Capítulo 1

En este mundo, donde la raza humana es predominante por su gran número, pero sí de fuerza bruta se trata estaban los demonios, seres sobrenaturales, que habitan la tierra desde hace mucho tiempo, por varios siglos ambas razas vivieron en guerra, pero después de tanto luchar llegaron a un acuerdo vivir en armonía el uno con el otro.

Aquellos que atentaran con la vida de un inocente serian castigados, ya fuese con la cárcel o la muerte, nadie estaba fuera de la ley, para no tener problemas ambos bandos optaron por formar un convenio, liderado por el más astuto de su grupo.

Inu no Taisho para los demonios y el emperador Akihito para los humanos, por suerte ambos hombres se llevaban bien y de inmediato se pusieron de acuerdo para gobernar a sus razas.

La gran mayoría estuve de acuerdo y otros no tanto, no provocaban el pánico pero si despertaban el terror y el miedo a donde quiera que vayan, solo con su simple presencia.

Aquel humano que se encontraba con este tipo de demonio se hacía a un lado y lo trataba con un exagerado respeto, temiendo por su vida obviamente, aunque era bien sabido que aquel ser sobrenatural que mataba a un humano sin razón alguna, podía pasar un buen tiempo en la cárcel o recibir incluso la muerte como castigo.

Entre aquel grupo que estaba de acuerdo, se encontraba ella; Aome Higurashi una joven de 24 años, que había terminado la preparatoria con honores, una apasionada de la historia y el arte, tenía un buen empleo en el museo de la ciudad de Tokio, conocida por su simpatía además de ser bonita, tenía la facilidad para llevarse bien con todos, incluso para llamar la atención sin proponérselo.

Aome siempre estaba sonriendo y haciendo que las personas a su alrededor se sintieran plenas en su compañía, pero la vida no era como la gente pensaba, los muchachos no se acercaban a ella con segundas intenciones por temor a que su esposo Sesshōmaru Taisho les hiciera daño.

Era bien sabido que los demonios son posesivos con sus parejas y en definitiva absolutamente nadie estaría tan loco para desafiar a ese demonio en concreto, porque después de 2 años haciendo planes sobre su futuro, lo había hecho, se había casado con aquel sujeto que no era más que un extraño, realmente lo conocía muy poco, por no decir nada.

Entonces se preguntaran ¿Por qué se había casado?

La respuesta era simple y sencilla, necesitaba dinero y él podía dárselo, el acuerdo fue mutuo, favorecía a ambos. Su padre había luchado con los mejores años de su vida para mantener la empresa, estuvo a punto de perderla, Aome no podía permitir eso, así que tomo la decisión de unirse con la familia Taisho, se casó con el mayor de ellos Sesshōmaru, para que ambas compañías crecieran, y sobre todo porque la unión entre dos seres de razas diferentes cambiaría la mala reputación que tenían los demonios, especialmente este.

Lo bueno de esta historia es que la empresa de su familia estaba bien y en buenas manos, su marido era un excelente negociador y no tenía problema en que los Higurashi participaran, después de todo eran ellos los dueños legítimos.

En cuanto a ella, no se arrepentía de la decisión que había tomado, porque lo había hecho por amor, por ayudar a las personas que amaba, a pesar de que estos no estaban del todo de acuerdo, recordó a su madre, y hermano el día de su boda, ambos rogando para que no se casada, pero Aome solo tenía que ver los ojos tristes de su padre para saber que estaba haciendo lo correcto, ¿Qué iba a hacer de él, sin su empresa? Si perdía todo lo que había logrado...

–Haré lo que sea necesario–

Y así lo hizo, ahora se encontraba legalmente casada, su boda fue el evento social del año, con más de 300 invitados de la más alta clase social- incluyo demonios y humanos- lucio un Vera Wang de más de 25 mil dólares, una suma extravagante para un vestido de novia, pero realmente aquella prenda era perfecta, como si hubiera sido especialmente para ella y en cuanto a Sesshōmaru, el lucia guapo con cualquier cosa que llevara encima, era lo bueno de ser un demonio bien parecido.

Pasaron la luna de miel en una isla privada, que Inu no Taisho había alquilado para los flamantes novios...

Aquí es donde varias se preguntaran ¿Paso algo en esa noche tan importante?

SI, seamos sinceras Aome no está ciega, es humana, tiene un marido hecho a la perfección, como si el mismo Dios se hubiera encargado de hacerlo a mano.

¿Qué mujer en su sano juicio podría desaprovechar la oportunidad de estar con un semental de tal magnitud?

Obviamente que ninguna.

Además debía cumplir sus labores de esposa -en todo el sentido de la palabra- si es que tan solo de recordar lo que sucedió en esas cuatro paredes, los colores se apoderaban de su rostro.

¿Dónde había aprendido a hacer aquello?

No fue una sorpresa verse sola en la cama a la mañana siguiente, se acostumbró en su luna de miel, no vería a Sesshōmaru si no hasta la tarde, por motivos de trabajo él nunca estaba durante el día.

Aome jamás veía a su marido con la luz del día.

Los primeros días fueron terribles porque después de todo era humana y necesitaba sentirse apreciada, más allá de los lujos materiales que su marido le daba, necesitaba cariño.

Aome sin embargo hacia un esfuerzo sobre humano para sonreír y fingir que todo estaba bajo control, como si todo fuera perfecto.

Había días en lo que apenas se veían a la cara e incuso discutían constantemente, se maldijo y en más de una ocasión Aome le había arrojado un par de cosas, cierta noche descubrió accidentalmente que en su sangre corrían los poderes de una miko, casi manda a su esposo al hospital, aunque no iba a matarlo, si iba a dejar una gran quemadura sobre su piel.

Lo bueno de pelearse era la reconciliación, una fogosa noche de sexo, durante horas, donde lo único que importaba era la mutua satisfacción.

Para Aome, aceptar que la segunda cosa buena de su matrimonio era simplemente el sexo, podía significar un fracaso... Un matrimonio sin amor y sin felicidad.

El carácter de Sesshōmaru era un completa mierda, arrogante, frio, déspota, idiota, manipular y posesivo, pero a pesar de todo eso Aome no lo odiaba.

Ambos tenían un carácter fuerte, ambos eran orgullosos, testarudos... A pesar de sus diferencias lograban mantener una conversación civilizada.

Tal vez incluso podrías toparte con la imagen de ambos en la tapa de alguna revista importante, el diario o incluso en las noticias. Asistían a fiestas de gala, a Aome le encantaban pero Sesshōmaru las detestaba, estar en medio de la multitud no era algo que le agradase. Sin embargo tenía una reputación que mantener, a causa de su hostil temperamento y poca paciencia, se había ganado la fama de un demonio peligroso, no era algo que le preocupase, pero su padre y la empresa no creían lo mismo, así que tenía que fingir y reprimir las ansias de rebanar cabezas.

Aome había aprendido a manejar, pero sobre todo a reconocer las emociones de su esposo, así que sabía cuándo las cosas estaban bien, y cuando se iban a ir a la mierda, podía identificar cuando él estaba divertido, complacido, frisos y en raras ocasiones feliz.

Un mes después de haberse casados, Aome podía decir que conocía a su esposo, por lo menos en el breve tiempo en los que se veían, él regresaba a casa al caer la noche y se marchaba antes que los primeros rayos de sol se filtraran por la ventana.

El realmente debía amar mucho su trabajo, o al menos eso creía.

Aome jamás había ido a su oficina, no tenía por qué hacerlo además Sesshōmaru le había dejado en claro, que no quería verla por haya tenido mucho trabajo que hacer y poco tiempo para desperdiciarlo en ella.

No es que le hubiera afectado, para ser sinceros tampoco le sorprendió, además Aome se mantenía ocupada el en museo durante el día, solo procuraba regresar en la tarde y tener la cena lista para la noche.

La cena, el único momento que compartía con Sesshōmaru, porque el sexo no contaba eso parte era algo primordial, para ambos.

¿Aome era feliz en su matrimonio?

No.

Pero quería cambiar eso.

Continuara...

Hola a todas.

Este es otro de mis fic que ha estado almacenado en mi computador desde hace más de un año, desde ‎el lunes ‎31‎ de ‎octubre‎ de ‎2016, para ser exactos :/

Finalmente he decidido subir todos, pero repito las actualizaciones no tengo en claro cómo hacerlas, sin embargo aquí lo dejo para que me dejen su vista buena y también mala al respecto.