Las semanas pasaron algo rápidas a mi parecer, en la cabaña todo estaba tranquilo cada uno estaba en tranquilidad, estar así me gustaba pero aún seguía sintiéndome algo mal, no sabía nada de él ni de los demonios, suspire arreglando la cama y salir de la habitación para ir al comedor, realmente no tenía apetito pero debía comer o no me dejarían tranquila, dentro de poco volvería a la escuela para poder graduarme, estaba nerviosa pero feliz. Me senté a comer el desayuno en silencio, tome un poco de jugo de naranja y apoyé mi codo de la isla y recargar mi cabeza de mi mano divagando una vez más en mis pensamientos, no podía sacarlo de mi cabeza aunque quisiera, no podía borrar esas escenas de mi memoria y me frustraba, quería verlo, quería saber si estaba bien.

—¿Estás bien?—Lina me miró con una pequeña sonrisa y asentí devolviendo la misma—Por fin salió el sol, los chicos están en la piscina ¿Quieres unirte?, te hace falta tomar sol.

Y no era mentira, realmente estar encerrada y el clima nublado no ayudaba mucho que digamos, estaba más pálida de lo normal y esa era una buena idea para por lo menos broncearme un poco y no verme como un fantasma, al terminar mi desayuno fui rápidamente a mi habitación para lavar mis dientes y volver con mi amiga, ella había lavado todo y me esperaba, sostuve su mano al momento que la extendió y me llevo al patio trasero dejando ver a los chicos dentro del agua besándose, reí y ella carraspeó atrayendo la atención de ambos.

—No es momento para eso— nos acercamos más y negué mientras los miraba con diversión.

—Rayos, te urge tomar mucho sol Rosie.

—Calla tonto— solté su mano y me senté en la orilla y moví mis pies por debajo del agua mientras apoyaba mis manos a cada lado de mí achinando un poco mis ojos, el sol era muy bueno.

—De acuerdo, hace semanas que no tomó una gota de alcohol y hoy es sábado—Helios se colgó en la espalda de Harry y colocó su mentón encima de la cabeza del contrario, Lina se sentó a mi lado—Así que hoy haremos nuestra propia mini fiesta ¿Qué dicen?.

—Sin drogas—Sugirió Harry mirando a la contraria y la vi asentir tranquilamente, yo asentí a la idea de mi amigo queriendo más diversión.

—En un rato buscaré en el almacén a ver que hay— dijo la chica y me tumbé en el césped mirando el cielo, cerré mis ojos escuchándolos hablar yo no tenía nada que decir realmente.

Me sentía cansada y un poco adormilada, suspire removiéndome un poco girándome, apoye mi cabeza de mis manos cerrando mis ojos tomando sol, tenía una pijama corta así que no sería problema, bostece un poco dejando de escuchar sus voces, solo había un silencio cómodo y mi cabello se alboroto un poco por la brisa que hacía, arrugue mi nariz al escuchar un sonido de algo quebrarse, abrí mis ojos notando que estaba en la sala de mi hogar anterior, me confundí por ello pero caí en cuenta que me había dormido y estaba en un sueño, me levanté despacio y camine hacia la cocina debido a que los sonidos provenían de allí, di un paso hacia atrás cuando un vaso fue lanzado con fuerza contra el piso, alce mi vista encontrándome con esos ojos lindos que tanto estaba extrañando.

Me acerque lentamente esquivando los vidrios que estaban por casi toda la cocina, su mirada estaba completamente sobre mí, tenía un aspecto terrible, su cabello estaba hecho un desastre, no tenía camisa solo el mono de chándal azul marino que habíamos comprado hace semanas, tenía una barba de más de tres días y tenía ojeras grandes, en sus manos había un poco de sangre, retrocedía mientras que yo me acercaba.

—Sal de mi cabeza—su voz era ronca y algo distinta, olisquee el aire y supe que había estado bebiendo—¡Sal de mi puta cabeza!.

—Daren...—susurré mirando el piso para evitar cortarme pero ¿Por qué si estaba soñando?, me acerque más y estire mis manos para sujetar la suya y mire estas, podía sentirlo. —¿Qué estás haciendo?.

—Solo vete, por favor— alejó sus manos de mi de forma brusca y se giró con intenciones de irse pero al reaccionar me acerque rápido a él para abrazarlo por detrás y detener sus pasos—Rosie...

—Vuelve— cerré mis ojos fuertemente evitando llorar, el vacío se hizo presente y dolió por primera vez en semanas—por favor, vuelve conmigo.

—Rosie abre los ojos— me aferré más a él comenzando a llorar, ya no podía evitarlo más, no podía negar que lo extrañaba mucho, no sabía si era por mi padre o por él en sí—Abre los ojos..

No me quedó más remedio que obedecer así que abrí mis ojos pero al hacerlo él ya no estaba, estaba en la cocina pero no en mi anterior hogar sino en la cabaña, me abrace a mí misma sorbiendo mi nariz mientras bajaba mi cabeza, sentí brazos rodearme y mire a los chicos, no me contuve simplemente seguí llorando siendo consolada por ellos, seguramente no sabían porque lloraba pero no quería dar explicaciones, me llevaron a mi habitación y me acosté sin rechistar, abrace una almohada sintiendo una gran presión en mi pecho, limpie mi nariz con un pañuelo que Lina me había extendido, solo escuche la puerta ser cerrada y unos pasos acercarse nuevamente a la cama.

Cerré mis ojos tratando de calmarme, no quería seguir preocupándolos, sentía un peso más en la cama y unos dedos acariciar mi cabello, abrí mis ojos por unos cuantos segundos y mire a Harry, me acomode mejor en su dorso haciendo que me abrazara, lo necesitaba, acaricio mi mejilla y cabello despacio, sorbí una vez más mi nariz y luego limpie la misma con el pañuelo, juguetee con su camiseta seca cayendo en cuenta que se había cambiado completamente, humedecí mis labios mirando la pared en silencio, no sabía qué decirle.

—Te gusta, ¿Cierto?— me quedé en silencio por unos cuantos minutos y luego negué despacio cerrando mis ojos.

—No lo sé— confesé alejando esa imagen suya en ese horrible estado, se acomodó mejor y suspire pesado—yo no sé qué siento Harry, no sé realmente quién es Daren, solo sé que es el hijo de Drácula y debe embarazarme pero ninguno quiere eso.

—¿En qué momento ocurrió toda esta locura?— me encogí de hombros sin saber realmente esa respuesta, suspiro respirando lentamente y solo escuche el latir tranquilo de su corazón.—Ellos piensan que extrañas a tu padre.

—Y lo hago, pero no me enfoco en él porque no quiero sentirme peor— me aleje de su cuerpo y me senté quedando a su par, claramente él era más alto que yo, recargue mi cabeza de su dorso unos minutos—No sé qué hacer..

—Por ahora mantenerte tranquila, seguramente volverá pero debes tener paciencia— suspire cerrando mis ojos y asentir.

Él tenía razón, debía mantenerme tranquila y conservar la poca paciencia que tenía, ¿Cómo sería Daren realmente?, es decir, su cuerpo real, ¿Cómo sería su aspecto?, ¿Era joven o muy viejo?, optaría la primera opción no creo que se viese viejo ¿O sí?, dios santo, yo solo quiero estar completamente tranquila, quiero que esté aquí para dejar de tener esos sueños tan reales, para dejar de extrañarlo, debería odiarlo por asesinar a mi padre pero simplemente sentía que no podía hacerlo, ¿Para qué se alejó?, había mencionado que debía estar cerca suyo para estar a salvo pero al parecer ¿Había mentido?.

De acuerdo ya me comenzó a doler la cabeza de tantas preguntas, decidí dormirme para poder verlo nuevamente, Harry seguramente me dejaría sola si me veía dormida aunque lo dude mucho después de lo acontecido, me removí más pero no podía dormirme nuevamente, bufé abriendo mis ojos y ver a mi amigo dormir, me sentí celosa por eso pero lo arrope más y deje un beso en su mejilla, me levanté de la cama para salir de la habitación e ir con Lina y Helios pero al verlos dormidos en el sofá solo pude sonreír un poco, salí de la cabaña y camine hacia el patio trasero para sentarme en una silla y mirar el bosque, sentía mis ojos pequeños he hinchados pero no le tome importancia.

Ya casi no hacía sol y seguramente volvería a llover, rasque mi nuca con mi mano derecha mientras miraba los árboles tranquilamente, amaba la naturaleza, era tan única y misteriosa, sonreí al recordar cuando papá y mamá me llevaron a un hermoso campo floreado, claramente cuando aún eran los verdaderos, mi sonrisa se borró con tan solo pensar en eso, suspire cruzando mis brazos por encima de la mesa y esconder mi rostro entre mis brazos y cerrar mis ojos por un par de segundos, ¿Acaso ella trabajaba con Drácula?, ¿Qué pasará si cumplo los dieciocho y aún no me embarazo?, me estremecí por la brisa fría y negué colocándome recta, me levantaría para ir a la habitación a tratar de dormir pero el sonido de un claxon llamó mi atención. Me levanté de mi lugar y corrí hacia la entrada que estaba un poco alejada de la cabaña a decir verdad, ¿Y si era él?, sonreí por eso pero al ver al mismo detective quitar sus lentes de sol detuve mi correr y borré mi sonrisa.

—Señorita D. Laurent, debe venir conmigo— mire hacia la cabaña y negué, no podía irme así porque sí, tal vez él era uno de ellos.

—No iré a ningún lado con usted.

—Rosie, se trata de tus padres— mi semblante cambió y mi guardia bajó, abrió la puerta del auto mientras suspiraba, ¿Ahora qué había sucedido?, sentí miedo y sin pensar mucho abrí la reja para salir y entrar rápidamente al auto, mire la cabaña juntando mis manos.

El detective subió al auto y lo coloco en marcha, subí mis pies descalzos al asiento y abrace mis rodillas, mire la ventana tratando de calmar el fuerte cosquilleo de mis manos, seguramente están en la estación, ahora Daren que había hecho, suspire moviendo mi pie derecho mirando aun la carretera, él iba a una velocidad considerable, ninguno dijo palabra alguna durante el trayecto, cuando pude divisar finalmente unos edificios supe ya había llegado, desvió el auto y en minutos llegamos al hospital de Beaufort, ¿Por qué me traía aquí?, pensé que íbamos a la estación, baje del auto sin comprender nada, cerré la puerta y camine a su lado rápidamente, sentía el corazón en la garganta y mis nervios estaban a flor de piel.

Entramos al hospital pero por la parte trasera, me indico que subiese al ascensor y así lo hice, presiono el botón que daba hacia la morgue, pase saliva con algo de dificultad sintiéndome ahora completamente ansiosa, mis manos temblaban y estaban heladas, al llegar salió primero y solo imite su acción siguiéndolo, un policía nos dejó entrar y en segundos llegamos a nuestro destino, tome aire y entre al cuarto tapando mi boca al verlos ahí a ambos, mis ojos se llenaron de lágrimas y me acerque más, en el cuello de ambos había una gran cicatriz, fije mi vista en mi padre y ese aspecto horrible seguía en él, pero ¿Qué sucedió?.

—A tu madre la encontraron muerta en el mismo lugar donde te habíamos encontrado a ti— el detective explicó mientras yo solo los miraba sin comprender nada aun— y a tu padre lo encontraron muerto en su casa, claramente ambos fueron asesinados.

—Espero no piense que yo les hice tal cosa porque no es así—aclaré luego de poder tranquilizarme un poco, él negó levemente.

—Tienes excelentes coartadas—me aleje de los cuerpos y camine hacia la salida de donde estaba tenía mucho frío—Rosie tienes que estar bajo protección, no se sabe aún quién es la persona responsable de esto.

—Solo necesito tomar aire fresco— salí lo más rápido que podía de allí, subí al ascensor y presione rápido el botón de planta, esto no podía ser cierto.

¿Entonces dónde estaba Daren y el demonio que estaba en el cuerpo de Ana?, estaba cada vez más confundida con todo esto, no tenía duda de que ese hombre sospechaba de mi pero no me importaba nada que tuviese que ver con él, yo solo quiero encontrar a Daren y exigir respuestas, quiero saber que sucedió y quiero saber si se encontraba bien. ¿Por dónde debería iniciar?, mierda esto está siendo complicado, a decir verdad, no soy buena en este ridículo juego...