1/Mayo Hora: 11:11 PM

Llegamos a la casa del imbécil de Neithan.

Zayn bajo del auto, junto con el ya mencionado idiota.

Yo me quedé dentro mirando cómo se despedían, y cuando Zayn regresaba, Neithan lo detuvo y le susurró algo. Para después volver al carro.

--Si siguen haciendo sus joterias, los empezaré a shippear y no va a ser bonito.-- Le dije cuando entro.

--Lo superaremos, no es la primera vez que lo emparejas con alguien que no es Lucy, ¿cierto?--Me interrogó.

--Emparejo a Neithan con otros de los crushes de Lucy, lo siento pero sigo sin aceptar esta relación.

--No quiero solapar a Neithan, pero créeme jamás lo había visto tan decidido por conquistar a una chica.--Explico.

No dije nada, no iba a cambiar mi postura, le duela a quien le duela.

--Pues...--Empecé a hablar.--No recuerdo la última vez en la que Lucy se veía tan...

--¿Feliz?--Me interrumpió, negué con la cabeza.--¿Enamorada?--Volví a negar. Y suspiro.

--No lo sé, se ve distinta, creo que es por el hecho del que ya no somos pinches pubertas las cuales sólo tenían que preocuparse del valor del proyecto final.--Empecé a reír un poco.

Veía como los postes de luz iluminaba un poco el camino.

--Vivíamos en una época en la que éramos felices, y no lo sabíamos.--Mi voz comenzó a cortarse.

--Supongo que tienes un poco de razón.--Hablo Zayn.--Éramos pubertos que no sabíamos lo que estaba bien, que sólo actuábamos por actuar.

Escuchaba atentamente cada palabra que tenía que decir.

--Por eso Neithan esta tan empeñado en ganarse la confianza de Lucy, hace años era un imbécil que no sabía el valor que tenía Lucy para él y lo entendió cuando fue muy tarde.

Supongo que eso tiene sentido.

--Préstame tu celular.--Dije secamente.

--¿Para qué?—Me respondió sacando de su bolsa el mencionado.

--Préstamelo.--Insistí.

Con un movimiento rápido me dio su celular. Su fondo de pantalla tenía un lindo perrito de raza Golden Retriever.

--Aw que bonito.--Dije al aire. Para después mostrarle la pantalla con el teclado para poner la contraseña.

Miro la pantalla, y me sonrió.

--Es de mis padres, se llama Golddy.--Comento.

Me enternecí más. -- ¡Qué bonito! No lo conozco pero ya lo amo, en fin dame tu contraseña.

--¿Que, para qué?--Me interrogo.

--Dame la contraseña--Insistí, el suspiro y negó con la cabeza.

--Contraseña.

--¿Khé?

--La contraseña es "Contraseña"

--¡Qué mamada, es la mejor contraseña del mundo!--Reí.

El sólo negó con la cabeza para después yo ingresar la tan aclamada contraseña.

Y empecé a buscar entre los contactos a una persona en específico.

--¿A quién tienes registrado como "Amor de mi vida"?--Dije divertida.

--¡Ash! ¿Eres Lizbeth Rodríguez para andar revisando mi celular?--Me reclamó.

--Pa'que me lo prestas.--Le dije.--Ya en serio, ¿Quién es?

No me respondió al momento.

--Eres tú.

Ahora yo no respondí. De un momento a otro las cosas se pusieron muy incómodas.

--Yo te tengo registrado como "El pendejo que me gusta"--Respondí.
Mientras seguía buscando el contacto.

Y lo encontré "El Neithan". Ñe, yo lo registraría como "El rey pendejo".

Marque.

--¿Porque me tienes registrado así?--Me preguntó.

--Porque puedo, quiero, y es la verdad.-- Después del tercer timbre Neithan contestó.

--¿Qué paso bro? ¿Qué te respondió la amargada esa?-- Habló.

--La amargada esa te iba dar chance de que estuvieras con Lucy. Pero como le recordaste que es una amargada, seguirá siendo la amagada.-- Respondí.

--Verga...-- Se escuchó del otro lado. Solté una risa. --No te creas Dany, eres mi cuñada y... es una forma... em... lo que... Agh carajo.

--Déjate de joterias wey. Escúchame...--Tome aire, no puedo creer que haga esto.--Te doy 1 semana, para que recuperes la confianza de Lucy y puedan llegar a ser algo. No voy a interferir, no voy a chantajear, te dejo el camino libre.-- Solté. --Pero hay de ti si le haces algo porque ahora si te castro.

--¿Qué te hizo cambiar de repente?-- Preguntó.

-- No voy a dar detalles.-- Dije mirando de reojo a Zayn.

--Dany...--Habló Neithan.-- Gracias, por el chance.

--Si, si, sólo no hagas ninguna pendejada.-- Respondí. Para después colgar.

Le entregue el celular a Zayn.

Sentía como me miraba con una sonrisa.

--Vete a la mierda.--Le respondí.

Y seguimos con nuestro camino.