Vínculo. Prueba de amor y nivel arcano
https://youtu.be/oOT_7xZ8cRI
Después de la abrumadora derrota ante los Ars Goetia, Berceo convoca una reunión a la cual llama una maga omnisciente llamada Lolopechka Rosenkreutz.
Esta amiga de Asta y compañía ha compartido el conocimiento mágico y demoníaco que tenía con todos. Y también han descubierto un dato preocupante: Las siete puertas del Inframundo se están abierto poco a poco, y en menos de seis meses se habrán abierto todas. Para impedirlo, deberán derrotar a los Ars Goetia y a los Diez Apóstoles de Qlifot antes de que Lucifer recupere todo su poder.
¿Pero cómo uno es capaz de derrotar a un demonio? Según Lolopechka, sólo los magos de nivel Uno, Cero o de nivel Arcano serían capaces de cosechar semejante hazaña. Como por ejemplo, Berceo, quien parece tener claro su plan: dominar la fórmula de runas y aumentar aún más su poder mediante el "Juicio Blanco".
Lolopechka también se ha ofrecido s sí misma y a seis personas más a entrenarlos para la batalla contra Qliphoth, que serán tres meses en la tierra santa de los elfos, Elysia, por cortesía de Licht.
En los siguientes días, se decidirán a los magos que serán seleccionados para afrontar este entrenamiento. Será una prueba para ver si pueden realizar la fórmula de runas. Claro, que cada uno es libre de fortalecerse como le plazca, ya que el fin es el mismo: hacerse más fuerte.
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Llegó la noche después de una reunión con muchas luces y sombras. Berceo y sus prometidas estaban cenando tranquilamente, aunque el rey del castillo era el único despreocupado. El divino aún tenía algo pendiente antes de comenzar el entrenamiento, y sus futuras doñas se lo recordarían.
Élise: Berceo-san...
Berceo: ¿Qué pasa? ¿A qué vienen tantas caras largas?
Élise: ¿No te has percatado de que falta alguien?
Berceo: ¿Eh? A ver... -se fijó en la sala para contar a sus prometidas-
Berceo: Élise. Iris. Alba. Yuri. Hestia. Hades...
Berceo: Rea. Sue. Hilda. Gabriela...
Berceo: Lily. Frey. Nina. Celeste. Lunamilia...
Berceo: Están las quince. No falta nadie... ah...
Berceo: ¿Te refieres... a Helena?
Élise: Bingo.
Alba: Berceo, ¿cuándo te le vas a declarar a Helena?
Iris: No está bien ignorar los sentimientos de una chica. Ya deberías saberlo.
Yuri: Ella ha estado con nosotros incluso antes de la fundación de Dragnis-degozaru.
Hestia: Yo ya daba por hecho que también se prometería contigo, Berceo-kun.
Hades: ¿Es que Helena no te interesa?
Berceo: Yo no he dicho eso.
Rea: A mí me agrada Helena-san. Hablar con ella me relaja mucho.
Sue: ¡También es muy guapa, huele muy bien y tiene una voz preciosa!
Hilda: ¿A ti qué te parece Helena-dono, Berceo-sama?
Berceo: ¿A mí?
Gabriela: ¿Es que no te gusta como mujer?
Berceo: Por enésima vez, yo no he dicho eso.
Lily: Entonces, ¿te gusta Helena-san, Berceo-sama?
Frey: Cuando la conocimos en el Concilio de los Reyes, pensábamos que ya era una de tus prometidas, Berceo-kun.
Nina: A mí también me agrada Helena-san. Pero a veces tengo el presentimiento de que ella se siente fuera de lugar aquí.
Berceo: ¿Fuera de lugar? Yo le permití quedarse hasta que recuperase la memoria. Ahora que ya la ha recuperado, puede hacer lo que quiera. No molesta a nadie, así que no tengo razones para largarla. Ni quiero hacerlo.
Celeste: Entonces, te gusta Helena-san, Berceo-san.
Luna: Será mejor que aproveches y te le propongas, Berceo-kun. Antes de que el asunto de Qliphoth decida alejarla por temor a ser un estorbo.
Berceo: (!) Ella no es un estorbo. -dijo levantándose de su silla alarmado-
Berceo: (...) Helena significa mucho para mí.
Berceo: Este es su hogar. Y somos su familia. Voy a dejárselo claro.
Berceo: Élise, la votación.
Élise: Claro, mi amor.
Élise: Todas las que se oponen al matrimonio entre Berceo-san y Helena-san, por favor, levanten la mano.
Ninguna de las quince prometidas levantó la mano. Berceo, entonces, se comunica telepáticamente con uno de sus familiares.
Berceo: Es unánime, ¿eh? Bien, yo tampoco tengo objeciones. -se lleva los dedos a la cabeza-
Berceo: Speagle.
Speagle: ¿Sí, amo?
Berceo: ¿Está Helena contigo?
Speagle: Sí, ¿quiere que le diga algo de su parte?
Berceo: Dile que se reúna conmigo en los terrenos traseros del castillo.
Speagle: Como ordene. -se corta la comunicación-
Berceo: Mmm... Me preocupa pensar que estoy pasándome de mujeriego, citando así a las chicas, como si fueran citas cada día...
Élise: Sólo sé tú mismo, Berceo-san. La citaste en el jardín por un motivo en concreto, ¿verdad?
Berceo: Sí.
Berceo: Allá voy.
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Palacio de Gaia - Jardines traseros
Berceo camina sobre unos terrenos donde comenzó a plantar recientemente. Tuvo una idea y citó a Helena para verla. Mientras la esperaba, empleó la fórmula de runas y conjuró varias que rodeó un gran espacio que se perdía en el horizonte de Dragnisia. Lo medía muy bien gracias a sus ojos divinos.
Helena: Majestad, ¿quería verme?
Berceo: Sí. Gracias por venir, Helena. Estaba por probar un hechizo nuevo.
Helena: ¿Un hechizo?
Berceo: Sí. -acumulaba maná-
Berceo: Verdadera Magia de Tierra... ¡Separación de Pangea!
Se activa el hechizo. La tierra de Dragnisia deja de ser llana y se forman colinas, mesetas y algunas montañas. Todo por el hechizo de Berceo.
Helena: Toda la tierra... ha cambiado.
Berceo: Con la Fórmula de Runas, puedo manipular el maná natural y emplear hechizos nuevos.
Berceo: Para hacer más grande mi país, la geografía tiene que ser diferente y variar. Sería muy aburrido que todo fuese una tierra plana. Aunque se vea en el mapa como un país pequeño, la barrera de Babylon que lo rodea también oculta que es un espacio cuatridimensional. Es decir, que dentro es muchísimo más espacioso.
Berceo: Según Regina, ahora mismo Dragnisia es tan grande como Japón.
Helena: ¿Japón?
Berceo: Es el país de origen de Rea y Yuri. También es el mío y el de mis hermanos.
Berceo: El país donde se sitúa Ragnares, la capital de Yggdragoria, está afiliado a Japón. Por ello, adoptamos dicha nacionalidad en este mundo.
Berceo: Cambiando de tema... Helena, ¿crees que se podría plantar un gran árbol desde donde estamos? Me gustaría levantar uno donde no solape el castillo.
Helena: Mmm... No sé de jardinería, pero... A esta distancia, se puede plantar sin problemas.
Berceo: Bien, pues. -saca su grimorio y formula varias runas en un gran espacio del jardín-
Berceo: ¡Verdadera Magia del Árbol del Mundo: Ascenso del Árbol Divino!
Con un nuevo hechizo, Berceo hace crecer un árbol. Pero ese árbol creció y creció hasta doblar en tamaño al Palacio de Gaia. El nuevo gran árbol se situaba sobre el filo de la meseta.
Helena: (¡...!) Hala... -se quedó muda de la impresión-
Berceo: No será el Yggdrasil, pero le hará justicia, sin duda. Sus raíces se extenderán por la tierra, volviéndola rica y brindando energía a los cultivos. También se conectará al árbol sephira del sótano, compartiendo el maná.
Helena: (...) Está tan alto que no se refleja la sombra en la tierra. Aunque es de noche...
Berceo: Bueno... Con esto, la flora de nuestro reino comenzará a prosperar.
Helena: No sabía que le gustara la jardinería, Majestad.
Berceo: Puedes llamarme por mi nombre, Helena. No me importa.
Helena: Como desee.
Berceo: Quería comenzar algo nuevo para nunca olvidar esta nueva mentalidad.
Helena: ¿Nueva mentalidad?
Berceo: Helena. Una vez más, quería darte las gracias.
Helena: ¿Por qué? No he hecho nada para merecer su agradecimiento.
