Prólogo
Hoy hace dos años que te fuiste, sin embargo siempre estás presente.
Hoy estoy aquí, escribiéndote esta carta, porque siento la necesidad de hacerte saber lo inmensamente importante que fuiste para mí.
Aunque no puedo tocarte, aunque no puedo escuchar tu voz... a veces, sin ningún tipo de razón ni patrón, juro que puedo oír como me llamas por mi nombre, o como de pronto noto la yema de tus dedos acariciando mi mejilla de la forma en que lo hacías. Es sólo un instante muy breve, y a pesar de ser algo tan efímero, se vuelve tan intenso, tan real...
No dejo de preguntarme qué hubiera ocurrido si no nos hubiésemos conocido ese día.
Sin embargo, sé que no fue el destino. Fue algo... mucho más profundo que eso.
A día de hoy soy incapaz de explicarlo. De encontrar las palabras adecuadas para hacerme entender sin que me dictaminen.
Pero yo sé de lo que hablo.
Sé que, de algún modo, estás ahí, y siempre vas a estar cuidando de mí. Y también sé que puedo encontrarte en cada ola. Que cada vez que una de ellas rompe en las rocas tú estás ahí sujetando mi mano y tirando de ella para que no me quede estancada en el pasado.
Aunque no te pueda ver, aunque no me hables, te escucho.
Porque...
...Yo no puedo ser sin ti.
Deja... deja que vuelva a recordarte una última vez.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro