(Narrador omnisciente)

Decir que no se sentía aturdido sería mentir. El Alfa pelinegro después de despedirse de los Omegas emprendió caminó hacía una cafetería cercana para reunirse con sus viejos amigos de la infancia y adolescencia. 

Pero lo que tenía aturdido al chico era el embriagante aroma que había quedado en el interior de su auto. El aroma del Omega de cabellera rubia había quedado impregnado por todo el auto. Con el tenue aroma de Taehyung también, vainilla y cereza. Pero era casi imperceptible para el Alfa, el que según él destacaba más era el del Omega peli rubio. 

Jimin no fue el único que se pasó en vela divagando en sus pensamientos la noche anterior. El Alfa no pudo pegar el ojo toda la noche. Por estar soñando despierto y fantasiando con dicho Omega. Su Alfa interno le exigía estar cerca del Omega pero también le decía cosas que él no logró entender en un principio. 

"Mi Omega"

"Nuestro Omega"

"Mio"

Esas y otras más, al principio le pegaba una pequeña reprimenda a su Alfa por dichos pensamientos, pero después de un par de horas reflexionando en los sentimientos que sentía cuando estaba cerca de él, llegó a una respuesta que lo dejo helado. 

Jimin era su pareja predestinada. 

Claro, esos nervios que sintió cuando lo vio, ambos se perdieron en sus miradas, el aroma de Jimin y ese tercer olor a miel que estaba más que claro que sólo el sentía, la felicidad inexplicable que sentía cuando estaba a pocos centimetros del Omega. 

Y como no, su Alfa dando vueltas, corriendo de felicidad cuando lo vio, como paraba las orejas cada que el Omega soltaba una risita, como movía el rabo con sólo verlo y como movía su narisita cuando sentía el delicioso aroma del Omega. 

Ahora todo estaba más que claro para él. Pero de algo estaba muy seguro. Y eso era que le costaría ganarse la atención y el cariño del Omega peli rubio. 

Sabía muy bien que Jimin no lo quería y podría asegurar que lo odiaba por todas las veces que de cachorros le hizo la vida imposible. Siempre alejaba a quien sea de él y su hermano pero Tae nunca supo que con Jimin se llegó a pasar. 

Al pobre rubio le hizo la vida fastidiosa desde niños. Le hacía los típicos jalones de pelo, lo molestaba por su sobre peso cuando eran niños, por sus mejillas aún regordetas. En fin, Yoongi sabía que no sería nada fácil poder tener la atención de su Omega.

Aunque el tenía un pasado que superar antes que nada. 

Cuando llegó a la cafetería, bajo del auto y entró, vio en una de las mesas de esquina a sus dos amigos. Que aunque no lo diga en voz alta los extraño demasiado. 

_ ¡¡Yoongi!! — exclamó el único Omega de los tres, saltando a darle un fuerte abrazo a su amigo — ¡No sabes cuanto te extrañamos!

— Ya me di cuenta Seokjin — contesto el Alfa devolviendole el abrazo a su empalagoso amigo. 

— Al menos finje que tú también nos extrañaste tarado — Dijo el Omega peli rosa. 

— Claro que los extrañe. 

— Hola amigo, cuantos años sin verte — Habló el moreno de oyuelos, parandose de su asiento y acercándose al Alfa pelinegro, para darle un abrazo también. 

— Lo mismo digo Namjoon — Dijo Yoongi regresando el saludo a su amigo. 

Los tres tomaron asiento para pedir su orden y poder charlar a gusto. 

— Bien, creo que tenemos mucho que contarnos al parecer — Habló el peli rosa emocionado de por fin estar los tres mosqueteros después de tanto tiempo. 

— Lo mismo digo Jin — Dijo Yoongi, señalando con su barbilla el cuello del Omega donde relucia una muy rosada marca. 

El Omega se sonrojo hasta las orejas y soltó una tímida sonrisa, escondiéndose en la curvatura del cuello y hombro de su Alfa. 

Yoongi alzó una ceja, sorprendido y divertido por lo que estaba presenciando. 

Sabía que los tontos de sus amigos eran pareja cuando el se fue a Canadá pero no sabía que seguían siéndolo y mucho menos que Namjoon había marcado a Jin. Eso sí que no se lo esperaba. 

Siguieron platicando y contándose todo lo que pudieron en aquel reencuentro de amigos. Nuevamente juntos, los tres mosqueteros como los había apodado el mismo Jin cuando eran unos cachorros mocosos aún. 

♡ ♡

Cuando las clases terminaron y la hora de la salida llegó, ambos Omegas, se despidieron de sus amigos aunque fue más difícil separar a Taehyung de Jungkook. Esos dos no se cansaban de pasar juntos dandose muestras de amor por donde sea. 

Hasta que por fin lo lograron y se dirigieron hacia cierto Alfa pelinegro que ya los esperaba fuera del auto. 

— Hola hyung — saludo muy contento el castaño. 

— Hola hermanito. Hola Mochi — Saludo Yoongi.

Jimin solamente se le quedó viendo de una manera sería, cosa que en realidad era una capa bajo sus reales sentimientos. Por dentro estaba que se moría por saltar a los brazos del Alfa y ocultarse en la curvatura de su cuello y hombro. Pero debía saber controlarse. Aunque le fuera casi difícil por el delicioso aroma del Alfa. 

Al no recibir respuesta del Omega, se subieron al auto para emprender caminó a la Universidad que querían ir los Omegas. 

Tanto Tae como Jimin estaban emocionados por que por primera vez pasarían por las instalaciones de lo que sería su Universidad en unos meses. 

Cuando llegaron ambos Omegas bajaron como rayo del auto y entre chillidos de emoción, entraron a ver las instalaciones y "pedir información" ellos sabían muy bien lo que querían. 

Taehyung, soñaba con estudiar fotografía, era un mundo de en sueño para el plasmar las distintas bellezas del mundo. Detener el tiempo en una fotografía, era algo que simplemente amo hacer desde muy pequeño y claramente sus padres y amigos siempre lo apoyaron. 

Por otro lado, Jimin estaba más que seguro que quería estudiar danza, el Omega, amaba bailar, sentirse libre en cada paso que da, en cada giró, en cada saltó por que definitivamente su estilo era el contemporáneo. Era inexplicable las sensaciones que el baile hacia sentir al rubio. Y como al igual que su amigo. Su padre siempre lo apoyo con su sueño de ser bailarín y estaba apunto de cumplir una gran meta en su vida. Ingresar a la Universidad de sus sueños y estudiar danza contemporánea. 

Yoongi llegó al lado de ambos cuando los logró encontrar. No va negar que la Universidad es hermosa. Con amplias instalaciones, edificios señalados con las diferentes carreras. Areás verdes por puntos estratégicos. Simplemente un lugar que le corta la respiración al que entré. 

— Wow, si que supieron elegir un buen lugar chicos — Habló el Alfa causando un pequeño respingo por el susto a los Omegas, al no percatarse de que el chico había llegado a su lado. 

— ¿Verdad que es hermosa hyung? — Dijo Tae, aún más emocionado que antes. 

— Definitivamente. 

— ¿Usted término sus estudios en Canadá hyung?— Jimin no sabía por qué pregunto eso, se dió cuenta de lo que dijo hasta que ya había soltado la pregunta. 

— No. Me faltaron 2 años para terminar, pero trasladé mis papeles a una universidad de aquí, de Corea. Para terminar mis estudios — Respondió el pelinegro con su mirada fija en el rubio. 

— Que bien hyung. ¿Por qué no se pasa aquí con nosotros? — Pregunto Tae. 

— Es una buena idea hermanito — Respondió Yoongi, muy atraído por la idea de su hermano y poder estar más cerca de un hermosos Omega rubio, que lo estaba taladrando con la mirada en esos momentos. El Alfa moría de ternura con solo verlo, es que definitivamente Jimin parecía más un gatito gruñon que realmente molesto.

La tarde se fue en pedir información para ambos Omegas. Recorrer algunas de las instalaciones que se les permitió y admirar el lugar en el que estarian por varios años. 

Saliendo del lugar los tres se dirigieron a sus respectivos hogares. Cansados por pasar caminando casi toda la tarde de un lado a otro. 
Ambos amigos se despidieron como siempre lo hacen e ignorando olímpicamente a cierto Alfa que se les quiso unir. Bueno solamente cierto peli rubio hizo lo posible por ignorarlo. 

Así se fueron a sus casas a descansar y esperar un nuevo día.

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¡Hola amigos!

¡Aquí les traigo un capítulo!

Espero lo disfruten.

Perdón si hay errores ortográficos. Cuidense!!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