Berceo: Te equivocas. El simple hecho de haberte conocido ha cambiado en mí algo que creía imperturbable.
Helena: ¿Algo imperturbable?
Berceo: Yo odio a los demonios.
Helena: (...)
Helena escuchó la historia de Berceo algo apesadumbrada.
Berceo: Cuando tenía 8 años, supe que el terremoto espacial que me separó de mis padres fue presuntamente provocado por la influencia de un demonio. Y mientras trabajaba como shinobi en Konohagakure, también vi como los demonios destruían vidas inocentes, a sangre fría...
Berceo: Mi opinión sobre ellos tampoco mejoró después de enfrentarme a ellos directamente.
Berceo: La primera vez que pisé este mundo humano, en una ciudad de Japón llamada Kioto... Nos enfrentamos a un grupo de demonios conocido como las Doce Lunas Demoníacas.
Berceo: Recuerdo aquellos combates frenéticos, en Ginkakuji, Kinkakuji... y también en el Puente Togetsukyo... Pero no fue hasta después del Torneo de Artes Marciales, cuando comenzó la verdadera pesadilla.
Berceo: Nos tendieron una trampa y caímos al Infierno. Jamás imaginé que pisaría el Inframundo, el hogar de mis enemigos jurados...
Berceo: Libramos una batalla a muerte contra Muzan Kibutsuji y las Lunas Superiores. Sólo por gracia de la Diosa logramos sobrevivir todos a aquel infierno, después de que nuestros compañeros pasasen por ese mismo mal trago por segunda vez.
Helena: ¿Segunda vez?
Berceo: Mis compañeros ya se habían enfrentado a esa amenaza hace siglos, durante la era Taisho, en sus vidas pasadas. Es más, la mayoría de ellos murieron en aquella batalla.
Berceo: Saber aquello, antes de la batalla, me hizo odiar aún más a aquellos seres tan repugnantes. Ya ni siquiera los consideraba personas, sino simplemente escoria que merecía la muerte...
Berceo: Y ver la maldad en la naturaleza de los humanos me hacía ver iguales tanto a humanos como a demonios. Simplemente me daban asco. Los repudio. Cometen pecados. Hacen el mal. Y ni siquiera se arrepienten por ello. No comprendía por qué la Diosa se apiada de unos seres tan inflexibles e irreflexivos .
Helena: (...) -seguía escuchando cabizbaja-
Berceo: Por eso, cuando te conocí, si hubiera llegado a saber entonces que eras medio demonio, no habría dudado en matarte. Pero... -tembló con aire de culpabilidad-
Helena: ¿Eh?
Berceo: Ahora me alegro de no haberlo hecho, por que habría sido el peor error que jamás habría cometido en mi vida y jamás me lo hubiera perdonado...
Helena: ¿Por qué...?
Berceo: Me di cuenta de que estaba cometiendo un error. Si bien es cierto que hay discriminación entre humanos y demonios, además de con otras razas... Yo no estuve lejos de ser como ellos.
Berceo: Helena, tú me mostraste que también existen demonios buenos. Del mismo modo que las personas que he ido conociendo me mostraran que también hay bondad en los humanos. Incluso la realeza, que siempre la consideré como arrogante, resultó ser en su mayoría personas justas y benevolentes...
Berceo: Aún hay personas buenas en el mundo. Sin importar que sean humanos o demonios, me convencí de que existe bondad en todos los seres. Quiero convertir Dragnisia en un país donde todos puedan vivir y convivir como iguales, sin importar su raza o su origen.
Berceo: Por eso me alegra que estés aquí, Helena. Por que gracias a ti, mi odio por los demonios ha podido cambiar un poco.
Helena: (...) Yo no hice nada. Soy yo quien te está agradecida, Berceo-sama. Me permitiste vivir con vos y vuestros súbditos cuando no tenía recuerdos, y no dudasteis en ayudarme y salvar a mi madre, pese a saber que soy hija de Forneus, un demonio de clase alta como los Ars Goetia.
Helena: Y el momento en el que te enfureciste por lo que le hicieron a mi madre... Al principio me asusté por la magnitud de tu poder mágico, pero luego... me sentí muy feliz. -sonrió-
Helena: Gracias, Berceo-sama. Por no odiarme por ser demonio, y por permitirme vivir con ustedes hasta hoy.
Helena: Pronto mi madre y yo partiremos de este reino. No queremos causar molestias a nadie, así que será lo mejor...
Berceo sorprende a Helena tomándole las manos.
Berceo: ¡No sois ninguna molestia en absoluto!
Helena: ¡Ah...! -se sonrojó ante el atrevimiento del divino-
Berceo: Oh, perdón... -soltó sus manos-
Berceo: No hace falta que te vayas si no quieres. ¡Puedes quedarte para siempre! Si es ppr trabajo, podemos ofrecer muchas oportunidades... ¡la capital es lo bastante grande para todos!
Berceo: ¡Quiero que te quedes con nosotros, como has estado haciendo hasta ahora!
Helena: Pero... Yo no soy... más que una enchufada que vive aquí por oportunismo...
Berceo: ¡De eso nada! ¡Vives aquí porque tú misma lo deseas, al igual que todos nosotros!
Berceo: ¡Me da igual que seas una demonio! ¡Tú eres tú, Helena! ¡A todos nos gustas tal como eres, y si te fueras, todos se pondrían tristes, empezando por mí!
Helena: Berceo-sama... ¿por qué eres tan amable conmigo? Acaso... No, es imposible... Yo soy...
Berceo: ¿Media demonio? ¿Y qué? ¡Yo te amo tal como eres!
Helena: ¡Ah...! -se impactó por la declaración-
Helena: Berceo-sama, me halaga, pero... -estaba aún impactada-
Berceo: (...) ¿No sientes lo mismo?
Helena: ¡N-No es eso! ¡Quería decir que yo no soy digna de ser tu prometida!
Berceo: ¿Y por qué crees eso? ¿Por ser demonio? ¡Porque estás muy equivocada!
Berceo: Todos tienen derecho a amar. ¡Sin importar nuestra raza, todos somos seres vivos y tenemos emociones y sentimientos!
Berceo: Helena. Si sientes algo, puedes contármelo. No tengas reparos en decirme. Te escucharé. Y si no quieres que nadie se entere, lo respetaré.
Helena: Berceo-sama, yo... -titubeaba-
Berceo: (...) -escuchó atentamente-
Helena: Desde que salvó a mi madre, empecé a verlo diferente. Mi corazón palpita con más fuerza cuando le miro y no sé por qué.
Berceo: ¿Qué pensamientos rondan tu mente cuando me miras?
Helena: (...) ¿Puedo decirlos?
Berceo: Claro que puedes.
Helena: Más que pensamientos, siento en mi corazón unos deseos... El de vivir toda mi viva a vuestro lado... el de formar una familia... Y que esa familia ayuda a que humanos y demonios aprendan a convivir...
Berceo: (...) -sonríe- Son unos deseos muy hermosos.
Berceo: ¿Por qué no los hacemos realidad? -sacó un anillo de oricalco de Storage-
Helena: ¡Oh! -se sorprendió aún más-
Berceo: Un amor entre humano y demonio... Bueno, yo no soy humano, pero ya me entiendes. Para mí, es algo que otrora hubiera considerado impensable. Pero ahora que me he enamorado de una preciosa y bondadosa demonio como tú, ya no me es tan descabellado.
Helena: ¿P-Preciosa, yo? -se ruborizó-
Berceo: Sí. Eres preciosa, Helena. ¿Recuerdas la razón por la que te puse ese nombre?
Helena: Por que fue el nombre que llevó una humana bendecida por la diosa del Amor... que ésta consideró como la más bella del mundo...
Berceo: No me equivocaba al nombrarte así. Y tu nombre real, Hélenia, hasta se parece.
Berceo: Nos has ayudado mucho en varias ocasiones. Y estoy seguro de que esta batalla contra Qliphoth marcará un antes y un después para nosotros. Afrontémosla juntos y abramos la puerta hacia un nuevo futuro.
Berceo: Helena... Todas mis prometidas opinan lo mismo, y yo también. Puede que haya tardado un poco, pero aún así... ¿Querrías convertirte en mi esposa?
Helena: (...) Sí... -sonrió felizmente-
Berceo le pone el anillo a Helena y la besa.
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A la mañana siguiente, Berceo presentó a Helena como su decimosexta prometida.
El plan de ahora es...
Dentro de 6 días se realizará la prueba para determinar el nivel mágico de aquellos que quieran participar en la batalla contra los Ars Goetia. Berceo, Flareleon, Glaolo y Drake han decidido tomar caminos separados y entrenarse cada uno por su cuenta. Pero antes de pensar cuándo partir, sus compañeras estaban algo preocupadas. Lunamilia habló con Berceo como portavoz.
