No logre impedir que Elia se fuera, después de todo es lo mejor que podía  pasarle en ese momento, era lo mejor para él, parece que su madre había conseguido un lugar lejos donde su padre no podría hacerle más daño, estaba feliz por él aunque de cierto modo le tenía envidia

Yo no tenía donde ir, el único que podía apoyarme era mi padre y si viera en la persona que me estaba convirtiendo seguro se decepcionaría de mí, de la clase de persona que soy porque mi madre ni siquiera quería verme, no pertenecía a esa casa, solo volvía ahí porque no tenia otro lugar donde ir

Por eso durante unos años más me mantuve con ese infierno que mi supuesta familia había hecho para mí pero no es fácil sobrevivir en un lugar como ese, el que te miraran en tu casa como si fueras una basura ensuciando su ambiente dolía mucho, que tu propia madre no te quisiera ver por miedo a ver al único hombre que metería a las manos al fuego por el

Es extraño que el hombre borracho y violento era el único que me había estado apoyando en ese tiempo aunque él no lo sabía, nunca llegue a contarle lo que pasaba en la casa al menos no todavía, sino tiempo después donde me permití desahogarme pero aún falta para que lleguemos a eso

Lo de Elia aunque no le había tomado tanta importancia en mi vida luego me di cuenta de lo importante que era, nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde y al parecer nunca valore a mi amigo hasta que se fue de mi lado, tenía conocidos pero amigo solo uno

Y la verdad es que Elia era el único que sabía la historia real de mi vida, era el único con el que hablaba sobre mi situación pero luego no quedo nadie, bueno solo una persona en realidad, esa mujer que fue una buena enseñanza

Carolina y yo comenzamos a vernos en el bar para beber, charlar y bailar aunque nuestro bailes nos llevaba a algo más, no eran besos inocentes aprendí hacer con ella lo que era el sexo con ropa, no se mantiene ningún contacto piel a piel tampoco ahí penetración solo toques a través de la tela

Pensé que se sentía bien pero definitivamente era porque aún no probaba lo otro que en realidad no sabía porque no habías ido a ese nivel, no es que mantuviéramos algún tipo de relación, fue una noche en el que había discutido con mama y su esposo

El dinero que había ganado vendiendo mi celular y ropa que por cierto nadie sabía que había hecho, me sobro algo de dinero y Adam había querido un blog de dibujo, tenía talento para los dibujos, entonces le compre un Kit completo para que hiciera lo que quería

Arturo no le gustaba que hiciera esas tonterías como él lo llamaba por eso no le había comprado nada y mi madre no iba en contra de las decisiones de su esposo, descubrí tiempo después que mi madre pensaba que como había cometido un error criándome a mi pensaba que si se metía más de lo debió en la crianza de Adam terminaría como yo porque Santiago era un excelente niño a pesar de todo aunque ella no sabía los detalles de la vida de mi hermanastro en esa época, yo lo descubrí después por el mismo Santiago

En fin le compre ese regalo a mi hermano ya que pronto seria nuestro cumpleaños para el seria 6 años y yo los 16, se lo di pero días después encontré ese mismo regalo en la basura, fui a ver a mi hermanito pero la respuesta que me dio me molesto mucho

***

—Adam ¿Estas aquí? —veo a mi hermano que estaba sentado en medio de su habitación, estaba jugando con unos cubos de lego

—Marcos—corre hacia a mi abrazándome, ya me llegaba por la cintura, estaba creciendo rápido— ¿Viniste a jugar conmigo?

—Sabes que no puedo—me alejo de él y me inclino para verlo—No le digas a mama que me viste ¿De acuerdo?

—Está bien pero ¿Por qué ya no quieres jugar conmigo? ¿Es porque me porto mal? Porque le hecho caso a papa y mama, hasta estoy jugando con esos estúpidos legos que odio—veo las lágrimas se acumulan en sus ojos

—No digas estúpido, es una mala palabra Adam y no llores

—No estoy llorando—se limpia las lágrimas—papa me dice que llorar es para bebes y yo no lloro—sonrió— ¿Es porque dije estúpido?

