Había pasado una semana desde aquella pelea entre los bravucónes y el chico nuevo ocurriese y como se podía esperar tuvo repercusión.

Jeff había ido a acusar a sus abusones con el director Asgore y estos inmediatamente estuvieron castigados y reportados con sus padres por otra travesura ocurrida obviamente todos los chicos miraban con odio a su acusador todos los días que tenían que cruzarse. Por el lado de este no les tomaba importancia, les parecían asquerosos y tontos al verlos pero igualmente los ignoraba. Extrañamente este inconveniente lo hizo respetar en el instituto y a saber más de los demás estudiantes sobre los "matones"  del lugar.

Pero era difícil el ignorar a uno en especial.  Cerf era distinto.
Recordaba perfectamente el como le dio su merecido a ese idiota que se cree mucho y  el que osó ponerlo en semejante problema. Precisamente era el que más veces se lo cruzaba durante todos los días y más asco le daba.

Lo miraba con una cara de loco que daba miedo  a decir verdad.  Algo tramaba, y por eso trataba lo mejor posible de no encontrarlo durante el día pero era imposible.

El solo iba al maldito instituto a estudiar y nada más.  Suficiente problema tenía ya con su vida y ahora tenía a que tenerlos en el estudio.

No era un esqueleto sociable, preferia desayunar sólo y no hablar con nadie consentrandose solo en las clases, eran aburridas y le daba flojera hacer la tarea pero era responsabilidad suya.

Ya más o menos conocía a sus compañeros. Podía hablar con algunos para pedir algun útil o pedir ayuda para una tarea.

Con el tiempo sus abusones le empezaron a insultar al cruzarse con ellos. Trataba de no meterse más en problemas pero sabía que tardé o temprano se cansaria y les daria una paliza.

Un día que desayunaba un asqueroso flan de la cafeteria escolar lo sorprendió que Cerf se sentara enfrente suyo de la nada, apoyo su engreida cara sobre su menton y se lo quedó mirando fijamente sin hablar unos minutos puesto que ese acercamiento fue rapido y incomodo para ambos.

—...hola querido Jeff, ¿delicioso el vomito con lo que esta echo ese postre?—

—hasme un favor, y vete a la mierda—

Rechinando sus colmillos Cerf quedo callado por segundos, como puede ser posible, nunca dejó que alguien tan inferior a el le insultara así sin darle un merecido castigo, pero no lo hizo.

—de echo acabo de venir de ahí,
...oye ...alimaña quiero, disculparme por nuestro desafortunado primer encuentro—

—¿eres idiota?...por que tendría yo que perdonarte. Seguro tu lo planeaste todo—

—claro que no,  bueno,  creeme que me paresiste un ...buen chico y les roge a mis camaradas que no te hicieran daño pero no tuve otra opción que seguirlo, me obligaron—

—¿en serio? A un chico tan bueno como tu?—

—me da igual si me crees o no el punto es que, vine aqui como todo caballero que reconoce su error a pedir disculpas—

—okey, acepto tu disculpa- dijo falsamente dandole otro bocado al flan.

—tengo otra propuesta,...que te parece si te ayudó con la prueva de este mes, es economía y se que te va fatal en esa materia—

—¿como sabes eso?...y en todo caso si aceptara me delatarias que hago trampa o me daras respuestas falsas—

—te doy mi palabra, si hago eso te dare la livertad de decirle lo que quieras al director para expulsarme si quieres —

—....¿por que haces esto? —

—ya lo dije, empezamos con el pie izquierdo,  además,  eres el unico que a logrado golpearme de ese modo y escapar de todos nosotros casi ileso... eso amigo mio nos sorprendió, tienes buen potencial—

—¿potencial?—

—para unirte a nuestra hermandad si es necesario —

—Pfff! No gracias,  pero...aceptare lo de la prueva de economía,  si falla te hare la crux "amigo"—

Término su comida en ese instante y salio caminando a otra parte lejos de ese pscopata. El mayor por su parte se quedo sonriendo ligeramente viendo como el contrario se alejaba.

—uy amigo, si ya estas cayendo a mi ayuda desde el principio la  vengaza sera deliciosa sin duda~—

Una vez el día de la prueba llegó Jeff sudaba por los nervios de llegar a desaprobar, al momento de tener el papel en la mano intento responder lo mejor que podia algunas que sabia de las preguntas,  hasta que la maestra se distrajo y recibió un avióncito de papel directo en su hombro.

Como iba acordado con Cerf en ese avión al abrirlo estaban todas las respuestas de dicha prueba,  al principio desconfio, pero que más podia perder?  Si era engañado podía vengarse perfectamente sin problema a ser degollado después.

Al final el siguiente día fueron entregadas las pruebas y Jeff saco un nueve. Luego de mirar la nota se dirigio a ver a su cómplice tener tambien su prueba en mano y dandole un guiño de recompenza con una sonrisa a au lado estaban sus amigos riendo y festejando por seguramente aprovar tambien.

Paso 1: Ganar su confianza.