Berceo: ¿Os preocupa no tener el nivel mágico necesario para vencer a los demonios?
Luna: Sí.
Luna: Mediante especulaciones, sé que aparte de ti, la única de nosotras que es nivel arcano es Celeste. Ya que tiene poderes tanto del Clan de las Diosas como del Clan de los Demonios, será crucial al pelear contra los Ars Goetia.
Luna: Como mi magia de Dragon Slayer Lunar también tiene propiedades del elemento Luz, tal vez yo también lo sea.
Luna: Pero desconozco si las demás también tienen aptitudes para enfrentar a los demonios...
Berceo: Hagamos recapitulación de lo que hemos visto hasta ahora. Aunque no podré decir mucho, ya que apenas han participado en batallas importantes...
Berceo empezó a recapitular.
Berceo: Élise es usuaria de Magia de Rayo y de Luz. Ofensivamente va mejorando, aunque su mayor punto fuerte es la sanación.
Berceo: Iris es usuaria de Magia de Fuego, Agua, Hielo, Viento y Luz. Es bastante versátil tanto ofensiva como defensivamente. Su nivel mágico dependería de su cantidad de maná.
Berceo: Alba sólo conoce Magia de Fuego y Hielo. Pero con su Magia de Fortificación y la combinación de Magias Neutras, podría despachar a varios demonios. La cosa, eso sí, es su cantidad de maná.
Berceo: Yuri también es usuaria de Magia de Rayo y Luz. Como ángel caído, seguro que tiene un nivel mágico que se acerca al arcano. Y además, tengo la sensación de que puede fortalecerse con la espada, que es su especialidad.
Berceo: Hestia también es muy versátil mágicamente. Sus elementos más frecuentes son Viento, Agua, Hielo, Rayo y Oscuridad. Tiene unas habilidades para la magia propias de una sabia.
Berceo: Con Hades sucede lo mismo. Sus elementos más comunes también son Agua, Hielo, Rayo, Luz y Oscuridad. Siendo hermanas de Volus-san y Cintia-san, ya debí imaginarlo. Tu manejo experto de la magia puede convertirlas en nivel arcano.
Berceo: Rea no es muy hábil en el ámbito mágico, pero aún así usa Magia de Viento y Luz. Aparte, su habilidad para combatir con dos espadas puede ser un indicio de algo desconocido.
Berceo: Sue tiene afinidad para el Rayo y la Luz, al igual que Élise. Aunque hace poco que está aprendiendo y preferiría que no se involucrase en la batalla, sé que de alguna manera, lo hará. En lo que es habilidad curativa, tiene el mismo potencial que su prima, así que será una buena noticia para los sanadores.
Berceo: Hilda apenas tiene habilidad mágica, de hecho, no emplea ninguna magia básica. Pero es una de las espadachinas más fuertes del reino. Su habilidad con la espada también puede indicar algo nuevo.
Berceo: Gabriela es más de lo mismo. Cero aptitudes para la magia, pero un talento innato para la espada. Es probable que ella también pueda usar "eso".
Berceo: Lo que sé de Lily y Frey es que ambas comparten los elementos Luz, Agua y Hielo en común. Pero aún desconozco su especialidad. No puedo permitir que participen en combate sin saberlo, sería un suicido.
Berceo: Nina sí que ha demostrado tener aptitudes, al emplear Magia de Fuego, Hielo, Viento y Luz. Y su dominio del arco también es una demuestra mucha habilidad. Tal vez ella también pueda usar "eso".
Berceo: Y Celeste también combate con espadas gemelas, así que puede añadir esa carta a su arsenal de combate.
Luna: ¿A qué te refieres con "eso"?
Berceo: Os lo contaré cuando estemos reunidos.
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Berceo y Lunamilia convocan a todas en un patio del castillo.
Berceo: Bien, ya estamos todos.
Iris: ¿Querías hablar con nosotras de algo, Berceo-san?
Berceo: Sí.
Berceo: Luna y yo hemos estado debatiendo acerca de las probabilidades que tendríais todas vosotras de vencer a los demonios.
Élise: ¿Y qué opinas, Berceo-san? ¿Crees que tenemos alguna posibilidad de vencer?
Berceo: (...) No.
Berceo: Con toda honestidad, sinceridad y cariño, os digo que ahora mismo no seríais rivales para ningún demonio. Ni siquiera podéis vencer a los demonios de clase alta sencillos, así que los Ars Goetia os matarían sin despeinarse.
Todas guardaban silencio cabizbajas. Sabían que su prometido tenía razón.
Berceo: -sonríe- Pero eso no significa que no podáis vencerlos en el futuro. Si entrenáis y os hacéis más fuertes, los venceréis sin duda.
Todas volvieron a sonreír.
Berceo: La cuestión que nos atañe es determinar cuál es vuestro nivel mágico. Para hacer frente a los Ars Goetia, es necesario ser de nivel Uno o superior. Es decir, Nivel Cero o Arcano.
Berceo: Y según Lolopechka, para usar la Fórmula de Runas, es necesario ser de Nivel Tres como mago. Dado que todas o sois de la realeza y/o poseen versatilidad mágica, la probabilidad de que todas lo seáis es alta.
Hilda: Berceo-san, dudo que mi escasa habilidad con la magia me haga de Nivel Tres.
Berceo: No te preocupes, Hilda. Hay otra alternativa que he barajado.
Hilda: ¿Otra alternativa?
Berceo: Ajá. Tú, Hilda. Yuri. Rea. Gabriela. Nina. Y Celeste. Tal vez vosotras seis podáis usar el bankai.
- ¿Bankai...? -algunas trataban de recordar ese término-
Hilda: ¡Ah! ¿Te refieres a ese estado que alcanzaron Flareleon-dono, Lola-dono y Eris-dono?
Berceo: Sí. Y la verdad es que yo también debería ser capaz de alcanzar ese estado.
Rea: ¿Y por qué no lo usas?
Berceo: Por que no puedo. Mi fuerza espiritual no es lo bastante grande como para escuchar la voz de mi Byakuya.
Nina: ¿Escuchar la voz?
Berceo: Sí. Para activar el Shikai, se debe imbuir tu arma con energía espiritual. Así tu alma se conecta a la suya.
Rea: ¿A la suya? ¿A la del arma?
Berceo: Los espadachines más diestros tratan su espada como a una compañera. Es frecuente que los que combaten con frecuencia con un arma, no puedan ni pensar que éstas tienen alma.
Berceo: Pero la tienen. Y para emplear el Bankai, el reiryoku debe ser superior al de un ser humano. Debe de ser lo suficientemente grande como para sentir las almas ajenas. Después de todo, el Bankai es la liberación total del alma. Te vuelves uno con ella.
Gabriela: Volverse uno con la espada... No sé cómo no se me ha ocurrido hasta ahora. De haberlo sabido, hubiera fortalecido mi reiryoku.
Berceo: El reiryoku está unido al alma y al espíritu. Es una energía que nace de la acumulación de ejercicio y la experiencia, y que aumenta conforme a la sensibilidad espiritual y la voluntad.
Gabriela: Entonces, es mi sensibilidad espiritual la que no está entrenada. Tampoco es que me haya molestado en conocer a mi espada...
Hilda: Conocer a tu espada no es algo propio de los caballeros europeos.
Rea: Así es. Está más ligado al código de los samuráis.
Yuri: Ah, claro... Mi tío Gyomei puede usar el Bankai porque está conectado en alma a su espada.
Nina: Esto... Pero yo no peleo con espadas...
Berceo: Un arco también es un arma y compañero. Es el único que nunca se separa de ti en batalla, ¿no?
Celeste: Si aprendo a dominar el Bankai, tal vez logre dominar los poderes demoníacos que usé contra Dialga-sama...
Berceo: Primero, debéis conocer a vuestra arma. Al menos, conoceréis su nombre, ¿no?
Las seis se quedaron calladas.
Berceo: Bueno... Aprovecharemos los días restantes previos a la prueba para crearlas.
- ¿Crear? -no entendieron las pibinhas-
Berceo: Chicas, si me lo permiten... Con los conocimientos de Babylon y algunos materiales, podemos emplear la alquimia para transformar vuestras armas en auténticas compañeras. -dijo con cara de habérsele encendido la bombilla-
Gabriela: Parece que se te ha ocurrido una idea, maridito.
Berceo: Sí. Luego buscaré mediante Archive. Haré un listado de materiales que necesitaremos para refundir vuestras armas.
Berceo: Puede que consiga replicar algunas armas legendarias.
Hilda: ¿Armas... legendarias?
Berceo: Si termino pronto, mañana mismo podremos ir tras los materiales.
