Hoseok dormía abrazando a su primo, su respiración era calma, dormía tranquilamente.

Taehyung había logrado adormecer tan solo media hora atrás, del brazo que colgaba de la cama sostenía su móvil, imerso en sueño este estaba a punto de resbalar de entre aquellos finos dedos pero no sin antes vibrar fuertemente haciendo que el moreno abriera sus ojos abruptamente. Salió deprisa de entre los brazos de Hoseok sentándose en la borda de la cama despertando al mismo y encendiendo la pantalla del móvil, el brillo de este lo cegó.

"Tu amigo está un tanto que borracho, te necesita.
Calle: xxx.
El primer club nocturno que veas.
Estamos aqui.

Un amigo de Jungkook."

Entonces Taehyung supo que estaba en lo cierto cuando no aceptó más ninguna bebida alcohólica de parte de Hope.

No lo pensó dos veces.

- Vete a casa, Hoseok. Surgió algo urgente. Búscame mañana.- Y tomando un par de tênis y un abrigo en manos dejó la habitación hacia atrás junto a un Hoseok desconcertado.

― 🌹 ―

Las luces coloridas cegaban a Jungkook, este ya no sentía más su cuerpo, tenía una patética sonrisa en los labios mientras se abría paso en medio a la multitud. Se dedicaba a empujar uno que otro, intentaba tan solo no caerse justo allí, en medio a tanta gente. Pero al fin, sus pies tropezaron entre sí y perdió el equilibrio cayendo.

O casi cayó.

Si no fuera por un par de largos brazos sostenerlo por los codos.

Levantó la mirada sonriendo mientras murmuraba incesantemente "gracias, gracias"  miró una ultima vez al chico haciendo una corta reverencia sin dejar de agradecerle por prevenir su encuentro con el piso.

- ¿Jungkook?- Miró hacia atrás, ese chico altísimo seguía allí en pié mirándolo con curiosidad.

- ¿Te conozco?- Preguntó volviendo a acercarse.

- ¡Jungkook!- El chico de piel blanca y cabellos oscuros corrió a él y lo abrazó. Jungkook frunció el ceño pero no se alejó.- ¡Soy yo! ¡Yugyeom!- Jungkook le sonrió sin saber que decir.

- Perdón. No te recuerdo.- Dijo sosteniendo con más fuerza la botella de whisky que tenía en manos, siquiera recordaba cuando aquel objeto de vidrio fue a parar en sus manos.

- ¡Hicimos el cuarto y quinto grado juntos!- Jungkook seguía parando ahí, su ceño fruncido. En silencio. No recordaba al pobre chico a su frente.- ¡Te robaron tu almuerzo una vez y yo te ayudé ¿Recuerdas?! Luego empezaste a robarte mis sándwiches, un día te pillé mientras te atragantabas con uno, ¿lo recuerdas?- Jungkook abrió sus ojos desmesuradamente de par en par. Imposible que aquel chico a quien le robaba los sándwiches se hubiera convertido en esa persona que tenía al frente.

- ¡Yugyeom!- De esta vez Jungkook lo abrazó.- Lo siento no recordarte, a decir verdad, estoy viendo a dos Yugyeom frente mío en este mismo instante.- Yugyeom sonrió. Al menos seguía teniendo esa misma sonrisa de ángel que tenía de niño, pensó, aun parecía un niño inocente cuando sonreía, como cuando un niño.

- No te preocupes con eso. Parece que hace tiempo que estas bebiendo eso ¿no?- Jungkook asintió frenéticamente.

- Bueno, voy por algo más de beber.- Jungkook dijo después de pasar unos cortos segundos en silencio. Se giró en dirección al bar y perdió el equilibrio, casi volvía a caer, si no fuera, por supuesto, por su salvador.

- Creo que debías volver ya a casa en vez de beber más ¿no crees?- Yugyeom cuestionó sujetándolo junto a él para que pudiera andar.

- No.- Negó Jungkook.- No quiero verle ¡Nunca más! Lo odio, lo odio tanto que tengo ganas de darle una paliza, pero ya está demasiado lastimado y también es por mi.- Yugyeom se detuvo a mirar con una sonrisa ese triste puchero, las mejillas rosáceas, los cabellos despeinados y los ojos llorosos del más bajo. No entendía nada de lo que hablaba el otro pero era adorable en ese estado, borracho.

Cuando al fin lograron salir de ese lugar, Yugyeom lo llevó hacia la esquina de la fría y escura calle.

- ¿Debía llamar a tu madre?- Jungkook no contestó, miraba a sus botas y sacudía sus brazos mientras suspiraba ruidosamente.- ¿No está en casa?- El más bajo negó con la cabeza.- ¿Tienes el móvil ahí?- Jungkook apuntó al bolsillo de su chaqueta con la mirada. YuGyeom rió y tomó el móvil de la chaqueta color negro.- ¿Contraseña?- Preguntó al encender la pantalla.

- Jeon.- Habló Jungkook bajo.

- Que obvio.- Yugyeom rió mientras buscaba la lista de contactos. En los números de emergencia, estaban: Mamá, Gyu, Kim Taehyung. Miró nuevamente a Jungkook.- ¿Gyu? ¿Debería llamarlo a él?

- ¡No!- Yugyeom se asustó por el repentino cambio de temperamento.

- Lo siento ¿Kim Taehyung entonces?- Jungkook suspiró alta y dramáticamente. Por fin, asintió.

En unos instantes, Yugyeom volvió a retornar el móvil al bolsillo de Jungkook.

- ¿No le vas a llamar?- Jungkook preguntó.

- Sería extraño ¿no? Le envié un mensaje.- Aclaró dando de hombros. Jungkook bajó la mirada.

Fueron algunos minutos en un incómodo silencio, a Jungkook le empezaron a helar las manos, miró a la botella que aún no había soltado y terminó con todo el líquido que sobraba de un solo trago.

- ¿Sabes que te pusiste más apuesto? Casi no te logré reconocer ahí dentro.- Confesó Yugyeom sonriendo.- A decir verdad, siquiera se como lo logré, cambiaste bastante.- Aquella bonita sonrisa no desaparecía de sus labios y Jungkook sin darse cuenta estaba mirando embobado a esta.

YuGyeom notó hacia donde la vista del más bajo se dirigía, y no sabia si esa regla sólo servía para el pero cuando alguien miraba de esa manera a la boca de otro eso solo significaba algo.

Y lo hizo.

Atrajo el cuerpo de Jungkook al suyo jalando de la barra de su chaqueta y pegando sus calientes y secos labios a los fríos y húmedos de Jungkook.

Y se sintió satisfecho.

Porque tuvo ganas de besarle desde que lo reconoció.

Se sentía bien tener ese cuerpo más pequeño pegado junto al suyo y sus manos en sus caderas.

Para su infelicidad, no duró mucho, los labios de Jungkook fueron alejados de los suyos con brusquedad. Miró asustado atrás de Jungkook.

Un tipo de altura semejante a la de Jungkook lo sujetaba por la muñeca, Jungkook lo miraba tremendamente asustado.

- La próxima vez que intentes abusar de un chico borracho, espero que haya alguien cerca para romperte la cara.- Yugyeom lo miró asustado. Además de atrevido, era irrespetuoso.

- Jungkook ¿conoces a ese tipo?- Yugyeom preguntó irritado mirando a Jungkook.

- Este tipo,- Taehyung se señaló a sí mismo.- Es el tipo a quien le enviaste el mensaje. Mucho gusto, Kim Taehyung. Espero verte jamás en mi vida.- Declaró marchándose y arrastrando a Jungkook con el, sin siquiera mirar atrás.

- Que bastardo...- Fue lo unico que Yugyeom logró murmurar antes de regresar al club incierto si debió dejar ir a Jungkook con una persona de aquella clase.

― 🌹 ―

- ¡¿Qué tienes en el cerebro, maldito Jungkook?! ¿Caca?- Taehyung gritaba con el pequeño cuerpo encogido en la esquina del sofá.- ¡No es posible que seas tan idiota! ¡Estabas en un callejón abandonado! ¡A media noche! ¡Con un tipo que jamás has visto! ¡Debes estar loco! ¡Pudo haberte hecho daño, idiota!- Y Taehyung sólo detuvo sus duras palabras cuando escuchó un sollozo provenir de la cabeza gacha de Jungkook. Abrió sus ojos de par en par cayendo en cuenta de lo que acababa de hacer. Analizó a Jungkook por mas algunos segundos.- Lo siento.- Murmuró sin que Jungkook lo escuchara. En silencio se acercó y tomó el cuerpo de Jungkook en sus brazos, y en silencio se dirigió a las escaleras. Jungkook sollozó por última vez antes de quitarse las manos de la cara dejando a vista un par de ojos inchados, unas mejillas coloradas así como la punta del nariz.

