April y yo nos encontrábamos de camino hacia aquella casa, Yerik me dio dos maletas y unas cajas. Me dijo que para evitar perder tiempo buscando maletas y no demorarnos tanto, quiso venir con nosotras... Pero no quise. Él comprendió y nos dijo que si pasaba algo le avisáramos inmediatamente.

—Entonces... Ya entablaste amistad con Yerik. — Comentó April.

—Pues sí, hablamos ayer en la noche y hoy en la mañana... —Encogí los hombros.

Las carreteras se encontraban con poco tráfico, así que probablemente llegaríamos en unos 15 minutos.

—Me alegro que se puedan ver como amigos, ya verás que él es una persona muy comprensiva y cariñosa — Sonrío —. También es un buen cocinero, me encanta cuando hace lasaña.

—Sí sé que es una persona comprensiva, pude conocer esa faceta rápidamente. — Sonreí.

Está bien hacer amigos, pero en mi vida he ido divulgando mi pasado con todos. Es algo que siempre he reservado, evitaba que los externos se dieran cuenta de todo. Y podría haber ocultado la verdad de Yerik por un tiempo, pero él vio una escena muy... muy ¿Cuál es el adjetivo exacto? Podría decir privada, pero todo ocurrió en el patio de la casa asi que privada no fue.

— ¿Qué piensas, niña?

—Solo que ayer fue todo un show... O no lo sé. — Musite divertida.

—Yo quería golpear a Peter, pero me aguante. — Soltó un suspiro.

—Pues Mónica te leyó el pensamiento...

— ¿Ya no te duele la boca?

—No mucho, ayer tuve que curarla rápidamente en mi cuarto... Imagínate que hubieran pensado en la universidad, que quizá soy alguien que le gusta las peleas.

—Si hubiera continuado dentro de esa casa, probablemente me hubiera hecho algo más...Y Peter hubiera entrado cuando quizá me esté tirando un vaso o alguna cosa que estuviera a su alcance.

— ¿Cuál hubiera sido reacción? Bueno, me alegro haber llegado, alguien me llamó y me dijo "Están a punto de asesinar a tu amiga"... Por primera vez en mi vida sobrepase límites de velocidad, insultaba a la gente que se cruzaba y ni hablar de los autos.

— ¿Qué? — Pregunte confundida.

—Sí y ellos me contestaban, entonces les decía algo referente con su mamá. — Explico de manera tranquila.

— ¿Te dijeron que me iban a asesinar? — Ella asintió — ¿Así parecía?

—Pues sí mi niña, además te alteraste con todo y no... Eso no es bueno para tu salud mental, te estaba dando una crisis pero de ahí comenzaste a gritarle a Peter todo... Te desahogaste, era una piedra que tenías atorada por años.

—Es un momento que, aunque no lo creas, lo sigo procesando — Admití—. Que me diga que por años supuso que yo era una fresa y que según él si me quiere, no es algo que pueda creer y ya. ¿Piensa que es fácil aceptar? Y lo que más me molesto... ¡Quería hablarme de ella! — Grité — ¡Qué diablos piensa! ¿Acaso no se escucha? ¿Cómo se sentiría él? ¿Acaso no tiene empatía? — Lleve mi manos a la cabeza, sentía que una vena se quería salir.

—Al parecer quiere buscar su propia felicidad y jugar a la familia feliz, que egoísta...— Musito — Pero no tienes por qué preocuparte por más querida, solo debes concentrarte en ti de ahora en adelante. Para lograr lo que has obtenido hoy, no necesitaste su afecto o apoyo, lo hiciste sola. — Señalo.

—Sé que pude hacerlo y fue gracias a ustedes — Sonreí—, quizá sin ustedes otro hubiera sido mi final.

—Yo te soy sincera, y le doy casi todo el crédito a Fabiola... Esa mujer te ayudo mucho antes que Kendall llegará, fue quien te apoyaba con tus metas, quien te impulso. — Sonrió.

Cierto, es muy cierto.

Aquellas veces que iba a su casa y le pedía ayuda en mis tareas, nos divertíamos haciendo juntas las tareas. Con el pasar de unos años, Fabiola ya no iba entendiendo las tareas así que le pedía ayuda a Kendall.

Pero ella siempre estuvo ahí, puedo estar segura que gracias a ella pude acabar el colegio y continuar.

—Me cuido cuando era niña e incluso cuando ya podía hacer las cosas por mí, ella seguía ahí como una mamá... April, hay algo que quiero decirte, pero necesitas prometerme que no dirás nada.

—Claro, ¿qué es? — Ella tenía puesta la mirada en la carretera.

—Tú sabes que Fabiola estaba al tanto de lo que ocurría dentro de esa casa — April asintió —. Hace unos 7 meses Mónica me estaba gritando por algo, y me dijo que ella tenía que ver con lo que le paso a Fabiola. — Termine la oración susurrando.

— ¿Qué...? — Musito sorprendida.

—Yo no sé qué tan cierto pueda ser... Pero es algo con lo que he vivido los últimos meses, ella me dijo que no fue fácil hacerlo parecer un accidente. — Comenté asustada.

— ¿Te das cuenta de que has estado con una asesina todo este tiempo? — Asentí — Maldición — Susurró — ¿Por qué no llamaste a la policía?

—No tengo pruebas April, ¿qué se supone que les diga?

—Pero los policías dijeron que fue un accidente, no encontraron nada extraño.

—Lo sé, yo también pensaba eso... ¡Maldita sea! Cuando me dijo que no fue un accidente me quede en shock, luego me dijo que haría lo mismo con mis amigos sino me callaba...

— ¿Es que no tiene límites? Y no te preocupes por mí, en mi casa tenemos seguridad A1.

—Me calle por miedo, créeme que aún tengo miedo de que les pueda hacer algo... No podría seguir viviendo si fuera así.

—Escucha Kira, esa mujer solo toma en cuenta a Kendall y a mí, Kendall esta en Alemania y yo sé cuidarme — Aseguró —. No tengas miedo, recuerda que ella siempre vivió de tu miedo.

—Un miedo que ella provoco... ¿Tú crees que deba ir con alguna ayuda profesional?

— ¿Un psicólogo? Hay cosas que sí tienes que superar y aprender a controlar, quizá sea bueno que vayas.

—Quiero quitarme muchas mañas de mi cabeza, poder tener confianza en mí y formar mi carácter.

—Es bueno que tengas esa intención, quieres romper tus propios obstáculos.

April se escuchaba contenta, pero en su mirada veía incertidumbre. El comentar que Mónica es responsable de la muerte de Fabiola ha causado algo en ella. Un cumulo de emociones que no me quiere decir.

¿Estuvo bien en decirle?

Esto es algo que no se lo he comentado ni a Kendall, porque muy en el fondo tenía miedo que se alejara de mí. Tenía miedo de su reacción.

Soy muy consciente de que Mónica es muy peligrosa, y también soy consciente que estoy poniendo a estas personas en peligro.

¿Y si solo tomo algunas de mis cosas y desaparezco? Ellos dejarían de estar en peligro..., podría ser una opción.

—No sé qué estas maquinando, Kira... Pero no te agobies, vamos a estar aquí para ti hasta que lo necesites. — Sus palabras están cargadas de sinceridad.

—Sabes que no me alcanzaría esta vida para agradecerte, ¿no?

—Eres mi amiga desde hace 4 años y todo lo que hago me nace del corazón, así que no me agradezcas — Ella me sonrío — Llegamos — Comento con un suspiro.

Miré la casa que estaba por dejar.

—Quisiera decir que tengo recuerdos memorables, pero no es así... — Giré mi cabeza y miré la casa de Fabiola — Quizá lo único que extrañe sea esa casa — Señale la casa de Fabiola.