Helena, entonces, tomó la palabra.
Helena: Berceo-sama, ¿me permite compartir algo?
Berceo: Adelante, Helena.
Helena: Estuve en la reunión de ayer cuando escuchaba lo de los niveles mágicos, cuando recordé algo que puede ayudarnos a vencer a los demonios.
- ¿Eh? -todos sintieron intriga-
Berceo: ¿Qué es? ¡Toda información es poder ahora mismo!
Helena: Una magia antigua con la que todos podríamos hacernos mucho más fuertes.
Berceo: ¿Magia antigua?
Helena: Sí. Una magia que empleaban los antiguos demonios para aumentar su poder. Se llamaba Magia de Contrato Amo-Sirviente.
- ¿Magia de Contrato Amo-Sirviente? -todos sintieron intriga y algo de repelús-
Helena: El Contrato Amo-Sirviente es un tipo de magia que une las almas de dos personas.
Berceo: ¿Une las almas?
Helena: Sí. Pero al ser magia demoníaca, conlleva riesgos.
Berceo: ¿Qué tipo de riesgos?
Helena: Explicaré los efectos...
Helena: Además de poder decir la ubicación entre amo y sirviente, se activaría una maldición cada vez que el sirviente traicionara o se sintiera culpable hacia su amo, y se muestra por el collar que aparece alrededor de su cuello.
Helena: Si hablamos de partes, pues Berceo-sama sería nuestro amo y nosotras las sirvientes.
- ¡¿Eeeeeeeeeeeeeeeeeeeeh?! -todos se inquietaron mucho-
Berceo: Pues renuncio a esa magia. -dijo tajantemente-
Helena: ¿Oh?
Berceo: ¿Amo? ¿Sirviente? ¡Ese tipo de relación apesta!
Berceo: Sois mis amadas futuras esposas. Jamás os trataré como a mis siervas, sino como a lo que seréis: mis adoradas reinas.
- Berceo/san/sama/kun/dono... -todas adoraron las palabras de su futuro esposo-
Berceo: Ah... Helena, ¿terminaste de explicar? Si no es así, perdona. Continúa. Hay algo que te queda por mencionar, ¿no?
Helena: Sí.
Helena: Otro efecto del contrato es que aumenta el poder tanto del sirviente como del amo a medida que crece la lealtad del sirviente. Y hay un punto aún más importante.
Yuri: ¿Cuál es?
Helena: Para empezar, hay ciertos niveles en el Contacto Amo-Sirviente, que se significan por el color específico del collar, que aparece alrededor de su cuello: Azul es el más bajo y básico, que representa la baja confianza que un sirviente tiene hacia su Amo. Violeta-Azul es la segunda etapa y el color al que se vuelve el collar, representando su crecimiento en la confianza en su Amo. El segundo más alto es Violeta-Rojo . Y el límite máximo más alto del Contrato Amo-Sirviente es Rojo Carmesí , que un Amo y un Siervo podrían alcanzar el Voto Amo-Sirviente.
- ¿Voto Amo-Sirviente?
Helena: Cuando se alcanza el máximo nivel, la máxima lealtad... La marca desaparece y la maldición ya no se activa. Después de todo, el sirviente nunca traicionará al amo en ese punto. Ese es el fenómeno en el que el "contrato" se sublima en un "juramento".
Helena: Es la forma definitiva de relación Amo-Sirviente, que existe tanto entre un Amo que está preparado para que su subordinado le pertenezca por completo, como entre un Sirviente que es capaz de jurar su corazón y cuerpo por completo a su amo. El voto de amo y sirviente une al amo y al sirviente para siempre y aumenta significativamente el poder del amo y de los sirvientes involucrados. Además, cada contrato adicional que alcanza el estado del voto también aumenta aún más el poder tanto del amo como del sirviente.
Helena: Esto... se me ocurrió que podrían probarlo. Porque... la lealtad y el vínculo que sentís haría posible que alcanzarais rápidamente el Voto Amo-Sirviente.
Todos cambiaron un poco de cara.
Helena se acercó a las chicas para susurrarles algo sin que Berceo les escuchase.
Helena: Además, esta magia también aumenta el tamaño de los senos a gusto del amo y las sirvientas...
A las que tienen los pechos planos se les iluminó la cara.
Berceo: (...) -sintió algo extraño en la conversación-
Berceo: Entonces, al usar esta magia que une nuestras almas... ¿nos haríamos más fuertes cuanto más fuerte sea nuestro vínculo?
Helena: Sí. Vuestra cantidad de poder mágico y reiryoku, por ejemplo, aumentaría de manera considerable. Haría posible que incluso vos alcanzarais ese estado que llamas Bankai.
Berceo: (...) Votémoslo. Todos los que quieran probar la magia de Contrato Amo-Sirviente que menciona Helena, por favor, levanten la mano.
Todos, incluido el propio Berceo, levantaron la mano.
Berceo: Lo preguntaré una última vez para estar seguro.
Berceo: Al unirnos por esta magia, técnicamente os estaréis entregando a mí en cuerpo, alma y corazón. Hasta que alcancemos el nivel máximo, sufriréis una maldición cada ve que sintáis culpabilidad. Sé que no me traicionaréis, y confío plenamente en vosotras.
Berceo: ¿Estáis completamente seguras de esto?
Élise: Berceo-san, estoy preparada para entregarme a ti desde el día en que nos prometimos.
Iris: Nunca te traicionaré, estaré contigo incluso si onee-chan no lo hace. Ahora, podemos dar un paso más adelante hacia el matrimonio. Te amo, Berceo-san.
Alba: ¡Yo jamás te traicionaría! Te amo con todo mi corazón, Berceo. Si entregarnos el uno al otro nos hace aún más fuertes, pues con más razón si cabe estaremos contigo.
Yuri: Una vez más, te ofrezco a ti, Berceo-dono. Estoy preparada para entregarte todo de mí.
Hestia: Nunca imaginé que una magia antigua de los demonios nos abriría un camino similar al matrimonio. Esto también debe ser voluntad divina. ¡Hagámoslo, Berceo-kun!
Hades: ¿Qué mejor magia para hacernos más fuertes que una que nos una para siempre? Casi parece que esté hecha para nosotros. ¿No crees, Berceo-kun?
Rea: Tengo algo de miedo, pero... ¡sé que podremos superar este reto juntos, como una familia! ¡Tú siempre me haces fuerte, Berceo-sama! Ahora seré yo quien te haga fuerte.
Sue: ¡Quiero ser más fuerte y serte útil, Berceo! ¡Y desde que te conocí, supe que quería pasar todos los días de mi vida contigo, por toda la eternidad!
Hilda: Yo también deseo ser más fuerte, Berceo-san. Y si puedo unirme aún más a ti, no podría desear un entrenamiento mejor.
Gabriela: ¡Opino lo mismo que Hilda-dono, maridito! ¡Por amor solo, te entregaré todo de mí!
Lily: Yo también estoy lista. Quiero entregarme a ti por completo, Berceo-sama.
Frey: Yo también quiero estar contigo eternamente, Berceo-kun. Y ser lo bastante fuerte o incluso más para ser digna de ello.
Nina: Berceo-sama, tú me diste todo lo que deseaba. Mi cuerpo y mi alma te pertenecen, y quiero seguir dándote mi corazón.
Celeste: Yo no sólo sigo el oráculo de los dioses. Deseo con toda mi alma unirme cada vez más a ti, Berceo-san. Mi amor por ti crece cada vez más.
Luna: Hagámonos más fuertes juntos y dejemos florecer este gran amor, Berceo-kun.
Helena: Aunque acabamos de prometernos, sé gentil con nosotras, por favor, Berceo-sama.
Berceo, al oír a sus prometidas, ya no tuvo dudas.
Berceo: Muy bien. Pues está decidido.
Berceo: Helena, ¿cómo se usa esa magia?
Helena: Primero hay que esperar a que haya luna llena para activarla. Casualmente, esta noche la habrá.
Berceo: Bien. Pues esta noche la haremos.
Berceo: Aunque Contrato Amo-Sirviente suena un poco... controvertido. Mejor pongámosle otro nombre, ¿no?
Berceo: La llamaremos... Magia de Vínculo.
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Berceo dedicó al resto del día a investigar. Fue hacia los Babylon para hablar con Regina y las ginoides de su idea y emplear la alquimia.
Regina: Berceo-niichan. Bienvenido a Babylon.
Berceo: Llámame como quieras... -se resignó-
Regina: ¿En que podemos servirte, Maestro?
Berceo: Me preguntaba si podríamos fabricar unas armas que sólo la alquimia puede crear.
Regina: Uuhh, armas, ¿eh? ¿De qué tipo?
