El poderoso Vegetto
Las líneas de tiempo son una cosa, las dimensiones otra, y en esta ocasión, se juega con ambos términos. En la historia que todo mundo conoce, los rivales saiyajin Goku y Vegeta se fusionaron para poder vencer al maligno demonio llamado Majin Buu. Esta fusión, nacida de los arcillos Pothara que son objetos divinos, fue llamada Vegetto. Siendo la unión de dos rivales y siendo producto de una fusión con objetos divinos, Vegetto era naturalmente superior al resultado que habría obtenido al nacer por medio de la danza de la fusión Metamoru, quizás su nombre sería Gogeta por ese método.
Originalmente, en la línea temporal principal, los pendientes Pothara poseen un límite de tiempo de una hora para aquellos que se fusionan siendo mortales. Pero además, Vegetto tendría la mala fortuna de separarse prematuramente debido a unos gases mágicos qué produce el cuerpo de Majin Buu y que entraron en contacto con él.
Sin embargo, en una realidad o dimensión muy alejada de la original, las cosas tomaron un giro totalmente inesperado. En esta dimensión, en esta realidad en concreto, la fusión por medio de los pendientes no posee un límite de tiempo, siendo una fusión eterna para cualquier individuo.
Esta es la historia que responde a la pregunta de: ¿Qué habría pasado si Vegetto no hubiera desaparecido en el cuerpo de Buu?
Acompáñenme a ver la historia de la unción de los rivales más poderosos. La historia de la fusión más poderosa de la existencia.
LA HISTORIA DE SÚPER VEGETTO.
Año 774:
El día 7 de mayo del año 774, en la tierra del universo 7, ocurrió algo impresionante. Ese día, el temible monstruo llamado Majin Buu fue resucitado por el maligno mago Babidi, hijo de Bibidi. El demonio creado por Marva resultó ser un guerrero cuyos poderes superaraban cualquier límite ordinario. Vegeta cayó en combate incluso después de desbloquear su poder oculto con la magia de Babidi. Gotenks, la fusión de Goten y Trunks, fue absorbido por él y con ello Buu le dió una paliza a Gohan para después absorberlo también ante el fin de su tiempo con la fusión de los niños.
Goku y su súper saiyajin 3 resultarían inútiles, pues no estaba ni cerca de los poderes del mejorado Súper Buu, y menos ahora que poseía el poder de los niños, de Piccoro y de Gohan con su potencial oculto liberado. Todo parecía perdido.
Sin embargo, Vegeta volvió del mundo de los muertos y, luego de una difícil discusión, los dos rivales saiyajin se fusionaron para dar nacimiento a Vegetto.
En su forma de Súper Saiyajin a la cual bautizó como Súper Vegetto (así como Vegeta se llamó a sí mismo Súper Vegeta), el guerrero definitivo dominó por completo al monstruo Majin Buu. Ni con el poder de Gohan absorbido, Buu pudo hacerle cosquillas a la fusión más poderosa.
No había comparación, la fuerza de Vegetto excedía por mucho a la de Majin Buu. No importaron las técnicas ni los trucos que el demonio hubiera utilizado, pues nada fue capaz de hacerle algo al nuevo saiyajin más poderoso de todos.
Curiosamente, el poder del Súper Saiyajin de Vegetto era tan grande, que sin la necesidad de usar una forma superior, su aura desprendía una enorme cantidad de rayos. Un saiyajin común como lo eran Goku o Vegeta solo manifestaban rayos al usar la segunda fase, pero Vegetto era tan absurdamente poderoso que solo le bastó la forma ordinaria para generarlos.
Vegetto le dió una paliza a Buu, pero no lo eliminó. Esto se debía a que él plan de la fusión consistía en dejarse absorber para poder liberar a aquellos que fueron absorbidos por Majin Buu y así salvarlos antes de matar al monstruo.
Finalmente Buu cayó en el juego de su oponente al verse totalmente acorralado por las habilidades y la destreza de la fusión de Kakarotto y Vegeta. Usando un campo de fuerza, Vegetto se adentró al cuerpo de Buu.