—Adam solo...tengo mucho trabajo en la escuela por eso no puedo jugar contigo

—Mentira es porque papa no te quiere ¿Verdad? Siempre me dice que no juegue contigo pero no quiero hacerle caso quiero jugar contigo

—Tienes que obedecer a tu padre Adam, sabe lo que es lo mejor para ti—se cruza de brazos haciendo un puchero sonrió al ver lo tierno que se ve enfadado—Bien en la noche vendré a jugar contigo, lo prometo

—No, nunca cumples tus promesas, así que no te creo

—Esta vez es verdad—lo tomo de los hombros—ahora quería preguntarte algo

—No quiero responder nada—se aleja de mí y se sienta en la cama, cruzándose de brazos, era muy orgulloso a su edad—Tu no quieres jugar conmigo

—Adam no te molestes—me acerco a el—Pero sabes que tu papa no le gusta que juegue contigo y tampoco a mama ¿Quieres que los desobedezcas?

—Siempre lo haces ¿Por qué no sigues haciéndolo? —Rio al escucharlo, su hermano tenía unas cosas—Soy tu hermano se supone que debes jugar conmigo ¿No me quieres? ¿Es por eso?

—Está bien, jugare contigo solo si respondes mi pregunta—me ve—Si no lo hago puedes gritarme todo lo que quieras y te daré mi postres durante una semana—veo que ve sus manos con duda

—Está bien—me ve— ¿Qué quieres saber?

— ¿Recuerdas el Kit de dibujo que te regale? —Asiente—esta mañana estaba en la basura ¿Puedo saber porque está ahí? —noto que observa sus manos nuevamente moviéndolas inquieto

—No lo sé—hago que me vea—Bien...fue papa le dije que me lo regalaste y dijo que es una pérdida de tiempo, me prohibió aceptar cosas que venga ti y aunque le dije que no me quito lo que me diste, lo boto porque le robaste dinero a él pero no le creo nada, no sería capaz de hacerlo—veo como sus lágrimas comienzan a salir—de verdad quería ese juego de dibujo, lo siento Marcos, no sé porque papa te odia—lo abrazo, no podía perder la compostura frente a Adam aunque en ese momento la sangre me estuviera ardiendo

—Adam no es tu culpa— ¿Por qué tenía que comportarse así? ¿Tanto me despreciaba? No tenía el derecho a hablarle así a Adam

—Si lo es, mi papa te odia porque cree que todas esas bromas la hiciste tú y porque juego mucho que por tu culpa no estudio, dice que eres una mala persona

—Hablare con él y podremos jugar ahora no llores—le limpio las lágrimas y veo que asiente—no es tu culpa y esconde esto—le muestro el Kit que había traído conmigo en una bolsa—Solo que tu papa no lo vea—sonrió al ver su mirada que se ilumina

—Lo recuperaste, gracias, no dejare que papa lo tome, lo prometo

—Y tú si debes cumplir tus promesas ¿de acuerdo? —Asiente frenéticamente—iré a conversar con tu papa ¿Por qué no jugas con eso? —Asiento beso su frente para levantarme—Vendré luego a jugar, lo prometo—asiente y salgo de la habitación me quedo en medio del pasillo a ver a Aturo que subía por las escaleras y me ve

— ¿Estabas en el cuarto de Adam? —frunzo el ceño al verlo, mal momento para encontrarlo, no cuando sentía mis manos picar por golpear ese rostro que tenia

—Si ¿Algún problema con eso? —Veo que sonríe—Es mi hermano después de todo, tengo derecho a verlo

— ¿Sabes que desprecio? Que lamentablemente Adam sea tu medio hermano pero eso no significa que se vaya convertir en la basura que tú eres porque tu madre puede tenerte aprecio pero yo no ¿Por qué no me hace un favor? O al menos a tu madre, todo sería perfecto si desaparecieras

— ¿Favor? —Rio ante la gracia— ¿Quién me ha hecho uno a mí en esta familia? Créeme que ni mi madre está en esa estúpida lista ¿Qué te hace creer que me importa lo que tú pienses?

