Elsa
Me separo de el en cuanto me doy cuenta de lo que estoy haciendo.
-Lo siento -me disculpo.
-No te preocupes -sonríe-. ¿Sabes? Eres demasiado tierna.
La sangre me llena el rostro y abro los ojos como platos.
-Gra-gracias, pero no es verdad -respondo entrecortadamente.
-Claro que si, Elsa -responde en una carcajada-. Lo eres.
-Jack, basta -maldita sea mi timidez.
El se acerca un poco más a mi.
-Eres tierna, y también linda, no lo niegues -me pone un mechón rebelde detrás de la oreja. Siento nos piernas de gelatina.
-No, Jack; no lo soy -murmuro-. Deberíamos continuar...
No se me permite continuar. Unos labios se posan sobre los míos con una entrega y una pasión que siempre ha sido desconocida para mi. Nunca jamás había besado a alguien antes, y mucho menos cuando acabo de conocer a esa persona y que aparte me lastima los labios con tanta agresividad en el beso.
Siempre imaginé mi primer beso como algo tierno, como una mariposa posándose en el dedo o como la brisa del mar. Suave, tierno, dulce y hermoso. En cambio, mi primer beso lo estoy dando con un chico apuesto que, repito, ¡acabo de conocer! Y lo hace con agresividad, impaciencia, desespero y pasión. Las lágrimas caen inconscientemente y hago lo posible por ocultarlas.
Me separo.
-Debo ir al baño -murmuro y me voy a ese lugar a lavarme el rostro-. ¿Que me ha pasado? ¿Por que no lo paré antes?
Mi rostro esta rojo como si hubiera corrido una carrera de diez kilómetros y mis labios están hinchados y tienen un poco de sangre en el labio inferior. El maldito bastardo me mordió.
Haciendo a un lado el enojo y la tristeza, algo revolotea en mk estómago. ¿Me gustó el beso? No lo se. ¿Lo repetiría? ¡No lo se! Joder.
Sonrío tímidamente y me encuentro en una batalla conmigo misma.
Salgo del baño en busca de Jack, pues he decidió devolverle el beso esta vez, pero uno tierno y suave. Para que la ira lo deje como el me dejó a mi. Si, en parte es una excusa para besarlo de nuevo, pero yo quiero mi beso tierno. Mi primer beso de verdad. Y se que a el no le gustará ese tipo de beso. Con suerte logre sacarmelo de encima.
Lo busco por todas partes y de repente, lo veo. Siento un extraño dolor en el pecho al ver como besa tiernamente a la chica con la que esta. Se separan de vez en cuando para decirse cosas que no alcanzo a oír, pues están como a cinco metros de mi. Jack le sonríe y ella a el. Se me escapa un jadeo. Mis ojos escuecen.
Ellos lo escuchan y Jack me mira.
-Elsa...
Salgo corriendo.