Esta es la catarsis de mi vida después de conocerle a él, luego de su larga ausencia y después de reencontrarnos como extraños.

A través de esta historia contaré cómo aprendí que la fama y la fortuna no quita lo cobarde y lo tonto, no evita la toma de malas decisiones, no nos hace inmunes a equivocarnos. 

Todos creían que yo tenía confianza en mí mismo, pero eso era tan cierto como mi falsa felicidad, mi vida estaba rodeada de pretensiones, invenciones y falsedades que todos se creían hasta tal punto que hasta yo mismo también creía que lo hacía.

Las mentiras fueron capaces de hacerme cautivo de su juego infinito, hasta muy tarde no comprendí que la única llave que me daría acceso a la libertad era la verdad.  Pero mientras más me tardaba en usarla, más doloroso se volvía.

Mi corazón se deshacía en un sufrimiento que hice solo mío y con el paso del tiempo se hacía polvo de tanto recibir golpe tras golpe, pero ninguno dolió más que verlo del brazo de otro y regalándole esa hermosa sonrisa cuadrada que tanto deseaba que fuera para mí.

Dolía demasiado ser solo un completo extraño para él, un transeúnte más que se paseaba casi desapercibido por su vida. Pero si le revelaba la verdad, lo que en una época fuimos, ¿me odiaría tanto como para no perdonarme por haberle mentido o empezaría a mirarme con otros ojos?

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((((Esta será una historia inspirada en la adaptación de un libro infantil que llamé:"Las mentiras del cibergay" Un TS "two shots" que recomiendo leer antes de empezar con esta historia.)))).