Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 29 Final

Aunque la situación estuviera siendo demasiado difícil, ya había pasado suficiente, ya me había dejado agobiar por demasiado tiempo por la negatividad, no podría continuar de ese modo, a final de cuentas no terminaría por traer nada bueno.

La muerte de mi padre siempre me dolería, porque pese a lo último que sucedió, no puedo olvidar todo lo que fuimos, sin embargo, la fecha de su muerte, gracias a que Kenneth está a mi lado jamás sería recordada como una fecha triste, había elegido aquel momento para poder pedirle que fuera mi novio de una manera más oficial, podría haber esperado un par de días más, porque luego de tanto, no nos haría daño un par de días, pero no quise.

Quería elegir ese día para que al final no fuera solamente el día en el que había perdido algo importante, sino que también fuera el día en el que había ganado, algo que para mi corazón era muy valioso.

Ahora que le había comunicado a mi madre sobre mi decisión, ahora que sabía que Kenneth vendría conmigo solamente me quedaba darle tiempo a las heridas para que pudieran sanar lo más que fuera posible, aunque fueran profundas, no me gustaría que todo ese dolor me acompañara en mi interior para siempre.

Fuimos a la mansión de regreso para armar las maletas, había reservado una habitación en un hotel, al menos quería pasar allí la noche porque dormir en mi habitación en aquella mansión tan grande, tan vacía, no me dejaría en paz, tenía los recuerdos por todas partes.

Al siguiente día tendría que ir a hablar con el abogado, estaba segura de que mi padre había dejado listo el testamento, pero nada de allí era del todo justo, de todo lo que mi padre había dejado, había una parte que le pertenecía a Adira, me gustase o no ella era mi hermana y lo que él hubiera querido es que ella tuviera una parte de todo eso.

Vi que Kenneth durante todo el día estuvo bastante distraído, mientras preparábamos la maleta, mientras que comíamos, lo poco que pudimos ambos comer, sabía que se debía a la preocupación que cargaba consigo, pero no había nada que pudiera hacer, se sentiría de ese modo hasta que Adira diera señales de vida.

Hablé con los empleados, les dejé en claro que a pesar de que mi padre ya no estuviera con vida y que yo me marchara a Rusia, todo continuaría de la misma manera, quería que la mansión estuviera tal cual como él la había dejado, al menos hasta que tomara una decisión de que debería de hacer con ella.

Tal vez algún día sería capaz de pisar aquella mansión sin tener grabada en la mente la escena de ese día, aunque fuera poco probable no descartaba la posibilidad de que pudiera suceder de ese modo.

Estuve toda la noche abrazada a Kenneth, ninguno de los dos pudo dormir bien, fue una de esas noches en las que la mente no se calla, éramos dos personas acostadas en la misma cama, despiertos mirando al techo sin cruzar palabras, ambos nos dejamos comer por los pensamientos.

No sé en qué momento me quedé dormida, pero cuando me desperté Kenneth ya no estaba a mi lado, así que me levanté para asegurarme de que todo estuviera bien, lo hice con prisa y miedo de que algo más hubiera pasado, pero allí estaba, sentado en el sofá mirando la televisión.

Había reservado la suite del hotel para tener una mayor comodidad, aunque verlo allí en la sala, tan solo, mirando un punto fijo, me hacía sentir realmente mal por él.

—¿Qué haces aquí solo? —le pregunté antes de sentarme a su lado.

—No pude dormir prácticamente nada, no dejo de pensar en Adira y tengo terror de encender la televisión —comenta soltando un enorme suspiro.

Sabía que aunque tuviera miedo de encenderla, lo mejor para él era ahora mismo salir de cualquier tipo de dudas, así que tomé el mando y la encendí. Puse un canal de noticias, lo que quería saber era si pasaban algo sobre su hermana, aunque realmente dudaba que lo hicieran.

De repente la mujer del noticiario empezó a hablar y ambos prestamos atención, hablaron un poco sobre la delincuencia juvenil, sobre algunas personas desaparecidas, entonces prestamos especial atención a las siguientes palabras.

—En la noche de ayer se le dio captura al jefe de un cartel de mafia importante, se descubrió gracias a una fuente que desconocemos donde se encontraba la cabeza del cartel, siendo capturado en uno de los más grandes almacenes de droga que poseía —comentó la mujer que se notaba un tanto sorprendida ante la noticia.

—Si fue Adira que lo entregó, ¿en dónde estará ella? —me relamí los labios ante la pregunta repentina.

