— El príncipe alpaquita sigue sin aparecer— YoonGi soltó un suspiro— ¿En dónde se habrá metido?

— No tengo la menor idea...— TaeHyung le entregó una mandarina—no has comido nada, estás muy preocupado por él.

— Es que es tan pequeño y adorable como un cachorro que me preocupa que algo le haya pasado o que alguien se haya aprovechado de su estado para hacerle algo.

— Si, no puedo imaginarme como debe estar Jimin, Jin es realmente es su cachorro.

— Espero que este bien y solamente se haya dormido con alguno de sus amigos.

— No lo sé, Jin le tiene miedo a los puentes y para llegar a la ciudad donde viven sus amigos se debe pasar por uno.

(• • •)

Taeyang no sabía que hacer, SeokJin se había despertado desde temprano y fue revisar su cocina encontrando sus galletas "especiales" y cuando lo vió ya se había comido la mitad de una galleta, se la arrebató diciéndole que estaban en mal estado y que ya las iba a tirar pero ahora el príncipe estaba tirado en el suelo riéndose solo.

— Tae — lo llamó por aquel mote cariñoso que le había puesto.

— ¿Si, SeokJin?

— ¿A dónde va nuestra ropa cuando nos transformamos en nuestra forma animal? — preguntó alzando sus manos y observando detenidamente estás.

— No lo sé...— ahora también le estaba generando dudas existenciales y otra vez comenzaron las risas— ¿Por qué te ríes?

— Manuel me contó un chiste.

— ¿iY quién es Manuel!?

— ¡No me grites! —las lágrimas comenzaron a salir, se levantó del suelo y corrió al baño para encerrarse.

— ¡SeokJin!— corrió detrás de él.

No sabía que hacer, si regresaba a SeokJin a su casa en ese estado se metería en problemas por tener drogas cuando era un guardia y no tenía el permiso de portar aquellas sustancias, no eran completamente ilegales y conseguir el permiso era muy fácil pero estando en servicio estaba prohibido consumirla ya que debía estar en todos sus sentidos.

SeokJin había consumido sólo media galleta y había tardado en hacer efecto una hora en lo que trato de hacerlo vomitar pero le era imposible y no sabía que consecuencias habría porque el menor nunca en su vida había consumido y él solamente comía un cuarto de galleta porque con eso tenía suficiente, el efecto podría durar de tres a cuatro horas y en ese tiempo no podía dejarlo solo por miedo a que entrara en pánico e hiciera algo.

— ¡Jeonie!— lo escucho gritar.

— ¿Qué sucede?

— ¿Dónde estoy?

— En el baño.

— ¿Y cómo salgo?— suspiro e intento girar la perilla, pero Jin había puesto el seguro.

— Quita el seguro.

— ¿Cuál seguro?

— ¡El de la puerta!— gritó e intento mover la perilla para que Jin le pusiera atención.

— ¡Quiero ir con Jeonie!

— Te llevaré si abres la-— se quedó callado al escuchar un fuerte golpe— ¿SeokJin?—no recibió respuesta— SeokJin abre la puerta, esto no es divertido!— siguió intentando girar la perilla a la fuerza hasta que se rindió y comenzó a patear para romperla.

(• • •)

— ¡Es un mensaje de Jin!— JungKook gritó emociónado y Jimin corrió hacia él.

— ¿Qué dice?— preguntó preocupado.

— Ayúdame, fui a baño y no sé por dónde salir— leyó y quedó confundido— y me mandó su ubicación— Jimin le arrebató el móvil para revisar.

— Al menos sabremos dónde está si lleva su celular con él.

— Es el edificio donde vive Taeyang— NamJoon comentó al ver la ubicación que marcaba.

— ¿Qué?— el Omega recordaba a Taeyang porque era compañero de NamJoon.

— Si, una vez me invitó y recuerdo la dirección.

— Vamos— los tres salieron de la casa— será más rápido si me transformó, así que tendrán que subir en mí— a Jungkook sólo le preocupaba encontrar a su esposo y saber cómo estaba porque aquel mensaje lo había dejado desconcertado. Paso a su forma animal y espero que los otros dos subieran a su lomo para dirigirse hacia el lugar que marcaba.

