🔼LE COCCINELLE🔽

1990. Febrero-Marzo.

—¿Cómo me lo has podido ocultar?

—¡Fácil! ¡Porque no estabas de acuerdo!

—¡Pero podría aceptarlo por muy encontra que estuviera! ¡Eres mi mejor amiga, por el amor de Dios!

—¡Él es también tu mejor amigo! ¿¡Por qué no le dices lo mismo a él!?

—Tranquila que lo haré, los dos tenéis la misma culpa.

Que salieran juntos me molestaba, pero podía hacerme a la idea y acostumbrarme. El problema era que me lo ocultó, me lo ocultó por mucho tiempo. Y eso, no sólo molesta, sino que duele.

Otro problema era que ellos se odian, no lo saben, pero en sus formas heroicas se odian. Pueden quererse mucho siendo civiles, pero si no se llevan bien en sus dos vidas, es obvio que esa relación no irá a ninguna parte.

¡Esa era una de las razones por la cual no me parecía bien que estuvieran juntos!

Con el tiempo, vi como mis dos mejores amigos se distanciaban de mi. Yo empecé a ser sólo un peso en su relación y poco a poco ninguno de los dos pasaba tiempo conmigo.

Pero al mismo tiempo que ellos se alejaban de mi, se odiaban cada vez más y más con sus antifaces.

Así que, un buen día, cuando pude reunir el suficiente dinero para un billete de tren bien lejos de Francia, me fui. Yo ya no soportaba más esa situación. Estaba sola y veía como mis mejores amigos se odiaban por una parte y se amaban por la otra haciéndome a un lado. Así que pensé que la culpa de todo era mía, mía por no haber apoyado a Charlotte desde el inicio y mía por no intentar que se llevaran bien de héroes.

Decidí que me iría el día que discutí con Gabriel.

Ese día, extrañamente, fue Gabriel el que entró por la ventana de mi dormitorio. Y traía en su rostro una cara de pocos amigos.

—¿Qué ocurre? —Le pregunté dejando de lado "Love Story", el libro que estaba leyendo— Normalmente das unos golpecitos en la pared cuando quieres hablar.

—Esto es serio.

—Vale... Dispara.

—¿Es verdad que estás en contra de mi relación con Charlotte?

—No en contra, pero si en desacuerdo. No me parece bien, pero puedo aceptarlo. —Respondí completamente seria.

—Pero en cambio bien que estuviste desde años atrás incitando a Charlotte para que no se confesara.

—Sabes que no puedes tener una relación con alguien como ella.

—¿Por qué? ¿Porque es alegre? O sea, que como es lo contrario a mi, automáticamente no podemos estar juntos, ¿no es así?

—Gabi, estás empezando a tener uno de tus ataques... —Me levanté para intentar calmarlo.

—¡Esto es mucho más que uno de mis ataques! ¡Tú eres muy importante para mí! ¡Yo quería que estuviéramos todos bien!

—Ya, Gabi, ya...

—¡Déjate de "Gabi" y escúchame!

Y en ese momento exploté yo también.

—¿¡Te crees que no te he escuchado!? ¡Llevo escuchándote toda mi vida, apoyándote, entendiéndote! ¿¡Por qué no me puedes escuchar y entender tú por una vez!?

—¡Oh claro, pero la señorita "comprensiva" ahora se las da de víctima! ¿¡Sabes qué!? ¡Que ya no me importa si estás en contra o no! ¡Yo haré lo que me venga en gana!

—¿Perdona? ¡Pero qué tipo de razonamiento es ese? —Sin responderme, se dió la vuelta y salió de mi cuarto— ¡Bien, bien! ¡Lárgate! ¡Menudo amigo eres!

Cogí mi maleta de viajes de dentro del armario y empecé a meter ropa y cosas que no podía dejar atrás, ese día sería el último que vería a mis mejores amigos. Yo era sólo un estorbo.

—¿Pero que haces? —Me preguntó preocupada Tikki.

—Me voy. No lo aguanto más.

—¿Y qué vas a hacer? ¿Con qué dinero te irás? ¿Y tus padres? ¿Y París?

—París seguiría teniendo dos héroes sin mi.

—Te podrías alejar de Charlotte y Gabriel siendo aún heroína.

—No Tikki, —Reí amarga con lágrimas en los ojos— tal vez pueda alejarme de Gabriel y Charlotte, pero no de Le Paôn y Papillon.

Cuando en la maleta no cupieron más cosas y se hacía casi imposible de cerrar, agarré mi hucha de hojalata, cogí un abrelatas de la cocina y saqué todos mis ahorros. También cogí algo de dinero del tarro de emergencias familiares de mi madre y le escribí una nota. Sabía que le haría daño igual, pero con la nota la tranquilizaría un poco, le dije que pronto tendría noticias de mí. Me puse una chaqueta, metí en un bolso todo lo necesario que por comodidad no podía ir en la maleta y me dispuse a ir con equipaje en mano hacia la estación de tren.

