Más o menos una semana después, las cosas estaban súper tranquilas en Ciudad Aventura, todo de lo más normal.

Una tarde, Connor saldría a la ciudad para comprar algunas cosas mientras Hilary se quedaría con la linda Delores, que no tenía ganas de salir ese día.

Connor: (Recoge sus llaves) De acuerdo, ya me voy

Hilary: Nos vemos más tarde jeje

Delores: (Sin ánimos) Nos vemos

Connor: (La acaricia) ¿Pasa algo, mi pequeña?

Delores: (Lo mira con una mirada algo triste) No, solo que no estoy de ánimos hoy

Connor: Awww tranquila, volveré en un rato, nos vemos (se va)

La joven poodle solo asintió con la cabeza mientras veía como Connor se iba en auto, y mientras Hilary la acariciaba por un rato.

Delores dejó de lado la comida y solo se sentó en la sala bajo el sol esperando poder dormir, cosa que sería imposible con lo que estaba por pasar.

Delores: (Mira a Barney rascando la ventana) ¿es enserio?

Barney: (Sigue rascando esperando que la abra)

Delores: (Abre la ventana) Eh hola, Barney

Barney: Hola amiga, no te vi pasar por nuestra calle hoy, ni tampoco ayer, así que le pregunté a Harris si sabía algo de ti, pero me dijo que no, así que le pregunté a Justin y pues... (interrumpido)

Delores: ¿Puedes ir al grano?

Barney: Pues Justin está trabajando, y me aburro mucho (entra a la casa) ¿tienes algo divertido que hacer?

Delores: (Se vuelve a acostar en el suelo) No, solo me quedaré aquí a dormir un rato

Barney: Mm ¿desde cuándo te gusta dormir?

Delores: Desde que lo único que quiero hacer es quedarme aquí sin nadie que me moleste

Barney: Mm, dormir es genial, pero ¿sabes qué también lo es?

Delores: ¿Qué cosa?

Barney: (Sale por la ventana) Dar un paseo

Delores: (Sale con él) ¿Sin correa?

Barney: Bueno, obvio no podemos salir a la calle, pero por lo menos libera el estrés

Delores: Ok jeje, tú me guías (camina con él)

Barney y Delores caminaron juntos por las calles de Ciudad Aventura, donde había mucho escándalo como siempre, construcciones, autos y demás.

Barney: (Caminando) Por aquí es muy tranquilo

Delores: (Mirando) Eh sí, muy tranquilo que es

Barney: Por cierto, ¿para cuándo la boda de tus dueños?

Delores: ¿Qué qué?

Barney: Pensé que los dos eran novios

Delores: Eh pues sí lo son, pero bueno no lo sé (en su mente) ni siquiera sé que es eso

Barney: Ok, eso creo (sigue caminando)

Ambos perritos siguieron caminando un por toda la ciudad, pero después de un rato ya estaba empezando a atardecer, y había otras cosas que angustiaban mucho a la joven poodle.

Delores: (Mira hacia arriba y ve los grandes edificios) Ehh (traga saliva) ¿seguro que no es hora de regresar a casa?

Barney: Mm tal vez, si es que puedo recordar el camino a casa

Delores: Ahg (se hecha en el suelo)

Barney: No estamos perdidos, sé muy bien cuál es el camino (mirando arriba un poco aterrado) solo... qué pues... eh esos edificos estorban mi vista

Delores: (Ve un pequeño cachorro pastor alemán en la aterrorizado por la inmensidad de la ciudad) Mm supongo, díselo a ese chiquitín

Barney: Ehh ¿cuál?

Delores: (Le quita los pelos que le cubren los ojos y lo señala) Allá, míralo, pobrecito, está tan solo

Barney: (Lo ve) Ah es cierto ¿dónde estarán sus dueños?

Delores: Yo que sé, si éste es uno de los 5 cachorritos pastor alemán que llegaron, no tiene sentido que esté rondando por las calles, ya se los adoptaron a todos hace varios días

Barney: Mm bueno ¿qué hacemos?

Delores: (Cambia la mirada) Tranquilo, sé a dónde llevarlo (se acerca)

Los dos perritos se acercaron cuidadosamente al pequeño cachorro pastor alemán, quien tenía una mirada de terror y estrés.

Continuará............