El incómodo e incesante ruido de la campanilla despertó a Taehyung.

- ¡Que mierda! ¡Ya voy!- Pestañeó unas cuantas veces para poder tener nítida su visión y al notar en donde se hallaba maldijo en su interior por haber gritado.

Con sumo cuidado quitó sus brazos de alrededor del cuerpo de Jungkook y se paró después de arreglar la almohada que compartían y cubrirlo de mejor manera con las frazadas.

Se encaminó al baño y encargó de hacer su limpieza matinal lo más rápido posible ya que la campanilla ya había sonado otras dos veces.

Se juró internamente que si el individuo responsable por interrumpir la paz matutina llegase a despertar a Jungkook le rompería la cara con el mismísimo timbre.

Demasiado tarde.

Al dejar el baño, Jungkook empezaba a removerse en su lugar en la cama mientras murmuraba cosas sin nexo. Taehyung observó como fruncia el ceño y trataba de abrir los ojos; algo que le parecía dificultoso devido a la luz solar que entraba por la ventana.

- Buen día.- Articuló acercándose al menor con una sonrisa.

- Hola.- Murmuró Jungkook con su ceño fruncido e intentando sonreír aunque aquella luz le estuviese fastidiando los ojos tremendamente.- ¿Qué hora es?- Preguntó inquieto e incoformado.

- Las 10:26.- Anunció Taehyung. Jungkook soltó un largo suspiro.

- ¿Qué está pasan...?- La campanilla sonando otra vez respondió a la pregunta inacabada de Jungkook.

- No sé que tipo está desde hace diez minutos jodiendo con el timbre. Iré a ver quien es porque, por lo visto, no tiene planeado detenerse hasta que alguien asome.- Taehyung aseguró molesto. Jungkook sonrió al oírlo hablar.

Descabellado, tal y como estaba, atrapó un calentador y se lo puso.

Marchaba de la habitación cuando Jungkook saltó de la cama y corrió hasta él para abrazarle por detrás envolviendo sus manos por el tronco desnudo del moreno.

- Gracias por ayer.- Murmuró con su cara enterrada en la espalda del mayor. Taehyung sonrió abiertamente.

- Te lo merecías.- Enunció dándose la vuelta para arrollar al menor en un abrazo confortante. Depósito un beso en la cabellera castaña del más bajo y se alejó minimamente.- Ya regreso, ve a lavarte y baja después. Prepararé el desayuno cuando me libre del molestoso ese.- Jungkook rió y asintió dejándose ser besado en la frente antes de marchar hacia el baño casi saltitando por lo alegre en que se encontraba aquella mañana.

Taehyung lo observó con adoración. Era lo más lindo que ya había visto. Ladeó un poco la cabeza antes de mecer su cabeza en negación mientras sonreía.

Olvidándose de la necesidad de una camiseta bajó por las escaleras corriendo y evitando que el desconocido provoque más ruidosas molestias.

Cuando sostenía la manija de la puerta para abrirla, la campanilla volvió a sonar. Incomodado, Taehyung rodó sus ojos y abrió la puerta de golpe.

No fue para menos la sorpresa que se llevó al tener a un elegante chico, bien vestido y de apariencia impecable situado frente suyo.

Taehyung se sintió miserable por el estado en que se hallaba.

El chico de gran porte lo observó de arriba a abajo antes de sonreír suavemente. Aunque su sonrisa fuese bonita, Taehyung no pasó por alto la mueca de confusión que se dibujó en el rostro del desconocido.

- Eh... Siento haberte... ¿despertado?... Dime una cosa... creo que me he equivocado ¿Jeon Jihee está hospedada aquí?- El chico tenía su ceño fruncido.

- Eso está correcto. Pero no se encuentra ahora, ¿para qué la busca...?- Taehyung informó. El chico pareció aliviarse ya que soltó el aire de sus pulmones fuertemente.

- Necesitaba hablarle. Ayer la llamé y me dijo que podría encontrarla aqui...