EN ESTE MOMENTO:
"Qué bien. Por fin pude entrar al cuerpo de Majin Buu"– dijo Vegetto mientras miraba como su plan había tenido éxito.
En ese instante, Buu comenzó a reírse como un desquiciado al creer que por fin había tenido la victoria definitiva frente a los guerreros de la tierra y ahora ya nadie podría vencerlo. El poder de Vegetto había sido tan superior al suyo y no tenía límite de tiempo, que Buu de creía invencible. Claro, no sabía que había fallado.
Lastimosamente para el saiyajin, al estar dentro de su cuerpo las carcajadas maniáticas del demonio rosa resonaban con un eco tremendo, irritando sus oídos y haciendo que pierda un poco de paciencia.
"-Aysh- ¡Qué escándalo! Se está riendo como un lunático. Quizá perdió la razón, pero no puedo hacer nada mientras esté dentro de él."– se quejó mientras se tapaba los oídos.
Dejando se eso de lado, la fusión se dió cuenta de que él ambiente allí era desagradable y se sentían unos gases muy pero muy extraños, aunque nada de que preocuparse siendo que Buu no le pudo ni hacer cosquillas.
"Por cierto. El campo de energía que usé funcionó a la perfección, no pudo absorber mis poderes como hizo con los demás."– decía orgullosamente. – " ... -Ugh-... Los gases de aquí son horribles. Tal vez será mejor dejar la barrera, no sé cómo será el interior de este sujeto. Ahora debo buscar a Gohan y los otros.. ojalá sigan con vida."
Vegetto no tenía ni la más mínima idea de por donde comenzar su búsqueda, pues estaba en el cuerpo de Buu y claramente no tenía ninguna pista de por donde comenzar a buscar a los que había absorbido. Sin embargo, una idea se le vino a la cabeza, aunque no estaba seguro.
Él era la combinación de dos seres que por medio de los Pothara, elementos superiores a la fusión común, pero además era la fusión de dos rivales, por lo que era el tipo de fusión más poderosa de todas por cualquier medio (sin mencionar el pequeño bono de los Pothara por dicha rivalidad). Por ende, sus sentidos también debían ser superiores ahora y no solo sus poderes.
"... Soy la fusión de Kakarotto y Vegeta, así que nuestros sentidos ahora deben ser más agudos que antes. Me pregunto si....."
Vegetto cerró los ojos mientras respiraba profundamente. Lo que pretendía era ver si ahora era capaz de sentir las presencias de Gohan y los demás si es que ellos estaban todavía con vida. Generalmente se necesitaba una mínima explosión de energía para poder sentir a los demás, pero las partes que lo conformaban eran guerreros increíblemente experimentados.
Luego de unos pocos minutos de absoluta y extrema concentración, Vegetto pudo empezar a sentir una leve presencia. Si bien él cuerpo de Buu estaba lleno de energías malginas y magia, esta presencia destacaba por no ser nada hostil.
"¡QUÉ SUERTE! ¡ESTE ES EL KI DE PICCORO!"– exclamó con alegría la fusión al sentir el poder del Namekiano.
Vegetto puso sos dedos índice y medio en la frente y se concentró. Al cabo de unos instantes el saiyajin usó la técnica de parte de Kakarotto, el Shunkan-ido o teletransportación.
Vegetto se teletransportó sin dudarlo a pesar de no tener la más mínima idea de a donde iría parar una vez que hiciese esa técnica. Cuando finalmente apareció, se alegro de una manera inmensa al ver a su amigo verde aún con vida en el cuerpo de Buu.
No solo él, todos sus hijos también estaban ese sitio, y todos estaban encerrados en una especie de capullo o huevecillo rosado unido al cuerpo de Buu.
"PICCORO... QUE BUENO, TODAVIA ESTÁ VIVO."– dijo Vegetto viendo al Nameku inconsciente.
Luego miró detrás de Piccoro y vió a los demás. Todos estaban sin conocimiento encerrados en esos capullos.
