"íSu Majestad, Su Majestad! ¿Lo ha oído?"

Después de que mi padre y mí madre se marcharon al Imperio Oriental,yo intentaba en vano calentar mi corazón roto llenándome de comida caliente. Mastas irrumpió en mí habitación, radiante.

"¿Recuerda que la santa díjo que el Emperador Sehun debía inclinarse ante Su Majestad en agradecimiento tres veces al día? ¡Bueno, la historia se está extendiendo!"

"Eso no es del todo correcto."

"Los rumores siempre cambian un poco. De todos modos,es de lo que se habla en la ciudad. Anoté todo lo que oí cuando venía hacía aquí. Le leeré lo más impresionante."

Mastas sacó una nota del bolsillo de su abrigo.

"¡Alguíen tan respetable en el Imperio Oriental como Su Majestad Luhan jamás traería aquí un baño de sangre de la nada! Cuando alguien cambia de repente, ¡hay que culpar a su nuevo entorno!"

Aunque la leyó como un niño a su profesor de etiqueta, el contenido era vergonzoso.

"Para que lo sepa, fue un guardia de la muralla oeste quien dijo esto. Lo iba a reportar porque estaba holgazaneando, pero después de oír esto, lo dejé en paz."

No me reuní con la santa para iniciar rumores como este. Lo hice porque pensé que las personas se molestarían sí no lo hacía. Aun así, me sentí agradecido que se extendieran rumores inesperadamente buenos.

Quería contrale a Sehun pero se había marchado a la muralla de este, para supervisar el trabajo de la presa que ya casi estaba finalizada, regresó hasta la noche tras encontrarse con una fuerte lluvia.

"No pasa nada, mi lu. Todo lo que necesito es un té y dormir bien."

Lo dijo completamente empapado. Pero al dia siguiente, su estado empeoró hasta el punto de que ni siquiera podia hablar. Aún conservaba su agudeza mental, era más un fuerte dolor de garganta.

Después de que el médico del palacio lo trató, Sehun se agarró la garganta, angustiado por no poder comunicarse. Podría haber soportado la fiebre, pero no poder hablar era agonizante para él.

Me dolia verle así, asi que le tomé la mano.

"Yo cuidaré de ti. No te preocupes, Sehun."

Min trató de disuadirme.

"No puede, Su Majestad. Seria terrible que se resfriara. Yo cuidaré de él."

Pero Sehun estaba tan afónico que no podia comunicarse con nadie. En momentos como éste, debia quedarme con él. Después de todo, podla entenderlo como a un libro.

"No te preocupes, Min. Yo cuidaré de Sehun. Sería dificil para ti, porque no lo entiendes. Él me necesita a su lado, ya que puedo saber lo que quiere."

Tal como ahora. Visto cómo Sehun agitaba desesperadamente los brazos, él prefería que lo cuidara yo antes que Minseok.

Los ojos de Min se abrieron completamente al mirar a Sehun.

"Pero... ¿no lo entendería yo mejor?"

Su afirmación era absurda. No le creía,pero me contuve y le dije a Min que Heinley deseaba que yo cuidara de él. Dado que Min no comprendía las señas que él me hacía ,al final acordamos que ambos cuidaríamos de él juntos.

....

Sintiéndose más tenso que nunca, Sehun tragó saliva. La saliva le quemaba al bajar por su garganta hinchada. No podía relajar los hombros. Cuando Luhan le hizo aquel dibujo antes, no tenia ni idea de lo que significaba. Sehun pensó que ocurriría lo mismo si fuera al revés, pero Luhan nunca supo que no había podido interpretar su dibujo. De hecho, había escondido el malentendido debajo de la alfombra, para nunca resolverlo.

Sehun amaba a Luhan, pero no podian comunicarse sin palabras. Ahora no era diferente, Frenéticamente, le habia indicado que prefería que le cuidara Min. Pero Luhan no le entendió en absoluto. Más bien, se sentó a su lado con una sonrisa.

"Comprendo. Cuidaré de ti. Me quedaré a tu lado todo el día de hoy, Sehun."

Le temblaron las manos.

¿Se sentiría Luhan profundamente decepcionado sí supiera que su comunicación fallaba? Luhan creía que se entendían con una mirada. Sehun no quería ver su decepción.Así que, aunque le dolía tanto la garganta que le costaba respirar y el cuerpo le ardía de fiebre,se esforzó por hacerse entender correctamente.

"¿ Sehun? ¿Tienes frío?"

Luhan le agarró las manos temblorosas. Sehun no tenia frio, se moria de calor, La preocupación cruzó su rostro helado. Sus cálidas manos envolvieron suavemente las de él. Sehun se aferró a sus manos y miró por encima de su hombro a Min.

'Ayúdame.'

Min asintió sutilmente en señal de que lo entendía.

No obstante, un minuto después, Sehun se desmayó. Cuando recobró el conocimiento, Luhan lo miraba con preocupación. Al contemplar aquellos ojos fríos, rebosantes de afecto, Sehun pensó que era tonto por temer sus cuidados. Había renunciado a una guerra por la mirada de aquellos ojos. No podía creer que hubiera tenido miedo.

Culpándose de lo que había hecho antes, reunió todas sus fuerzas para sonreírle a luhan. Cuando Luhan lo vio,frunció el ceño.

"¿De verdad vas a bromear en medio de todo esto?"

Sehun sacudió la cabeza. Pero debido a su enfermedad, los músculos de su cara no se movían. Relajó su sonrisa para no ofenderlo. Pasaron unos treinta minutos. Sehun sintió sed, quizá porque había sudado mucho, así que levantó una mano y se señaló la garganta.

'Agua. Por favor, tráeme agua, mi rey.'

Cuando pronunció su deseo, Luhan volvió a fruncir el ceño.

"Realmente no puedo impedírtelo ."

'¿Qué hice?'

Sin darle oportunidad de responder, Luhan besó su cuello. Cuando sus labios suaves y fríos tocaron su piel enrojecida, se sintió electrizado. Pero en cuanto luhan se echó hacia atrás, le entraron ganas de llorar. Por encima de su hombro, vio a Min perplejo,con una botella de agua en la mano.

'No, no me la des. No importa. Mi lu se avergonzaría si me entendieras.'

Sehun habló con la mirada. Min dejó la botella en el suelo. Aliviado, Sehun miró a Luhan y le agradeció.

Pasó otra hora. Sehun quería cambiarse de atuendo, así que agarró su ropa y la sacudió.

"¿Tienes calor?"

Luhan le abanicó de inmediato.

Min,que estaba a punto de traerle ropa,se sentó a regañadientes cuando Sehun le hizo señas de que no importaba. Pasaron dos horas más y Sehun sintió hambre. Se palpó el estómago. Luhan le preguntó si le dolía y se lo frotó mientras le cantaba.Min estaba a punto de traerle sopa,pero observó la cara de Sehun,preguntando en silencio,

'¿Qué hago?'

Esta vez, Sehun no le dijo que no importaba. Estiró la mano hacia McKenna a espaldas de Luhan, moviendo los dedos con desesperación.

'Sálvame. '

¿Dónde estoy? Miré a mi alrededor. Sin duda era el interior de un Palacio Imperial. ¿Era el Imperio Oriental? ¿O el Imperio Occidental? Por extraño que parezca, no podía distinguirlo. ¿Se ha deteriorado mi mente?

Estaba confundido, pero no sentía miedo. No importaría aunque lo tuviera, porque mis piernas seguían moviéndose independientemente de mis intenciones. Caminé durante mucho tiempo.