— ¿Ninguno de sus hijos ha decido vivir ahí? — Negué — ¿Ni siquiera desean venderlo?

—Despues del entierro no supe más de ellos, pero la casa sigue vacía. — Me quite el cinturón de seguridad y abrí la puerta.

— ¿Cómo entraremos? No tenemos la llave. — Comentó.

—Hace dos años en una pelea de ellos a Peter se le cayó la llave en el pasadizo... — Saqué la llave y se la mostré.

— ¿Estas lista? — Asentí — Entonces vamos.

Recogí todo el valor y salí del auto, fui a la parte trasera del auto para sacar las maletas y cajas. April tenía una caja y una maleta colgada en su cuerpo. Yo tenía una maleta, una mochila y una caja. Cerro su cajuela y le echo seguro a su auto.

Mientras caminaba mi cabeza se estaba martillando con preguntas.

¿Ella estará ahí? ¿Me hará algo? ¿Me dirá algo? ¿Y si hay alguien más? ¿Y si le hace algo a April? ¿O es que no habrá alguien?

—Respira amiga, no podrá pasarnos nada. — April me tomo de la mano.

Al pararme frente a la puerta sentí un hormigueo recorrer mi cuerpo, nervios... o miedo. Se lo dejo a mi bella imaginación

Con una mano insertó la llave y giró dos veces.

Al parecer no hay nadie... Ojala sea.

Abrí por completo y empujo la puerta. El olor a cigarrillo me hizo retroceder, debido a que estaba muy fuerte. Entró rápidamente y subo las escaleras, escuchó a April seguirme. Al llegar doblo a la mano izquierda y abro mi puerta. Toda mi habitación esta como la deje.

—Bonito cuarto. — Susurra April.

—Mi refugio... — Comento. — Comencemos a empacar.

***

Sacamos las cosas sin problemas, ella no se encontraba ahí... Una suerte la mía. April y yo nos encontrábamos rumbo hacia la casa de Yerik, que sería mi nuevo lugar. Lastimosamente no logramos sacar todas mis cosas, pero decimos venir otro día para terminar el trabajo. Mientras tanto mis cosas importantes como ropa, libros y mi lámpara ya estaban conmigo, también estoy llevando mis colchas y almohadas.

— ¿Cómo te sientes? — Preguntó.

—Más tranquila, siento que voy cortando cosas... No lo sé. — Suspire.

— ¿Ese lugar siempre olio a cigarros? —Pregunto arrugando la nariz.

—No, algunas veces olía a alcohol. —Respondí.

—Con ese estilo de vida, no le espera mucho tiempo de vida. — Susurro.

—April, necesito que me ayudes con algo.

—Claro, en que soy buena. — Comento feliz.

—Verás, ayer vi a Mónica en el restaurant... — Escuché claramente como paso saliva — Con el papá de Dalton. — La boca de April se abrió poco a poco.

— ¡¿Qué?! — Chilló.

—Yo ayer estuve más en la cocina, pero los vi juntos... — Musité— Y la mamá de Dalton los vio juntos, me dijo que le diera su anillo al señor, pero se lo encargue a una amiga.

— ¿Qué? — Cada vez parecía más consternada.

—Dalton sospecha que su papá lleva engañando hace tiempo a su mamá, me lo comento ese día que me llamaste. ¿Debería decirle que es mi progenitora la amante de su papá? — Miré mis piernas y comencé a trazar círculos.

—Bueno... Primero déjame capturar toda la esencia de la notica. — Me dijo confundida.

Ya van dos baldazos de agua que le digo hoy, para la siguiente vez le diré inmediatamente. Pero necesito respuestas, quizá ella pueda ayudarme.

—No lo sé — Soltó —, yo no conozco a Dalton lo suficiente como saber su reacción. Sé que no te va a culpar, porque tú recién te enteras. — Me aseguró.

—Él me dijo que lo quería averiguar por su cuenta, pero — Antes de poder seguir con mi dialogo mi celular comenzó a vibrar.

El nombre de Kendall apareció en mi pantalla.

—Es Kendall.

—Contéstale y pregúntale acerca del tema, él conoce mejor a Dalton. — Señalo firmemente.

—Ni loca — Susurré —. Si es tema que tiene de por medio Dalton, no quiere saber nada.

—Que infantil. — Comentó indignada.

Di clic en contestar.

—Hola, hola. — Saludé.

—Mi pequeña hermanita, cómo estas — Saludó enérgico.

—Pues hay muchas cosas que te tengo que decir... Así que toma asiento.

— ¿En serio? — Escuche una risa — Ya me senté, cuéntame que ha pasado.

—Bueno, después de la pelea de ayer con ellos dos, fui a ver lo de mis papeles en la universidad con Peter — Tomé aire —. Quiso justificar su actos diciéndome que había creído que yo era alguien superficial.

— ¿Qué? — Pregunto con un tono entre confundido y molesto.

—Mónica le dijo que yo era alguien que le gustaba gastar dinero, que al parecer era una Mónica 2.0 — Susurre —. Obviamente reproche sus actos y le aseguré que no quería saber nada más de él, para mí fue suficiente daño de ellos dos.

— ¿Me estás diciendo que Mónica mintió para sacarle dinero a Peter?

—Ajam.

—Esa mujer no tuvo límites. — Lo escuche murmurar sorprendido

—También le hizo creer que estaba un poco loquita, porque según ella yo tomaba medicamentos. — Agregué burlona.

—Mierda, Kira. Debes salir de esa casa lo antes posible, esa mujer esta demente. — Aseguró.

—Y eso estoy haciendo, April me ayudo a conseguir un lugar y voy de camino para instalarme hoy.

— ¿En serio? — Pregunto sorprendido — Que rápido.

— ¡Soy una profesional! — Grito April. Me reí disimuladamente.

—Dile que muchas gracias, ¿cómo consiguió a tu compañera? — Miré a April.

—Pues es amigo de April de hace muchos años, es una buena persona. — April asintió como si su vida dependiera de eso.

— ¿Están seguras que es una buena persona? — Miré a April y ella seguía asintiendo.

—Por supuesto, he estado hablando con él y no es ningún patán. — Aseguré.

—Bueno Kira, con tal que salgas de esa casa y tengas un lugar estable no reprocharé nada. —Soltó un suspiro.

—Guau, creí que me empezarías de decir algo como —Preparé mi voz grave y cité: — "es increíble que te mudes con él, podría ser un enfermo".

— ¿En serio? ¿Así me escucho? — Pregunto riéndose.

—Quizá. — Comente burlona.

—Bueno, Kira espero que realmente él sea una persona decente y no se aproveche de tu situación.

— ¿Él es estúpido por creencia o convicción? — Fruncí el ceño — Yo estoy dando mi palabra que ella estará bien, ¿acaso eso no te basta?

—¿Por qué la agresividad? — Comentó sarcástico — Kira es muy linda, ¿quién me asegura que no se aprovechará de ella?

—Solo te diré que este sujeto está ayudándola sin querer algo a cambio, Yerik es una buena persona, así más respeto. — Comento April un tanto fastidiada.

—Pero yo no lo conozco. — Aseguró.

¿Por qué decidí ponerlo en alta voz? ¡Ah!

— ¡Pero yo sí! — Afirmó molesta — No todo hombre piensa en sexo cada vez que pasa una mujer, ¿es que no puedes entenderlo?

— ¡Él podría ocultarte cosas! — Contraataco— Nunca llegas a conocer a una persona totalmente, siempre hay algo por descubrir.

— ¡Pues yo te puedo asegurar que Yerik es virgen!

¿Qué?

Hubo un silencio incomodo en el auto.

—Eso no venía al caso April. — Musité.

—Por favor no le digan nada. — Suplico April.

— ¿Y tú como sabes que es virgen? — Preguntó Kendall.