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"No se preocupen, ahora mismo los voy a sacar de este lugar."– exclamó el guerrero fusionado mientras apuntaba a los tallos de esos capullos.
Vegetto rápidamente usó su ki para ir quitando a sus amigos del cuerpo de Buu. Se le ocurrió la idea de ir sacándolos uno por uno en el orden reverso en el que Buu los había absorbido, ya que de ese modo podía comprobar si realmente lograba hacer que se desvincularan del demonio.
Primero liberó a Gohan. En ese instante, el poder de Buu se redujo drásticamente a un nivel incluso inferior a la mitad de lo que ya tenía y el ambiente en el cuerpo del mismo se sentía mucho más ligero, pero aún desagradable. La parte de Vegeta en Vegetto le impedía sacar el campo de energía al tenerle asco a esos gases en el ambiente.
"Perfecto. El ki de Majin Buu se debilitado muchísimo. Bueno, creo que es hora de liberar a los demás."
El saiyajin rápidamente repitió el proceso. Primero liberó a Piccoro y con ello sintió como el ki de Buu de nueva cuenta volvía a disminuir para luego liberar a sus otros hijos, haciendo que el demonio definitivamente volviese a como estaba antes, siendo el Buu que enfrentó a Súper Gotenks.
Sus amigos estaban en el suelo atrapados por esos extraños capullos. Si bien era una duda interesante saber qué era lo que había dentro de esos capullos qué permitía que Buu absorbiera sus poderes, Vegetto no tenía deseos de seguir soportando a ese sujeto.
"Muy bien. Ahora debo pensar en cómo salir del cuerpo de Buu. Tal vez..... ¿Hmmm?"– mientras el saiyajin pensaba que qué hacer, hubo algo que le llamó la atención.
No muy lejos de allí, pudo ver qué había un capullo más dentro del cuerpo de Buu, pero este tenía algo en especial diferente a los otros.
Este capullo no contenía a ningún amigo, sino que tenía a alguien totalmente diferente.. ERA EL MAJIN BUU GORDO CON EL QUE GOKU Y VEGETA HABÍAN LUCHADO EN SOLITARIO.
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"¿Huh? ¿Qué hace ese sujeto aquí?"– se preguntó viendo al Buu gordo. – ".... Ah, es cierto. El Buu flaco y gruñón lo convirtió en chocolate."
Gracias a la memoria de Vegeta, quien vió todo desde el infierno, Vegetto recordó como Majin Buu había pasado de ser ese gordinflón simpático que Goku pudo haber derrotado a ser él monstruo que requirió su nacimiento para poder ser detenido.
El Buu gordo se había hecho amigo de Mr Satán, demostrando que no era un mal sujeto al fin de cuentas. Sin embargo, unos humanos provocaron su ira y le hicieron liberar su maldad, dando origen al Buu con maldad pura.
Al ser la combinación de dos personas muy diferentes en el ámbito del perdón, Vegetto comenzó a tener un debate interno entre la parte de Kakarotto y la parte de Vegeta.
"-Tsk-... ¿Debería liberarlo?"– se preguntó. Luego recordó otro detalle importante. – "Un segundo. Si este tipo está aquí, ¿entonces Krillin y los que fueron convertidos en chocolate también?"
"NO. EL ES EL ÚNICO CON UN TRATO ESPECIAL."– contestó una voz que Vegetto reconoció al instante, aunque la sorpresa fue inmensa.
"¡¿QUÉ?!"– el guerrero se dió media vuelta, viendo como el mismísimo Buu estaba saliendo desde el piso... ¿de su propio cuerpo?
"Qué listo. Ahora entiendo porqué mi cuerpo no tuvo ningún cambio cuando creí haberte absorbido."
"¿Buu? ¿Qué demonios haces en tu propio cuerpo?"– se preguntó sorprendida la fusión.
"Grrrrr.... No me explico porqué ustedes fueron los únicos que mi cuerpo no absorbió.¡¿Cómo te atreves a arrebatarme a los que ya había absorbido?!"– gritó furioso el demonio mientras se desprendía del piso. Su ki se empezó a expulsar con una gran furia, pero Vegetto ni se inmutó.
"Jejeje. ¿Y qué vas a hacer al respecto, maldito? Si quisiera, ya te habría pulverizado desde dentro."– se burló el saiyajin.
"Jujujuju. En este momento no eres más que una pequeña célula dentro de mi organismo. No importa que mi poder haya disminuido, tengo la ventaja mientras estemos aquí."
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"Oohh. ¿Tan seguro estás? Bueno, ya que lo dices, ¿qué tal si tu poder disminuye incluso más?"
"¡¿QUÉ?!"
Vegetto sonrió con algo se burla mientras tomaba el capullo del Buu gordo por el tallo inferior con una de sus manos mientras la otra la tenía apoyada en su cintura. No le habría costado ni una milésima de segundo pulverizar al Majin Buu que tenía en frente, pero era la excusa perfecta para liberar al Buu gordo de su capullo.
El demonio rosa catalogado como Súper Buu de repente perdió toda el coraje que tenía en él cuando su enemigo puso su mano en el capullo del Buu gordo. Su cuerpo comenzó a temblar y empezó a sudar a mares.
"¡N-No! ¡Aléjate de él! ¡No lo toques!"– gritó casi que en tono de súplica.
"Jajaja. Parece que este gordo te preocupa mucho más de lo que esperaba. ¿Qué pasará si lo arranco? ¿volverás a ser este gordo o serás ese flacucho gris? De algo estoy seguro y es que tus poderes van a disminuir otra vez."– presumió Vegetto.
"¡N-No lo hagas! ¡Te lo suplico! ¡Él es la esencia! ¡S-Si haces eso desapareceré yo!"
"¿En serio? Jaja. Eso suena un poco interesante. Realmente quiero ver qué clase de transformación tendrás ahora."
"¡¡YA BASTA!!"– gritó desesperado el monstruo mientras se lanzaba a atacar a Vegetto.
A la fusión se le dibujó una sonrisa en la cara mientras veía a Buu lanzarse hacia él. Con un simple movimiento, Vegetto arrancó el capullo del Buu gordo y lo lanzó justo delante de él, mientras que Súper Buu se quedó completamente helado al verlo.
Luego de unos segundos, el saiyajin vió como Buu caía al piso sin energías para después empezar... ¿deshacerse? Era una escena muy extraña, pero el monstruo comenzó a retorcerse en el piso mientras se iba deshaciendo como si se estuviera derritiendo en el suelo.
"¿Eh? Qué sujeto tan extraño. -Hmph-... Su cuerpo está cambiando, siento que se está volviendo más caliente, debo salir de aquí."
Vegetto rápidamente se acercó a sus amigos. Primero, usó casi todo su poder para abrir un agujero en el cuerpo de Buu ya que el mismo monstruo le dijo que no era más que una célula de su organismo, por lo que su tamaño era prácticamente ínfimo.
Incluso habiendo usado mucho de sus grandes poderes, el saiyajin solo logró crear un agujero no muy grande en el techo de donde estaba, que no era más que la cabeza de Majin Buu. Una luz se podía ver al otro lado, por lo que asumió que lo había logrado.
"¡Muy bien! ¡Ahora debo apresurarme antes de que reconstruya esa parte de su cuerpo!"– exclamó con algo de apuro.
Vegetto tomó a dos de sus amigos por cada mano desde los tallos de los capullos qué los encerraban.
Usando toda su velocidad, Vegetto voló a toda prisa hacia el mundo exterior antes de que Buu cerrara la herida qué había hecho en su cuerpo. Con un poco de pesar, el saiyajin dejó atrás al Buu gordo, pues obviamente sus hijos y Piccoro eran prioridad.
A pesar de que el cuerpo de Buu comenzó a volverse más estrecho de alguna manera y el calor aumentó exponencialmente, Vegetto logró salir del cuerpo de Buu justo a tiempo antes de que el agujero fuera reconstruido por el monstruo.
Al salir, su cuerpo empezó a brillar un poco para después recuperar su tamaño normal, aliviando la duda de si se iba a quedar así de pequeño para siempre.