—No lo sé, quisiera saberlo —susurró sin apartar la mirada de la televisión.

—Entre otras noticias, se entregó la culpable de la muerte del famoso empresario Óscar Winchester, que recibió un disparo el día de ayer y perdió la vida tras llegar al hospital...

Dejé de escuchar después de la palabra Hospital, pensé que tardaría más en propagarse la noticia, pero necesitaba hablar con mi tía antes de que la noticia llegara a sus oídos, por otra parte, además tendría la oportunidad de hablar con ella sobre el viaje antes para saber si está de acuerdo con mi decisión.

Me alejé un poco antes de marcarle, no es que no quisiera que Kenneth me escuchara, simplemente que vi lo mal que se encontraba en aquellos momentos y quería darle un poco su espacio.

—Mi sobrina querida me está llamando —dijo en cuanto respondió a la llamada con un tono alegre.

Aquel tono me dejó en claro que no tenía la menor idea de lo que estaba ocurriendo, me quedé un momento en silencio pensando en como debería de hablar con ella sobre lo que estaba ocurriendo, me armé de valor, por muy difícil que fuera, no había tantas maneras de decírselo.

—Tía, sé que esto será difícil de procesar, pero papá está muerto —solté de manera repentina con todo el valor que había acumulado.

La risa que había escuchado momentos antes a través del celular cesó, fue un momento incómodo de silencio y luego escuché un sollozo.

—No puede ser cierto Lennon, debes estar en un error —dijo a modo de negativa mientras sollozaba.

—Lo lamento, creo que habrá mucho tiempo para hablarlo, viajaré, quiero tomarme un tiempo de este sitio que está lleno de recuerdos oscuros —aseguré apagada, con la tristeza que nuevamente se apoderaba de mí.

—Quisiera viajar a verlo por última vez, no es justo —murmuró.

—No llegarás a tiempo, tía, lo van a enterrar esta tarde, no pueden dejar el cuerpo por demasiado tiempo —le comento a lo que un silencio vuelve a aparecer una vez más.

Creo que es la primera vez que siento un silencio tan prolongado en una llamada con mi tía, pero la realidad es que lo entiendo, está aún muy consternada por todo lo que está sucediendo.

—Te estaré esperando, sabes que siempre serás bienvenida —me dice en un tono angustiado— Me hará bien tenerte cerca un tiempo, eres lo único que me queda.

—Iré con mi novio Kenneth, espero que no te incomode, ambos estamos pasando por momentos difíciles —termino por decir.

—Son bienvenidos, lo vamos a superar Lennon —me respondió.

Luego de aquella conversación simplemente corté a la llamada, no había mucho más que pudiera decirle a través de aquel aparato, necesitaba un abrazo, tanto como probablemente necesitaría de uno Kenneth en estos momentos, así que me aproximé a él y lo abracé fuertemente.

—Se entregó, es probable que esté ahí adentro por muchos años —murmuró Kenneth con los ojos desbordados de lágrimas.

Esto que iba a sugerir, probablemente sería lo más ilógico que había hecho en mi vida, pero era lo que haría que Kenneth pudiera vivir tranquilo y que el alma de mi padre pudiera estar en paz.

—Kenneth, voy a pedirle al abogado familiar que haga lo posible para sacarla, pero vamos a tener que mentir delante de la justicia, diremos que no fue de ese modo, los empleados, ellos dirán lo mismo si se lo pido —lo tomo por los hombros— Hay que tomar una decisión.

—¿Serías capaz de hacer eso por mí? ¿Serías capaz de perdonarle lo que hizo? —me preguntó con todo su rostro desfigurado.

Asentí un poco, no me sentía del todo segura de poder perdonar, pero por él lo intentaría, por él y por mi padre que me lo había pedido.

...

Había sido difícil de lograrlo, interrogatorios, mentiras en conjunto, el trabajo del abogado, todo, pero lo habíamos logrado, sacamos a Adira aunque ella siguiera insistiendo con lo mismo, la policía misma no comprendía por qué quería quedarse, no siendo culpable, pero explicamos que fue un suceso traumático que la hizo sentir como si tuviera la culpa, ya que la persona que lo mató a la vista de la autoridad fue el hermano de Kenneth, que tenía relación con la mafia y era sabido.