Finalmente, llegué a la puerta del gran salón de banquetes. Estaba ligeramente entreabierta. ¿Por qué está abierta? Normalmente estaba cerrada. Oí un ruido alborotado dentro, pero no era el sonido de la música de una fiesta.

Tampoco era el sonido de personas charlando. Se escuchaban risas pequeñas y suaves.

Me despertó la curiosidad, así que entré sin dudarlo. Justo entonces, vi a dos enormes pájaros aleteando en medio del salón.Ambos eran hermosos pájaros de plumas doradas,que chillaban y batían las alas, sus regordetas barrigas sobresalían.Luego se encararon con los picos bien abiertos y empezaron a abrazarse el uno al otro.

'¿Qué están haciendo? ¿Quiénes son esos pájaros?'

Para ver con más claridad, me agarré a la barandilla y me incliné. Al mirar de cerca,vi una cosa brillante,dorada, entre los dos pájaros.

'¿Qué será?'

Miré con más atención. Eran dos coronas. Los dos pájaros se ponían una corona, el pájaro dorado mas grande al menor y después el menor al mayor. Cuando ambos tuvieron coronas en sus cabezas una luz brillante apareció de repente

"Lu."

En ese momento, me interrumpió una voz. Mis ojos se abrieron bruscamente. No había Palacio Imperial,ni pájaros, ni coronas. Todo lo que vi fue una suave manta...¿de oro y marfil?

"Lu."

Al levantar la cabeza,vi a Sehun mirándome con preocupación.

'Oh, no. Debo haberme quedado dormiia. ¿En qué momento?'

"¿Por qué duermes asi? ¿Dónde está Min?"

Ah, ahora recuerdo.

"Él parecia cansado, asi que le dije que se fuera a dormir un poco."

Después de que Min se fue, me quedé observando la cara de Sehun mientras dormia.Debió de ser entonces cuando me quedé dormido.

"¿Se fue porque tú se lo dijiste?"

"Él no queria irse, pero se lo ordené. Siempre está muy ocupado."

Sehun puso una cara intimidante. Su expresión decía que,en cuanto estuviera mejor, llamaría a Min y le reprendería. Puse mi mano sobre la de Sehun.

"Más importante, ¿qué hay de ti? ¿Cómo te encuentras? Veo que has recuperado la voz."

"Estoy bien.Ya no me duele la garganta."

La expresión de Sehun ahora decia,sé que estás cambiando de tema, pero lo pasaré por alto. Utilizó su mano libre para cubrirse la garganta.

"Me pasa desde que era joven.Me enfermo sólo un día y me recupero enseguida."

"Menos mal. ¿Sabes lo preocupado que estuve ayer?"

Asintió con la cabeza.

"Si,lo sé. Pero no imaginaba lo bien que me sentía contigo cuidándome."

"Eso no es verdad."

"Es verdad. Sentia mi vida amenazada."

¿Qué?

Me quedé mirándole, confundido, pero Sehun evitó mi mirada y se incorporó.

"Vaya,tengo hambre."

¿Qué pasa? ¿Qué significa esto? ..

"Debería desayunar un plato ligero. Sólo tomar sopa caliente. Puede comer un poco de pan, pero es mejor que no lo haga."

El médico del palacio dio el tratamiento y algunos consejos, luego se marchó. Una vez que trajeron la sopa de patatas y champiñones que pedi, le fui dando cucharadas a Sehun,una a una.

Era incómodo, pero... a Sehun le gustaban este tipo de cosas.

"Esto se siente raro, lu."

A él le gustaba darme de comer. ¿Le parecía raro que nuestros papeles se hubieran invertido? Sehun abrió la boca.

Para el almuerzo el médico aconsejó una comida completa.siempre que evitara los alimentos picantes. Asi que nos sentamos frente a frente en una mesa dentro del grandioso jardín otoñal. Sehun debía de estar muerto de hambre. Comió mucho más de lo habitual. Mientras comía, saqué a relucir las cosas que había querido decirle ayer.

" Sehun,la próxima vez que llueva,cúbrete. No te quedes bajo la lluvia."

"De todos modos, fue agradable verte tan preocupado por mí."

"Siempre me preocupo por ti, así que no te vuelvas a enfermar."

Suspiré, arranqué un poco de carne de mi pescado y se la puse en el cuenco. Sehun la devoró, luego arrancó un poco de su propio pescado y me lo acercó a la boca. Abrí la boca y dejé que me diera de comer. 

Unos dias despues

Decidimos habilitar la habitación frente a la mía y la de Sehun como cuarto del bebé. Queríamos que estuviera lo más cerca posible para poder estar pendientes en todo momento.

"¿Qué diseño le gustaría para la cuna, Su Majestad?"

Preguntó Laura.

"¿Qué tal hacer una de pino, Su Majestad?"

Sugirió la Condesa Jubel.

"¿No seria bueno un patrón de estrellas para el móvil?"

Comentó Rose con una sonrisa.

"¡Ah! Señorita Rose, el Emperador Sehun dijo que pondría joyas en el móvil,así que olvidémonos de eso."

Señaló Laura.

"El bebé necesita ropa cómoda, ¿verdad?"

Intervino Mastas.

"Y si llevamos al bebé a las fiestas con nosotras, también será necesaria ropa formal."

Añadió la Condesa Jubel.

El palacio estaba lleno de actividad estos días, en la preparación del cuarto del bebé, de los juguetes y de los accesorios. Tal vez porque una nueva vida estaba en camino, no quedaba rastro de las oscuras sombras que se habían cernido sobre el palacio.

No sólo estábamos preparando el cuarto del bebé. El palacio también necesitaba algunas reformas. Teníamos que asegurarnos de que el bebé pudiera corretear sin hacerse daño. Se colocaron amplias alfombras en los pasillos y se hicieron pequeñas sillas para cuando el bebé se cansará y necesitará sentarse. Sehun colocó más guardias en los pasillos, y mis damas de compañía decoraron las paredes.

Era mucho más trabajo del que esperaba. Por suerte, desde aquella vez, aunque Chanyeol seguía quedándose en el palacio, no se había acercado a mi, de hecho, entre más se acercaba el dia de mi parto, mas parecía evitarme. No lograba entenderlo, pero realmente no me interesaba mucho hacerlo.

Incluso con mi prominente barriga, me encargué de los arreglos para la vida diaria de mi primer bebé.

Sin embargo, los nubarrones en mi cabeza no se disipaban fácilmente, por muy luminoso que fuera mi entorno.

¿Podría eliminar en secreto el nido que Sehun había construido?

Al estudiar sobre la infancia, descubrí cuán vulnerables eran los bebés. Por mucho que lo pensara, un nido seguía siendo poco conveniente. Cuanto más aprendía, menos quería a mi bebé en ese nido descuidado de Sehun El problema era...

"¡Lu, Lu! Mira qué bonita es esta joya amarilla. ¿O encuentras más bonitas la joya púrpura?"

Cuando Sehun me extendió dos joyas para que las examinara, suspiré.

"¿Mi rey?"

Estaba ocupado decorando su nido. Min también correteaba por ahí, recolectando seda para añadir a su propio nido. Como necesitaban construir sus nidos convertido en pájaros, con frecuencia veía a través de las ventanas de mi oficina a un pájaro dorado grande y otro azul más pequeño revoloteando.

"¿No podemos montar un nido después de que el bebé crezca un poco?"

"Ah, Su Majestad. El bebé necesita pasar varias horas al día en su forma de pájaro."

"Eso he oído, Min. Pero mientras el bebé es un pájaro, ¿realmente tiene que estar en un nido?"

"Un nido es más cómodo en forma de pájaro."

Quise decirle que eso no era cierto, pero como yo nunca había sido un pájaro, no podía objetar. Al final, me reuní con Sehun y Xiumin en mi salón para elegir la seda y otros detalles para los nidos. Sehun y Xiumin necesitaban probar ellos mismos la seda, así que se transformaron y me dejaron como único humano. Mi trabajo consistía en poner y quitar la seda alrededor de sus alas mientras probaban varias opciones.

Después de que cerré la puerta y volví al sofá, Xiumin resbaló y cayó de bruces sobre la mesa. Era tierno ver a un pajarito tumbado boca abajo en linea recta. Pero en cuanto me eché a reir, Sehun le dio una patada. Acto seguido, Sehun se tumbó de la misma manera, mirándome con ojos brillantes. Prácticamente podía oírle pensar

'¿No soy más tierno?'

Sí. Definitivamente sus cerebros se vuelven de pájaro.

Después de elegir cómodas sedas y más joyas para los nidos, Sehun y Xiumin volvieron a su forma humana y los tres comimos juntos. Los dos discutieron, aunque esta vez no sobre los nidos.

Terminamos la comida charlando entre risas, luego pedimos café y té. Salimos al jardín para disfrutar de las actividades vespertinas, disfrutamos del sol y comimos tranquilamente el postre. Sehun dijo que quería cantarle al bebé. Le cantó suavemente una canción de cuna en voz baja. Min gozó de un momento de paz mientras se tapaba los oídos.

El día transcurrió de esa forma, tan tranquila y brillante, que me dio un poco de miedo pensar en que algo pasara.

Al dia siguiente

Termine mi trabajo temprano, Sehun había salido a terminar de dar nombramientos, estaba feliz ya que por fin había terminado de arreglar los asuntos reino a imperio; eso significaba que en cuanto regresara podría pasar mas tiempo con el cómo antes, sin descuidar nuestras obligaciones, claro.

Mientras sonreía con aquel pensamiento decidí practicar un poco más mi magia, lo había estado haciendo los últimos meses en mis ratos libres, y podía asegurar que estaba mejorando bastante.

Intente hacer hielo de nuevo. Fue excepcionalmente fácil. Hice una bola de hielo del tamaño de un puño en mi palma. A continuación, hice un carámbano.

¡Increíble!

También hice una flor y un libro de hielo. Las formas eran irregulares, pero aun así fue un logro increíble para mi. Ahora sólo tenia que intentar derretir el hielo.

Miré fijamente los objetos que había creado. No funciono. Más carámbanos estallaron a mi alrededor. Jadeé y traté de imaginarme absorbiendo todo ese maná del hielo, como succionándolo de vuelta a mi cuerpo.

Justo en ese momento, un dolor agudo me atacó por dentro y me llevé la mano al corazón. Sentí como si agujas me pincharan en algún lugar profundo. No en mi corazón, sino en otra parte...

Me siento mareado.

...

Sehun había terminado por fin sus deberes fuera del palacio, después de tanto tiempo de ir y venir todo lo que quería era pasar tiempo con Luhan, Pero a su regreso, encontró el palacio sumido en el caos. Los sirvientes corrían en todas direcciones, presas del pánico. Algunos cortesanos lloraban en los pasillos. Min se quedó helado al verlos. Sehun se acercó rápidamente al guardia más cercano.

"¡Su Majestad!" Gritó el hombre.

"¿Qué está pasando?"

Preguntó Sehun,a lo que el caballero se arrodilló.

"El consorte parece estar dando a luz antes de tiempo."

Min estaba sólo un paso por detrás de Sehun. El grito del caballero le hizo sobresaltarse.

"¡Con razón se le notaba tanto! ¿Qué hacemos?"

Conmocionado, Sehun corrió hacia el dormitorio. La puerta de la habitación de luhan que normalmente estaba cerrada, estaba abierta de par en par. En el salón, Laura y Mastas se abrazaban llorando. Nian y otras mujeres de la nobleza caminaban nerviosas por el salón. El Vizconde Langdel y sus caballeros montaban guardia delante de la puerta del dormitorio. Sehun estaba a punto de entrar cuando el Vizconde le detuvo.

"Lo siento, Su Majestad. La partera del palacio me ordenó que no dejara entrar a nadie mientras trabaja."

Min se tapó la boca, tembloroso. Los labios de Sehun se estremecieron. Cuando sus manos empezaron a temblar, se apoyó en la puerta para mantener el equilibrio.

...

Sentía como si el dolor del mundo entero hubiera entrado en mi cuerpo. Estaba molesto con la tribu de los pájaros. ¿Por qué no pueden nacer como un huevo? Cuando quedé embarazado, tenia miedo de que el bebé saliera en forma de huevo. Ahora que sentía estas contracciones, un huevo habría sido cien veces mejor. Así era lo mucho que me dolía.

Justo cuando el bebé finalmente salió y pensé que el dolor desaparecería.

"¡Son gemelos,Su Majestad! ¡Está dando a luz gemelos!"

Gritó la partera del palacio.

Mi cuerpo volvió a caer en la agonía. Ni siquiera podía ver a mi primer bebé, estaba totalmente desorientado. El dolor me invadió de nuevo, consumiéndome.

Finalmente, después de que el médico del palacio cortara los cordones umbilicales, la partera trajo a los bebés uno por uno para que yo los viera.Los bebés que no paraban de llorar ya se habían calmado.

"Felicidades,Su Majestad."

Le brillaban los ojos.

"Tiene un príncipe y una princesa realmente adorables. ¿Le gustaría cargarlos?"

Cuando extendí las manos, la partera me entregó cuidadosamente el primer bebé, envuelto en un pañal blanco.

"Esta es la princesa."

Una princesa... Ni siquiera había pensado aún en un nombre. Estaba tan desconcertado que sólo ahora me di cuenta de que eran prematuros.

"¿Están bien los bebés?"

"Aunque son un poco pequeños, están sanos,Su Majestad. Ambos están bien."

El diminuto cuerpo presionado contra mi pecho, tenía la frente pequeña y redonda, los ojos bastante arrugados, la boca firmemente cerrada, las mejillas regordetas y la nariz pequeñita. Mi bebé, Y de Sehun. ¿Nuestro?

La habitación del bebé aún no estaba lista, la ropa no estaba preparada y aún no habíamos comprado los accesorios para bebés. Por no hablar de la niñera. Todavía no habíamos encontrado una.

Teníamos mucho que hacer, ¡pero el bebé ya estaba aquí!

El bebé se veia arrugado y nada bonito. Su nariz parecia perfecta, pero todo lo demás estaba tan arrugado ...

"El bebé está muy arrugado. ¿Le pasa algo?"

El médico y la partera se miraron y se rieron.

¿Les resultaba gracioso que mi bebé estuviera tan arrugado?

La partera me acercó al niño a continuación.

"Eche un vistazo al príncipe también,Su Majestad."

También parecía arrugado. En mis retratos de bebé, era tan adorable y bonito. ¿A quién se parecían, entonces? ¿A Sehun? ¿Sólo se volvió apuesto cuando creció?

En ese momento, la princesa abrió los ojos y me miró fijamente. Era casi como si me hubiera oído y quisiera protestar.

"Oh, tus ojos."

Murmuré con asombro. Esos ojos cafe claro, que brillaban entre sus pliegues, eran increíblemente encantadores. Además, eran míos.

Pero aún así, está arrugada.

De repente, el pequeño príncipe lanzó un extraño grito. Miré en su dirección y vi que sacó una mano del pañal, moviendo los dedos hacía mí.

"Parece que al príncipe le molesta que sólo tenga en brazos a la princesa."

Dijo la partera. Asi que le pasé la princesa a la partera y sostuve al príncipe. Sus ojos ya estaban abiertos. Volvi a conmoverme, pero por una razón diferente.

"Un mini Sehun."

Este bebé arrugado tenia los ojos de Sehun. Brillaban de un misterioso color púrpura, como los de Sehun,los ojos que yo amaba. Se me salieron las lágrimas al verlos. Verme a mí mismo y a Sehun en nuestros hijos fue como un milagro.

Poco después de eso el cansancio me venció, entregue al príncipe y en un parpadeo caí dormido

Cuando desperté de mi sueño, la habitación habia sido despejada y ventilada. De la chimenea emanaba calor. Sehun estaba sentado junto a la cama,sosteniendo a los dos bebés al mismo tiempo.

"Eso es peligroso."

Me preocupaba que se le cayera uno de ellos. Tomé a la princesa en mis brazos. Todavia sentia el cuerpo pesado, pero al menos podia moverme.

Sehun y se inclinó y me besó la frente.

"Vine antes, pero no me dejaron entrar mientras estabas dando a luz. Estaba muy asustado. Deberia haber estado aquí contigo. Siento haberte dejado solo..."

Sonreí.

"No te preocupes. Tampoco esperaba tener gemelos ni que nacieran tan pronto."

Mis padres tampoco. Probablemente no recibirían la noticia hasta dentro de unos días. No estaba segura de cómo reaccionarían. Probablemente se lamentarían de que ocurriera algo enorme cada vez que volvían al Imperio Oriental.

"Dios mio. ¿Cómo pueden existir unos bebés tan bonitos? ¿Lo ves, Mi lu? Vaya angelitos. Ahora tengo tres ángeles."

"Mis padres podrían escandalizarse al ver a los bebés."

"¿Ya que ahora hay tres ángeles?"

"No... porque están muy arrugados."

Pero mientras dormía, la piel de los bebés parecía haberse suavizado. No tenian el mismo aspecto que antes. Seguían arrugados, pero menos. Pasé el dedo suavemente por la frente de la princesa.

"Dios mío. No importa cómo los mire, todo lo que veo es un par de ángeles perfectos. ¿Cómo puedes decir que están arrugados,Lu?"

"¿No te parecen arrugados?"

Entrecerré los ojos mirando a los gemelos. Sehun acarició la frente del príncipe.

"Es la personificación de un ángel. Nunca he visto un bebé más hermoso en mi vida."

"Bueno,esta es la primera vez que veo a bebés recién nacidos..."

"Lo mismo para mi,por supuesto ."

Sehun y no dejaba de murmurar sobre lo hermosas que eran las cejas, los ojos, la nariz, las fosas nasales, los labios y las uñas de nuestros bebés. Al cabo de un rato, me susurró al oído,

"Lu,mantén lo siguiente en secreto del príncipe, los ojos de la princesa son un poco más encantadores. Creo que porque son como los tuyos."

Sonaba apenado por el príncipe. Entonces Sehun lo acarició, elogiándolo por ser el bebé más lindo de todo el mundo. Apoyó la nariz en el pañal y respiró hondo.

"Mi lu, esto es un milagro. Estaba seguro de que nadie tan encantador como tú podria existir en el mundo. Sin embargo, hoy triplicaste mis bendiciones."

Eso fue tan vergonzoso. Sintiéndome incómodo, mantuve la cara seria y miré a mi hija. ¿Me estaban engañando los ojos? A pesar de las arrugas, realmente parecía un ángel.

Por la mañana

"¡Su Majestad, todo el mundo desea desesperadamente ver a los bebés!"

"Nobles y ciudadanos por igual no paran de enviar regalos."

"Una vez que la noticia se extienda por todo el país, ¿se reunirá todo el mundo aquí para verlos?"

Mientras escuchaba la charla de mis damas de compañía, acaricié con cuidado el pecho del príncipe. Sorprendentemente, en el transcurso de un día,las arrugas de los bebés se habían atenuado. Tal como había dicho Sehun,ahora parecían ángeles. Aún les quedaban algunas arrugas, pero el médico del palacio dijo que desaparecerían en poco tiempo.

"También tenemos que pensar en nombres."

Suspiré, a lo que la Condesa Jubel asíntíó.

"Tendrá que discutirlo con Su Majestad."

"Supongo que sí. Y tendremos que encontrar pronto una niñera."

Me fijé en la princesa en brazos de la Condesa Jubel. Estaba recorriendo la habitación con la mirada sin siquiera llorar. Sabía que en realidad no estaba pensando en nada, pero verla fruncir el ceño y entrecerrar los ojos la hacía parecer muy lista.

Por otro lado,el príncipe parecía más lento. Aunque sólo era un recién nacido, ya lo notaba. Incluso Min había dicho con confianza,

"Su cara es la de Su Majestad Sehun, pero su personalidad es completamente diferente."

Estaba a punto de pedirle a la Condesa Jubel que cambiáramos de bebé, cuando oí que llamaron a la puerta.Era Sehun Las damas de compañía le saludaron. Él tomó a la princesa en brazos de la condesa, luego despidió a las damas.

"¿ Sehun?"

Me sorprendió que hiciera eso. A contínuacíón se acercó a mí.

"Mí Rey, yo cargaré al príncipe."

"¿Los cargarás a los dos tú solo?"

"Sí. Es hora de que se transformen en pájaros. He consultado los registros para asegurarme"

"¿Pero y si se te cae uno mientras intentas sostener los dos a la vez?"

"Está bien. Entonces sígueme con el príncipe."

Sehun fue al dormitorio principal y colocó el nido en el centro de la cama. Luego acostó a la princesa y le tocó la barriga con los dedos. Parecía que intentaba hacerle cosquillas. En un abrir y cerrar de ojos, se hizo lo bastante pequeña como para quedar enterrada en el pañal blanco.

" Sehun,la princesa..."

Antes de que pudiera terminar mi pregunta, un chirrido salió del interior del pañal. Poco después, un pajarito de plumas doradas asomó la cabeza. Sehun lo agarró enseguida para que no fuera engullido.

"Trae al principe aquí, Lu."

Le entregué al príncipe sin pensarlo, y también lo convirtió en pájaro. Acto seguido, Sehun se convirtió en Reina en un parpadeo.

Saltó a la cama y recogió a cada pajarito por el pescuezo. Los colocó en lados opuestos del nido. Los pajaritos chirriaron en señal de protesta.

Mis bebés...¿se convirtieron en pájaros?

Aunque sabía de antemano que esto ocurriria, no dejó de ser impactante. Ver a mis bebés transformarse era completamente distinto a ver a mi esposo hacer lo mismo. Nervioso, me acerqué a ellos. Los pajaritos batieron sus cortas alas y abrieron sus picos hacia mi.

Cuando intentaron abandonar el nido, Reina los empujó dentro nuevamente. Luego se agachó y envolvió sus alas alrededor de ambos, apretándolos contra su pecho.

¿Estarán bien asi?

...

No todo el mundo disfrutaba de la nueva dicha. Mientras Luhan observaba cómo su esposo cuidaba de sus bebés recién nacidos, su ex esposo,Chanyeol, quien se había mantenido ocupado dando paseos por el pueblo, y alrededores, para dar espacio a Luhan, recibía la noticia.

"El consorte Luhan ha dado a luz gemelos."