Al llegar pasaron a recepción para preguntar si habían visto entrar a un Omega alpaca rubio de ojos azules, pero el trabajar dijo que no, él apenas estaba iniciando su turno así que NamJoon se encargó de guiarlos haya el departamento de Taeyang, Jin conocía al guepardo y tal vez haya decidido irse con él.

Llegaron al apartamento y tocaron el timbre y al instante escucharon algo que los hizo calmarse: un "ding-dong" con la voz de SeokJin. Esperaron hasta que la puerta fue medio abierta por Taeyang.

— Jefe Park, Príncipe Jungkook— saludo respetuosamente pero en su tono se notaba nervioso.

— ¿Dónde está SeokJin?— Jimin se apresuró a preguntar.

— ¡Aquí!— y ahí obtuvieron la confirmación de que efectivamente ahí estaba el príncipe y Taeyang no tuvo de otra más que dejarlos entrar, se encontraron a SeokJin sentado en el suelo sosteniendo una bolsa de hielo en su cabeza.

— Cariño— Jungkook se acercó rápidamente y se puso de cuclillas para quedar a su altura— ¿que fue lo que te sucedió?

— Tae pegó la bolsa a mi mano y a mi cabeza~

— ¿Eh?— tomó la bolsa y la quito con facilidad dejando con la boca abierta al menor, pero había un poco notando que de sangre— ¿Qué fue lo que sucedió, Taeyang?

— Ayer me encontré al principe y se veía bastante distraído así que lo traje, él me pidió permiso para quedarse-

— ¿No viste que estábamos en estado de emergencia por la desaparición del principe?— Jimin se cruzó de brazos.

— En realidad no, solamente salí a comprar comida y regresé así que no me fijé mucho. Mi plan era llevarlo de regreso a casa temprano pero ocurrió un accidente...

— ¿Qué accidente?— Jungkook preguntó mientras revisaba a su esposo en el cual ya había notado una actitud extraña.

— Él comió la mitad de una de mis galletas "especiales" y pues está ido, hace un rato se encerró en el baño y se cayó.

— Y se golpeó la cabeza y no lo llevaste al hospital— NamJoon se acercó a los príncipes que seguían en el suelo.

— Perdió la conciencia por dos minutos y despertó como si nada, sigue actuando extraño pero no sé queja de dolor o algo— se defendió— tuve que decirle que pegue la bolsa a su cabeza porque se la quitaba.

— Vámonos— el dragón cargo al Omega alpaca.

— ¡Yupi!— SeokJin exclamó al ser levantado.

— NamJoon, avisa que encontramos a Jinnie y Jimin hazte cargo de Taeyang, no seas duro con él— murmuró lo último y salió del departamento.

— Jeonie— Jin lo llamo en lo que caminaban, lo llevaría al hospital para que lo revisaran ya que tenía una herida en la cabeza que sangraba.

— ¿Si, Jinnie?

— Perdón por enojarme contigo cuando tú sólo querías protegerme...

— No te preocupes por eso, sé que es difícil para ti escuchar todo lo que te dije además de que también estás recuperando tus recuerdos reales.

— Ahora sé que Minnie es mi papá.

— ¿Y que piensas de eso?

— Que lo quiero más, él me cuida y siempre me trata bonito, me gusta más estar con él que con mi mamá.

— ¿De verdad?

— Si, ella aunque fingiera ser buena siempre hacia algo que no me daba la misma seguridad que Minnie... Además de que ahora tengo un padrastro.

— ¿Un padrastro?

— NamJoon, él me conciente~

— Si, él también te quiere mucho~

— No me gustó que no me lo contarán antes, siento que no confías en mí y me ves como un cachorro indefenso.

— No te veo como un cachorro indefenso.

— Si lo haces, por eso no me marcas.

— De eso hablaremos cuando vuelvas a tus sentidos— pasaron un par de minutos en silencio.

— Jeonie...

— ¿Si?

— Te amo~

— Yo también te amo, Jinnie~