Percival choca contra algo... No está seguro de qué es porque ya está tratando de fingir que no pasó nada, aunque es demasiado tarde para eso. Aparentemente no puede evitar mirar…

"Estabas mirando su trasero, ¿no?" Queenie se ríe justo en su oído y Percival no tiene tiempo para decirle que se calle porque Newt ya se da la vuelta y lo mira con preocupación.

Perfecto. Está haciendo el ridículo delante de él.

"¿Estas-"

“Sí, estoy bien”, murmura amablemente el agente… Aunque está irritado consigo mismo porque su plan de cortejar a Newt no va tan bien…

Newt asiente y sigue caminando, aunque Percival nota que es perfectamente consciente de su entorno; se pregunta si alguien los está siguiendo.

De repente, el hermoso espía se detiene y Percival se contiene para no gemir porque, por supuesto, Newt andar en motocicleta...

"Tuve que pedirlo prestado, así que no tengo ningún casco conmigo, lo siento", dice Newt con una sonrisa traviesa en su rostro, lo que por supuesto significa que lo robó y Percival no está del todo seguro de por qué eso lo hace lucir aún más sexy en ese momento.

Quizás se está volviendo loco.

“Toma esto”, Newt le entrega una de las pistolas que tiene adheridas a sus muslos y Percival tiene que forzarse a apartar la mirada de sus largas piernas para enfocarse. "Por si nos siguen. Ahora, salta y agárrame de la cintura."

“Parece que te vas a divertir”, comenta Queenie.

Por supuesto, ella debe estar pasando el mejor momento de su vida, imaginándolo sufrir.

Simplemente no necesita pensar demasiado en el hecho de que va a estar demasiado cerca de la espalda de Newt… de su cálido cuerpo…

"Tiene un trasero tan hermoso, ¿no?" Queenie dice entonces y Percival no está seguro de si ella está tratando de hacerlo sentir incómodo o ponerlo celoso, pero ciertamente está teniendo éxito en ambas cosas.

Intenta no moverse demasiado; ya no quiere avergonzarse frente a Newt.

"¿Crees que hay alguien más por aquí?" pregunta Percival. "Me di cuenta de que... me encargué de todos ellos".

“Eso es lo que yo también pienso”, admite Newt. “Pero tenemos que estar preparados de todos modos”.

“Si trabajas para ti mismo… ¿Qué haces aquí?” Percival sabe que no habrá suficientes oportunidades para hablar mientras se mueven, así que decide preguntar todo lo que pueda.

“Tina me pidió que la ayudara”, murmura Newt. "Ella es mi amiga. Un muy buena amiga"

Entonces... Tina es la clave para ganarse el corazón de Newt. Él necesita tener eso en mente.

***

Cada uno de los movimientos de Newt es elegante; Percival se da cuenta cuando llegan a la CIA y el espía tiene que bajarse de la moto.

Luego recuerda algo que leyó sobre el programa de la Viuda Negra, todas también se formaron en ballet; ha oído que es el primer paso.

Tiene tantas ganas de ver bailar a Newt; se pregunta si todavía lo hace.

"Deberías ir primero al médico antes de informar a tu superior", dice Newt y Percival trata de no lloriquear cuando se da cuenta de que no planea quedarse más tiempo.

"Estoy bien, pero-"

“Por favor, primero ve al médico”, insiste Newt y Percival se da cuenta de que no podrá decirle que no.

“Iré si me das tu número… ¿Número personal, en caso de que haya algún problema?” La excusa suena tan débil incluso para él. Percival tiene la repentina necesidad de patearse a sí mismo porque se supone que es excelente para inventar excusas... Es un agente...

"Está bien", Newt no parece sospechar nada, lo cual es un gran alivio.

"Es inconsciente", le recuerda Queenie y Percival se da cuenta de que acababa de olvidar que ella todavía estaba escuchando todo.

“Gracias, Newt”, murmura y sabe que el espía entiende que no solo está agradecido por el número, sino por haber sido rescatado.

"De nada, Percival."

Lo ve desaparecer de la vista, pero se promete a sí mismo que hará que se enamore de él.

“Apuesto a que ya estás locamente enamorado…”

A veces, Percival se pregunta si Queenie es capaz de leer la mente de las personas a través del auricular.