La expresión de Chanyeol se endureció. El Marqués Karl juntó las manos, lamentando tener que dar esta noticia. Pero había que decirlo.

"Su Majestad, sé que no estamos en buenos términos con el Imperio Occidental debido al fenómeno de la disminución del maná,pero ¿no sería mejor enviar un regalo de felicitaciones, como muestra de amistad?"

Chanyeol fue incapaz de darle una respuesta adecuada.

"Gemelos ... Luhan tuvo gemelos."

Su mirada se hundió sombríamente. Emociones oscuras, demasiado difíciles de expresar, surgieron en su interior. Demasiado pesadas para llamarlas celos, demasiado turbias para considerarlas anhelo y demasiado deprimentes para llamarlas rabia.

Dado que parecía demasiado ido para hablar de un regalo, el Marqués Karl se marchó. Ahora completamente solo, Chanyeol se tumbó sobre el respaldo de la silla como si fuera ropa sucía.

Luhan...

Le vinieron a la mente las comidas semanales que solían tener juntos. Extrañaba esos ojos mirándole. Incluso extrañaba su cara de enfado.

¿Cómo serán sus bebés recién nacidos? ¿Se parecerán a el? Si bien tenía curiosidad, al mismo tiempo no quería saberlo. Una parte de su corazón no quería verlos, pero otra, ansiaba conocerlos. Y verlo a el también...

"Marqués Karl."

Salió del salón y se apresuró hacia donde esperaba el Marqués.

"Sí,Su Majestad."

"Envia a alguien a que regrese al imperio, Reúne todo lo que una madre primeriza pueda desear y envía los regalos a la Duquesa Trobi. Pero no menciones que los regalos son de mi parte."

Dicho esto,Chanyeol volvió a la cama y enterró la cabeza entre sus rodillas.

...

¿Cómo deberían llamarse los bebés? Me sentía atascado.

"¿Puedes traerme todos los diccionarios que tenemos? No nada más los del Imperio Occidental. También tráeme los de los demás países. Por favor, incluye los diccionarios de lenguas antiguas."

Después de dar esa orden a uno de mis ayudantes, pensé en todos los nombres bonitos que pude.

¿Sería mejor un nombre con un buen significado? ¿O uno que se pueda pronunciar con facilidad? ¿Un nombre común, pero de la nobleza? ¿Deberían ser sus nombres similares entre sí o diferentes?

La decisión no era fácil.

"¿Qué dijo Su Majestad?"

Fruncí los labios ante la pregunta de la Condesa Jubel.

"Sugirió que cada uno eligiera a uno de los bebés y pensara en un nombre."

"¿Oh? ¿Entonces es eso lo que piensan hacer?"

"Le dije que estaba bien. Así es más sencillo."

Me encogí de hombros. Sehun había dicho que él mismo pondría el nombre a la princesa. Eso me dejaba a mí con el príncipe. Probablemente fue por los ojos de la princesa. Mirar sus ojos verdes le daba una alegría desbordante. Eso no quería decir que Sehun sólo amara a la princesa, él también amaba mucho al príncipe.

Al amanecer, me pidió que los vigilara un momento y se marchó a alguna parte. Volvió trayendo algo en un plato muy pequeño. Parecía como filete triturado. Sehun se convirtió en Reina, luego colocó a los pajaritos en el nido y llevó la extraña cosa a sus picos, para alimentarlos.

"¿Qué es eso?"

Pregunté con inquietud. Él dijo que era una especie de comida para bebés que comía su tribu.En cualquier caso, Sehun realmente amaba a sus hijos. Ese no era el problema. Nombres de bebé.

¿Cómo debería llamar al príncipe...?

Aunque estaba mejor,no me había recuperado lo suficiente como para moverme con libertad. En cuanto terminé de cenar, me acosté temprano y cubrí la parte inferior de mi cuerpo con una manta cálida. Mientras tanto,la Condesa Jubel y las damas de compañía lavaron a los bebés, los cambiaron y los pusieron en las cunas.

Las cunas estaban en mi habitación, ya que aún no habíamos encontrado una niñera. Como los bebés nacieron inesperadamente, tuvimos que conseguir rápidamente cunas que hicieran juego para colocarlas aquí una al lado de la otra. Sin embargo,a mis damas de compañia les preocupaba que me costara dormir así.

"Tenemos que encontrar pronto una niñera,o de lo contrario será demasiado duro para Su Majestad."

"Por suerte, los dos son unos angelitos."

En realidad,mis damas no debían preocuparse. Sehun también cuidaba bien de ellos. Cuando mis damas se marcharon, convertí a los bebés en pajaritos, como me habia enseñado Sehun. Luego los llevé al dormitorio principal. Sehun ya estaba allí como Reina, sentado en el nido. Cuando entré, batió las alas con impaciencia.

"Espera."

Tan pronto puse a los dos pajaritos cerca de su pecho, Sehun los envolvió con sus alas y arrulló feliz. Una vez dijo que no estaba interesado en los bebés...

¿A esto se le puede llamar no tener interés?

Los pajaritos chirriaban mientras jugaban bajo las alas de su padre. Sehun los alimentó hasta que tuvieron la barriga llena y se durmieron. Me preocupaba ponerlos en un nido, pero parecían encontrarlo muy acogedor.

Los observé respirar profundamente, con los ojos cerrados. Una vez más, me sorprendió que hubieran nacido de mi. Sehun tenía razón. Nuestros hijos eran como ángeles que descendieron al mundo.

Después de un rato, cuando era seguro de que los bebés no se despertarían, Sehun salió con cuidado del nido y se sacudió, convirtiéndose de nuevo en humano.

Desnudo, se arrastró hasta mí de rodillas y apretó sus labios contra los míos. Luego me picoteó el labio superior como un pájaro y se echó a reír.

"Cada vez que miro a la princesa, te imagino de pequeño."

"Mi hermano también dice que se parece a mi."

Pero su personalidad parecía diferente. De acuerdo con Koshar, yo no fruncía el ceño tanto.

" Sehun, ¿se te ocurrió un nombre para ella?"

"Sí."

Él continuó con una sonrisa radiante.

"¿Qué te parece 'Laurel'?"

"Como una Corona de Laurel..."

"¿Te gusta?"

A la princesa pareció gustarle,ya que sus ojos se abrieron de repente y nos miró fijamente.

"¿Qué hay de ti,lu? ¿Se te ha ocurrido un nombre?"

Todavía no. Había encontrado todo tipo de nombres con buenos significados en el diccionario. Pero cada vez que me decidía por un nombre, encontraba otro que me gustaba. Cuando lo cambiaba por ese, encontraba otro más. Así que no acababa de decidirme. Sin embargo, por extraño que parezca, en cuanto Sehun me dijo el nombre de la princesa, se me ocurrió inmediatamente un nombre para el príncipe.

"Kaiser."

Otro nombre con un significado similar, que combinan Perfectamente con mis gemelos.

"¡Los dos nombres son geniales!"

Al día siguiente, El principe Kyungsoo y el Gran duque Kai que partieron de rwitt tras escuchar la noticia, vinieron a visitar a los bebés. El príncipe dio sus felicitaciones. Cuando oyó sus nombres, aplaudió.

"¿Eso significa que ambos serán gobernantes? Además son tan bonitos. Bueno, todos los bebés son preciosos, pero estos dos son especialmente lindos. ¡La Princesa se parece a Su Majestad, y el Príncipe al Emperador!"

"¿En serio?"

"Si,y ambos son tan dóciles..."

