Una semana ha pasado y ahora nos encontramos en un jurado, donde se llevaría a cabo un juicio en contra del violador Max Gilbert. El mismo que quiso violad a Dana. Esta última se encontraba junto a Lincoln, quien también daría su testimonio de lo ocurrido el día que ese malviviente intentó abusar de la castaña.

Y no solo eso, también en ese mismo jurado estaban los amigos de ambos protagonistas, aparte que también se encontraban en el lugar las demás víctimas que el tipo abusó sexualmente a cada una de ellas. El juicio duró al rededor de dos horas, en donde se mostró evidencia suficiente para hundirlo, no había por donde pudiera defenderse, su destino ya estaba sellado.

_ Bien, luego de mostrar todas las pruebas y escuchar los testimonios de las víctimas he llegado a una conclusión. Max Gilbert, te sentencio a cadena perpetua sin posibilidad de salir bajo fianza. He dicho ¡Caso cerrado!

Tras las palabras de la jueza todos comenzaron a aplaudir de la alegría de que por fin se había hecho justicia, ya ese descarado no verá la luz del sol por un buen tiempo. Lincoln, Dana, Karen y Demian salieron del lugar, los cuatro amigos estaban contentos de que ese tipo no saldrá en mucho tiempo, más que nada quien si estaba contenta era Dana, quien, pese a que no fue violada por ese sujeto, le alegraba que se hizo justicia para las demás víctimas.

_ Estoy feliz de que ese maldito no saldrá de la cárcel. Se pudrirá ahí como una frutal al sol.— dijo Karen a los chicos.

_ Tienes razón, ojalá espero que al tipo se le caiga el jabón en las duchas. Para que sienta lo que las víctimas que él abusó sintieron.— comentó Demian.

_ Jaja, buena esa Demian. ¿Quién quiere pizza? Yo invito.— preguntó Lincoln a sus amigos.

_ Claro, nos vendría bien comer algo luego de estar ahí durante dos horas.— aceptaba Dana la propuesta.

Karen y Demian también aceptaron la invitación de Lincoln, por lo que sin perder tiempo fueron a la pizzería donde trabaja el peliblanco. Durante el viaje todos estuvieron callados, no por incomodidad, sino que no tenían nada más que hablar, más por el tema de que Max ya no será una molestia durante un tiempo.

Llegaron y ahí mismo fueron recibidos por el mismo Mario, quien vio a su mejor empleado acompañado de algunos amigos.

_ Hola bambino, veo que vienes acompañado. Dime, ¿Cómo terminó todo con lo del juicio?— preguntaba Mario a su empleado.

Si, Mario sabe lo del juicio ya que Lincoln le pidió permiso de ir para así dar su testimonio, cosa que el hombre accedió a cambio de que le dijera cómo terminó todo.

_ Al infeliz ese le dieron cadena perpetua sin posibilidad alguna de poder salir o que le reduzca su condena.— contaba Lincoln cómo salió todo.

_ ¡Grazie al cielo! Ese despiadado no volverá a hacerle daño a otra ragazza. En fin, ¿En qué te puedo ayudar, Lincoln?— preguntaba Mario a Lincoln.

_ Vinimos a comer una pizza mis amigos y yo. Ya que tenemos hambre.— respondía Lincoln la pregunta.

_ Por supuesto, pidan lo que quieren comer y en seguida estará lista.— dijo el hombre con bigote.

Los cuatro amigos vieron en el menú cual de todas las pizzas les gustaba más. Para cuando escogieron una fue que Mario fue a la cocina a que empiecen a preparar la pizza. Mientras esperaban fue que Dana veía a Lincoln de manera disimulada, aún se hacía la pregunta de que si de verdad Lincoln siente algo por ella, aparte de que a él no le ha hablado mucho en estos días.

Esto era por lo que pasó días atrás, más preciso, de cuando le contó a Karen que casi fue violada y que Lincoln la salvó. En la noche, cuando chateaba con la misma Karen, fue cuando le dio por hacer algo, y eso fue lo que verán a continuación.

