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Parte 19

Alrededor de cuatro a seis veces al año se realizaba un baile público masivo, un evento al que incluso los plebeyos podían asistir. Estaba en medio de una larga conversación con el ministro de cultura para decidir la fecha. Me excusé apresuradamente para ir al baño, y salí de la oficina por un momento para aliviar mis ojos cansados.

'Voy a dar un paseo.'

Miré por el largo pasillo y comencé a caminar lentamente, esperando relajarme. Sin embargo, después de solo unos pocos pasos, noté que el Duque Suho se apoyaba en un pilar no muy lejos. ¿Por qué estaba parado ahí? Cuando me detuve y lo miré, él sonrió y se enderezó para inclinarse ante mí.

"He estado esperando aquí por tres horas. Debes estar muy ocupado."

Su cabello ondulado y dorado se balanceaba junto con su lazo. Me volví aún más curioso. ¿Esperó tres horas solamente para verme? Traté de recordar si tenía una reunión preestablecida conmigo. Si fuera urgente, debería haber enviado a alguien para dar un informe...

"¿Como puedo ayudarte?"

El Duque Suho sonrió y murmuró

"Ah. Directo al punto principal. Muy bien. Rápido ¿Sabes que soy amigo de Sehun?"

"Lo he oído."

"Ya lo has oído."

"Lo oíste."

¿Qué demonios ha venido a decir? El Duque Suho murmuró 'escuchó' para sí mismo y de repente frunció el ceño y miró hacia el suelo. Un silencio incómodo pasó. Permaneció así durante unos tres minutos antes de volver a hablar.

"He escuchado de Sehun algunas veces sobre usted, Su Majestad. ¿Sehun dijo algo sobre mí?"

'No a menudo, pero sí una vez. Y no fue halagador.'

"No mucho."

Le respondí honestamente, y él me miró fijamente mientras daba un par de pasos más cerca.

"¿Dijo algo extraño?"

"¿Extraño...?"

"Cualquier cosa desagradable."

De hecho, Sehun lo hizo, pero no podía responder eso. Sacudí la cabeza y dije que no, mientras el Duque Suho suspiró y puso su mano sobre su frente.

"Así es él. Siempre dice cosas malas sobre mí a alguien que le gusta."

¿El Príncipe Sehun?

"Le ha estado diciendo a la gente que soy una muñeca maldita o una historia de fantasmas viviente...Es una mentira, así que no es necesario que le prestes atención. Cuando te vi ayer, no pensé que Sehun socializaría con un tipo de persona como usted."

"¿Qué tipo de persona?"

"Del mismo tipo que Sehun y yo, una persona frívola."

Ayer solo había sonreído y asentido, apenas abrí la boca para saludar. Cuando la fiesta del té se interrumpió, me fui. Apenas me había visto y decidió qué tipo de persona era.

"Pero si hay una diferencia, es que Sehun es un hombre que quiere que alguien sea su opuesto completo, y en cuanto a mí, soy un hombre frívolo que quiere llevarse bien con personas frívolas."

"¿Eso significa que no soy apto para ser amigo del príncipe?"

"No, estoy aquí para darte un consejo."

¿Consejo?

"Sehun es un hombre de dos caras, Su Majestad. Él dice una cosa frente a ti y hace algo diferente por detrás. Él puede sonreír y lastimar a la gente. No confíes en los dulces que ofrece.".

¿Por qué el príncipe Sehun y el Duque Suho hablarían mal el uno del otro? Tan pronto como hablé, el Duque Suho sonrió con indiferencia.

"Fue Sehun quien me llamó aquí en primer lugar. ¿No dijo eso?" Sacudió la cabeza y continuó.

"Durante unos años Sehun ha estado preparando-"

Antes de que pudiera terminar de hablar, alguien golpeó la pared. Me di la vuelta y vi a Chanyeol mirándome a mí y al Duque Suho.

"Otro extranjero, de nuevo."

El Duque Suho se inclinó ante Chanyeol, beso mi mano y se fue con una sonrisa inocente.

Tan pronto como el Duque se fue, Chanyeol se giró para mirarme.

"Creo que ahora está claro. Un hombre del Reino Occidental, otro de Rwibt, y otro de Bohean Azul. Claramente tienes una preferencia por los extranjeros, ¿no es cierto?"

Su demente especulación había regresado. Esperaba que todo se mantuviera en calma. Chanyeol frunció el ceño y apuntó a la espalda del duque que se retiraba.

"No tienes mucha experiencia con otros hombres además de mí. Solo porque hable con una lengua de plata no significa que sea un buen hombre."

Al contrario, el Duque Suho era un hombre que hablaba sin rodeos, pero en vez de corregir a Chanyeol, lo observé estupefacto.

"Entonces, ¿qué tipo de hombre es un buen hombre?"

Si tenía consciencia, no diría que él mismo.

"¿Yo?"

¿En serio?

Levanté una ceja ante él, y su expresión se tornó descontenta mientras suspiraba.

"De todas maneras, quiero que seas cuidadoso con tu comportamiento."

"Entonces Buscaré un guapo y joven hombre del Reino Oriental." Me observó en silencio, luego murmuró "Sí," y se fue.

Suspiré. No podía comprender lo que Chanyeol tenía en la cabeza. No le importaba haber traído a Baekhyun, ¿pero le molestaba oír que su pareja Imperial tenía otros amantes?

"Su Majestad. ¿Estaba buscándome?"

Mientras presionaba mi mano contra mi sien, el ministro se acercó apurado desde el baño.

"Lo siento, mi sistema digestivo ha estado funcionando extraño últimamente."

"Está bien."

Regresamos a la oficina, pero encontré difícil el ser capaz de concentrarme, y eventualmente acorté la reunión.

"Hablaremos nuevamente mañana. Descansemos un poco por hoy."

"Oh, muy bien."

"No puedo concentrarme mucho tampoco, así que no se preocupe."

Después de que el ministro se fue, me senté de brazos cruzados y observé la pila de documentos sobre la mesa. Chanyeol estaba siendo Chanyeol, Pero ¿qué quiso decir el Duque Suho? ¿Qué es lo que el Príncipe Sehun había estado arreglando durante años? No podía ser un edificio. ¿Un plan? La palabra "plan" tendría sentido.

Tendría que preguntarle al PríncipeSehun. Él había hecho venir al Duque Suho, y aun así ambos estaban intercambiando detalles despectivos acerca del otro...era extraño.

...

"Su Majestad, ¿se siente bien esto?"

"Su Majestad, ¿esto está bien?"

"¿Su Majestad?"

Baek dejó de masajear los hombros de Chanyeol cuando no respondió a sus repetidas preguntas. El inclinó su cabeza sobre su hombro, y sobresaltado, movió la cabeza hacia

"¿En qué estás pensando que no escuchas a Baek?"

Su voz era encantadora, pero contenía un reproche.

"Oh... lo siento."

"Si es algún asunto nacional, Baek no será de mucha ayuda."

Después de disculparse, se encogió de hombros y se sentó en la mesa frente a él. Chanyeol negó con la cabeza.

"No es un asunto nacional."

"¿Qué es?"

Baek habló con una voz medio distraída. El emperador no solía compartirle detalles de su día de trabajo. Él hablaba con este cuando le apetecía, lo cual no pasaba a menudo, así que Baek preguntó sin pensarlo. Sin embargo, él hizo su propia pregunta.

"Pensándolo bien, Baek, el Duque Suho se lleva bien contigo, ¿cierto?

¿El Duque Suho? ¿Por qué Chanyeol lo menciona tan de repente? Baek respondió, perplejo.

"Él es cercano a Baek, ¿por qué?"

Su siguiente pregunta fue incluso más sorprendente.

"El DuqueSuho; ¿es cercano a mi consorte?" Baek se estremeció muy ligeramente.

"¿Por qué lo preguntas?"

"Los vi teniendo una conversación amistosa esta tarde." Chanyeol exhaló con lentitud.

'Antes...'

Baek le dijo que el Duque Suho se había ido por un tiempo, que no lo había visto durante horas.

'No dijo a dónde iba. Así que debió haber ido a ver al consorte.'

Baek recordó la confidente y traviesa propuesta del Duque para seducirlo. '¿Estará realmente intentando seducir al consorte por mí?, silenciosamente apretó sus labios. 'No, no por mí...'

Debe haberlo hecho por sí mismo. El estaba de alguna manera ofendido, y Chanyeol lo notó y lo llamó con un tono extraño.

"¿Baek?"

Este sonrió rápidamente.

"No, el consorte no se lleva bien con el Duque."

"¿Es cierto eso?"

"Si, el Duque Suho es amigo de baek. "

Ante su rápida respuesta, Chanyeol lo miró adorablemente.

"¿Estás defendiendo al consorte porque podría tener un desacuerdo con el?"

"Oh... ¿te diste cuenta?"

Baek cubrió su rostro con sus manos y Chanyeol asintió.

"No llevas puesto el anillo que te di, ¿no es así?"

"Anillo..."

Baek escondió sus manos. A pesar de su bello rostro, sus manos eran feas y ásperas debido a los trabajos que había hecho de niño. Cuando Chanyeol vio sus manos ásperas, sus ojos temblaron, y se inclinó para tomar los dedos de su amado.

"Un anillo plateado con una joya roja en él, ¿recuerdas?"

"¿Ah? Sí."

"La joya roja es conocida como 'Estrella de la Llama Roja'."

Baek recordó tres anillos que Chanyeol le había dado. Uno de ellos debió haber sido un anillo plateado con una joya roja. Ella creyó que era el más barato por ser el más pequeño, pero debía tener una gran reputación para tener su propio nombre.

"¿No te gusta?"

La expresión de Baek cambió cuando se dio cuenta que le dio el precioso anillo a la persona que más odiaba.

"No estoy intentando presionarte si no te gusta. Pero ese anillo tiene un hechizo. El efecto no es obvio si lo llevas puesto poco tiempo, pero llévalo puesto por un tiempo y removerá las cicatrices."

¡El anillo era mágico! Baek dejó caer su cabeza sobre la mesa produciendo un sonido seco.

"¿Baekhyun?"

"Ohhh... qué desperdicio."

"Encontré a una sirvienta pobre y se lo regalé. No sabía que era ese tipo de anillo..."

Después de mirarlo con cierta sorpresa, Chanyeol explotó en una carcajada.

"¿Qué? ¡Jaja!"

Baek quería llorar.

"¿Su Majestad, hay otro anillo con el mismo efecto?"

"Lo hay,pero..."

"Si Baek te pide otro anillo... ¿estaría bien?"

"Bueno, si quieres uno similar, pues bien."

¿Podría tenerlo ahora? Cuando Baek lo miró con sus enormes ojos, Chanyeol sonrió torpemente.

"El consorte tiene uno."

...

Tan pronto como el Vizconde Roteschu visitó al día siguiente, Baekle preguntó por el anillo.

"¿Qué hiciste con el anillo que te di?"

El Vizconde Roteschu fue asaltado con un aluvión de preguntas antes de que pudiera siquiera sentarse.

"Lo vendí."

"¡¿Lo vendiste?!"

"¿Por qué no? Ya no te involucra."

Baek había estado dispuesto a cambiarlo si todavía lo tenía, y el soltó un frustrado

"¡Hu!"

"Lo vendí por más dinero del que esperaba. Pensé que me habías dado un anillo barato a propósito, pero lo has hecho bien por mí."

La presión sanguínea de Baek aumentó aún más ante la vil sonrisa del Vizconde Roteschu. Sin embargo, el anillo ya no estaba en sus manos. Chanyeol tenía que obtener uno nuevo.

Baek contó mentalmente en forma regresiva desde el diez, luego señaló con el dedo una silla al otro lado de la mesa.

"Siéntate. Ya no más de tu descaro."

Baek estaba extrañamente enojado por el anillo, pero él no se sentía intimidado.

"Si estás del mismo lado como dices, ya no estarás a la cabeza. No seas tan grosero conmigo."

El Vizconde Roteschu lo miró irritado, pero cuando Baek sacó su abanico y comenzó a refrescarse, su ira disminuyó cuando vio las joyas brillando en el objeto. No pasaría mucho tiempo antes de que las adquiriera también.

Sonriendo en anticipación, el Vizconde Roteschu tomó su lugar con un chirrido de su silla.

"Sí, tienes razón. Somos como colegas ahora."

Baek lo miró despectivamente, pero él continuó.

"¿Has tomado una decisión? Se me está acabando la paciencia."

"Primero tienes que convencerme."

"¿Con qué?"

"Dijiste que ayudarías aBaek.Ya sea que realmente estés ayudando o no, demuestra tu habilidad."

"¿Habilidad?"

Baek golpeó el abanico contra su palma.

"Dijiste que revelarías la existencia del bebé si no cooperaba. Pero si arruinas nuestro acuerdo incluso cuando estamos del mismo lado, seguiría siendo una pérdida para ti. Así que al menos tienes que mostrarme tu habilidad. Descubre una debilidad de la Duquesa Tuania. Algo que pueda iniciar un mal rumor."

•••

Cenaba dos veces por semana con Chanyeol, y una de esas veces era hoy. Ayer recordé nuestra desagradable conversación, pero no podía evitarlo. Me cambié de la ropa diplomática a un cómodo traje azul claro y me dirigí hacia el palacio del este. Para evitar cualquier conversación desagradable, cuidadosamente repasé las palabras que quería decir.

Mientras caminaba por el pasillo hacia la habitación donde comería, me encontré con Baek. Las secuelas de la villa seguían sin cambios, el se inclinó cuidadosamente y se hizo a un lado.

'Me alegro de que ya no finja ser amigable y me llame 'hermano'.'

Esta distancia era aceptable para mí. Di unos pasos más allá de el cuando habló.

"Disculpe... Su Majestad."

Baek me llamó en voz baja. Me detuve y me di la vuelta, pero el dudó.

"¿Qué pasa?"

Era como si las palabras estuvieran atrapadas en su garganta. ¿Qué estaba tratando de decir? Frunciendo el ceño, lentamente comenzó a hablar. Sin embargo, lo que dijo a continuación me tomó por sorpresa.

" por favor no toques al Duque Suho."

"¿Qué?"

'¿Por qué me molestaría con él?' '¿Cree que tocaría al Duque?' Una exhalación escapó de mi boca.

"No sé de qué estás hablando."

"Cuando estaba en problemas, él era el único de mi lado que me escuchaba y confiaba en mí."

"¿Entonces?"

"Por favor... no se ofenda. Su Majestad, tiene muchos amigos, así que por favor no se lleve a mi único-"

"No lo haré."

No sabía por qué el me malinterpretó, pero la idea era completamente ridícula e inmediatamente la corté.

"No sé por qué esto te preocupa, pero no debes alarmarte. El Duque Suho no es mi amigo. Como decirlo."

"¿Qué?"

"Tú has codiciado lo que era mío, pero yo no he codiciado nada de lo tuyo. No estoy tan necesitado como para tener que quitarle algo a otra persona."

Una mirada de angustia brilló en la cara de Baek, pero la ignoré. Pasé junto a el con una mirada tan fría como la de Chanyeol.

•••

Cuando entré en la habitación de él, su secretario, el Conde Pirnu, estaba adentro. No estaba seguro de si estaban inmersos en una larga conversación, pero Chanyeol estaba sentado frente a la mesa mientras el Conde Pirnu estaba de pie a su lado. Observé en silencio, pensando que el conde se iría pronto dado que ya tenía su sombrero en la mano. Chanyeol no le habría permitido venir aquí en primer lugar si no le importara escucharlo.

"Un anillo con magia curativa, ¿correcto?"

"Sí!'

"¿Son aceptables los collares, pulseras y espadas?"

"No. Debería ser un anillo. No, no. Un brazalete también está bien."

"Muy bien. Son extremadamente raros, y la búsqueda será muy extensa."

"Encuentra uno de todos modos, y tan pronto como lo hagas, cómpralo."

"Sí, Su Majestad."

El Conde Pirnu nos hizo una reverencia, luego salió de la habitación dejando la puerta cerrada. Chanyeol sonrió en mi dirección y tocó la campana para llamar a los sirvientes. Habían estado esperando de antemano, e inmediatamente trajeron una lujosa cena de brochetas de ganso a la parrilla, estofado y pan con queso. Después de que los sirvientes se fueron, dirigí la conversación a la escena de antes.

"¿Ya no tienes un anillo con un hechizo de curación, Su Majestad?"

"Oh...sí. Pero ya no lo tengo."

"Ya veo."

No parecía querer decirme por qué ya no lo tenía. En lugar de interrogarlo más, me llevé a la boca una cucharada de estofado. Me sentí aliviado de encontrar un tema de conversación, pero ahora estaba completamente en blanco. La sala se encontraba en completo silencio, ya que nos habían enseñado a una edad temprana a no hacer sonidos fuertes con nuestros utensilios contra los platos.

"Entonces, ¿Te molestaría prestarme la flor del desierto por un tiempo?"

La "Flor del Desierto" era mi anillo, obtenido de un comerciante que regresó de Rwibt. Había sido transmitido de generación en generación por los guerreros más grandes de la tribu del desierto, y también contenía un poderoso hechizo de curación. No lo usaba mucho, así que no me importaba prestárselo...

Sin embargo, mi mirada se dirigió sin saberlo a las suaves manos de este. No tenía rasguño ni cicatriz.

"¿Realmente lo necesitas?" Chanyeol respondió sin rodeos.

"Solo quiero prestárselo a alguien que se lastimó las manos."

"¿Quién es?"

"Préstame el anillo y prometo devolverlo."

"Las manos de tu amante deben ser ásperas."

Los ojos de Chanyeol se abrieron. Puse mi tenedor en la mesa, luego me limpié la boca con una servilleta y le sonreí.

"No necesitas usarlo en ti mismo. No puedes prestarlo a otros nobles de la nada, y no puedes vender nada de lo que pidas prestado, además estás seguro de poder devolverlo."

El me miró en silencio, luego tímidamente colocó su frente en su mano. Dio un largo suspiro.

"¿No me lo prestarás?"

"Lo haré."

"¿En serio?"

"Sin embargo, con una condición."

"Una condición..."

"Préstame uno de tus objetos mágicos como garantía."

Chanyeol soltó una risa de sorpresa.

"¿Crees que no lo devolveré?"

"No. Pero puedo tener una persona a la que quiera prestárselo."

"Prestárselo a...¿Quién?"

"¿No me lo dijiste ayer? No querías que me asociara con extranjeros, así que miraré a nuestros jóvenes compatriotas, Hay muchos actores guapos que podría tomar como amantes. Debería darle al menos un regalo mágico a cambio."

La cara de Chanyeol se puso rígida.

"Entonces, ¿prestarás los artículos del Emperador a un joven compatriota?"

Asentí y fríamente tomé un sorbo de agua. Era mentira, pero si iba a tomar mi anillo, necesitaba seguridad. Chanyeol me lanzó una mirada sucia y se levantó

"Si no quieres prestármelo, di que no. Fingiré que esto no ha pasado."

No pude terminar mi plato de estofado después de eso, pero todavía tenía hambre. Tendré que pedirle a la Condesa Eliza un poco de helado.'

Me sentiría un poco mejor después de comer. Tal vez fue la satisfacción por la retorcida expresión de Chanyeol, pero mi estómago se sintió menos alterado que cuando me acusó de difundir rumores sobre que Baek era un esclavo fugitivo o cuando pensó que había traído al Vizconde Roteschu.

Estaba caminando por el Palacio del Oeste cuando vi un par de figuras. "¿Príncipe Sehun? ¿Reina?"

El Príncipe Sehun estaba de pie sosteniendo a Reina. Se me aceleró el corazón al acercarme a ellos, pero descubrí que estaba equivocado.

"Ese no es Reina, ¿verdad?"