- ¿Tu nombre?- Ahora una sincera sonrisa volvía a dibujarse en el bonito rostro desconocido.

- ¡Oh, lo siento! Que grosero he sido al no presentarme...- Taehyung sonrió minimamente frente a los modales del joven. Era tan peculiar.- Me llamo Kim Mingyu.- Estrechó su mano hacia Taehyung acompañado de una gran sonrisa. Taehyung la aceptó.- Necesitaba encontrar a Jihee para hablarle a Jungkook.- Al oír el nombre de Jungkook salir tan familiar de los labios del contrario, Taehyung no pudo evitar fruncir el ceño.

- ¿Jungkook? ¿Cómo lo conoce? ¿Para qué lo busca?- El chico puso una sonrisa de oreja a oreja.

- Hace tiempo que no hablamos, no me llama, ni responde a mis mensajes.- Alegó el más alto con una triste sonrisa.- ¿Sabes si está bien?

- Si, está bien... Pero ¿cómo lo conoces?- Insistió Taehyung.

- Parece que se han tornado amigos, tu y él.- Mingyu llevaba una gran sonrisa.

- Podría decirse que sí.- Taehyung contestó un poco molesto porque el más alto no había contestado a su inquietante pregunta.

- ¡No sabes cómo me alegra saber eso! Espera... ¿no te ha dicho?... ¡es mi novio!

Mingyu parecía orgulloso y feliz de alegar tal cosa. No obstante, Taehyung sintió como si le hubiesen arrojado un balde de água helada arriba.

- ... ¿Qué? ...

Taehyung dejó que sus brazos colgaran de su cuerpo, su boca se abrió a fin de formular algo pero nada salió, su pecho pareció sofocarse, no conseguía respirar, ya no sentía su respiración através de sus narinas, su mente quedó en blanco, sus ojos fijos en el chico que tenía frente a él sonriendo amablemente.

Una tercera voz se unió a la platica.

- ¿Que pasa, Tae? ¿Quien es?- Jungkook se paró de puntillas unos metros atrás de Taehyung mientras sonreía, ajeno a lo que pasaba frente a sus ojos.

Sintió como un nudo se formaba en su garganta al divisar la imagen de Mingyu al otro lado de la puerta.

- Mingyu...- No podía ser verdad. Volvió a pestañear y cayó en cuenta de qué estaba pasando.- Tae yo...- No era Mingyu lo que le importaba en ese instante.

Taehyung apenas y fue capaz de girar su rostro perdido hacia donde había sido llamado.

Jungkook sabía que la había cagado cuando un par de ojos cristalizados se giraron a verle.

Taehyung lo miraba fijamente sin dejar que las lágrimas que empapaban sus ojos descendieran sobre sus mejillas.

- Taehyung déjame explicar, yo...- Jungkook dio un paso al frente pero Taehyung retrocedió otro alejándose de Jungkook.

¿Quien era ese tipo parado justo ahí?

- ¿Quién eres?- Taehyung estaba aterrado y aún no podía digerir la noticia que se le habían dado.- ¿Qué me has hecho?

- Taehyung, escucha por favor, yo...

- Maldito...- Jungkook seguía intentando acercarse pero Taehyung retrocedía como si fuese un niño aterrado por tener una bestia frente a él.- Maldito covarde...

- ¡No! ¡Tae escúchame un momento!- Los ojos de Jungkook empezaban a empañarse. Estaba desesperado porque no sabía qué hacer, qué decir, qué pensar, sólo quería que el mayor dejase de retroceder y llorar. No quería verlo llorar. No merecía sufrir.

- ...¿Estuviste todo este tiempo burlandote de mí?...- Dedujo Taehyung cerrando sus puños sintiendo cómo sus uñas rasgaban la piel de la palma de sus manos.- Dejaste que todo esto pasara, aún cuando ya tenías a alguien.- Mingyu no entendía nada. Miraba de Jungkook a Taehyung y así sucesivamente.

- Taehyung tu no entiendes... Yo...

- ¡¡Tienes novio, Jungkook!! ¡Tienes un puto novio! ¡Eres un maldito cobarde, Jungkook!

- Por favor, Taehyung, cálmate.- Taehyung golpeó con su espalda contra la pared. Ya no tenía adonde huir. Mingyu bloqueaba la puerta con su eminente tamaño.

Jungkook se percató y caminó hasta estar a unos pocos pasos de distancia del moreno.

- ¡¿Que me calme?! Que me calme...- Taehyung dejó caer la primera testaruda lágrima. Su voz se oía entrecortada.- ¡Eres un mentiroso de mierda ¿y me pides que me calme?!

- ¡Lo siento! ¡No pensaba en eso cuando estaba contigo!- Confesó Jungkook. Empezaba a sudar frío y sus lágrimas ya se veían. Le falta el aire y las manos le sudaban.- Lo siento... Pensé contártelo en ocasiones pero jamás vi la oportunidad.

- ¡¡Cállate!! ¡Cállate! ¡Ya deja de mentiras! ¡Hice todo lo que podía por ti! ¡Soporte tus groserías! ¡Tu mal carácter! ¡¡Te confesé como me sentía, te dije toda la puta verdad!! ¡Que te amaba y que eras perfecto ante mis ojos! ¡¡Y mientras lo hacía te burlabas de mi!! ¡¡Me tomaste cómo tonto y dejaste que esto pasara aún cuando sabias que ya había alguien en tu vida!!- Las lágrimas bañaban las mejillas de Taehyung, se resbalaban por sus labios y luego caían al piso. Sus ojos empezaban a tornarse rojizos e inchados. Su pecho bajaba y subía descontroladamente a causa del ritmo que su respiración había adaptado. En su corazón sentía un sofoco y era como si alguien estuviese sujetandolo entre sus manos y estrujando sin piedad.

- ¡Yo te amo!

La recámara se colmó de silencio por unos largos segundos.

- Te amo...- Aseguró Jungkook sin importar que Mingyu lo mirase espantado y Taehyung le dirigiera una mirada cargada de odio.

Jungkook se acercó un poco y cuando iba a sostener la mano de Taehyung creyendo que este había entrado en razón, una bofetada hizo que retrocediera algunos pasos desorientados.

- ¡Oye! ¡¿Que mierda piensas que haces?!- Mingyu no entendía qué era lo que pasaba entre aquellos dos pero no pudo contenerse al ver a Taehyung lastimar a su novio.

- ¿Me amas?- Taehyung rió amargamente ignorando a Mingyu. El mencionado se había acercado a Jungkook a sostenerlo entre sus brazos ya que parecía un poco desorientado.- Pues no te creo...- Jungkook no lograba decir nada. Sentía gusto a hierro en su boca. Le dolía el cachete pero nada comparado al dolor que sentía en el corazón; era como si alguien lo estuviera traspasando con una lanza lentamente para hacer el dolor más intenso.- Te di todo lo que tenía a mi alcance.... Te amé con lo más puro y sincero que tenía pero tú... tú simplemente dejaste que esto pasase aunque cuando sabías la verdad. Te dije...- Se detuvo a abocar un poco de aire.- Te dije que recibiría tiros por ti... pero... pero no puedo hacerlo si eres tú quien disparas.- Las mejillas de Jungkook estaban completamente empapadas.

- No...- Su voz sonaba ahogada.

- Vete a la mierda con todas tus mentiras.- Sostuvo el collar que colgaba de su cuello desnudo y sin piedad lo arrancó y lo arrojó a los pies de un Jungkook que siquiera podía sostenerse en sus propias piernas.- Que se joda todas esas mierdas que te dije. Olvídalo todo y piérdete. Vete de aquí y jamás regreses, Jungkook. Es lo último que te pido.

Después de expulsar gran parte de la rabia que lo consumía y ver a Jungkook quebrar en llanto, la visión de Taehyung se nubló y su corazón pareció latir más despacio, el aire se le fue y su cuerpo ya no fue capaz de sostenerse en pie.

Mientras se desplomaba en el piso su mente en blanco sólo lograba pensar en esos ojos llorosos que lo observaban desde arriba. 

Taehyung sabía perfectamente qué le estaba pasando a su cuerpo y sintiendo sus ojos pesar se entregó a la oscuridad dejando que estos se cerrasen y su cuerpo quedase inconsciente.

- ¡Tae!- Jungkook empujó los fuertes brazos de su novio y dejó que sus piernas cayeran junto al cuerpo de Taehyung.- ¡Tae! ¡¡Tae!!- Lágrimas corrían como ríos de sus ojos castaños. Su entrecejo estaba fruncido. Su corazón descontrolado. No entendía qué estaba pasando.- ¡Despierta, por favor! ¡Taehyung! ¡¿Tae qué te pasa?!- Acercó su rostro hacia el pecho de Taehyung. Se le fue el aire, no respiraba.- ¡Que mierda! ¡Por favor! ¡Por favor, Taehyung, despierta!- Sus descontroladas lágrimas empezaban a empapar el pecho desnudo del chico inconsciente echado al piso.- ¡Llama a una ambulancia, Mingyu!- Se giró gritando hacia donde su novio observaba todo horrorizado.- Tae... ¿Qué te pasa?- Sostuvo el rostro helado del moreno entre sus manos.- Abre los ojos... por favor... abre los ojos...- De repente algo paso entre su mente. Sobrepuso sus manos y las posicionó en el centro del pecho desnudo, empezó a ejercer presión con desespero mientras trataba inútilmente de retener las lágrimas.- Por favor...- Nada. El cuerpo seguía lo mismo. Las manos de Jungkook empezaron a ejercer más fuerza. Le temblaba todo el cuerpo y se detuvo al notar qué era inútil.- Taehyung...- Observó ese cuerpo inconsciente próximo a él.- ¡Taehyung abre los malditos ojos!- Sus lágrimas se habían detenido.

"¿Que he hecho?" - Jungkook se alejó del cuerpo de Taehyung bruscamente.

Mientras Jungkook observaba el cuerpo del chico que amaba inconsciente, se oyó la ambulancia.

Pero Jungkook no la oía, no oía nada, no veía nada, no atentaba a nadie, su mirada estaba clavada en el cuerpo de piel morena.

Parecía dormir. Sus ojos se cerraban tan tranquilamente que parecía dormir, su piel seguía reluciente como la de un bebé, su cabello desordenado lo hacía parecer un niño.

"Sólo se ha dormido, Jungkook. Sólo eso." - su mente le aconsejaba. Jungkook sonrió amargamente. Sí, tal vez sólo dormía. Pero deseó estar metido en ese sueño, en vez de Taehyung.

Volvió a pestañear y para cuando lo hizo el cuerpo de Taehyung ya estaba siendo cargado hacia la ambulancia. Avistó a la señora Kim bajar de su auto y subir a la ambulancia junto a su hijo mientras lloraba.

Con mucho esfuerzo, Jungkook se paró del piso. Sus ojos le pesaban, su cuerpo dolía, su corazón parecía vacío, el chico que le daba vida acababa de irse.

Una solitaria lágrima escurrió por el rostro rojizo cuando Jungkook bajó la mirada y se encontró con el collar de Taehyung. Con cuidado se agachó y lo recogió.

Marchó hacia la habitación. La casa había quedado vacía. No sabía adonde se habían ido todos y tampoco le importaba.

Con lentitud empezó a recoger sus cosas, sus ropas esparcidas, sus calzados, todo lo que le pertenecía. Hizo su cama y la de Taehyung. Se pego una ducha rápida y luego de estar vestido con indumentaria parecida al día en que había llegado a esa casa, salió del baño.

Arrojó su mochila hacia sus hombros y elevó la maleta que estaba en el piso hasta tenerla a su lado en pie.

Observó por última vez la habitación que había sido testigo de el amor que había nacido entre el y su chico y sonriendo dejó el collar que pertenecía a Taehyung en la punta de su cama.

Apagó las luces y abandonado la recámara, cerró la puerta tras él.

Bajó la escaleras y cuando estuvo fuera de la casa de los Kim llamó un taxi que lo llevó hasta la estación.

Sí, estaba yéndose porque Taehyung tenía razón en algo: era un covarde, un maldito covarde.

Mientras el autobús dejaba atrás el pequeño pueblo, Jungkook se acomodó en su lugar, al lado de una señora de media edad.

Tomó su móvil en manos y dejó un mensaje a su madre diciendo que se iba primero y que no se preocupara por él, iba a estar bien. Sin esperar respuesta de su progenitora, acomodó sus auriculares en sus oídos olvidándose del mundo que había a su alrededor.

No, eso estaba incorrecto, su mundo en ese exacto momento estaba a camino del hospital sufriendo.

Pegó su frente en el vidrio de la ventana y llevándose por la melodía que tocaba, se permitió llorar un poco más, sólo un poco más. Sólo hasta que fuese capaz de olvidar como el cuerpo del chico que amaba se había desplomado frente a sus ojos y había dejado de respirar.

Cerró sus ojos ignorando todos las miradas que lo miraban apenadas por ver tal sufrimiento.  Lloró, lloró y lloró otra vez.

Lloró tal cual niño a quien le arrebatan el juguete adorado.

Lloró porque sabía que aquel era el último día en que veía a ese hombre. El único hombre que fue capaz de amar, el único que hacía latir su corazón, el único que lo besaba con cariño incomparable, el único que no le había decepcionado, el único que lo abrazaba y le hacía sentir protegido, el único que con sólo una sonrisa lo hacía suspirar de amor. El hombre que le había dado vida.

Pero ya no estaba más y lo único que sentía era como si sólo su cuerpo estuviese allí, su vida la había dejado kilómetros atrás junto a un chico llamado Kim Taehyung.

Un chico que le había enseñado el significado de la palabra amor.

Pero él, como siempre fue un niño rebelde, decidió hacerse el desentendido y romper aquél corazón puro de su maestro.

Aquella tarde, se marchó de aquel pueblo y jamás regreso.

Porque, Taehyung, le había enseñado otra cosa también. Era un covarde, un maldito covarde.

Y sobretodo, no se merecía el amor que el hijo de la amiga de mamá tenía para brindarle. Jamás mereció.

《🌹》

No tienes​ idea de que aún
Te extraño. Todavía te extraño.
Cuando vemos nuestros recuerdos de amor dejándonos,
Encontramos las lágrimas que están cayendo.
Tus huellas ya se encuentran muy lejos, ya no soy
Capaz de alcanzarte

Te necesito, te amo

Con mi roto corazón

Te sigo llamando. Seguiré amándote por siempre. Por siempre.

Por favor, piensa en mi en ocasiones
Aunque no me encuentre ahí
Iré en tu busqueda después de limpiar
Mis lágrimas que caen

Yo iré, te encontraré

En algún momento nos encontraremos

Incluso si mi cuerpo es dañado por el frío viento. Por siempre.

Cuándo encuentre a mi amor que me dejó le pediré que regrese
No te volveré a perder, no
Ahora sonríe frente a mi, siempre seremos felices
Así nunca más volveremos a llorar

Te necesito, te amo
Con mi roto corazón
Te continuó llamando. Seguiré amándote por siempre

Yo iré, te encontraré (ah)
En algún momento nos encontraremos (Cuando nos encontremos de nuevo)
En el frío viento... (El tiempo detenido...)
Incluso si mi cuerpo es dañado (Voy a retrocederlo)
Por siempre

--

Y mientras escuchaba esa triste melodía, lo supo.

Todo se había acabado.

* Wind - FT Island (música)

--

Here's the end.

Gracias por todo, queridos lectores.