Flashback.

Estamos en el mismo día, donde como se mencionó anteriormente, que Dana le contó a Karen que Lincoln la salvó de ese sujeto. Es de noche y Dana estaba en su habitación, la castaña le había pedido a su hermano menor que no le dijera nada a sus padres con respecto a lo que le sucedió, ya que los conoce bien y son muy sobreprotectores, no los culpa, sabe que ellos harían lo que fuera por ella y Dylan, aunque hay ocasiones donde exageran un poco.

Dana estaba en su cama chateando con Karen, en donde estuvieron hablando de otros temas sin relación alguna de lo sucedido con Dana.

_ Espero que en estos días lleguen nuevas prendas a la tienda del centro comercial. Ya quiero ver lo nuevo que traigan.— escribió Karen a Dana.

_ Yo también, espero que traigan nuevas blusas y pantalones. También ropa interior, quiero ver si compro algunos y tirar algunos que ya no sirven.— respondía Dana.

Estuvieron así hasta que era momento de que las dos se despidieran. Dana aún tenía en sus manos su celular, estaba por meterse a otra página cuando, de puro instinto, se metió a Facebook y vio su perfil y ver si ha recibido alguna solicitud de amistad. Pero fue que a su mente le llegó la imagen de Lincoln.

_ Yo... aún no le he agradecido a Lincoln por lo que hizo por mí. Podría mandarle un mensaje y agradecerle, no es lo mismo decírselo en persona, pero es algo.— dijo a si misma Dana.

Acto seguido buscó el perfil de Facebook de Lincoln, no fue difícil, al hacerlo encontró su perfil, además de otros más, los cuales son de algunas chicas quienes también tienen el apellido de Lincoln, ¿Serán familia de Lincoln? Luego lo sabría, por ahora lo importante es mandarle el mensaje a Lincoln, lo hizo por privado, cuando se lo mandó fue que esperó respuesta de él, la cual fue casi al instante.

”De nada, recuerda que si algo te vuelve a suceder. Yo estaré ahí para salvarte, yo también te aprecio mucho, y no sé que haría si algo te sucediera"

Al leer esa respuesta de parte de Lincoln hizo que Dana sonriera, también de que sentía como en su pecho una sensación que nunca antes ha experimentado, sentía como los latidos de su corazón se aceleraba poco a poco. Nunca antes alguien le había dedicado esas palabras, además de mostrar una preocupación que no muchos suelen tener con ella, más que sus padres, su hermano y su mejor amiga, pero con Lincoln es diferente, ya que se notaba lo preocupado que se sintió cuando la salvó de ese violador.

Estuvo así, mirando el mensaje que Lincoln le envió, pudieron haber pasado horas desde que lo leyó, aunque en realidad solo fueron unos segundos. Aún sentía esa sensación en su pecho y su corazón aún no dejaba de latir muy rápido. Sin importar eso, y, sin que se diera cuenta, le mandó un mensaje del cual, y como se mencionó, no se dio cuenta de lo que había mandado.

"Te quiero"

La castaña se dio cuenta cuando ya lo había enviado, abrió sus ojos de lo que acababa de hacer. Dejó su celular a un lado de su cama, se cubrió su cara con la almohada, estaba muy avergonzada de lo que acaba de hacer. No sabía cómo se lo tomaría Lincoln, ya que no escuchó que haya enviado un mensaje.

_ Seré una tonta, ¿Por qué le envié ese mensaje? ¿En qué estaba pensando?— se cuestionaba Dana a si misma.

Estuvo así por un rato, volvió a tomar su celular, no recibió ninguna respuesta por parte del peliblanco, se acostó en su cama mirando al techo y pensar en lo que podría estar pensando Lincoln con respecto al mensaje que le envió. No fue hasta que recordó el mensaje que Lincoln le había enviado momentos antes, de que si algo volviera a sucederle, no lo dudaría dos veces e iría a salvarla, dejándole claro que se preocupa por ella. Y, también podría ser señal de que Lincoln si esté enamorado de ella.

_ Nunca antes alguien se ha preocupado mucho por mí. Es la primera vez que esto sucede, realmente Lincoln es un chico que tiene una buena voluntad, y un gran corazón. Y también, el novio perfecto para cualquier chica.

Eso último que dijo Dana fue que unas imágenes cruzaron por su mente, una en donde se ve a ella y Lincoln, corriendo por un campo de flores tomados de las manos. Otra en donde estaban dando un paseo sobre un lago en una canoa bajo la luna llena. Y la última, se ven a los dos, sentados en un tronco mirando el atardecer, ambos mirándose fijamente, en donde sus rostros se acercaban lentamente uno al otro, a punto de darse un beso, ambos tenían sus ojos cerrados para así sentir los labios del contrario.

No obstante, cuando estaban a punto de besarse fue que Dana abrió sus ojos, fue que se dio cuenta de dos cosas, la primera es que todo lo había imaginado mientras estaba acostada en su cama con los ojos cerrados, y la segunda es que estaba abrazando su almohada y a su vez, la estaba besando. Al ver lo que había hecho fue que Dana se levanta y dándose cuenta de algo del cual se ha dado cuenta.

_ Acaso.... ¿Estoy enamorada de Lincoln?

Fin del flashback.

Volviendo al presente, vemos que Dana seguía recordando lo sucedido ese día. En donde se había hecho esa pregunta, de que si estaba enamorada de Lincoln. Algo que hasta el día de hoy se lo sigue preguntando, aunque eso era algo del cual si sabe, solo que no estaba segura del todo.

_ Dana.

_ Dana...

_ ¡Dana!

La castaña regresó a la realidad cuando escuchó que alguien la estaba llamando por su nombre. Sacudió la cabeza solo para ver a sus amigos, quienes la veían confundidos, fue que Dana se dirige a ellos para saber que ocurría.

_ ¿Que es lo que sucede, chicos?— preguntó la castaña a sus amigos.

_ Nosotros deberíamos de hacerte esa pregunta. ¿Por qué estabas tan quieta y distraída? Hace unos segundos llegó la pizza.— preguntaba Karen a Dana.

_ Oh... perdón chicos, estaba distraída ya que.... estaba pensando en las cosas que le harán a ese tipo estando encerrado. Espero que ahí reflexione de lo que hizo.— mentía Dana lo que le ocurría.

_ Si solo es eso, será mejor que empecemos a comer, antes de que se enfríe la pizza.— dijo Demian a sus amigos.

Sin decir alguna palabra más, cada uno tomó su porción de pizza y empezaron a comerla. Mientras comían fue que Dana volvió a recordar el sueño que tuvo hace días. De que en su sueño estuvo a punto de besar a Lincoln, la castaña estaba en ese momento confundida, pero luego de pensarlo bien, fue que había llegado a su propia conclusión. Estaba enamorada de Lincoln.

Dana sentía que sus mejillas se ponían coloradas, pero hizo lo posible para que no se note. Nunca antes había estado enamorada de alguien, puede que si, pero eran con cantantes de varios grupos de música, un amorío que era pasajero. Pero esto era real, se había enamorado de Lincoln, algo del cual nunca se llegó a imaginarse, aunque, le preocupaba si Lincoln no siente lo mismo que ella, no podía forzarlo, dejaría que todo fluya a su ritmo y ver que sucede.

Ya cuando terminaron de comer fue que los chicos se separaron y cada quien se fueron a sus hogares. Dana había llegado a su casa, vio que Dylan estaba en la sala mirando la televisión. Antes de ir a los tribunales y dar su testimonio, le había avisado a su hermano a dónde iría y que no le dijera a sus padres en donde estaba. Fue a su habitación y de ahí se quedó un rato sentada en su cama, nunca antes había experimentado algo relacionado al amor, nunca en su vida ha tenido un novio, y esto era una señal de que Lincoln es el indicado para ella.

_ Creo... que Karen tiene razón. No debería dejar que otra chica tenga a Lincoln, él me ha dejado claro que si le importo, y que haría lo que fuera con tal de que esté bien. Cosa que solo un novio haría por su pareja.— se dijo a si misma Dana.

_ Aunque... primero quisiera un consejo de alguien que sepa de estos temas. Y sé quién se lo puedo pedir.— dijo la castaña.

Más tarde en la residencia Miller habían llegado los padres de Dana y Dylan, quienes saludaron a sus hijos, la madre fue a prepararle la cena a sus hijos y esposo. Todos comieron en el comedor en donde los padres quisieron saber que habían hecho sus hijos. Claro, Dana tuvo que inventarse una mentira para que sus padres se la creyeran, no quería aún contarles lo que le sucedió días atrás.

Cuando terminaron de comer fue que Dana le ayudó a su madre a lavar los platos sucios. La castaña vio a su progenitora, quien estaba lavando unos cuantos platos, fue entonces que aprovechó la oportunidad de que estaban las dos ahí, para así hacerle una pregunta muy importante.

_ Mamá, ¿Puedo hacerte una pregunta? Es... importante.— preguntaba Dana a su madre.

_ Por supuesto cariño, puedes preguntarme lo que sea.— decía la señora Miller.

_ Tú... ¿Que fue lo primero que pensaste al conocer a papá?— soltó la pregunta Dana.

La señora Miller vio a su hija y se sorprendió un poco al escuchar la pregunta que su hija le había hecho. Por su lado Dana veía a su madre, quien la miraba con una mirada algo extrañada. Pasaron unos segundos hasta que la señora Miller respondería la pregunta de su hija.

_ Bueno... cuando conocí a tu padre en una primera instancia me parecía un tonto. Provocaba uno que otro desastre, no era tan atlético y a veces olía raro. Pero a pesar de todo eso, me demostró que yo era su otra mitad, yo lo complementaba, y otras virtudes de él del cual hizo que me enamorara de él.— contaba la señora Miller el como conoció al padre de Dana.

_ Vaya, eso es muy romántico, el saber que ambos fueron hechos el uno para el otro. Aunque suene cursi eso no quita el hecho de que ambos estaban enamorados.— comentaba Dana de como se conocieron sus padres.

_ Si, lo es. Aunque quiero saber, ¿Por qué me preguntaste eso?— ahora quería saber la madre de Dana.

Dana por su lado sabía que debía de decirle la verdad a su madre del por qué le preguntó sobre como se conocieron ella y su esposo. No podía mentirle, la conoce muy bien para saber cuándo está mintiendo, aunque en ocasiones suele funcionar, en otras no tanto, por lo que decide en contarle la verdad.

_ Te pregunté sobre eso ya que... creo que estoy enamorada de un chico.— contaba Dana el motivo del por qué hizo esa pregunta.

Por parte de la señora Miller, ella al oír lo que su hija dijo estaba feliz de que su hija se haya enamorado. Aunque, debía de poner a prueba su papel como madre responsable y brindarle un poco de su experiencia para que así su sepa sobre estos temas.

_ Ay hija, estoy orgullosa de ti. Nunca pensé que te llegarías a enamorar. Pero dime unas cuantas cosas sobre el chico que te gusta, ¿Cómo luce, que le gusta, es guapo?— preguntaba la señora Miller a su hija.

_ Primero que nada su nombre es Lincoln Loud. Él está en el mismo salón de clase conmigo y Karen. Y aunque no me creas, él tiene el cabello blanco, y no es por qué se lo tiñe, dice que lo heredó de su abuelo.

_ Cosas que le gusta a él no lo sé, no se lo he preguntado. Y de que es guapo, si, lo es. Y más por su cabello que lo hace único. Sobre otros detalles sobre él, he visto que le gusta hacer deportes, es inteligente, y es muy servicial. Eso y mucho más lo caracteriza, como dije, es un chico único.— contaba Dana todo acerca de Lincoln.

