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El comienzo

¡No tuvieron que esperar tanto mi dulce gente! XD

-¡Hola Ink!- sonrío el ratón al verla salir de uno de los proyectores.

-¡Hola Mickey!- ella se la acerco con una gran sonrisa. -¿Hay alguna razón para que los "Old Toons" se reúnan esta vez?-

-Nha, solo es para pasar el rato- rio Mickey, para después enarcar una ceja y mirarla con diversión. -¿"Old Toons"?-

-Pensé que era un buen nombre para nuestro grupo~- ambos rieron, empezando a caminar hacia el castillo. -¿Y...como te fue con tu trabajo?- pregunto, mirándolo de reojo. -Digo, después de nuestra "pequeña" aventura y tus días ausente, debieron estar muy enojados-

-¿Mis jefes?- Mickey rio ligeramente. -Enojados es poco- rodó los ojos. -Apenas llegue y me dieron una montaña de tareas, problemas que resolver y me llenaron la agenda de reuniones-

-Uy...- Ink hizo una mueca. -¿Eso significa que tuviste un buen mes?- rio.

-Ni te lo imaginas- el ratón se encogió de hombros.

-¡Aquí chicos!- Félix y Oswald los saludaron desde la gran puerta, sonriéndoles.

-¡Hey~!- Ink sonrío al estar frente a ellos.

-¡Hola hermano!- el conejo rodeo los hombros del ratón, acariciándole con una gran sonrisa.

-¡Oz!- Mickey rio.

-Es bueno que se lleven mejor~- sonrío Félix.

-Muy cierto~- asintió Ink, jadeando al sentir que unos brazos la rodeaban desde atrás.

-¡Hola!- sonó una voz alegre y familiar tras ella.

-¡¿M-M-Mug?!- se sonrojo y bajo las orejas, escuchando la risa ajena. Él rió, abrazándola un poco más fuerte.

-Hola a todos~- Cup los saludo con una sonrisa, acercándose a paso lento.

-Hey- Oswald le sonrío.

-Parece que solo nos falta Bendy- hablo Mickey mirando a su alrededor.

-¿El demonio?- Cup enarco una ceja. -Eso es raro-

-¿Por?- Ink lo miro con curiosidad, suspirando mentalmente de alivio cuando Mug la soltó y se paro a su lado.

-Suele ser el primero en estar aquí- Oswald se encogió de hombros.

-Bueno...- la coneja se encogió de hombros. -...solo tendremos que esperarlo-

-Sip- asintieron los demás.

-Algo muy malo va a pasar...lo presiento- pensó Ink sin poder evitarlo, haciendo una mueca pero mostrándoles una gran sonrisa a sus amigos cuando ellos la miraron. Suspiro y siguió a los demás hasta dentro del castillo, esperando estar equivocada.

... ... ... ...

-¡¿Bendy?!- Boris camino por los pasillos del estudio, mirando a su alrededor y sonriendo al ver a su amigo parado ahí, mirando con seriedad el techo. -¡Bendy!- se le acerco, agachándose para estar a su altura. -Amigo, te he estado buscando-

-Lo siento Boris~- el demonio le sonrío. -No te escuche-

-¿Qué estas haciendo?- pregunto con curiosidad.

-Pienso en como detener la fuga- señalo hacia el techo, donde habían algunos tubos que pasaban por ahí y que estaban agotando un liquido negro, un charco bastante grande ya formado en el piso.

-¿No vamos a ir con los demás?- hizo lo que pareció ser un puchero, bajando las orejas con tristeza y mirándolo con ojos brillantes.

-No hagas esa cara, venga- rodó los ojos pero rio, acariciando la cabeza del lobo y viendo como las orejas se paraban rapidamente, sonriendo y moviendo la cola con energía. -Solo debo reparar eso antes de que empeore e inunde el pasillo- le sonrío. -Puedes adelantarte y avisarle a los demás que llegare tarde-

-¿Estas seguro?- lo miro con curiosidad. -Puedo quedarme aquí y hacerte compañía-

-Nha, no es necesario- lo miro con diversión. -Además, se que te mueres por ir al Páramo y jugar con los hijos del orejón-

-¿Seguro?- volvió a preguntar.

-Claro- le sonrío.

-¡Esta bien!- le mostró una gran sonrisa, lanzándose para abrazar al demonio. -Eres el mejor amigo del mundo~-

-Si, si, si, si. Lo sé- le devolvió el abrazo, sonriendo al ver la cola ajena moverse con fuerza. Lo separo de si y apoyo sus manos en los hombros del lobo. -Ahora saca tu trasero de este estudio y ve a decirle a los demás que no me extrañen mucho-

-¡Muy bien~!- se levanto de un salto, alejándose rapidamente. -¡Nos vemos haya Bendy!-

-Ese lobo...- rodó los ojos con diversión en cuanto su amigo desapareció de su vista. Miro una vez más la gotera, haciendo una mueca. -Debo buscar las herramientas- murmuro, dándose media vuelta y empezando a caminar, deteniéndose al sentir un crujido. -¿Pero qué...?- soltó un grito cuando el piso bajo sus pies se rompió, haciéndolo caer. Después de unos segundo, se quejo al haber aterrizado sobre su espalda con un fuerte golpe. -Carajo...- gruño, sentándose lentamente. -Este estudio si que esta echo mierda...- se masajeo la nuca, levantándose lentamente y alzando la vista para ver el agujero por el que callo, parpadeando con sorpresa al ver que estaba más abajo de lo que pensaba.

-¿A qué piso caí?- contó los pisos. -¿En el...tercero?- miro a su alrededor, confundido. -¿Desde cuando este lugar tiene un tercer piso?- miro a su alrededor, estaba en lo que parecía ser una habitación con dos puertas y tinta manchando la paredes, una tonada vieja y molesta resonando por el lugar. Se cruzo de brazos, tensándose al notar un overol algo roto y manchado dejado en el respaldo de una silla de madera. Empezó a caminar, intentando ignorar las obvias señales de que alguien estuvo viviendo ahí por un buen tiempo. Pisoteo el suelo con algo de fuerza, notando el sonido hueco bajo sus pies. -¿Hay...más?- frunció el ceño y chasqueo los dedos, despareciendo en un charco de tinta.

-Esto no esta nada bien- gruño, emergiendo de un charco de tinta en otro habitación y un piso más abajo. -¿Por qué este lugar es más grande de lo que recuerdo?- gruño de mal humor. Se volteo, jadeando con horror ante la escena que tenia en frente. -...No...- intento retroceder un paso pero callo de rodillas, sin poder apartar los ojos de lo que tenia frente a él.

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