En ese momento miró a sus amigos. Poco a poco Gohan y los otros también fueron recuperando su tamaño normal, y los capullos qué los contenían se habían deshecho por completo.
"Qué suerte. Están a salvo."
El saiyajin rápidamente tomó a sus amigos como pudo y los dejó en un lugar seguro para luego enfrentarse a Buu, sea cual sea el resultado de su transformación. Al dejarlos, notó que poco a poco sus energías estaban volviendo, aunque todavía estaban desmayados.
Vegetto comprobó totalmente que estaban vivos para después concentrarse en Majin Buu. Curiosamente, el ki de su enemigo empezó a variar de formas que ni él logró comprender en un inicio.
"¿Eh? El ki de Buu.... ¿está aumentando otra vez?"– dijo el guerrero fusionado.
La fusión de Kakarotto y Vegeta se percató de los cambios en el ki de Majin Buu. En un abrir y cerrar de ojos, el poder de Buu comenzó a elevarse a ritmos qué a Vegetto lo dejaron totalmente impactado. Claro, aún estaba muy pero muy lejos del nivel qué el poseía, pero aún así ese no era el cambio que él esperaba al sacar al Buu gordo.
Rápidamente se acercó volando hasta la cima de una montaña en donde estaba su enemigo, viendo como este estaba gritando y retorciendose como si todo su cuerpo le estuviera doliendo.
"¿P-Pero qué diablos le pasa? Su-Su cuerpo está cambiando de una manera sorprendente y su ki está aumentando."– exclamó la fusión con una evidente sorpresa.
Esto era extraño. Arrancar a Gohan y los otros había hecho que Majin Buu perdiese una gran cantidad de poder, por lo que claramente la solución a su absorción era arrancar a los absorbidos, o más bien arrancar sus capullos del cuerpo del monstruo.
Sin embargo, arrancar al Buu gordo estaba teniendo el efecto totalmente opuesto. El Majin Buu que enfrentó Vegetto no solo no había perdido poder, sino que este estaba aumentando bastante.
En ese momento, Buu cambió nuevamente. Vegetto vió como sus músculos comenzaron a crecer de forma exponencial. Sin embargo, esto no era como el tercer grado del súper saiyajin donde se inflaban anormalmente los músculos, esto era algo más.
El ki de Majin Buu volvió a subir conforme su cuerpo iba cambiando más y más hasta que se volvió una masa de músculos feroz y que no podía hablar.
En ese momento, el poder del monstruo rosa había llegado a su límite de crecimiento, teniendo más fuerza que cuando había absorbido a Gotenks, pero menos que el poder que obtuvo al absorber a Gohan.
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"–Cht–.... Qué sujeto más raro eres. Tu poder no parece tener lógica."– decía el saiyajin mientras veía todo desde una distancia prudente. En ese instante, se percató de un nuevo cambio en Buu. – "¿Eh? .... Ahora su fuerza está disminuyendo drásticamente."
De nuevo, Buu comenzó a cambiar su apariencia mientras su poder iba decreciente a un ritmo muy acelerado. Su cuerpo comenzó a volverse más pequeño mientras que sus músculos inflados volvían a bajar de tamaño así como la cola qué tenía en su cabeza regresaba a un tamaño normal, siendo más corta que antes.
A los pocos segundos, luego de unos gritos intensos por parte de esa especie de "Ultra Buu" que parecía más un animal que un demonio, las cosas finalmente se calmaron un poco.
Vegetto vió como Majin Buu, ahora sí, había terminado su transformación. Su poder había bajado muchísimo, estando ahora muy por debajo del nivel de Gotenks o Gohan. La fuerza de Buu no solo disminuyó, sino también su estatura, teniendo la apariencia de un niño ahora. Era casi igual al Buu con el que sus hijos lucharon, solo que ahora en versión pequeña y con un poder similar al de Kakarotto y su súper saiyajin 3.
"Ja. Ahora entiendo porqué estabas tan desesperado, Buu. Perdiste incluso más poder que cuando liberé a Gohan."
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