Berceo: Armas legendarias. Tal vez hayas oído hablar de ellas.
Rosetta: ¡Si tiene los materiales, podemos crearlas de inmediato, Maestro!
Berceo: Estaría bien, pero primero quiero saber con qué materiales fueron forjadas esas armas originalmente. De lo contrario, no serían más que copias baratas.
Regina: ¡En la Biblioteca seguro que encontramos información sobre los materiales que buscas! ¿Verdad, Nero?
Nero: Sí, doctora. Maestro, Cesca y yo podemos buscar los libros por vos.
Cesca: ¿Le parece bien?
Berceo: Claro. Gracias.
Berceo crea unas gafas y las encanta con magia para leer todos los idiomas y a gran velocidad. Se leyó todos los libros en una hora, y elaboró una lista de los materiales necesarios para elaborar las armas de sus prometidas.
Cayó la noche. Había llegado el momento de usar la nueva magia. Berceo citó a todas sus prometidas a sus aposentos, donde tendrían la mayor privacidad.
Berceo: Es la hora. ¿Helena?
Helena: Ya ha salido la luna llena. Es el momento. -acumula maná-
Helena invoca un gran círculo mágico dorado que rodea a Berceo y a sus dieciséis prometidas.
Helena: Aquellos cuyas almas estén unidas por un pacto serán capaces de sentirse el uno al otro. De modo que siempre sabemos dónde estarás. -hablaba a Berceo-
Berceo: Será más fiable que un GPS de un celular, eso seguro.
Helena: Magia de Contrato Amo-Sirviente... ¡Loyalty Seal!
Helena: Ahora... Berceo-sama, debería aparecer un símbolo en la espalda de tu mano.
Berceo revisa sus manos y ve el símbolo mencionado.
Berceo: Aquí está. -muestra el símbolo en su mano derecha-
Helena: El símbolo desaparece pasado un rato, pero yo lo mantendré.
Helena: Minna-sama, tenéis que besar la mano de Berceo-sama para sellar el pacto. Tenéis que hacerlo, de lo contrario, se activará una maldición si se rebelan o traicionan a nuestro amado.
- ¡Jamás haríamos eso! -respondieron todas-
Las prometidas de Berceo besan la mano del rey. Y Helena termina con su beso de establecer el pacto. En los cuellos de las dieciséis prometidas aparece un collar mágico.
Helena: Bien. Ya está.
Berceo: Siento que estamos más unidos que antes... ¿Pero cómo se supone que vamos a aumentar nuestro poder?
Helena: Berceo-sama, ahora puedes activar el hechizo a voluntad. Si envías magia a nuestros collares, se activa.
Berceo: ¿Así de fácil? A ver... Mana Zone. -acumula y extiende una capa de maná por la habitación-
Los collares de las prometidas empiezan a brillar. Tanto ellas como Berceo empiezan a emanar una extraña energía.
- ¿Oh? -las dieciséis empezaron a sentir algo extraño-
Alba: ¿Qué es esto...? ¿De repente?
Iris: Siento un calorcito en el pecho...
Élise: Y eso que las noches suelen ser frías...
Helena: Berceo-sama, ahora debes someternos.
Berceo: ¿Someteros? ¿Cómo?
Helena: Es simple. Debes tocarnos.
Berceo: ¿Tocaros? Eso es fácil.
Helena: No es tan sencillo como cree...
Helena: Ahora mismo, nos invade un calor que irá de menos a más. Nuestros cuerpos se sentirán cada vez más calientes.
Berceo: ¿Y para aliviarlo os tengo que tocar?
Helena: Sí...
Helena: No hace falta que crucemos la línea... simplemente danos placer... Cuanto mayor sea, mejor. Encuentre nuestro... punto G.
Berceo: Aaaaaaahh... -sintió vergüenza y se ruborizó-
- Berceo/san/sama/kun/dono... -miraban a su prometido con ojos de "cógeme"-
Berceo: Ni modo, tengo que asumir la responsabilidad. -dijo serio y resignado-
Berceo: Ya que sois dieciséis... -sacó una crema de Storage- Os daré placer por parejas. Entretanto, untaos con esto para aligerar el calor, ¿sí?
Helena: Lo más recomendable sería... que os pongáis con la chica con quien más confianza tengan...
Berceo: Bien... ¿quiénes quieren empezar?
Primero, Berceo lo hizo con Élise y Sue. Tocó sus cuerpos y revolvía sus cabellos con gentileza, dándoles cariño y placer. Y éstas respondían acariciándolo con sus cuerpos y agarrándose como sanguijuelas al divino. Berceo terminó de darles placer dándoles un buen beso en los labios.
Siguieron Alba e Iris. Tocó sus cuerpos al gusto de las gemelas, quienes sintieron un gran placer. Ambas respondieron con gran placer corporal. A ambas les excitaba que Berceo manoseara u chupase sus senos. Para Berceo, el beso en los labios era el mejor toque final.
Las siguientes fueron Hestia y Hades. Las dos acariciaron a su prometido con la suavidad de sus cuerpos. Y Berceo también las acarició en sus bajos, ya que les excitaba. También se daban lengüetazos entre ellos. Pero lo que más excitaba a las primas era el beso final de Berceo.
Siguieron Yuri y Rea, las dos japonesas. Ambas se volvieron más cercanas. Berceo las tocó con gentileza y suavidad, al igual que ellas a él. A Rea le excitaba que su amado le olisqueara y le tirase un poco del pelo, y más cuando le olía y le lamía la nuca. A Yuri le excitaba de todo porque resultó ser masoquista. Cuando Berceo la lamía, le olía el pelo, la manoseaba de los senos hasta la cintura... Y ésta se excitó aún más cuando le chupó y besó los senos. El beso fue la mejor parte para las dos.
Ahora fueron Hilda y Gabriela, ambas caballeros. Berceo pensó bien en cual podría ser su punto G, y lo encontró. A Hilda le emocionaba cuando le tocaba el trasero y era envuelta por el cuerpo del divino. Gabriela era lo mismo, pero su punto G eran sus grandes senos, ya que gritó como una gata en celo cuando su amado los apretó y succionó cariñosamente. Un beso y a mimir.
A continuación, Lily y Frey. Las dos eran aún muy jóvenes, así que Berceo fue despacito y gentil. Empezó jugueteando con sus cabellos y dándoles besitos en el cuello. Y éstas también respondieron con besitos a él por todo el cuerpo. Al poco, comenzaron con caricias y contacto físico cálido. Y un beso para redondear la noche.
Las siguientes fueron Nina y Helena. Nina estaba preparada para dárselo todo a su amado. Aunque Berceo fue gentil y sabía que aún no era el momento. El divino les da a ambas placer carnal, y tanto a la elfa como a la demonio les excita ser tocadas por el divino. Y Berceo descubrió otro fetiche: las orejas. A ambas también les encantó el beso final.
Y las últimas fueron Celeste y Lunamilia. Ambas ya sabían como excitar a su amado divino, y vaya que si lo hicieron. A Berceo les excitaba tanto los pechos, como el cabello, así como el trasero de la Nephilim y la dragona. Y éste les dió un placer inimaginable con solo chupar y morder un poco sus senos antes del beso.
Al terminar de tener relaciones carnales con cada una, todos sintieron una gran fuerza en su interior mientras se sentían realizados. Berceo acostó y se acostó con todas.
Élise: Ahh... Qué gustito...
Iris: Siento un calorcito muy agradable en mi corazón...
Alba: Ahh.. ahh...
Yuri: Qué... manos tan... buenas-degozaru...
Hestia: Vaya... Wow...
Hades: Ni a mí... me salen las palabras...
Rea: Qué cosquillitas...
Sue: Aaahhh... te amo, Berceo...
Hilda: Siento una fuerza... ardiente en mi interior...
Gabriela: Yo también... siento el amor de Berceo-dono...
Lily: Aaahhh... qué placer...
Frey: Me siento súper relajada...
Nina: Goshujin-sama...
Celeste: Me siento mucho más fuerte... y más amada...
Lunamilia: Je, je, je...
Helena: Eso fue... fantástico, Berceo-sama.
Berceo: Je... Me alegro... Mañana probaremos los resultados.
Berceo: Buenas noches, mis bellas durmientes...
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Al día siguiente...
Berceo y sus prometidas decidieron prepararse para la prueba realizando un encargo de Clase S: Exterminar a unos grupos de demonios de alto rango. Como el divino es rango maestro, no había inconveniente con que tomaran el trabajo. Además, serviría para probar sus niveles mágicos después de experimentar la Magia de Vínculo.
Berceo y sus dieciséis prometidas fueron hasta unas llanuras neerlandesas, cerca de la costa norte de Europa. Allí habían cientas de hordas de demonios de alto rango.