Cuando la liberaron, nosotros estábamos esperando por ella, yo ya había tenido la oportunidad de hablar con el abogado y pedirle lo que había pensado, que la mitad de todos los bienes que dicho sea de paso eran muchos, fueran puestos a nombre de Adira, para que pudiera rehacer su vida, esta vez sin que nadie pudiera molestarla.

—¿Por qué me sacaron? —preguntó desde una distancia considerable— Hice las cosas mal, me merecía ese castigo, no me merezco que se apiaden de mí.

—A veces simplemente con admitir que has cometido errores basta, sé que no han sido unos errores cualquiera, pero el sentir culpa y arrepentimiento en el corazón no es algo que cualquiera sienta, eso es algo que se valora —me atrevo a decirle.

—Sigues siendo la hermana de ambos, te equivocaste, pero estás dispuesta a cambiar eso, nunca has tenido un mal corazón, yo mejor que nadie lo sé, aprenderemos a perdonar, aprenderemos a vivir de una manera diferente —le dijo Kenneth que extendió su mano hacia ella.

—Quiero poder conocer a esa chica genial de lo que me hablaba Kenneth hace tiempo —le sonreí con sutileza.

Los tres nos unimos en un cálido abrazo, aunque aún tuviera cosas en las cuales pensar, aun así quería intentarlo.

—Hoy tenemos una cena en la casa de mi madre, me gustaría que nos acompañes, sería bueno, ya que hemos decidido ir a Rusia, mi tía vive allí —le comenté a Adira que bajó la mirada.

—¿Está bien si voy? —preguntó un poco apenada.

—Por supuesto, te diría que vinieras con nosotros a Rusia, pero me imagino que vas a aprovechar a terminar tus estudios, de todos modos te lo puedes pensar —le comenté a lo que ella simplemente asintió.

...

El resto del día pasó bastante calmado, lo aprovechamos para platicar más calmados, Adira estuvo contando algunas anécdotas, quisimos dejar un poco de lado lo malo que pudiera haber sucedido, centrarnos simplemente en lo que sí fue bueno de nuestras vidas.

Yo por mi parte me dediqué a contarle de los buenos momentos con mi padre, algunas anécdotas de momentos chistosos que tuvimos, al menos eso era bueno, mi padre era muy gracioso.

Cuando fue la hora fuimos al apartamento de mi madre, donde nos recibió, en esta ocasión junto a su esposo y junto a Nova, que se mostraba mucho más calmado.

—Sean bienvenidos, no sabía que debería de preparar para la cena, pero traté de que fuera algo bastante variado, espero que les guste —nos dijo cuando entramos al comedor.

—Nos comentó Mabel que vas a marcharte a Rusia con tu tía —comentó el hombre ocupando su sitio en la mesa— Es una pena, nos hubiera gustado poder compartir un tiempo contigo, conocerte mejor.

—Vendré de visita de vez en cuando, no puedo perder la oportunidad de recuperar algo del tiempo perdido con mi madre —sonrío levemente.

—¿Ustedes dos también se van a marchar? —preguntó de la nada Nova que estaba a punto de comenzar a comer.

—Sí, yo me iré con Lennon, pero Adira aún se lo piensa —confiesa Kenneth que me miró de reojo.

—Bueno, si decides quedarte, vamos a estar al pendiente de ti —dijo mi madre sonriendo.

—Quería pedirte un favor madre, sé que puede que para ustedes sea demasiado y de ser así, espero me lo digan, pero Adira no tendrá en donde quedarse hasta que se haga la división de la herencia, porque como te comenté en la llamada ella también es hija de mi padre, me preguntaba si podría quedarse aquí un par de días —le pido a lo que ella mira a su esposo esperando un gesto.

—No me gustaría ser una molestia —se apresuró a decir Adira— Puedo volver a la universidad si me lo permiten.

—Nada de eso, serás bienvenida —dice el hombre asintiendo con una sonrisa.

Me quedaba mucho más tranquila luego de aquella cena y sabía que Kenneth también lo estaría sabiendo que Adira a partir de ahora no estaría sola, sino que tendría personas que la apoyaran.

Mañana comenzaría nuestro trayecto para buscar la felicidad que nos merecíamos, aquella que la vida se había empeñado en quitarnos, sería el principio de una nueva aventura, de un futuro en el que seríamos Kenneth y yo, ya no sería simplemente mi guardaespaldas, el hombre que me ha cuidado este tiempo.


Si algo me había dado la vida como recompensa a tanto dolor había sido la oportunidad de tener un gran amor, ahora aprendería a vivir mi propia historia de amor.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro