¡Hola a todos! Sí, vuelvo a escribir aquí. ¿La razón? Mi semana en Italia. ¡Empecemos con esto!

1. ¡Empieza la aventura!

Montamos en el autobús a las 16:30 del viernes. ¡Qué emoción! Los asientos se convirtieron en literas para la noche. ¿alguna vez habeis dormido en un autobus con literas? Yo lo puedo tachar de la lista (aunque olvidé la foto).

2. Pausa francesa

Durante el viaje en autobús a Pontedera, Italia, paramos en Cannes, Francia, para que el chófer durmiera (¡no son máquinas! ¡Necesitan descansar! ¡No quiero tener un accidente!).

No tengo fotos; me quedé sin batería en el viaje, así que... ¡Siguiente!

3. ¡No puedo ir a Italia sin botas!

El día libre, con la familia italiana. Fuimos a casa de una amiga de mi compañera de intercambio; hicimos creps, jugamos al Twister y arrasé en los bolos de wii.

¿Por qué el título? Tiene triple sentido. ¿Adivináis? Uno de ellos es el literal, faltan los otros dos (Mechitas, adivina por lo menos uno, es especial para ti; además, este fue justo el día de tu cumpleaños).

4. El día inclinado de Pisa

Partimos a Pisa. ¡Vi la torre! Es más gigante de lo que parece en las fotos. También miré a la fuente, solo por llevarle la contraria a Mechitas (ella dijo que no lo hiciera, pero hasta saqué foto; estuve chequeandolas después, a ver si encontraba a Alette, Carter o Jackson).

¿Acaso esta necesita subtítulo?

Ya dije, mirando a la gente de la fuente

5. Referencias enmascaradas

Viaje a Lucca, Viareggio y Torre di Lago. Una búsqueda del tesoro con librería incluida, una playa y las vistas impresionantes de un lago. Un día completito, sí señor. Además, ¡las máscaras venecianas aparecían por todos lados! Me recordaban a Iz (al final compré un imán y una pulsera con esa temática).

Iglesia en Lucca

Librería de Lucca (una pena que estuviera todo en italiano...)

Foto sacada en Torre di Lago

Mis souvenirs enmascarados

6. ¡No compréis helados en Florencia!

Lo digo en serio; ni se os ocurra. ¡Son carísimos! Además, los de S. Miliano estaban muchísimo más deliciosos y me costaron cinco euros menos. Siete euros por un cono de helado, a donde va a parar el mundo...

Por lo demás, el día en Florencia estuvo genial. ¡Vimos la catedral y la galería Uffizi!Todo el mundo conoce el cuadro de "El nacimiento de Venus", ¿verdad? Lo vi en directo.

Es IMPOSIBLE fotografiar entera a la catedral, creedme

Perdón al foto movida, la gente empujaba

7. La suerte juega conmigo

A ver, pasemos lista:

S. Miliano:

· Comerme el mejor helado de mi vida por (creo) el precio más bajo al que he comprado uno.

· Que se me caiga la cartera con toda la documentación en una alcantarilla (la conseguimos sacar, menos mal).

Siena:

· Comerme un trozo de pizza más grande que mi cara.

· Comprarme una sudadera tipo universidad.

· Que empiece a llover (gracias a la sudadera; si no la hubiera comprado justo ese día, me habría congelado con mi manga francesa finita).

· Que me ardan las manos al juntarlas durante media hora (sigo sin entenderlo; por un momento creí que tenía poderes por la tormenta o algo así).

Fue un día de altibajos, sin lugar a dudas.

Plaza de Siena, donde ocurrieron la mayoría de mis sucesos en esa ciudad

8. ¡Ciao Italia!

Día de partida, nunca olvidaré la experiencia. ¡Ester, te espero en España para mayo!

Foto de Ester (a la izquierda), Alessia (a la derecha) y yo en Piazza Anfiteatro de Lucca.

¡Así fue mi viaje! Menuda semanita, ¿eh? Aunque os he echado de menos; no poder comentar ni escribir ha sido una espinita en este rosal.

¡Nos leemos luego!