D I A N A
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Sentada en uno de los sillones rodeamos a Styx que se limaba las uñas sin prestarnos mucha atención a ninguno en particular. Hades caminaba de un lado a otro en la sala con su cabello encendido en llamas. La diosa del rió Estigia había aclarado que no hablaría hasta que todos estén tranquilos.

- ¿Puedo hablar o van a seguir estando alborotados? - levantando su mirada de sus uñas nos miro a todos posando su mano en su vientre antes de sonreír. Todos estábamos expectantes de Hades que seguía dando vueltas y Perséfone lo tomo del brazo sentándolo a su lado. Ahora las miradas recayeron en Styx que no se sentía incomoda, sino que le agradaba la atención que estaba recibiendo.

- Habla de una vez - se abalanzó sobre ella Alysa que ya había demostrado otras veces no ser muy paciente. La diosa del odio la miro posando su dedo índice en sus labios señalando que debíamos guardar silencio en especial la chica de cabello morado. Artemis la tomo de la cintura y cubrió su boca asintiendo a la diosa que volvió su mirar oscuro a los reyes del inframundo.

- El retoño que crece dentro de mi es hijo de Ceo llevo un mes de embarazo y todo esto lo estuve planeando desde que supe que Cronos quería hacerle daño a Diana - por primera vez vi como Styx demostraba algo más que burla o enfado su voz se quebró un poco y tuvo que respirar para continuar con lo que debía decirnos. - No sabía si tú eras de verdad la descendiente de Circe había perdido el rastro de tu padre y cuando finalmente logre encontrarlo él había muerto. La culpa comenzó a crecer dentro de mi generando odio y eso me hacía sentir bien, pero la promesa que le hice a mi amiga seguía rondándome la cabeza. Te vi con el príncipe del inframundo y supe que eso terminaría con ustedes dos juntos y formando una familia, pero la profecía que se declaró con Apolión volvió a repetirse. - ahora sus ojos estaban puestos en mí y sobre todo en mi vientre que comenzaba a notarse - La profecía hablaba que un descendiente del inframundo nunca dijo de quien y Cronos olvido escuchar hasta el final lo que el oráculo estaba diciendo. Si el niño llegara para destruir al olimpo, pero el amor hará que cambie por completo sus planes. El anciano se olvidó de ese pequeño detalle y yo no me negare a entregarle mi hijo, pero con una condición. - recostándose en el sillón miro a todos los presentes volviendo a tener su sonrisa malvada que me dio escalofríos.

- ¿Cuál condición? - pregunto mi novio sin dejar de abrazarme, desde que había llegado estuvimos juntos como chicle. No queríamos separarnos por nada del mundo.

- Es algo insignificante - intento restarle importancia la diosa para luego soltar la bomba - Quiero que Ziara pueda volver a la fraternidad y sin ningún tipo de castigos al igual que mi hermano Tánatos - Helen que había permanecido serena de levanto de golpe saliendo de la sala pisando fuerte. Hypnos salió detrás de ella y los demás no sabíamos que responder.

- Trato hecho - hablé yo captando la atención de todos sobre mí - Ziara no es mala chica solo quería proteger a su madre de Cronos fue una víctima tanto como todos nosotros - expuse y todos asintieron aceptando la propuesta de la diosa. - Una última cosa Styx ¿Por qué entregar a tu hijo ni bien nazca? - eso es algo que me carcomía la cabeza yo como madre no dejaría a mi bebé en manos de alguien como Cronos.

- No tengo lo que se dice instinto maternal - se puso de píe mirándome fijo a los ojos - Además ¿qué puede ofrecerle una persona que solo siente odio? - sin esperar a que respondiera ella desapareció.

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Tres meses más tarde....

Devoro la pizza de anchoas de cuatro quesos con extra de queso mientras miro una película sentada en la sala de mi casa. Desde que Apolión regreso del tártaro nos dedicamos a buscar un hogar para irnos a vivir juntos. Con ayuda de Hades compramos una casa que para mí es enorme pero mi novio dice que es perfecta para tener una familia enorme. Sigue con la idea de tener once hijos.

La fraternidad quedo al mando de Alysa que luego de unas pruebas compitiendo contra Sol una de las hijas de Apolo, Adara y también contra su propio novio Artemis la hija de Afrodita logro quedarse con el puesto. Ziara volvió a la fraternidad lo que trajo algunos problemas con Helen, pero luego se pudieron solucionar los malos entendidos y ahora la menor de las hijas de la diosa del amor está saliendo con Hypnos. Me siento muy feliz por la platinada al fin consiguió ser ella misma y demostrar que tiene emociones, más de una vez me la cruce en la universidad en una apasionada sesión de besos con su chico de las pesadillas. Y eso que ella decía que jamás se dejaría ver con ningún chico en público.