Sólo cuando están en forma humana. Como pájaros, volvían a su estado salvaje y chirriaban hasta perder la voz. Pero no pasaba nada, ya que Sehun cuidaba de ellos.

"Menos mal que les regalamos dos buques." Dijo el principe kyungsoo

"Asi,cada uno podrá tener uno sin pelearse por ellos. ¿No es cierto?"

...

Por otro lado

Kai caminaba hacia la habitación de Luhan mientras luchaba por controlar su corazón acelerado. Con cada paso que daba,su corazón latía más deprisa. Por un lado, quería ver al bebé que se parecía a el. Pero al mismo tiempo, no. Al menos ahora que la poción había dejado de hacer efecto, no era tan dificil ocultar o reprimir sus sentimientos.

Incluso cuando lo veía con el Emperador Sehun,ya no le dolia el corazón. Lo que importaba era que Luhan fuera feliz. Y por supuesto, Kai notaba que cuando luhan estaba con el emperador, él llenaba por completo su corazón. Más de lo que el Emperador Sehun podía imaginar.

Kai reprimió su emoción y entró en la habitación de Luhan. Tal como habían dicho sus damas de compañia, el príncipe y la princesa eran tan encantadores como ángeles.

'¿A ellos no les gustará si me ofrezco a ser el padrino? '

Justo entonces...

'Oh dios mío, alli esta mi bombón otra vez. ¿Cómo serán nuestros hijos?, dios, quiero que el año pase pronto, y por fin poder casarme y ganar el corazón de esa dulzura'

Antes de que pudiera saludar a Luhan o a los bebés angelicales, apareció la voz tranquila y pensamientos promiscuos del principe kyungsoo. Nunca habia conocido a un miembro de la realeza de un país que tuviera pensamientos tan subidos de tono.

'Así que ese chico buenorro y yo algún dia estaremos como sus majestad sehun y Luhan, con dos bebes con su cara. Ojala pudiera llegar ya la noche de bodas. Habia oído que las personas en rwitt de allí no usan mucha ropa porque es un desierto. ¿Por qué el siempre esta tan arreglado y con tanta ropa?'

Kai lo examinó. Su cabeza todavía estaba llena de pensamientos lascivos. Era realmente desconcertante.

"¿Gran Duque Kai? ¿Por qué te quedas ahí parado?"

Luhan lo llamó y solo entonces salió de su trance, aquel pequeño chico podía desorientarlo fácilmente.

...

Hilos amarillos y rosados en la punta de unas largas agujas se balanceaban de un lado a otro. El Duque Suho y su madre tejían sin prisa.

"¿Cómo me quedó?"

Suho le mostró una bufanda torpemente tejida. Su madre rió animadamente. Todo parecía más pacífico que nunca.

Cuando se durmió, el Duque Suho la cubrió con una manta y salió. Sus emociones de satisfacción se tornaron repentinamente en frialdad. Intentaba controlar su enfado con su padre, sin dejar que se le notara.Pero hoy,ya no pudo reprimirlo más.

Su padre,el Gran Duque Claude, estaba fuera del edificio principal. Suho pasó a su lado bruscamente, sin saludarle.

"¿Te das cuenta de que casi nos metes en problemas por culpa de esa imprudente aventura amorosa tuya?"

Exclamó su padre, a lo que el Duque Suho se dio la vuelta inexpresivamente.

"¿Qué quieres decir con eso?"

Su padre solo chasqueo la lengua y se fue. Su vida había sido asi desde que Alessia llego a sus vidas, Su padre sentía que lo tenia todo controlado, asi que ya no se preocupaba por ser un buen padre.

Mientras observaba la ventana, pudo ver la pequeña casa de su madre, normalmente oculta a la vista desde el edificio principal, al girar la mirada. Dejó escapar un suspiro.

No sabía cuanto tiempo mas las cosas seguirían asi, pero a ese punto se sentía indiferente. Viajar por los reinos, hacer pagar a los infieles, y volver a alegrar a su madre con sus historias de triunfo, eso era todo lo que le daba sentido a su vida, y probablemente seria así hasta que esta terminara.

Cuando haces daño a otros la daga vuelve contra ti.

Una vieja sacerdotisita le dijo eso una vez, y Suho sabía que eso era cierto, Había hecho mucho daño a personas que dañaron a otros, y aquello termino convirtiéndolo en un diablo con el alma tan rota como ellos.

Aquello lo hizo pensar en Baekhyun y la vez en la que le dijo que si el diablo fuese una persona luciría como él.

Soltó una risa sin ganas

"Querido ángel, ambos estamos en el infierno"

Y con un suspiro volvió a recluirse en su habitación

Hasta una nueva aventura

...

"¿Condesa Jubel? ¿A qué edad empiezan a hablar los bebés?"

"No lo sé. Es diferente para cada bebé,Su Majestad."

"¿En serio?"

La Condesa soltó una risita,

"De lo que si estoy segura es de que ahora es demasiado pronto. Pasaría a la historia si hablaran ya."

Suspiré. Quería que hablaran rápido para conversar y cantar con ellos. Quería oírles llamarme 'papi' y a Sehun 'papá'. Había tantas cosas que quería.

"¿Condesa Jubel? ¿A qué edad empezarán a caminar?"

"No tengo la menor idea. Cada bebé es diferente, Su Majestad."

"¿De verdad?"

"Lo que es seguro es que no comenzarán a caminar pronto. Si lo hacen, también pasaría a la historia."

"Ya veo."

Verlos andar de un lado a otro será precioso. Caminarán agarrados de la mano, con conjuntos a juego, y-

"¡Ay! ¡Su Majestad!"

Mastas gritó.

"¡La princesa sigue golpeando al príncipe!"

En efecto,vi a la princesa empujar al príncipe con una sonrisa angelical. Laurie no dejaba de golpear a Kaiser. Entonces, tal vez no caminen de la mano.

Mastas los miró con preocupación.

"¿Sería mejor ponerlos en cunas separadas?"

Los mantenía durante el día en una sola cuna uno al lado del otro porque se veían muy lindos juntos. Pero sabía que separarlos seria más seguro. Levanté a Laurie y la acosté en la otra cuna, después tome a el príncipe, que parecía igualmente inquieto. Acaricié sus mejillas regordetas. Luego me acerqué a la princesa y le agarré la palma de la mano, que era del tamaño de mi dedo.

No supe cuanto tiempo estuve de esa forma, pero cuando ambos comenzaron a inquietarse supe que era la hora de comer. Los transformé en pajaritos y traje la comida que Sehun indico

Sin embargo...

"No, Laurie. Esta es la comida de tu hermano."

Suspiré. Luego gruñí al otro pajarito.

"Kaiser,eso no es comida, es el pie de Laurie."

Me senté en la cama al lado del nido.

"Laurie, no le pegues a tu hermano en la cabeza."

Entrecerrando los ojos,atrapé a uno que quería escapar.

"Kaiser, ¿no te dije que no puedes dejar el nido?"

A medida que avanzaba el día, disminuía mi paciencia.

"Laurie, no le arranques las plumas a tu hermano. ¡Kaiser,ese es tu pie! ¡No comida!"

Cuidarlos solo no era tarea fácil. Sobre todo porque Sehun siempre se ocupaba de ellos mientras estaban convertidos en pajaritos.

Además, la diferencia de tamaño entre los pajaritos y yo era inmensa. Tenía mucho miedo de hacerles daño accidentalmente. Eran tan pequeños. Ni siquiera me atrevía a levantarlos.