—Debería porque después de todo soy yo el que te mantiene y aun si me robaste

—Sabes que es mentira ¿Por qué diablos tenías que decirle eso a Adam? Solo le llenas la cabeza de puras mentiras ¿Tan celoso esta de que me quiera más a mí que a ti? Es bueno que sepa diferenciar la basura

—No te permito que me hables así—se acerca y lo veo desafiante—ya no eres un niño y me importa un bledo lo que piense tu madre pero quizás sea mejor enviarte a la cárcel por haberme robado

—No soy la clase de basura que dices y lo sabes

—Tengo muy claro que lo eres ¿Crees que no me doy cuenta? Salidas muy temprano y llegadas muy tarde, quizás tu madre sea inocente pero yo no, terminaras como tu padre un alcohólico que no tiene futuro, te quiero lejos de Adam

—Te tengo noticias, no tengo ni las ganas y mucho menos la intenciones de alejarme de mi hermano porque necesita alguien que no se deje cegar por la envidia y la avaricia que lo guie

—Se perfectamente criar a mi hijo y no te estoy pidiendo un favor es una orden

—Más noticias, no acepto órdenes de escorias como usted

—Mira niño—siento que me toma del cuello—Te voy a dejar muy claro que en esta familia no tienes ni voz ni voto Adam tarde o temprano se va olvidar de ti después de todos la basura siempre será basura, tú lo sabes y hasta tu madre lo sabe por eso está esperando a que le muestres la perfecta version que eres de tu padre para así definitivamente deshacerte de ti, tu propia madre te desprecia ¿Qué se siente?

—Eso no es cierto—aprieto los puños porque aunque lo negara mi madre no podía pensar de esa manera de mí

— ¿Quién duerme con ella? Siempre me cuenta del miedo que te tiene, cada días es una tortura por eso no te ha dicho nada cuando sales prefiere que un día no vuelvas a entrar por esa puerta, solo quiere deshacerte de ti

—Cállate—lo empujo lejos de mí—No sabes lo que piensa

—Lo sé muy bien, se todo lo que sufrió por el desgraciado de tu padre y sabe que tu terminarás igual, peleado de aquí allá todos los días y no quiere que te acerques a Adam porque teme a que lo lleves a un camino que no es ¿Por qué piensas que no me ha dicho nada en cuanto en su crianza? ¿A qué crees que se debe nuestras discusiones? Necesita que este en la vida de Adam para que no termine como un hombre sin futuro como tu

—Claro, terminaron como un hombre violeto como usted

—Nunca lo he sido frente a él y el único que hace perder mis estribos eres tu porque no haces otra cosa que provocarle dolores de cabeza a tu madre, arruinando el sueño que tiene de familia perfecta que quiere pero esta nueva vida que se quiso permitir no ha sido más que un infierno por tu culpa, está claro que en esa familia tu no estas permitido nunca lo has estado

—Mi madre no pensaría de esa manera, es mentira—me dolía porque en verdad estaba creyendo lo que decía ese hombre

— ¿Por qué no se lo preguntas? Ella necesita un futuro donde tú no estés porque tú no tienes uno ¿Ese es el ejemplo que le quieres dar a Adam? Vivir día y noche bebiendo y pelado, fumando ¿Por qué no nos dejas en paz de una vez?

—Eso es lo que quieres, hacerme desaparecer, mi madre no piensa eso

—Piensa que eres un hombre violento sin remedio y ha dejado de enfrentarte porque teme que le hagas algo a ella y a Adam por eso me lo dejo a mi

—Mentira—veo detrás de Arturo a mi madre que nos observaba con lágrimas en los ojos—Mama ¿Es mentira? ¿De verdad me temes? —veo que baja la vista

—Marcos solo mantente alejado de Adam, a él no puedes hacerle esto—niego, no podía creer que mi madre pensaba de esa manera

— ¿Y a mí puedes hacérmelo? ¿Supiste todo este tiempo como ese hombre me trata? —Me acerco pero él se interpone—Quítate, este asuntos es con ella

— ¿Para qué? ¿Despiertes sus fantasmas del pasado? —asiento como se acerca a mi oído—Espera solo con tus presencia lo haces, le repugna tu presencia

—Mentira—lo empujo y escucho un grito de parte de mi madre

—No te voy a permitir que le hagas daño, ni ella y mucho menos a Adam

—Papa—me detengo en seco y veo al niño que está detrás de mí—deja a Marcos en paz, él no ha hecho nada malo, es mi culpa yo lo hice—veo sus lágrimas y como corre a abrazarme, mi mirada se dirige a mi madre que niega

—Adam cariño ven aquí por favor—siento a mi hermano negar

—No, quiero a Marcos conmigo, yo hice lo que sea que lo culpen

— ¿Vez lo que provocas? —siento mis ojo arder al escucharlo, tenía razón, solo era una basura que no servía de nada

—Bien, espero que estén feliz sobre todo tu mama—alejo a Adam para salir corriendo escaleras abajo y salir de la casa donde no tenía pensado volver

Hay muchas cosas que le temo, terminar solo no es uno de ellos porque estoy acostumbrado a estarlo, la oscuridad es pan comido para mí, en mi vida no había momentos de claridad y justo en ese momento fue cuando vi mucho oscuridad

Esa ocasión toque, fondo, me perdí completamente, no quería saber nada de lo que pasaba a mí al redor, no me importo en ese momento mi madre mucho menos Adam, estaba concentrado en olvidar todo, mis problemas en el infierno que vivía en esa casa, simplemente no quería pensar

Esa noche me fui a ver con Carolina y me perdí en ella, completamente ¿Qué si me acuerdo exactamente que paso esa noche? No solo recuerdo nuestros besos fogosos y no sé cómo diablos terminamos en el baño de ese bar, romatiquisimo mi primera vez con una mujer, fue tanto que no me acuerdo con claridad que paso esa noche

Pero me desahogue con ella, hable y descargue todo mi ira, recuerdo haber golpeado a un hombre solo por interrumpir nuestras conversación, luego de esa noche todo parece repetirse de la misma manera así  paso al redor de un mes donde no tenía sentido de la orientación

Termine trabajando para ella durante ese tiempo para ayudar mantener mis gastos, no estaba en negocios muy legales que digamos pero en ese punto de mi vida me importaba una mierda si terminaba con un tiro en mi pecho, pensaba ¿Qué más da? Era lo mejor que le podía hacer a mi madre, desaparecer porque era tan cobarde que ni yo mismo podía hacerlo

Un mes me tomo volver a esa casa ¿Por qué? Carolina se había metido en problemas y no quería que estuviera en medio de eso por eso me dijo que lo mejor era volver pero no tenía pensado quedarme en ese lugar, ni siquiera ella me iba a convencer de volver a vivir ahí

Mi madre no se había molestado en buscarme en todo ese tiempo, seguro que al volver me encontraría con la familia perfecta que ella había soñado todo esos años, no volvería a arruinarle lo que tanto soñaba, la basura solo servía para apestar el lugar

Si en esa época mi autoestima estaba por los suelos, muy diferente a la persona que me convertí, el Marcos de 16 años no se parece nada al abogado que soy pero en esa época solo pensaba en cosas como ¿Por qué no desaparecía? Si las cosas fueran así de sencillas quizás mi madre no tuviera que sufrir tanto

Por eso en esa ocasión que fui a esa casa solo por buscar algo de ropa que necesitaba para poder vender, era unas prendas de mi padre que había tenido guardada, solo era para lograr quedarme en algún lugar, tenía algo de dinero por parte de mis días trabajando con Carolina pero no era mucho, más de la mitad lo había gastado en alcohol ahí que no contaba con mucho mientras conseguía algo para trabajar

Sabía que no lo iba a tener fácil porque ¿Quién contrataría a un adolecente de 16 años? Sin contar mis problemas con el alcohol y mi mal temperamento pero ni porque tuviera que vivir en la calle volver a ver a ese hombre, no quería soportar otra vez esa humillación, esa desesperación y más esa desolación

Recuerdo que esa noche me atreví a volver, solo por lo que necesitaba, el plan era entrar y salir sin que me vieran pero las cosas no salieron como lo planea porque al entrar a la casa ya pasada la media noche me conseguí con una enorme sorpresa

***

—Bien solo entro y salgo—con la llave que llevaba abro la puerta pero cuando entro y la cierro las luces se inciden dejándome congelado en mi lugar, mierda me había descubierto—Juro que solo vine por mis cosas—levanto mis manos y me volteo esperando encontrarme con Arturo o algún vigilante pero me sorprendo al ver a mi madre

—Marcos—aun sorprendido veo como se acerca a mí para envolverme en sus brazos—Dios estaba tan preocupada, me iba a volver loca si no aparecías—me toma del rostro—Mírate, estas tan flaco ¿Haz comido bien? Ven te preparare algo o seguro quieres ducharte y cambiarte esa ropa que llevas esta toda sucia—bien no era que me vestía bien, no tenía dinero

—Mama—me alejo recordando lo que había pasado la última vez que la vi—Solo vine por unas cosas y me iré, no te preocupes—me aparto de ella para correr escaleras arriba y entrar a mi habitación, todo estaba como lo había dejado, busco bajo la cama dando con el bolso donde estaba la ropa de papa

—Marcos cariño ¿Qué crees que haces? ¿Piensas irte?

—Si, después de todo no me quieres ver así que te ahorro un mal trago y yo también—escucho que cierra la puerta, la observo tenia lágrimas en los ojos—Mama ¿En qué estás pensando?

—No permitiré que te vayas de esta casa aun eres mi hijo

—Deje de serlo cuando te casaste con ese hombre—reviso el bolso ignorándola para ver si todo estaba ahí

— ¿Dónde está el teléfono que te di? Te estuve llamando

—Lo vendí hace meses mama, lo supieras si me prestaras atención

— ¿Lo vendiste? ¿Qué hay de tu padre? ¿Por qué lo hiciste?

—Porque necesitaba el dinero—cierro el bolso y la veo seguro se imaginaba muchas cosas—Y mi padre no estaría orgulloso de verme en este momento y lo que menos necesito en esta vida es más desprecio de parte de mis padres

—Marcos por Dios no quería creerlo pero ¿De verdad estas drogándote?

— ¿Quieres sinceridad? —Veo que asiente— ¿Me creerías? —asiente, me acerco a ella para verla a los ojos—No lo he hecho, nada que tuviera que ver vicios de ese tipo  y si pusieras algo de esfuerzo sabrías donde saque el dinero para el juego de Adam, adiós mama—paso por su lado para dirigirme a las escaleras y me detengo al ver a mi hermano restregándose la cara abrazado algo que reconozco enseguida

— ¿Marcos? — veo como sus ojitos se abren con sorpresa y corre hacia a mi abrazándome—Si volviste, te extrañe un monto, papa decía que no volverías porque no me querías pero sabía que era mentira—toco su melena y observo con atención la chaqueta que pertenecía a mi padre, esa que me solía usar seguido ¿Por qué la tenía Adam?

—Te creo—escucho a mis espaldas la voz de mama—No te vayas otra vez, no sabes como la pase el ultimo vez—bajo la vista viendo a Adam llorar, eso explicaba porque estaba en la sala y no en su cuarto—Sé que no debí decirte eso pero entiéndeme un poco hijo—me muerdo la lengua porque tenía que decirle tantas cosas, no quería volver a esa casa

— ¿Te vas a volver ir? —veo que mi mira con sus ojos suplicantes—No te vayas Marcos, por favor quiero que juegues conmigo y me ayudes con las tareas, me he portado bien como me pediste para que no te fueras pero no lo hice bien porque te fuiste pero ahora prometo que me seguiré portando como tú quieras

—Adam—susurro, mi hermano todo ese tiempo me había estado esperando y seguro se había culpado de mi partida cuando yo ni una vez había pensado en él, solo había querido ahogar mis problemas en alcohol—Lo siento

—Marcos por favor, hablare con Arturo para que te deje en paz pero no vuelvas a irte de esa manera—aprieto los puños y la veo

—Si me quedo es por Adam no por ti madre pero si lo hare no quiero que me pidan explicaciones, no quiero que alejen a Adam de mi

—Como quieras pero promete que volverás a estudiar y te alejaras de donde seas que este metido, creo en que no haces lo que creo pero Arturo

—Solo miente—bajo la vista—Pero prometo volver al colegio nada más, mientras me dejen en paz y hables con tu esposo

—Está bien lo hare—siento como me rodea con sus brazos siento mis ojos arder porque hace tiempo que quería un abrazo así de mi madre aunque no tuviéramos en las mejores condiciones aun la quería y aunque lo negara había extrañado a mi hermano y a mi madre

Basto un encuentro con mi madre y con Adam para que recapacitara pero una cosa es cierto, una vez que te metes en la oscuridad no es fácil salir de ahí, como prometí volví al colegio por alguna razón me temían pero no me metía con nadie al menos que me buscaran problemas pero los evitaba a toda costa

Cambie de bar porque Carolina me dijo que mantuviera un perfil bajo y después de eso no la volví a ver así como llego a mi vida de igual manera desapareció de ella, fue una mujer que de cierta forma me ayudo a lidiar con toda mi mierda porque una cosa era seguro nunca me tentó a menterme en ese mundo de lleno, una vez me dijo que yo aún tenía salvación a diferencia de ella y tenía razón

Aunque Arturo no estuvo de acuerdo con mi regreso le toco aceptarlo pero aun así la situación en la casa era tensa, sabía que mi madre solía discutir con el seguido por mí y mi regreso, por mi parte intente de verdad portarme bien, solo que ese hombre sacaba la peor parte de mí, siempre discutíamos por cualquier tontería

Por eso termine por no pasar tiempo en la casa, conseguí un trabajo por las tardes y en las noches en un bar como seguridad, el dinero que ganaba lo decidí guardar porque no tenía planeado quedarme en esa casa, no quería ver sufrir a mi madre, ahora sabía que de verdad me quería y se preocupaba pero no tenía como defenderme siendo menor de edad además Adam estaba muy pequeño

Huir de la manera que lo hice no fue buena idea perder el control como paso tampoco fue lo más sensato porque si ayude a mi amigo Elia a salir de ese mundo de alguna forma ¿Por qué me orille a mí mismo a entrar en él? Eso no era el futuro que quería y lo sabía, quería poder ver a mi padre a los ojos, tener el valor de escuchar nuevamente su voz

Por eso me decidí de ser una persona diferente, seguir soportando ese infierno que estaba aprendiendo a sobrellevarlo y fue más sencillo cuando una noche llegue a casa y encontré a Santiago en la cocina en la oscuridad, era la primer vez que me acercaba a el de esa manera, no sé porque lo hice supongo que el madurar era parte de la vida, pensar de forma diferente a antes y ya a los 17 años mi manera de ver al mundo no era lo mismo, esa noche quizás tuve un poco de compasión por el

***

—Mama—me acerco al ver al adolecente beber algo y con sorpresa me doy cuenta que se trata de una botella de whisky de Arturo

— ¿Santiago? —me sorprendido y puedo ver lágrimas en sus ojos— ¿Qué haces aquí? Creí que no bebías—veo que se limpia las lágrimas rápidamente, noto que tenía una foto de su madre, la conocía porque Arturo tenía unas cuantas en la casa a mi madre no le molestaba

—Vete a la mierda Marcos—sonrió sentándome a su lado parecía que no era el único que sufría en esa estúpida casa—Lárgate quiero estar solo

—Lástima porque siempre he querido probar uno de esas botellas además si te descubren me culparan a mí y si me culparan de algo tengo que por lo menos disfrutarlo ¿no? —Le arrebato la botella para tomar un largo trago—sabe genial, no sabía que bebías —veo que se encoge de hombros, veo la foto que observaba— ¿Es el aniversario de su muerte? Nunca te vi llorar por ella

—No lo es pero a veces me hace falta igual ¿Qué te importa?

—A mí me hace falta mi papa y aunque esté vivo no puedo verlo quizás un año más cuando pueda ir por mi cuenta a la cárcel—me ve con sorpresa no sabía lo de mi padre—Entonces ¿Qué paso?

—No sabía que estaba en prisión—me encojo de hombres, me quita la botella tomándose un trago—Es por papa ¿Sabes que por su culpa murió mi madre? —frunzo el ceño al escucharlo, esa no era la versión de la historia que sabía pero en el fondo sabía que ese hombre tenía más de un secreto oculto