—Eso no viene al caso Kendall, demos por este tema cerrado y olvidado — Comenté seria —. Yo te puedo decir que no es ese tipo de personas, así que mantente tranquilo.

—Quiero llevar la fiesta en paz, así que está bien... Disculpa por el altercado. — Musito Kendall.

—Yo también me altere, pido perdón — Agregó April.

—Perfecto, todo tranquilo y amistados... Bueno Kendall, si algo llegará a pasar llamaría a April, pero dudo que eso llegue a pasar. — Aseguré.

— ¿No pasará nada malo en ese lugar? — Preguntó con temor.

—Voy a estar bien, te lo prometo. — Dije firme

—Me quedaré tranquilo, voy a confiar en tu palabra. — Soltó un suspiro.

Un nuevo lugar, lejos del peligro.

Un lugar para iniciar de nuevo, mi corazón aún no lo puede creer.

***

Luego de hablar unos minutos más con mi adorado mejor amigo, tuve que colgar porque habíamos llegado al edificio. Yerik y Leo nos ayudaron con las cajas y maletas, lo bueno es que hay elevador.

Todo fue directo a mi cuarto, April me ayudo a acomodar mis cosas rápidamente. Me sugirió que me compre un librero, porque no podría estar amontándome de libros y dejarlos por los pisos. Así que probablemente a fines de este mes me compré uno para guardar mis libros y que no se maltraten.

Con todo en orden, me sentía más relajada. Solo me queda trabajar y seguir adelante, sin detenerme.

—Kira, el almuerzo ya está listo. — Llamó Yerik.

Termine de colocarme la blusa celeste, amarré mi cabello en una cola y salí.

Hace mucho tiempo no como algo en casa, siempre era salir a otro lado o comer galletas en casa. Y otras veces que Kendall me invitaba a comer, y otras veces era April. Comúnmente almorzaba con Fabiola, pero después de su muerte... Las cosas cambiaron mucho.

—Ahí voy — Musite — ¿Qué hay hoy?

—Hoy decidí hacer tallarines con carne molida, espero sea de tu agrado. — Coloco un plato humeando con un olor delicioso, sobre la mesa de la cocina.

—Tiene un aroma delicioso. — Afirmé.

—Es receta de mi mamá, cuando era pequeño comúnmente lo prepara para mi hermana. —Hubo una pequeña y fugaz sonrisa.

—Buen provecho. — Comenté.

Tomamos asiento y comenzamos a comer.

¡Rico!

Todo el sabor está en su punto exacto y la carne está en su punto exacto de cocción.

—Está muy delicioso, realmente me encanta. —Aseguré.

—Muchas gracias, ¿tú cocinas? — Negué.

—Puedo hacer lo básico, solo eso. — Comenté mientras metía a mi boca una rica porción de tallarines.

—Por el tiempo que manejas es muy difícil poder hacerlo, porque en la cocina si te demoras, después de cocinar debes lavar los trastes y acomodarlos — Yo asentía con la boca llena de tallarines —. Tranquila, nadie te quitará tus tallarines.

Cubrí mi boca con la mano, quería reírme pero no podía. Termine de masticar y pasar la comida para poder hablar.

—Disculpa, jamás he probado unos tallarines tan ricos. — Comenté divertida.

— ¿Qué hay del lugar donde trabajas?

—He visto su menú y todo está muy caro, para la cena probamos sopa o alguna comida que no implique muchos ingredientes. — Comenté.

— Qué tacaños. — Comentó con el ceño fruncido.

—Lo sé, pero que se puede hacer — Encogí los hombros.

—Te daré la llave antes que te vayas, recuerda siempre dejar la puerta con llave y el cerrojo. — Asentí.

—Es por cuestiones de seguridad, una vez entraron a robar al departamento de al frente.

—Guau... ¿Pasó algo más?

—Solo robaron, no hubo heridos. Pero recuerda que es mejor prevenir, que lamentar.

—Es muy cierto.