—Oh, cierto. —Me di cuenta de que había algo que tenía que hacer antes de irme. Rebusqué por toda la habitación buscando una pequeña caja oriental. En la que estaba Tikki cuando la conocí— Espero que lo entiendas, Tikki. —Ella asintió con tristeza.

—Te echaré mucho de menos.

—Y yo a ti, Tikki.

Sólo media hora más tarde de mi despedida con Tikki, ya estaba dentro de un tren con destino a un lugar bien lejos de Le Paôn y Papillon.

El Maestro Fu ya tenía a Tikki y mi diario, tenerlo sólo me haría sufrir, no fui capaz de quemarlo, como era mi idea principal, y no era seguro esconderlo, así que decidí dárselo a Fu.

Una nueva vida me esperaba, aunque dentro de mi sabía que nunca los olvidaría.

🔹ADRIEN/CHAT NOIR🔹

—Muchas gracias Maestro Fu, con esto creo que podré hacer frente a mi padre.

—No hay de qué, joven.

En lugar de salir por el portón del bloque de pisos, subí hasta la terraza, me transformé y con el geolocalizador de mi bastón busqué a mi Lady.

—Voy para allá, Marinette.

Corrí hacia dónde me decía el localizador que se encontraba, pero, de repente dejó de tener la señal de Ladybug.

—Oh no, ¿Papá que has hecho?

Me preocupé mucho más de lo que lo estaba y aceleré el ritmo hasta llegar al que creía que era el último lugar en el que decía el localizador que estaban.

Cuando llegué, vi que era un lugar un poco a las afueras de París, mi Lady seguramente pensó que así sería más seguro para los ciudadanos. Los busqué con la mirada pero sólo vi a Marinette tirada en el suelo, llorando.

—¡Marinette! —Me abalancé hacia ella— Marinette, ¿Estás bien?

—Me ha quitado a Tikki. —Se lanzó a llorar en mis brazos— Ahora irá a por ti.

—Tranquila, sé lo que tengo que hacer.

La llevé en brazos hasta un lugar que consideré seguro, durante el camino, Marinette me explicó cómo consiguió Papillon quitarle el miraculous.

Cuando llegamos a lo que yo consideré seguro, mi padre nos encontró enseguida antes de que pudiera irme a buscarlo.

—Ya tengo el miraculous de Ladybug, sólo me falta el tuyo, hijo.

—Estás loco si crees que te lo daré, además, has hecho daño a Marinette, eso no te lo perdonaré.

—Hijo, aún tienes la oportunidad de dármelo por las buenas. No hagas que tenga que quitártelo por las malas como le he hecho a tu amiga.

—¿¡Así es cómo tratas a tus seres queridos!?

—Por mis seres queridos precisamente quiero los miraculous.

—Así sólo conseguirás que todos nos alejemos de ti. Piensa, recuperas a mamá, sí, ¿pero qué dirá ella cuando vea todo lo que has hecho para recuperarla?

Me miró fijamente sin decir nada, aún esperando a que yo decidiera darle mi miraculous.

—Papá, ya alejaste a Le Coccinelle, tu mejor amiga, por tu egoísmo. Si mamá vuelve, nos perderás a ella y a mí por el mismo motivo. Mamá te odiará cuando vea que has hecho daño a vuestro hijo por esto.

—¡Pero yo la amo y siempre la amaré! ¡Por eso la quiero de vuelta!

—¡Y la odiaste cuando llevaba tu miraculous! ¿¡Que no te das cuenta!? ¿No te das cuenta de que esto que haces no servirá para nada? Sólo para crear más odio a tu alrededor. ¿Realmente quieres que te odiemos mamá y yo?

Respiré profundamente esperando a su respuesta, pero no llegó.

—Papá, ella seguirá viva mientras la recordemos. No puedes destruir tu vida por algo así.

Mi padre se dejó caer al suelo rendido, tapó la cara y sin hacer ruido empezó a llorar. Me acerqué a él y lo abracé.

—Perdí a mi mejor amiga y perdí al amor de mi vida, yo sólo quería recuperar a una de las dos. Y casi te pierdo a ti por ello.

Entonces, mi padre se quitó el miraculous y lo lanzó con rabia por el suelo, dejando ver de nuevo a Gabriel Agreste. Me abrazó más fuerte.

—Perdóname hijo.

—Tranquilo, Mamá y yo te perdonamos.

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Estrellita 🌟 y comentario 💬 si os ha gustado!!

Madre mía cuanto drama, eh?? Pues aquí tenéis el final, el último capítulo. Sólo queda el epílogo y diremos adiós a esta historia.

Sé que en los últimos dos-tres capítulos este fic ha perdido la comedia para dar la bienvenida al drama, pero yo creo que un final de una historia así no puede ser cómica. El epílogo si puede, yo sólo aviso 😎😎

Os espero pronto 😭😭😭

Cia-ciaoooo 👋👋👋👋😭😭😭😭