- ¿Qué haces?- Logró murmurar entrecortado. Taehyung detuvo su caminata, observó el estado ajeno y volvió a caminar después de segundos, ignorando su pregunta.

Cuando Taehyung hubo alcanzado la puerta del cuarto, la empujó con el pie ya que sus manos estaban ocupadas por un cuerpo no tan pequeño que digamos.

Se dirigió inmediatamente al baño, sentando a Jungkook en la tapa del váter.

- Ya regreso.- Murmuró para que tan sólo fuera audible dejando el baño. Jungkook tiró hacia atrás la cabeza y cerró sus ojos.- Parece que no tienes fuerza ni para una ducha ¿verdad?- Taehyung cuestionó observando a Jungkook desde la puerta sin dejar que este escuchara. Ahora tenía una muda de ropa y una toalla en mano.

Se acercó haciendo que Jungkook despertase. Taehyung se agachó y quitando las manos de Jungkook de dentro de los bolsillo de su chaqueta le bajó el cierre a esta y haciendo a Jungkook un poco al frente la deslizó por sus hombros hasta que estuviera fuera del cuerpo de este.

- Te quitaré las botas.- Ese fue el mejor pretexto que Taehyung encontró para no tener que quitarle la camisa tan deprisa. No estaba preparado.

Con lentitud le desató las botas y las removió junto al pequeño par de medias blancas.

- ¿Te puedes enderezar?- Pidió Taehyung. Jungkook asintió.

Tomó la barra de la remera blanca y la subió prohibiéndose de mirar aquel cuerpo. La arrojó a una esquina del baño cuando esta terminó de pasar por la cabeza del menor.

Y confiriendo que Jungkook estuviera con los ojos cerrados miró aquel cuerpo.

El pectoral era demarcado divinamente, esa parte de piel lechosa se definía de manera tan bonita que quería poder poner su boca en ella. Bajó la mirada y su abdomen era aun mas precioso. Brillaba bajo la poca luminosidad y se notaba que así como su pectoral también empezaba a definirse de manera que Taehyung podría declarar que el cuerpo de Jungkook era el más bonito que había visto en toda su vida. Su cuerpo era realmente algo divino. Taehyung extendió su mano anhelando tocar ese delicado pedazo de piel a muestra pero volvió a recoger los finos dedos hacia atrás cuando la realidad le pesó en los hombros. Suspiró pesadamente bajando la cabeza.

- Esto es lo ultimo.- Avisó viendo a Jungkook asentir aún de ojos cerrados. Tomó la cremallera y la abrió revelando el color de la ropa interior del menor. Negro. Levantó la mirada y concluyó.

Ambos sabían que Jungkook era capaz de desvestirse sólo.

El menor lo estaba poniendo a prueba.

Pidiéndole que se levantase apenas un poco para que la pieza de ropa bajase terminó de arrastrarla por sus muslos hasta parar en las rodillas. Sin dificultad la terminó de quitar lanzando en la misma dirección que las otras piezas de ropa.

Se permitió mirar a ese cuerpo semi desnudo que tenía en frente. Si había siete maravillas en el mundo, Taehyung no quería conocerlas, tenía a la octava frente suyo.

-  Ya métete.- Ordenó.- Regresaré para ayudarte con el cabello.- Dijo tomándolo del brazo ayudándolo a pararse y lo observó caminar hacia la ducha. El trasero se movía al compás de los pasos y cuando su cuerpo alcanzó el agua, el menor gimió fuertemente, estaba fría, a propósito.

Y entonces Taehyung supo que debía dejar el baño. Cerró la puerta atrás de el con urgencia y se recostó en esta.

Miró hacia abajo sonrojado.

Tenía un bulto en medio de las piernas.

Jungkook lo había excitado.

― 🌹 ―

Taehyung se levantó de su lugar en la cama después que la oscura habitación estuviera en silencio.

Se dirigió a orilla de la cama del menor.

- Algunos días atrás te hubiera besado sin pensarlo dos veces, mocoso ¿Me estás dejando de gustar?- Se preguntó terminando de cubrirlo con las mantas que Jungkook olvidó usar devido al cansancio. Tocó uno de los mechones húmedos ajenos y sonrió.- Buenas noches.

-stxr_Suran este se lo dedico. Gracias por el apoyo.

-no olviden votar si les gusta. Cuando lo hacen me dan más ánimos de seguir-

Gracias por todo. Revisaré mañana. Perdonen los errores.

Nos leemos luego.

Un beso gordo desde Brasil ^^