- ¿Cómo está mi flor? ¿mi campeón como se portó? - la voz de mi novio hace que me sienta feliz y dejando la pizza de lado me pongo de pie con sumo cuidado de no hacerle daño al bebé. Hace un mes supimos el sexo del bebé y tenderemos un hermoso varoncito, Ylenia y Aileen tendrán niñas por lo que imagínense como están los abuelos en el olimpo con esta noticia.

- Estamos bien con algunos antojos ¿cómo te fue en la morgue? - Apolión había comenzado con las pasantías en un hospital que quedaba a quince minutos de nuestra casa y donde yo también estaba haciendo mis pasantías en la sala de emergencias es algo ajetreado el trabajo, pero siempre puedo pedir un descanso por mi estado.

- Tranquilo como muerto recién enterrado - desde que estaba en la morgue hacia esos chistes que para muchos no son graciosos, pero ya había mencionado que somos raros. Me reí acercándome a mi novio que me tomo de la cintura para luego atrapar mis labios con los suyos.

- Pedí la pizza que te gusta ¿vamos a cenar? - vi como él se lo pensaba un poco para luego sonreír y besar mis labios en un casto beso. Terminamos de cenar para luego irnos a acostar el embarazo me hacía tener sueño todo el tiempo y mi novio venia exhausto luego de las practicas.

Nos metimos en la cama con los pijamas puestos y yo como siempre no encontraba acomodo en la cama mi panza ya estaba creciendo y el dormir se me dificultaba porque mi cuerpo no estaba cómodo. Muchas veces use a Apolión como una almohada humana logrando poder dormir cómoda. Esta sería una de esas noches donde debía dormir abrazada a él para no estar incomoda.

- Sombritas no puedo dormir - sentándome en la cama me apoye en la cabecera acariciando mi vientre con mucho cuidado. El primer trimestre se fue junto con las náuseas mañaneras y los vómitos, pero los antojos vinieron con mucha más fuerza. Mis cambios de humor eran más frecuentes y mi novio con toda la paciencia del mundo entendía mis cambios repentinos.

- Yo tampoco mi flor - Apolión se sentó en la cama apoyando su espalda contra el respaldo y llevo su mano a mi vientre para acariciarlo. Muchas veces le hablaba al bebé porque sabemos que puede escucharnos y eso estimula a nuestro pequeño tesoro. - ¿Quieres hablar acerca de los posibles nombres para el bebé? - asintiendo con la cabeza me incline para tomar de la mesilla de noche la libreta y el bolígrafo. Teníamos una lista larga con nombres que habíamos estado pensando en ponerle a nuestro hijo. Gran parte de esos nombres son griegos queremos que nuestro hijo también porte un nombre griego como nosotros. Admito que algunos de esos nombres son espantosos y otros son claros imanes para que le hagan bullying.

- Nos quedan cinco y el único que me agrada es Anker - le mostré la lista y los otros nombres enserio no eran para nada bonitos. Habíamos leído muchos nombres de bebés desde los más novedosos hasta los más vintage.

- Me gusta suena genial para un chico - se acercó a mi vientre para acariciarlo y luego lo beso para comenzar a hablarle. - Anker te gusta ese nombre hijo, todo lo que tu madre elije es lindo - sonreí acariciando el cabello de Apolión ahora ya teníamos el nombre para nuestro hijo.

- Anker Calum Black Adelfótita ¿suena bien no crees? - me acomode junto a mi novio quedando de tal forma que mi pancita no se sienta con ninguna molestia para poder dormir juntos.

- Ya te dije que todo lo que venga de ti es perfecto mi flor - tomando mi mano la llevo a su boca para dejar un beso en mis nudillos. En estos momentos me siento completa estando junto a la persona que amo y en poco tiempo teniendo a mi hijo en mis brazos. La soldad que me acompañaba se fue con la llegada del amor y mi familia que en estos momentos se volvió enorme y no de tres como lo era antes.

A P O L I Ó N
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Me quito la bata de hospital dejándola colgada en el perchero y me quito mi ropa para ponerme el traje negro que me trajo Ylenia. Acomodo la corbata roja en mi cuello viendo que mi cabello esté en orden revisando mi bolsillo encuentro la pequeña caja de terciopelo azul que contenía el anillo de mi madre. Llego el momento de dar el siguiente paso en la relación y me siento como un niño de cinco años con miedo de decir la verdad de una travesura. Salgo del pequeño cuarto donde descansamos en los turnos largos de la morgue y veo a mis primas esperándome viendo con algo de desagrado las camillas donde realizamos las autopsias de los cuerpos.

- Este lugar parece una heladera gigante - comento Ylenia frotando sus brazos mientras temblaba un poco. Su abultado vientre la hacía verse adorable al igual que a Aileen que comía una barra de chocolate.

- Te dije que te pusieras un abrigo, pero no me escuchaste - la señalo la rubia con su chocolate para luego darle un gran mordisco. Mis primas vinieron a ayudarme con todo esto de la propuesta y lo haría en un restaurante muy elegante el cual Aileen se encargó de hacer las reservas para que esté completamente vacío para la ocasión. Ylenia hizo que su marido dejara a las estrellas más brillantes en el cielo y no olvidemos a la luna que se encuentra más cerca de la tierra.

- Ya chicas no discutan que debemos ir donde esta Diana - Gemma interrumpe la pelea entre ambas jóvenes metiéndose en medio de ambas embarazadas. La joven estaba llena de vitalidad con sus mejillas rozagantes gozaba del premio que le había dado Hades y Perséfone por su valentía. Volver a la vida, el accidente que en un inicio la mato si paso, pero Gemma en el recuerdo de sus padres y el de todos sobrevive. No se le borro su memoria por petición de Diana se encariño demasiado con la rubia al igual que Gemma con nosotros.

- Tienes razón, perdón Ylenia estoy muy sensible por todo - mis primas se abrazaron y Gemma se quitó su abrigo para ponerlo encima de los hombros de Ylenia la cual se lo agradeció.

- Chicas debemos irnos no puedo llegar tarde a esta cena - las tres jóvenes se giraron hacia mí y escaneándome con la mirada se acercaron acomodando mi cabello y mi corbata al parecer no lo hice bien yo solo.

- Ahora si estas perfecto primo - recorriendo mi aspecto con sus ojos grises Aileen asintió con una sonrisa franca. Ylenia apoyo su mentón sobre el hombro de Gemma y estiro su brazo con su otra mano señalando su muñeca donde tenía su reloj. Era hora de irnos oh llegaríamos tarde y si eso pasa Styx me mataría de diez formas diferentes y cada una peor que la anterior.

Tomándonos de las manos nos hice viajar a unas cuadras del restaurante donde mi auto estaba estacionado. Alida se había encargado de traer mi auto hasta el restaurante para no levantar sospechas en el hospital. La busqué con la mirada hasta que la encontré sentada en una banca comiendo galletitas cerca de donde nos encontrábamos.

- Al fin llegan Styx no puede seguir entreteniendo a Diana dando vueltas para que ustedes lleguen a tiempo - la voz alterada de Alysa resonó detrás de nosotros captando la atención de todos. La cabeza de uva traía un ramo de flores de distintos colores y especies que conformaban un ramo en tonos verdes y rosas. Me lo entrego acomodando la solapa de mi traje y paso su mano quitando lo que supongo eran pelusas de mis hombros. Girándome comenzó a empujarme hacia el restaurante seguida de tres embarazadas y una rubia que no dejaban de decirme que le dijera lo hermosa que se veía a Diana y que no arruine el momento.

Dejándome en la entrada del restaurante callaron su charlatanería al ver a Damián y Adonis en la entrada del complejo con trajes bien acomodados de camareros. Mis primas de inmediato se pegaron como lapas a sus esposos diciendo lo hermosos que se veían vestidos así.

- Basta de cursilerías y muévanse que Diana está a dos calles de aquí - con un vestido negro, cabello bien recogido en un moño elegante y tomada del brazo de Hypnos nos miraba con reproche Helen.

- Chicas les devuelvo a sus esposos en unas horas ahora váyanse - apartando a mis primas de los dos hombres que me ayudarían esta noche me adentre en el restaurante. Helen pisaba mis talones muy de cerca junto a su novio Hypnos, luego de muchas idas y vueltas la platinada decidió darle una oportunidad al amor que siente por el dios de las pesadillas y hoy celebran su primer mes de noviazgo.

Adonis me guió a través del lujoso restaurante asiéndome subir por unas escaleras de vidrio que se veían tan limpias que se podría comer en ellas. Como Aileen me aseguro la segunda planta del restaurante estaba completamente vacía y justo en medio destacaba una mesa con un mantel blanco y velas iluminando la mesa generando un ambiente más íntimo. Respiré profundo llegando hasta la mesa y dándole la espalda a las escaleras por donde subí. Puse mi mano en el bolsillo de mi saco buscando la pequeña caja que contenía lo más preciado en mi familia. Símbolo del amor de mis padres y en estos momentos símbolo del amor que siento por Diana.

- Sombritas - gire con una enorme sonrisa en mi rostro y sacando la mano de mi saco dejando la cajita en mi bolsillo. Posicione mi mano tras mi espalda baja y espere a que mi novia caminara hacia mí. Con un vestido purpura que tenía un cinturón plateado bajo su pecho marcaba su hermosa pancita de cuatro meses y medio. Su cabello castaño estaba en una trenza que caía a un lado de su hombro y el hermoso collar con forma de corazón que le regale para la misión reposaba en su pecho. Caminando despacio en sus sandalias bajas color plateado ella se acercó hasta a mi denotando la diferencia de alturas. - ¿Qué es todo esto? - sus oscuros ojos recorrieron el piso del restaurante vacío para luego verme a los ojos y caer en el ramo que tenía en las manos. Le entregue las flores a mi novia que sonrió tomando las flores acercando su nariz para oler el perfume de las plantas frescas.

- Estuve mucho tiempo ocupado con las prácticas y pensé en tener una cena tranquilos los dos solos - acariciando su mejilla besé sus labios por un segundo. Ella se sonrojo agachando su cabeza para oler de nuevo las flores y mirarme una segunda vez. - Siéntate la noche recién comienza - moviéndome corrí la silla para que Diana se sentara y espere para acomodar el asiento por ella. Dejando las flores a un costado mi novia observo a uno de los dos camareros que se encontraban al final de las escaleras Damián se acercaba con dos menús del restaurante. Solamente espero que el inútil de mi primo recuerde lo que debía decir o lo mato por arruinar la cena.

- Buenas noches soy Damián y esta noche seré su camarero - entregándonos los menús se retiró dejándonos hablar tranquilos.

- Apolión dime que estas tramando ¿porque Damián está en el restaurante como mozo y Adonis que se supone que hacen aquí los dos? - mirándome con una ceja alzada dejo el menú de lado y se cruzó de brazos viéndome con algo de tristeza. - ¿Es esto una despedida? - noté como sus ojos se llenaron de lágrimas y tuve que contener mis ganas de lazar la mesa al demonio correr hacia ella y secar sus lágrimas. Tomando su mano por encima de la mesa entrelace nuestros dedos acariciando su palma con amor.

- No es ninguna despedida solo pedí ayuda para algo muy importante, confía en mí - con su mano libre limpio sus ojos empanados y se abanicó para no derramar lágrimas. Con una sonrisa volvió a verme a los ojos cubriendo sus mejillas sonrojadas tras el menú.

Luego de los deliciosos platillos que degustamos vino el postre y junto al momento más importante. Haciéndole una señal a Adonis le pedí que abriera el tejado del ventanal del techo que dejaba a la vista las estrellas. Tomando la mano de Diana la hice mirar al cielo donde las estrellas comenzaron a bailar. Mi flor cubrió su boca emocionada y no podía dejar de ver el espectáculo que solo sus hermosos ojos eran privilegiados de ver. Luego de unos minutos las estrellas pararon y Diana me miro con sus pupilas iluminadas.

- Durante mucho tiempo estuve buscando ser alguien que no era para que el amor no me lastime. Fue un error termine con el corazón destrozado y con mucho rencor hacia ese sentimiento que solo me causaba dolor. - soltando la mano de mi novia me puse de pie para caminar hacia ella. - Todo eso cambio cuando tu comenzaste a meterte en mi corazón y debajo de mi piel. Moviste los cimientos de todo lo que pensaba acerca del amor y me enseñaste que puedo amar sin sentir dolor. Juntos creamos una familia, luego un hogar y ahora... - me arrodillé frente a ella con el corazón latiéndome a mil por hora metí mi mano en el saco sacando la cajita. - Quiero que seamos un matrimonio. Diana te casarías conmigo para estar juntos por... - abrí el estuche enseñado la sortija que perteneció a mi madre y si mi flor la acepta ahora sería suya. Señalando al cielo Diana termino de leer lo que las estrellas pusieron.

- Por siempre y para siempre - su mano cubrió su boca y con lágrimas en sus ojos me miro. - Si sombritas... si quiero - con manos temblorosas coloque la sortija en su dedo y la bese.

F I N
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#FelizJuevesEnLlamas

Capítulo dedicado a 20jers04 lectora destacada 💟

Llegamos al final de esta historia 😭 pero todavía falta el epílogo y los capítulos extras. Apolión tuvo su merecido final feliz junto a Diana, lucharon tanto para estar juntos que se merecen ser felices.