Mis bebés tenían un comportamiento apacible cuando eran humanos. ¿Por qué siempre armaban tanto alboroto cuando eran pájaros?

"screech, screech"

"Kaiser,ya te lo dije, eso no es comida."

Puse un dedo en su cara para apartar su pico de su pie. En ese momento,Laurie se acercó rápidamente y se aferró a mi dedo. Kaiser intentó picotearle la cabeza, pero Laurie se defendió inmediatamente y lo golpeó.

Kaiser cayó de bruces,llorando lastimeramente. Luego Laurie se le unió.

Exhausto, me tumbé en la cama, apoyando la parte superior de mi cuerpo en un brazo mientras los consolaba. Mi cabello se extendió como un abanico por la cama. A los pajaritos pareció gustarles. Salieron del nido a toda prisa, talvez preocupados de que intentara volver a meterlos dentro. Los dos se posaron en mi cabello y comenzaron a cepillarse las plumas.

Al verlos menearse, me eché a reír. Cuando acaricié suavemente con el dedo la barriguita prominente, ellos volvieron a convertirse en humanos, y me sonrieron.

Adorable.

Cuando Kaiser terminó, apoyando la cabeza contra la mía y se acostó de lado. Tal vez esa posición le pareció cómoda, porque Laurie también se acercó y apoyó la cabeza en la mía. Luego cerró los ojos.

"papí no podrá levantarse sí se quedan así."

Pero era imposible que los bebes entendieran mí protesta. Respiraban suavemente, ya sea dormidos o fingiendo estarlo. Los observé durante un Rato, hasta que finalmente yo también cerré los ojos.

....

Mientras Luhan dormía con sus pequeños plácidamente, Sehun entro a la habitación. La imagen era tan adorable que no pudo resistirse a unirse a ella. En silencio y con cuidado tomo el lugar junto a luhan, por debajo de su bebe, dando un besito al pequeño pie del príncipe mientras se abrazaba a Luhan. No supo cuánto tiempo estuvo asi pero en algún punto se quedó completamente dormido.

Había pasado ya una semana desde el nacimiento de los gemelos pero Chanyeol no había tenido el valor de verlos.

Esa tarde, completamente decidido camino a la habitación de Luhan, sorprendentemente no había ni una sola dama de compañía o guardia con quien anunciarse, asi que armándose de valor abrió la puerta por si mismo y se adentró, pero antes de si quiera poder llamar a Luhan la imagen de aquella familia lo dejo sin palabras.

Conocía a Luhan desde pequeños, creció con él, lo había visto dormir incontables veces, y aun así, en ninguno de esos momentos lo vio con tanta paz como en ese.

Luhan sonreía ligeramente con los ojos cerrados, su respiración era ligera y cualquiera que lo viera juraría era un ángel. A su lado, dos pequeñas copias de luhan dormían con la misma tranquilidad, aferrando sus pequeños dedos al cabello del rubio.

A lado de todo esto, abrazando a Luhan como un guardián, estaba sehun. Una parte de Chanyeol se sintió herida pensando que ese pudo ser él, pero la otra, llego finalmente a una comprensión: la única persona que podía hacer sentir a Luhan una paz tan grande como esa, era Sehun. Por mucho que lo odiara era asi.

Chanyeol salió con el corazón herido, y volvió a su habitación llamando prontamente al marques Karl.

"¿Cómo va la investigación del fenómeno del mana?"

"No hemos hallado nada, su majestad, o el emperador Sehun no esta relacionado, o borraron todas las pruebas. De cualquier forma, los magos no han podido hallar nada. Llevamos casi un mes aquí su majestad. Creo que ..."

Las palabras del marqués quedaron atoradas, aun si dijera que deberían regresa, ¿Chanyeol aceptaría?, aun cuando todo estaba perdido con Luhan el realmente parecía estar aferrado a quedarse.

Pero antes de que pudiera decir algo Chanyeol hablo

"Volvamos al imperio. Me he descuidado mucho aquí, tengo que volver a encargarme de todo"

El marques lo miro con sorpresa, pero no protesto, de hecho, antes de que este cambiara de opinión dio rápidamente la orden de preparar todo para su regreso.

...

Finalmente todo comenzaba a acomodarse, llego el dia en el que Chanyeol habia decidido irse, no sabia que es lo que lo habia motivado ,pero estaba feliz de ue asi fuera.

Acepte reunirme con el una ultima vez, pense que diria mas de su tonterias, pero esta vez fue mi turno de sorprenderse, pues el solo se quedo mirandome en silencio.

"Majestad"

Hable cuando comence a sentiem incomodo, y mi expresion se volvio mas rigida, como si supiera lo que significaba Chanyeol solto una risa sincera

"He oído que el Comandante de la 4ª División de los Caballeros Transnacionales seguirá cuidando de ti, y ahora de tus hijos.... Te sienta bien ser padre."

"Gracias, majestad"

Hablé en un tono duro. Chanyeol asintió con tristeza y susurró

"Tengo intención de volver, esta vez, no planeo aferrarme mas."

"Adiós."

"Adiós. Lu."

Me sonrió, y aunque yo intente mantener mi expresión fría para que entendiera que no planeaba volver con el jamás, este me dio una última mirada en la que parecía querer grabar ese momento.

¿realmente este era un adios?, ¿Dejaría de aferrarse a mi?

Lo vi darse la vuelta y antes de que saliera decidí hablar

"Chanyeol... espero que encuentres la felicidad. Yo lo he hecho. Olvídate de todo y se feliz"

Esas palabras fueron sinceras, a diferencia del día de su boda en el que aún me sentía molesto esta vez no tenía ningún pesar, solo esperaba que en algún momento el pudiera sentirse tan libre como yo.

Sin decir nada finalmente salíó.

...

Ya entrada la noche, el Marqués Karl subio junto con Chanyeol al carruaje, camino de vuelta al imperio, e informo sobre la carta que había recibido horas antes

"Su Alteza el Príncipe Sheir se entero del encierro de su padre, pidió renunciar a su derecho al trono. Oficialmente."

Dado que renunciar permanentemente al propio derecho de uno era una decisión absolutamente personal, Chanyeol no tenía nada que aceptar o hacer, no podía hacer otra cosa que concedérselo.

Chanyeol frunció el ceño.

"Eso es sorprendente. Puede que el Gran Duque Lilteang no quisiera ser emperador él mismo, pero estoy seguro de que quería que su hijo lo fuera algún día."

Chanyeol no sabía que Sheir había tomado la decisión aterrorizada tras conocer el castigo de su padre, pero no había nada que hacer, Había aceptado que Sehun mantuviera al Gran duque encerrado, y era tarde para echarse atrás.

"Ya veo ..."

Chanyeol reflexionó. ¿Era esa la única razón?

Mientras pensaba, el Marqués Karl dejó escapar un suspiro.

"Su Majestad, sin Sheir como su sucesor,no tendrá otra opción que volver a casarse."

Chanyeol cerró los ojos. Ya no tenía esperanzas de que Luhan volviera algún día. Aun así, no deseaba casarse con nadie más aparte de el.

"Su Majestad, aunque sólo sea por el bien de nuestro pueblo y el bienestar de nuestro país, debería encontrar un nuevo consorte."

"No lo sé. Si lo hiciera, esta vez seria un matrimonio de conveniencia. ¿Cómo funcionaria? ¿Podría tener un heredero con alguien a quien no amo?"

"Su Majestad..."

El Marqués Karl se aclaró la garganta. Esta vez, sonó vacilante. Chanyeol suspiro y miro por la ventana como la frontera del imperio de luhan se veía cada vez mas lejana.