El pájaro era un poco más pequeño que Reina, y sus plumas eran azules en lugar de doradas. Su cara también era completamente diferente.

"Este es el subordinado de Reina."

"¿Subordinado? ¿No es su amigo? Los pájaros del Príncipe Sehun son muy expresivos."

"¿Es eso así?"

"Reina tiene una cara de sorpresa, una cara triste y una cara tímida."

Extendí la mano y toqué la cabeza del pájaro. Él también era muy gentil por naturaleza y permaneció quieto, a pesar de que un extraño lo estaba tocando.

"Tiene una cara malhumorada."

"Siempre se ve así. Constantemente tiene una cara como de, 'No quiero hacer eso'."

Al final de las palabras del Príncipe Sehun, el pájaro se puso aún más malhumorado, pero el pájaro era tan lindo que seguí acariciándolo.

"¿Puedo abrazarlo?"

Supuse que podía, pero el Príncipe Sehun respondió con sorprendente firmeza.

"Eso no es posible."

"¿No puedo sostenerlo?"

No parecía dispuesto a explicar más, y asentí. 'También me gustaría criar un pájaro...'

El pájaro parecía tan lamentable que le acaricié el cuello, y el Príncipe Sehun dio un paso atrás de repente. Cuando levanté la vista, él sonrió suavemente.

"Creo que el pájaro está ansioso por volver a la habitación."

"... Se ve tranquilo."

"Su corazón late más fuerte. En realidad, es una criatura tímida y cobarde, a diferencia del valiente Reina."

No sabía si el pájaro azul era un cobarde, pero ciertamente estaba frunciendo el ceño al Príncipe Sehun. Sin embargo, en lugar de hacer sentir su desagrado al príncipe, el pájaro se levantó y se fue volando.

"Nunca he visto un pájaro tan desanimado."

"Siempre es así."

"¿Está enfermo?"

"Él está bien. Sólo se está quejando. Hm, de hecho. ¿Estoy en problemas porque impedí que mi rey le diera un abrazo?"

No sabía si estaba hablando solo o preguntándome. El Príncipe Sehun tenía una expresión inusual en su rostro mientras miraba la espalda del pájaro con los brazos cruzados. Luego, como si sintiera mi mirada sobre él, se giró y me sonrió.

"Tendré que preguntarle luego por qué está enojado."

"¿Puedes hablar con los pájaros?"

"Sí. Probablemente esté enojado porque impedí que tu lo abrazaras, y me va a pegar diez veces en el trasero. ¿Qué pasa?"

"Oh, me acordé de Reina."

"¿Qué?"

"A veces le doy palmaditas a Reina en el trasero. Tiene un lindo trasero."

"Oh... gracias."

"¿Qué?"

¿Por qué el príncipe Sehun estaba tan rojo? Lo miré con curiosidad, pero sus ojos se negaron a encontrarse con los míos. Ah. ¿Fue porque estaba hablando tan claramente sobre los traseros? Con una cara tan roja, realmente no era un playboy como lo sugerían los rumores.

'Es sorprendentemente puro.'

Pensé que se reiría, pero no continué porque estaba muy avergonzado. Rápidamente cambié de tema.

"Hay algo que deseo preguntarle"

Él me miró con una mano cubriendo su mejilla sonrojada.

"Sí. Pregúnteme, Mi Rey."

"Conocí al Duque Suho ayer..."

"Ah. Ya veo."

Frunció el ceño como si desaprobara el encuentro.

"¿Te faltó el respeto?"

"No, en absoluto."

"Eso es una bendición."

"En cambio, dijo algo extraño..."

"¿Qué quieres decir?"

La expresión del Príncipe Sehun era tensa.

'No estoy seguro de poder decirle los malos comentarios, ¿verdad? El Duque Suho dijo que era un hombre frívolo.'

Si bien el Duque Suho y el Príncipe Sehun eran mejores amigos de nombre, yo dudaba de esa relación en este momento. En cambio, pregunté sobre otra cosa.

"Dijo que fuiste tú quien lo llamó aquí."

"Sí."

"También dijo que has estado preparando algo durante años."

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