Berceo: Qliphoth comenzó a invadir a escondidas los países anexos a Alemania hace poco. Con la magia espacial de algunos Ars Goetia, crearon alguna especie de portales mediante los cuales, los demonios van emergiendo.
Berceo: Como ya se han abierto tres puertas del Inframundo, los demonios de bajo, medio y alto rango pueden cruzarlas para venir a este mundo.
Berceo: Nuestra misión es exterminar demonios hasta encontrar el portal y destruirlo.
Élise: Berceo-san, ¿me permitirías el primer movimiento?
Berceo: ¿Oh? Es raro verte tomar la iniciativa en combate.
Berceo: Me parece bien. ¿Qué os parece si os dejo a vosotras barrer a los monstruos mientras yo busco el portal?
- ¡Perfecto! -todas estuvieron de acuerdo-
Élise: Allá voy. Probaré un hechizo que encontré en los libros de Babylon. -acumuló maná-
Élise acumuló una cantidad de maná más grande de lo normal, y empezó a conjurar...
Élise: "Invoco a la tormenta perfecta". "A la lluvia torrencial que todo lo barre, y al trueno violento que estremece". "¡Zeus, concédeme tu fuerza!" "¡Ilumina, retumba!" "¡Golpea la tierra con tu furia atronadora!" ¡Magia de Rayo y Agua! ¡Ira de la Diosa: Cumulonimbus Storm!
El hechizo de Élise creó varias nubes de tormenta y condensó toda la energía en una andanada de rayos que golpearon a los demonios, borrándolos del mapa y haciendo cenizas parte de la llanura.
Todos fliparon por el hechizo de Élise, aunque esta se agotó un poco.
Élise: Hala... ¿Esto lo he hecho yo?
Berceo: ¡Ha sido alucinante, Élise! -dijo flipando mientras la levantaba con los brazos de la cadera-
Élise: Oh... Je, je, je, je... -se sonrojó y se puso muy feliz-
Berceo: Ese hechizo es casi de nivel arcano, estoy seguro.
Élise: Aunque... no me ha salido como esperaba. Sólo creí que invocaría un trueno, no una lluvia de relámpagos.
Berceo: Si dominas la fórmula de runas, seguro que te sale perfecto.
De la tierra salieron nuevos portales del cual seguían emergiendo demonios.
Berceo: Aún no encuentro el portal. Voy a buscar por toda la zona. ¡Os encargo a los demonios! ¡Hablamos por un canal abierto telepático! -dijo antes de buscar por el cielo-
Alba: ¡Claro! ¡Déjanoslos!
Iris: Que pasada... ¡Voy también probaré un hechizo nuevo!
Iris: ¡Magia de Fuego! ¡Explosión de presa: Llamarada Explosiva Espiral!
Iris conjuró una gran espiral de llamas explosivas que destruyeron a varios demonios.
Berceo: ¡Ah...! Ese hechizo... -recordó que fue el primer hechizo de fuego que usó cuando conoció a las gemelas-
Iris: Siempre quise probarlo cuando te vi usarlo por primera vez, Berceo-san.
Berceo: ¡Estoy orgulloso de ti!
Iris: ¡Je, je...! -rió sonrojada y feliz-
Alba: ¡No me quedaré atrás! -acumuló maná-
Alba: ¡Magia de Hielo! ¡Dientes de Roca Helados: Icicle Forest!
Alba conjuró y varios carámbanos emergieron de la tierra, perforando a los demonios que salían del suelo y congeló a los que recién salieron.
Alba: ¡Toma! -se puso muy contenta por el resultado del hechizo-
Berceo: ¡Muy bien, Alba! ¡No tienes nada que envidiar a Glaolo con ese hechizo!
Alba: ¡Je, je, je! La verdad es que me inspiré en su magia para aprender este hechizo. -reconoció sonrojada y feliz-
Alba: ¡Venga! ¿Quién se los carga?
Rea: ¡Los cortaré! -dijo acumulando maná y desenvainando sus catanas-
Rea: ¡Magia de Viento! ¡Brisa silenciosa y cortante: Wind Slicer!
Rea cortó el aire con sus katanas y lanzó varios tajos de viento que cortaron en trozos el bosque de carámbanos.
Berceo: ¡Fantástico, Rea! ¡Has aprendido a usar magia con tus espadas!
Rea: ¡Gracias, Berceo-sama! -respondió agradecida, sonrojada y feliz-
Hestia: ¡Ahora nos toca a nosotras! -acumuló maná-
Hades: ¡Después de ti, Hestia!
Hestia: ¡Magic Script! ¡Magia de Viento! ¡Viento del norte que sopla: Wind Dome!
Hestia creó una cúpula de viento veloz y envolvente que juntó los monstruos congelados.
Hades: Magia de Oscuridad... ¡Esferas negras tenebrosas: Shadow Ball!
Hades creó una andanada de bolas sombras que lanzó contra los enemigos congelados, destruyéndolos del todo.
Berceo: Fantástico, chicas. Volus-san estaría muy orgulloso.
Hestia/Hades: Ojalá... Gracias. -agradecieron sonrojadas y desiderativas-
Berceo aún no encontraba el portal. Pero a sus prometidas les parecía bien, ya que así podrían seguir probando hechizos para matar demonios.
Sue: "¡Oh, Apolo!" "La luz del sol es sagrada y abrasadora". "¡Golpea y quema la tierra con tus rayos ardientes!" ¡Magia de Luz y Fuego! ¡Luz que quema los cielos: Ultraviolet!
El hechizo conjurado de Sue concentró rayos solares y se condensaron en un gran rayo de luz que abrasó a los demonios.
Berceo: ¡Qué pasada! ¡Luego te daré un buen achuchón! ¡Eres genial, Sue!
Sue: ¡Je, je, je! ¡Por algo soy tu futura esposa! -dijo con orgullo pero sonrojada y muy feliz-
Hilda: ¡Nosotras tampoco nos quedamos atrás! ¡Gabriela-dono! -acumuló maná y lo imbuyó en su espada-
Gabriela: ¡Vamos! -hizo lo mismo que Hilda-
Hilda: Magia de Fuego... -Su espada se tiñó de llamas- ¡Cortes ardientes: Infernal Slash!
Hilda lanzó un tajo ardiente que se dividió en miles de cortes flamígeros que envolvieron a las hordas de demonios en un torbellino.
Gabriela: ¡Avivaré esas llamas llenas de amor! -su maná se tornó verde-
Gabriela: ¡Magia de Plantas! ¡Naturaleza feroz: Frenzy Plant!
Gabriela hizo crecer raíces enormes y afiladas de la tierra que rodearon el torbellino de Hilda.
Gabriela: ¡Y aquí viene un extra de regalo! ¡Magia de Viento! ¡Disparos de viento concentrados: Hurricane Thrust!
Acto seguido, Gabriela concentró magia de viento en la punta de su espada y lanzó varias estocadas al vacío que rompieron y empujaron las raíces hasta avivar el torbellino de llamas. Los demonios quedaron reducidos a cenizas.
Berceo: ¡Gran combinación, chicas!
Hilda/Gabriela: ¡Je, je, je! -rieron y se sonrojaron de orgullo y felicidad-
Lily: ¡No decepcionaré a Berceo-sama! -acumuló maná-
Frey: ¡Ni yo tampoco! -acumuló maná también-
Lily: "Invoco el poder de Odín". "¡Concédeme el poder de tu lanza sagrada y sacude los cimientos del planeta con tu filo helador!" ¡Magia de Hielo! ¡Lluvia helada y punzante: Gungnir!
Frey: "Invoco el poder del Gran Fenrir". "¡Golpea y congela la tierra con tu aliento invernal!" ¡Magia de Hielo! ¡Gran torbellino frío: Blizzard Storm!
Con sus hechizos, Lily invocó varias lanzas de hielo que cayeron desde el cielo, y Frey las envolvió en una ventisca que aumentó su poder. Varios demonios fueron derrotados.
Berceo: ¡Estupendo trabajo, chicas! ¡Un hechizo magnífico!
Lily/Frey: ¡Muchas gracias, Berceo/sama/kun! -agradecieron con sonrojo y felicidad-
Nina: Todas son fantásticas... ¡Yo también daré lo mejor de mí! -acumuló maná-
Nina creó unas semillas misteriosas y usó Modelling para convertirlas en flechas de madera. Entonces, las ajustó en su arco...
Nina: Magic Script: Enchant. -encantó las flechas y las disparó hacia el cielo- ¡Activar! ¡Magia de Luz! ¡Lluvia brillante descendente: Shining Rain!
El hechizo de Nina cae que de las flechas caiga una lluvia incesante de flechas luminosas que borran a los demonios del mapa.
Berceo: ¡Fantástico hechizo, Nina! ¡Has mejorado mucho!
Nina: Me halaga con sus palabras, Goshujin-sama. -agradeció con sonrojo y felicidad a su amado amo prometido-
Helena: Los atraparé. Vosotras atacad. -dijo a Celeste y a Luna mientras acumula maná-
Celeste: Muy bien.
Luna: Después de ti, Helena.
Helena empieza a conjurar y aparecen unas runas alrededor de los demonios.
Helena: Magia de Oscuridad. ¡Torbellino de tinieblas: Dark Tempest!
El hechizo de Helena cae que aparezcan cinco torbellinos de oscuridad que arrastran a los demonios hasta concentrarlos a todos en un mismo punto.
Celeste tuvo otra idea y conjuró runas para crear partículas de luz.
Celeste: ¡Ya lo tengo! ¡Luna-san, ataca después de mí!
Celeste: ¡Magia de Luz! ¡Esferas luminosas brillantes: Ark Delta!
Luna: Ya lo entiendo. Gran idea. -acumuló maná-
Lunamilia conjuró runas por debajo de los demonios y los hechizos de sus amigas.
Luna: ¡Mariposas de Luz Lunar!
Lunamilia genera una columna de luz lunar con forma de mariposas que hace explotar los hechizos de Helena y Celeste, generando una gran explosión que derrotó a los demonios.
Berceo: ¡Una hermosa y poderosa combinación! ¡No parece que se conozcan desde hace relativamente poco!
Helena/Celeste/Luna: ¡Je, je, je! -rieron y se ruborizaron de felicidad-
Berceo, entonces, encontró al demonio que creaba los portales demoníacos.
Berceo: Se acabó el juego, "amigo". -dijo al demonio mientras acumulaba maná-
El demonio trataba de escapar de Berceo, pero éste le marcó con runas.
Berceo: ¡Magia de Sellado: Maldición del Silencio!
Berceo selló la magia del demonio y acabó con él cortándole la cabeza de un vergazo.
Berceo: Bien. Con esto ya no aparecerán más demonios. Ahora, a hacer limpieza... ¡Multiple Target!
Berceo marcó a los demonios restantes con sus ojos divinos y conjuró runas en el cielo.
Berceo: ¡Magia de Luz Demoníaca! ¡Espadas de oscuridad luminosa: Betrayal Rain!
Berceo conjuró de las runas una lluvia de espadas de luz demoníaca que destruyeron a los demonios restantes. El exterminio está completado.
Berceo se reunió de nuevo con sus prometidas.
Berceo: ¡Gran trabajo, chicas! ¡Esos hechizos han sido la bomba! -felicitó-
Sue: ¡Ese hechizo tuyo sí que fue una pasada! ¡Como si el bien y el mal se hubiesen unido en algo completamente inimaginable!
Berceo: No es para tanto... La luz y la oscuridad son compatibles entre sí, y eso contra los ataques demoníacos es bastante eficaz.
Berceo: Lo vuestro sí que fue una pasada... ¡Os habéis vuelto muchísimo más fuertes en bastante poco tiempo!
Élise: Cada una de nosotras ha usado un elemento que no creíamos capaces de usar... ¡Yo nunca pensé que tendría afinidad con el agua!
Sue: ¿Eso significa que yo tengo afinidad con el fuego?
Helena: Es debido al enlace de Almas. Al unirnos a nuestro amo Berceo-sama, él puede compartir con nosotras sus afinidades elementales. Eso es una clara señal de que el Contrato Amo-Sirviente puede estar cerca de volverse Voto.
Berceo: Claro... Como yo tengo afinidad con todos los elementos, podéis adquirir el que más se ajuste a vosotras.
Yuri: Si este es el poder que se obtiene con sólo usar esa magia una vez, no puedo imaginar cuán fuertes seremos cuando el contrato se convierta en voto-degozaru...
Gabriela: ¡Ja, ja, ja! ¡Ni siquiera los Ars Goetia serán rivales para el poder del amor!
Luna: Claro. Sólo el amor vencerá al odio.
Berceo: Yo puedo enseñaros la fórmula de runas. Pero si lo que buscáis es dominar vuestra magia elemental, entonces deberíais aceptar el entrenamiento de Lolopechka.
Berceo: Asta me ha pedido permiso para entrenar en compañía de Nacht-san. Tanto Noelle como Mimosa, así como algunos miembros de Arcane Clover también tomarán parte en el entrenamiento.
Iris: ¿Pero sabes cómo será ese entrenamiento, Berceo-san?
Berceo: Lo único que sé es que Lolopechka también ofrecerá la ayuda de varios espíritus guardianes...
Berceo: Está la espíritu del Agua, Undine, cuya portadora es la misma Lolopechka.
Berceo: El espíritu guardián del Fuego, Floga.
Berceo: El espíritu guardián del Viento, Sumrik.
Berceo: El espíritu guardián de las Plantas, Potrof.
Berceo: La espíritu guardián de la Tierra, Sarad.
Berceo: Y el espíritu guardián del Rayo, Gadjah.
Berceo: Los seis espíritus guardianes pueden instruir hasta un máximo de cinco magos cada uno, así que sólo treinta personas podrán participar.
Berceo: Por mi parte, os puedo enseñar a formular los magivocablos necesarios para formular las runas hasta que llegue el día de la prueba. Algunas ya sabéis hacerlos, así que dominar la técnica no debería resultaros muy difícil.
Luna: Por mi parte, haré lo que pueda para enseñarles también.
Berceo: Gracias, Luna-shishou.
Alba: ¿Por qué tanta prisa, Berceo?
Berceo: Ya os lo dije. Después de la prueba, me ausentaré del reino para entrenar por mi cuenta.
Berceo contó sus razones a sus apesadumbradas prometidas.
Berceo: Después de lo que sucedió en Tartaria, tengo más que claro que mi poder es mucho mayor de lo que imaginé. Y mi derrota ante Belial en el Laberinto de Pandora me dejó claro que necesito dominarlo del todo. No puedo conformarme con los Sephiras.
Berceo: Además, mientras estaba inconsciente en la última semana, tuve un sueño.
Élise: ¿Un sueño?
Berceo: Mi entrenamiento lo supervisará una voz que me habló en aquel sueño. Tengo que ir hasta cierto lugar para invocarlo... Allí comenzaré a entrenar.
Berceo: Una vez termine de entrenar y dominar este poder... volveré a vuestro lado. Es una promesa.
Berceo: Y hasta que llegue el día en que deba partir... asumiré la responsabilidad y os haré lo más fuertes que pueda uniéndome a ustedes.
Berceo: ¡Hagámoslo juntos!
- ¡Sí! -respondieron todas las prometidas-
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A la vuelta, Drake estaba algo preocupado por algo y Berceo lo notó. Así que se acercó a su hermano para preguntarle.
Berceo: Drake.
Drake: Ah, Berceo. ¿Vuelves de un encargo? Tienes mucho tiempo libre para ser rey.
Berceo: Los Zodíacos y las ginoides de Babylon me ayudan en todo lo que pueden. Y el tío Dragios, papá y mis suegros y cuñados también me apoyan mucho.
Drake: Tener muchas prometidas tiene sus puntos fuertes, ¿eh?
Berceo: ¿Y qué me dices de ti?
Drake: ¿De mí?
Berceo: Tú también podrías tener muchas prometidas y construir tu propio país, ¿no crees?
Drake: ¿Me tomas el pelo? Yo no tengo tus habilidades y aptitudes mágicas. Y tampoco le gusto a ninguna chica, aunque tampoco tengo tiempo para eso.
Berceo: ¿Cómo que ninguna? ¿Y qué pasa con Dafne?
Drake: ¿Qué cosa con ella?
Berceo: Pensé que te gustaba ella.
Drake: ¿Eh? Tampoco es que me guste...
Élise: ¿Me permiten hablar, por favor?
Berceo: Claro, querida.
Drake: ¿Élise?
Élise: Hace poco que supe que Dafne-neesama es mi hermana mayor. Pero en lo poco que he visto de ella me ha bastado para asegurarme de algo-
Drake: ¿De qué?
Élise: A Dafne-neesama y a ti os une algo muy especial, Drake-san.
Drake: ¿Algo muy especial?
Élise: ¿Qué piensas de ella?
Drake: Qué pienso de Dafne...
Drake: Es verdaderamente hermosa, muy inteligente... Siempre puedo aprender algo de ella. Me encanta verla sonreír. Siempre que estoy con ella, mi corazón palpita.
Élise: Esa es la prueba definitiva: estás enamorado de mi hermana.
Drake: (...) Me gustaría que ella me acompañase en mi entrenamiento.
Élise: Pues pídeselo. Dafne-neesama ya es una maga muy poderosa y sabe emplear la fórmula de runas. No necesitará el entrenamiento.
Berceo: Además. Podemos enseñaros un hechizo para ayudaros a haceros más fuertes.
Drake: Primero deja que hablemos...
Élise: Pues estás de suerte. Mira, acaba de llegar.
Drake: Ah.
Dafne: Hola. ¿Va todo bien?
Berceo: Mi hermano tiene algo que decirte, Dafne. Os dejamos solos. ¿Nos vamos, querida?
Élise: Sí.
Berceo y Élise dejan solos a Drake y Dafne.
Dafne: ¿Querías decirme algo, Drake-san?
Drake: Ah... Pues...
Drake: ¿Qué tal tu día? Por mi parte, estuve preparándome para iniciar mi entrenamiento.
Dafne: ¿Ah, sí? Pues buena suerte, estoy segura de que te harás más fuerte.
Drake: Gracias. La verdad es que sé adónde ir, pero no sé donde se encuentra el lugar al que debo ir.
Dafne: ¿Adónde pretendes ir?
Drake: A un territorio llamado Escalera Celestial.
Dafne: La Escalera Celestial...
Drake: ¿Conoces ese territorio?
Dafne: Sí... Pero dicen que ese lugar se encuentra en la capa de ozono, y está formado por las capas de la atmósfera. Además...
Drake: Sé que allí se encuentra el "creador de los cielos". Quiero que él me entrene.
Dafne: Pues está difícil... Aunque yo sé dónde se encuentra.
Drake: (!) ¿De verdad? ¿Dónde?
Dafne: Dicen que su entrada se encuentra en otro territorio al que llaman el Techo del Mundo.
Drake: (...) Dafne, ¿ya tienes planes para entrenar?
Dafne: ¿Eh? Pues... No. ¿Por qué?
Drake: Por que si no te importa... Me gustaría que me acompañases.
Dafne: ¡¿Eh?! Qué inesperado...
Drake: No tienes por qué venir si no quieres. Investigaré la manera de llegar...
Dafne: ¡N-no tengo ningún problema! ¿Pero por qué quieres que vaya contigo...? ¿...necesitas que te guíe?
Drake: Bueno, eso es sólo en parte. Pero de verdad... me sentiría a gusto y motivado si vamos juntos.
Dafne: ¿De verdad te gusta... estar conmigo?
Drake: (...) Más de lo que crees.
- (¡Díselo ya!) -decían mentalmente Berceo y sus prometidas-
Drake: (Vamos, díselo...)
Drake: Dafne...
Dafne: ¿Sí?
Drake: (...) Me gustas mucho. Quiero estar siempre contigo.
Dafne: ¡¿Eeehhh?!
Dafne: (...) Q-qué inesperado...
Drake: A tu lado, siempre me siento capaz de volverme más fuerte. Nunca siento temor. Cuando peleé contra Mike y los Ars Goetia en el Laberinto, lo que más deseé fue... "Ojalá Dafne estuviera aquí..."
Drake: Si estamos juntos, el viaje y el entrenamiento se nos hará más llevadero.
Drake: Desde que te conozco, nunca he dejado de pensar... en lo fuerte, impresionante, y en lo hermosa que eres...
Dafne: ¿T-Tan hermosa te parezco? -se ruborizó-
Drake: Desde mi punto de vista, me pareces la mujer más bella del mundo.
Dafne: P-para, que me lo creo...
Drake: Siento que juntos, podremos llegar a hacer cosas inimaginables.
Drake: Dafne, de verdad que me gustas.
Dafne: ¿Sólo te gusto? -preguntó indecisa-
Drake: No.
Drake se acercó por sorpresa a Dafne.
Dafne: ¡Oh!
Drake: Te amo.
Drake sorprende a Dafne besándola en los labios. Sorprendiendo también sobremanera a todos los presentes.
Glaolo: ¿Oh? -no comprendía-
Flareleon: Vaya. -sí comprendía-
- ¡Qué atrevido, Drake/san/oniisama/niisama! -todas se sorprendieron-
A todos les asombró el atrevimiento de Drake.
Dafne: Drake-san... Sé que puedes hacer realidad cualquier cosa que te propongas. Y me encantaría estar a tu lado cuando las logres.
Drake: Dafne, ¿te gustaría ser mi novia?
Dafne: Sí. La primera, la única... no me importa. Si estoy contigo, nuestro mundo se hará mucho más grande. ¡Recorramos este camino juntos, Drake-san!
Drake: ¡Claro! ¡Lo logré! -celebró-
Flareleon: ¡Felicidades, hermano! Ya eres oficialmente un galán.
Drake: Anda ya...
Berceo: Ojalá este nuevo camino sea próspero para ambos.
Glaolo: No comprendo muy bien, pero me alegra que hayas encontrado a alguien con quien recorrer tu camino.
Glaolo: (Con ella, encontrará su lugar en el mundo...)
Berceo: Ya que estamos... Glaolo. Flareleon. Drake. ¿Mañana podríais venir con nosotros al Monasterio de Saint-Joanne?
Glaolo: ¿Para qué?
Berceo: Para ampliar un poco más vuestros horizontes... ¿os convertiríais al Alfaísmo?
Berceo: ¿Creéis en la Diosa?
Glaolo/Flareleon/Drake: (...) -no dijeron nada-
___________________________________________
Al día siguiente, Berceo llevó a sus hermanos a la Catedral donde se volvió alfaísta. Era un día de bautismos, y el divino quería bautizarlos.
Glaolo, algo indeciso. Flareleon, animado. Y Drake, con anhelos en su corazón. Los tres decidieron someterse al bautismo junto con el resto de nuevos acólitos.
Berceo: Diosa todopoderosa, bendice las almas de estos jóvenes con tu amor y compasión. ¡Que la luz ilumine sus caminos! -rezó-
Una luz bañó a todos los nuevos acólitos. Cada uno emanó una aura celestial de distintos colores, que significaban las bendiciones que habían recibido. Curiosamente, al igual que sucedió con Berceo al principio de todo, sus hermanos emanaron una aura iridiscente, multicolor como el arcoíris.
Berceo: Como suponía.
Hestia: Ahora ellos deberán darse cuenta del efecto de las bendiciones por ellos mismos, ¿no?
Berceo: Sí.
Hades: Segura que les irá bien. Son tus hermanos, después de todo.
Berceo: Es verdad.
Glaolo: (Diosa todopoderosa, ilumina mi destino, por favor.)
Entonces, Glaolo escuchó una voz misteriosa...
- Estás solo...
Glaolo: ¡¿Eh?!
- Siento en tu interior un gran vacío...
Glaolo: (¿Vacío...?) (No sé quien eres ni de qué me estás hablando...)
- Yo comprendo tu congoja... Comprendo tus dudas...
- Si buscas encontrarles respuesta, y hacerte más poderoso... ven a verme al Boquete Gigante...
Glaolo: El Boquete Gigante...
Flareleon: (Te lo ruego, ayúdame a hacer felices a mis chicas.)
Flareleon también escuchó la voz que escuchó en su sueño.
- Tu prueba tendrá lugar en las profundidades de las Ruinas Azabache. Allí me has de invocar... Te mostraré el camino...
Flareleon: Las Ruinas Azabache...
Drake: (Junto a Dafne, nos haremos más fuertes.) (Llegaremos a la Escalera Celestial... y conseguiré el poder de Rayquaza.)
Drake y Dafne estaban preparados para partir. Antes, Berceo les enseñó la Magia de Vínculo, para que la usen cuando se sientan con confianza.
De este modo, el día antes de la prueba, Drake y Dafne partieron hacia la Escalera Celestial...
Flareleon, junto con Eris, Lola y Kohaku, también partieron de viaje.
Glaolo, acompañado por Elizabeth, también decidió partir.
Dragios y Seek les recomendaron a ambos dirigirse a unos lugares diferentes. Flareleon y su familia decidieron partir a un lugar llamado Ruinas Azabache.
Glaolo decidió entrenarse en un lugar llamado Boquete Gigante.
Llegó entonces el día de la prueba de Lolopechka y los Espíritus Guardianes, que tiene lugar en el Domus Draco...
Fin del capítulo 45
Drake y Dafne ya son novios.
Berceo se hizo un poco más hombre al intimar explícitamente con sus prometidas.
Ahora, a lo siguiente...
les gustó?
queja?
sugerencia?
qué tipo de entrenamiento les espera a todos?
Si quieren saberlo, dejen su voto y comentarios, que es lo que me anima a seguir.
Jane!
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