Luhan...Luhan tuvo dos hijos. Por tradición el príncipe Kaiser seria el sucesor de Sehun. Pero Laurie....la niña que era idéntica a Luhan

"Preferiría nombrar sucesor a alguien que amara el imperio tanto como Luhan y yo"

"Su majestad, ¿en quién está pensando?"

Chanyeol sonrió, No tenia dudas de que Luhan criaría sus hijos maravillosamente, y esa pequeña sería igual que Luhan, con un amor profundo por el imperio oriental a pesar de vivir en el occidental. No podía volver a tener Luhan, aun si su corazón le pertenecía, pero podía devolverle un poco de lo que le quito.

Si anunciara ahora que quería hacer a la hija del emperador vecino y su exesposo, emperatriz regente, todo seria un caos, pero no había necesidad de darse prisa, podrían hacerlo de a poco, y unificar lo que una vez rompió. Con la influencia de la familia trovy no dudaba que fuera posible.

Mientras chanyeol se mantenía en silencio el marques seguía mirándolo con extrañeza.

...

La noche era preciosa, todo cayo en su lugar finalmente, y no parecía haber rastros oscuros de los tiempos pasados. Caminaba con sehun, quien prometió mostrarme un lugar hermoso. Me preocupaba dejar a los bebes solos, pero la condesa jubel, rose y mastas insistieron en venir a esta cita con sehun, prometiendo que cuidarían bien de ellos hasta nuestro regreso.

"oye, ¿hasta dónde vamos?"

Habíamos caminado por la montaña alrededor de veinte minutos, y comenzaba a desesperarme mientras abría con mis manos las ramas que había en el camino, pero justo cundo lo hice y antes de que sehun pudiera responder termine maravillado.

Detrás de aquella cortina de ramas se escondía un pequeño valle. Hermosos arboles de flores rojas adoraban el camino hasta un pequeño lago. Apenas puse un pie sobre el pasto y luciérnagas comenzaron a levantarse y salir de todos lados-

"Vaya, es tan hermoso"

La luna brillaba y se refleja en al agua, el cielo era despejado, y las luciérnagas brillando parecían estrellas bajando del cielo solo para nosotros dos.

"¿Cómo sabias de este lugar?"

Sehun se acercó despacio a mi pero en lugar de responder tomo una de las flores y me sonrió.

"¿sabes cual es esta flor?"

"no, pero puedo ver que es muy bonita"

Me puse de cuclillas frente al lago y sumergí mis dedos comenzando a jugar con el agua

"es una flor campanilla"

¿Qué hay con esa mirada?

Sehun se acercó a mi de pronto y despacio, su mirada estaba fija en mi rostro, no pude evitar sonrojarme mientras me ponía nervioso, cerré los ojos y espere su beso, pero en lugar de eso pude escuchar su risa.

"mi rey, solo quería quitarte esto, ¿en qué cosas estas pensando?"

Hablo mostrándome la hoja que quito de mi pelo. Aquello me hizo sentir tana avergonzado que rápidamente quise ponerme de pie pero termine tropezando con mi capa y cayendo hacia atrás.

"Lu, ¿estas bien?, ¿te duele algo?"

Sehun se acercó a tomar mi mano para ayudarme a ponerme de pie, pero antes de poder hacerlo, termino resbalando también, cayendo a lado mío, el agua del lago que mojaba el pasto hacía que fuera resbaladizo, pero más que molestarme termine riendo, mi risa hizo que sehun también soltara una carcajada.

Al final ambos nos quedamos recostados en aquel lugar.

"La flor campanilla significa un amor con esperanza, la esperanza de que se realizara, mas allá del tie po que le tarde en lograrse. Mi amor por ti es de esa forma. Desde que me enamore de ti solo vivía por la esperanza de que tu también me amaras algún dia"

"¿Amor por mi?"

"¿No lo sabes, lu?, yo me enamore de ti mucho antes de casarnos, y de que aceptaras mi propuesta"

"¿lo hiciste?, nunca había pensado en ello."

Sehun soltó una risa y miro hacia enfrente como si aquel momento se repitiera frente a él

Sehun acababa de llegar al imperio, y antes de que su visita como invitado real fuera anunciada, decidió dar un vuelo por el palacio. Había muchos lugares que como invitado no podría recorrer pero que como pájaro podía.

Antes de emprender vuelo hizo que xiumin atara a su pierna una pequeña nota, fingiendo ser un pájaro mensajero pasaría desapercibido de los guardias y gente del palacio.

Estaba posado sobre una enorme flor en los jardines del palacio del oeste, cuando vio un hermoso chico de cabellos rubios y ojos de ciervo acercarse a él con lentitud, sehun pudo jurar que había muerto y un ángel venía a recogerlo.

"Qué pájaro tan extraño."

Lo escucho decir, con una voz suave pero gloriosa.

Sehun supo quien era cuando las damas de compañía llamaron "su majestad", era el consorte Luhan, había escuchado muchos rumores de su belleza y frialdad, la gente solía llamarlo consorte de hielo, y aunque sehun nunca estuvo realmente interesado en las historias que la gente contaba sobre el, ahora entendía porque despertaba el interés de tanta gente.

Cuando extendió su mano, sehun saltó rápidamente, Sacudió sus alas y acarició su pico contra el dorso de su mano, necesitaba confirmar que aquel chico era real.

Mientras Luhan acariciaba su pequeña cabeza, quito la nota escrita a mano con letra pequeña.

- Soy un invitado extranjero que llegará el día de Año Nuevo. Escribí esto después de beber.

La carcajada que luhan soltó fue la melodía mas hermosa que sehun pudo haber escuchado, aquel chico que parecía frio e indiferente, aquel chico del que todos hablaba, emitía una ternura que no era fácil ver a primera vista.

"Bonito."

"Qué pájaro tan apuesto. ¿Cómo se llama?"

"Sé que es un pájaro difícil de domesticar... ¿no se usa para cazar?"

Cuando mostro la carta a las damas de compañía y estas lo animaron a contestar.

- Un pájaro borracho regresa volando. Si encuentra el camino correcto, estará mejor que su amo.

Sehun lo miro escribir, Guardar la pluma y atar la nota a su pierna. Sehun no pudo evitar acariciar su pico contra la mano de luhan otra vez antes de irse volando.

Aquel primer encuentro despertó en sehun una ola de sentimientos: ternura, curiosidad, emoción, fascinación, admiración. Eran tantas las palabras que no podía acabar de describirlo, lo que si sabía es que aquello había sido suficiente para iniciar una pequeña llama que al pasar los días, los intercambios de notas, y las charlas honestas, termino por causar en sehun un incendio.

Cuando sehun me termino de narrar su historia una sonrisa se dibujó en mis labios, Había olvidado aquel primer encuentro con reina, que era también el primero con sehun. Ael encuentro en el que se enamoró de mi.

Paseo sus dedos por mis mejillas, y yo lleve los míos a sus cabellos, enredando suavemente la punta en sus mechones. La mirada entre nosotros dijo todo lo que las palabras no podían.

¿en que momento yo me había enamorado de sehun?

A diferencia de el yo no tenía una respuesta, pues solo me di cuenta de mi amor cuando el príncipe Kyungsoo apareció. Lo que, si sabía es que cada carta, cada palabra, y cada detalle que sehun tuvo conmigo, llenaron mi corazón vacío hasta que se desbordo de amor por él.

Le sonreí con dulzura mientras lo miraba aproximarse y cuando nuestros labios se fundieron, nuestros corazones lo hicieron también.