_ Por lo que dices me doy una idea de cómo es ese chico. Y a decir verdad, con esa descripción me deja claro que ese chico es responsable, y que no es un bueno para nada. Aunque dime querida, ¿Cómo supiste que te gustaba ese chico?— volvió a preguntar la señora Miller.

_ Al principio no estaba segura, ya que no tenía ni idea de lo que sentía por él. Lo que me gustó de él fue su voluntad inquebrantable. Ya que demostró ser más de lo que aparenta, algo que ningún otro chico podría llegar a hacer, y eso fue algo que me hizo entrar en razón y darme cuenta que me gustaba, me había enamorado de él.— contestaba la castaña.

La señora Miller se sorprendió por la respuesta de su hija, no tenía idea de lo que ese chico haya hecho, pero si Dana dice que es algo que ningún otro chico puede llegar a hacer, entonces quiere decir que ese chico tiene todas las cualidades que una chica desea de un chico así.

_ Wow, por lo que dices ese tal Lincoln es un gran chico. Me sorprende de lo que puede llegar a hacer, y más en estos tiempos donde ya los chicos no son tan detallistas o le ponen empeño a ciertas cosas.— opinó la señora Miller.

_ Aunque tengo una duda muy grande, y es que si Lincoln no siente algo por mí. Ese es mi temor, de que yo sienta algo por él y él no sienta lo mismo que yo, y que le guste a alguien más. No quiero ilucionarme y salir lastimada, no sería capaz de soportar el rechazo.— decía Dana a su madre.

_ ¿No que dijiste que ese chico Lincoln hizo algo por ti que nadie más haría? De no ser así entonces no tendría sentido de que lo haga contigo y no con otra chica, lo que deja entender que si le interesas. Conozco este tipo de casos, tu tía Sara pasó por algo similar, cuando pensó que el chico que le gustaba no sentía lo mismo que ella, y ahora mírala, está casada con él y tienen una hermosa vida juntos.

_ Por lo que no debes de tener miedo, estoy segura que Lincoln siente algo por ti, puede que si lo sabe, solo que él no se da cuenta, puede que sea de entendimiento lento, a muchos chicos les cuesta entender la forma de expresarse de las mujeres o no captan nuestras indirectas. A lo que quiero llegar es que, no tienes por qué ponerte así, puede que también Lincoln esté enamorado de ti, solo es cuestión de tiempo para que se dé cuenta y así ambos puedan estar juntos.

Dana escuchó lo que su madre le dijo, y en parte puede que tenga razón. Puede que Lincoln si esté enamorado de ella, solo que aún no lo sabe, solo es cuestión de tiempo y así él se dará cuenta de lo que siente, así como ella lo está sintiendo ahora mismo por él.

_ Puedes que tengas razón mamá, puede que Lincoln si sienta algo por mí, solo que aún no se da cuenta. Aunque, ¿Que podría hacer para así estar segura que yo le guste a él?— le preguntaba Dana a su madre.

_ Podrías hacer algunas actividades que a él también le guste hacer. Así ambos podrían tener química y él vea que te gusta lo mismo que a él, siempre y cuando ambos se diviertan, ya que eso es lo más importante, que ustedes dos se diviertan.— decía la señora Miller que podría hacer Dana.

_ ¿Hacer alguna actividad los dos? Podría hacerlo, muchas gracias mamá. Realmente necesitaba esto, hablar con alguien con experiencia, te lo agradezco.— dijo Dana abrazando a su madre.

_ De nada cariño, y recuerda que para lo que sea me tienes a mí. Aunque te aconsejaría de que no te fíes mucho de ese chico. Ya que hoy en día los jóvenes solo piensan en sexo y otras cosas más que antes no eran permitidas hacer.— aconsejaba la señora Miller a Dana.

Al decir eso la señora Miller, fue que a Dana le llegó a su mente de cuando casi fue violada. Sacudió su cabeza para así borrar esas aterradoras imágenes que la perseguirá hasta el día de su muerte.

_ Tranquila mamá... conozco bien a Lincoln y él no haría nada de eso. Iré a mi habitación, buenas noches mamá, te quiero.— dijo Dana para ir a su habitación.

_ Si tú lo dices, que descanses cariño, también te amo.— dijo la señora Miller a su hija.

Dana subió a su habitación en donde se tiró en su cama, esa plática con su madre le había caído bastante bien, realmente la necesitaba. Ahora estaba decidida a todo para así poder estar con Lincoln, y lo hará tomando el consejo que su madre le había dado.

_ No será difícil hacer eso, realizar una actividad juntos. Podría hacerlo, solo es de ver qué le gusta Lincoln y así, los dos juntos podamos congeniar y así, ver si Lincoln siente algo por mí.— dijo Dana decidida a todo por Lincoln.

Estuvo así Dana hasta que fue a cambiarse a su pijama, se lavó los dientes y luego fue a su cama. Pensando en lo que podría hacer junto con Lincoln, en donde también, importaba mucho el poder divertirse los dos juntos. Dejando claro que ambos lo disfrutarán estando juntos.

A la mañana siguiente.

Es un nuevo día en Detroit, vemos cómo Lincoln había llegado a su escuela, caminó hasta llegar a su salón e ir a su asiento. En eso apareció Demian, quien venía corriendo, se le notaba cansado y sudando demasiado.

_ Wow amigo, realmente te vendría bien hacer ejercicio tal como te conté hace días.— le dijo Lincoln a Demian.

_ Eso... será para... otro día... vine aquí para... que veas esto... ven sígueme.— dijo Demian cansado y agitado.

Lincoln siguió a su amigo al lugar que le quería mostrar. Fueron a una parte de la escuela en donde había un mural. Ahí había varios anuncios que suelen poner el director y algunos alumnos, quienes forman parte de un club. Fue ahí que Demian le mostraría a Lincoln lo que vio.

_ Te llamé para que vieras esto, y estoy seguro que te llamará tu atención.— dijo Demian a su albino amigo.

El peliblanco vio lo que había en ese mural, y si, lo que vio le había llamado su atención. Lo que estaba mirando Lincoln es que en la escuela se llevaría a cabo un show de talentos. En donde se mostraba que podían hacer para participar. A Lincoln le gustaba esto, ya que era una nueva oportunidad para así ganar algo y ponerlo junto al resto de trofeos que ha ganado, y presumirlo a sus hermanas.

_ ¿Y que opinas?— preguntó Demian a Lincoln.

_ Es fabuloso, me gusta lo que veo. Tal parece que hay varias opciones para escoger para así participar. Y sé cuál de todas voy a escoger.— decía Lincoln a su amigo.

_ ¿A si, y cuál escogiste?— preguntó nuevamente Demian.

_ Tocaré una canción frente a todos en la escuela.— decía Lincoln lo que haría.

_ ¿Cantar frente a todos? Eso suena genial. Ya quiero ver cómo cantas.— respondió el pelinegro.

_ No solo yo, quiero que me acompañes en esto. Quiero que tú también participes.— dijo mirando a Demian.

_ ¡¿Que tal que?! Pero si yo no puedo cantar, soy malo en eso.— exclamó sorprendido Demian.

_ No importa, en ese caso podrías acompañarme tocando un instrumento. Así no tendrías que cantar.— decía Lincoln a su amigo gordito.

_ Espera Lincoln, ¿Dices que tocaremos instrumentos? Pero si ni siquiera tenemos ningún instrumento.— decía Demian ese pequeño detalle.

_ Ya lo sé, ese problema será después. Lo importante aquí es que quisiera que alguien más esté con nosotros, para así formar una pequeña banda y participar en este show de talentos. ¿A quienes podríamos llamar?— le preguntaba Lincoln a Demian.

El gordito se puso a pensar a quienes podrían llamar para así formar parte de esta pequeña banda para este show de talentos. Fue ahí que se le ocurrieron dos nombres a su mente.

_ Podríamos pedirle a Dana y Karen formar parte de la banda.— daba su opinión Demian.

_ No está mal, vayamos a buscarlas y así ofrecerles que participe con nosotros en este show de talentos.— daba su visto bueno Lincoln.

Sin perder el tiempo ambos amigos fueron a buscar a las dos castañas, cosa que no fue difícil. Ya que ellas dos estaban llegando a la escuela. Estando frente a ellas fue que Lincoln se dirige a las dos chicas.

_ Dana, Karen. Justo a ustedes dos estábamos buscando. Demian y yo quisiéramos que nos hicieran un favor muy grande, que también les vendría bien a ustedes.— habló Lincoln a las chicas.

_ Por supuesto, ¿Que clase de favor quieren que hagamos?— preguntaba Dana a Lincoln.

_ Que ustedes dos formen parte de una banda que Lincoln y yo queremos formar para el show de talentos.— respondía Demian lo que querían.

_ ¿Formar parte de una banda? Pero más importante, ¿Que clase de show de talentos hablan?— preguntaba ahora Karen.

_ Es uno que hará la escuela, y según se ve en el mural de la escuela, habrá premios para el primero, segundo, y tercer lugar. Hay varias secciones para poder participar, y nosotros dos escogimos en formar una pequeña banda y cantar frente a todos.— contestaba Lincoln la pregunta.

Tanto Dana, como Karen escucharon lo que Lincoln dijo, que en la escuela se llevaría a cabo un show de talentos, y que habría premios para los tres lugares. Ambas lo pensaron bien, aunque en la mente de Dana esto era una oportunidad para así poder convivir con Lincoln y así, compartir algo en común con él. Por lo que, sin pensarlo dos veces daría su respuesta.

_ Claro que le entro, será divertido participar en una banda.— dio su respuesta Dana.

_ Si Dana estará también yo, cuenten conmigo. Aunque quisiera saber, ¿Cómo nos vamos a llamar?— preguntaba Karen por el nombre de la agrupación.

_ No se me ocurre un nombre en estos momentos, ¿Alguien que quiera dar algunas ideas?— le preguntaba Lincoln a sus amigos.

Los cuatro se pusieron a pensar que nombre le pondrían a esta pequeña banda entre amigos. No fue hasta que Demian se le ocurrió uno.

_ Podríamos llamarnos "Héroes del Silencio" ¿Que les parece?— dio su idea Demian.

_ Suena genial, me gusta.— dio su visto bueno el albino.

_ También me gusta, original y fácil de entender.— dio su opinión Dana.

_ Me parece un poco gracioso, aunque no quita el hecho que se escucha genial. Tienes mi aprobación.— dijo por última Karen.

_ Perfecto, ya que ese problema está resuelto, se me había olvidado en preguntarles algo, ¿Ustedes saben tocar algún instrumento?— preguntaba Lincoln a los chicos.

_ Yo aprendí a tocar la guitarra gracias a un amigo de mi padre, quien en su juventud formó parte de una banda. La cual no obtuvo mucho éxito.— respondía Karen.

_ Yo puedo tocar un poco el bajo, eso también lo aprendí del amigo del padre de Karen.— dijo Dana.

_ Y yo sé tocar la batería, mi primo suele hacer videos enseñando como se toca dicho instrumento.— decía por último Demian.

_ Excelente, ahora y por último solo nos quedaría en donde podríamos ensayar y así crear las canciones que haremos. Dudo que en el salón de música nos dejen ensayar.— se preguntaba Lincoln donde podrían ensayar.

_ Podría hablar con el amigo de mi padre que nos presten algunos de sus instrumentos, además de que tiene en su casa un mini estudio de grabación. Solo tendría que hablar con él y esperar a ver qué me dice.— se ofrecía Karen sobre ese detalle.

_ Pero alto ahí, yo me estoy preguntando, ¿Quién escribirá las canciones que cantaremos en ese show de talentos?— se preguntó Dana a sus amigos.

_ Descuiden, yo me haré cargo de eso. Lo bueno es que tenemos tiempo para poder ensayar lo suficiente para cuando sea el día, el cual es dentro de un mes. Nos avisas Karen si el amigo de tu padre nos deja usar sus instrumentos y su estudio de grabación, para así reunirnos y así ponernm manos a la obra.— decía Lincoln a la castaña clara.

_ Si es posible se lo pediré de rodillas para que nos preste sus instrumentos. Yo les aviso si me dice que si.— respondía Karen a sus amigos.

Ya una vez resuelto todo esto fue que los cuatro fueron a su salón de clase. Pero de lo que ninguno se habían dado cuenta, es que alguien los estaba espiando, había escuchado todo lo que Lincoln y compañía habían platicado. Ese alguien era nada menos que Stan, fue a buscar a su jefe para informarle de lo que estaba por hacer Lincoln.

Una vez que lo encontró fue que le contó todo lo que había escuchado, cosa que claro, no le gustó para nada al oxigenado. De que Lincoln junto al amor de su vida y compañía formaron una banda para así participar en ese show de talentos que la escuela hará.

_ ¿Con que el anciano y mi amada Dana y sus amigos formarán su propia banda? Ya veo.— decía Scott de lo que dijo su secuaz.

_ ¿Y que es lo que harás?— preguntaba Eric.

_ Si el anciano participará en ese patético show de talentos entonces yo también. Le demostraré que soy mejor que él, y así lo voy a destrozar y Dana verá que soy mucho más talwntoso que él y vendrá conmigo como le corresponde. Y ustedes dos cabezas huecas me ayudarán en esto.— decía Scott lo que hará.

Los dos secuaces del oxigenado sonrieron de lo que su jefe hará ahora para así poder humillar a Lincoln y hacer que Dana vaya con él. Más tarde, a la hora de la salida se puede ver a Lincoln, quien junto con sus amigos estaban en la salida para así saber cuándo irán a ensayar.

_ Muy bien Karen, pregúntale al amigo de tu padre si nos deja usar sus instrumentos y su estudio de grabación. Si dice que si nos avisas de cuando podemos ir a crear las canciones.— decía Lincoln a su amiga.

_ Descuiden, él me conoce desde que tengo memoria, y sé que él nos dejará usar sus instrumentos. Yo les aviso si me dice que si.— dijo Karen asegurando que lo puede hacer.

Los cuatro tomaron caminos distintos, Lincoln por su lado estaba contento de que está sería una nueva oportunidad de poder ganar algo y presumirlo a sus hermanas. Llegando a su apartamento fue que se alistó en ir a trabajar, más tarde tendría que ponerse a escribir las canciones con las cuales ellos tocarían en ese show de talentos.

Más tarde.

Las horas pasaron y Lincoln ya estaba de camino a su hogar, se sentía un poco cansado, ya que le tocó hacer varios pedidos, pero nada que él pudiera hacer. Una vez adentro de su apartamento fue que se dispone a escribir las letras de las canciones que tocarían. Estaba en la sala del cuarto, tenía en la mesita un cuaderno y lápiz.

_ Bien, es momento de ponerme a trabajar. De algo sirvió ayudarle a Luna a darle ideas para sus canciones, además de que aprendí mucho de como tocar la guitarra. Y también de Lucy, de darle rimas para sus poemas, esto será sencillo.— se decía a si mismo Lincoln.

Hizo crujir sus dedos y procedió a escribir las letras de las canciones que tocarían. Durante dos horas estuvo ahí, escribiendo, en algunas ocasiones tuvo que borrar y reescribir algunas partes, lo veía y a su vez le daba unos retoques. Para cuando se dio cuenta ya eran las 9:30, de la noche, había hecho un total de cinco canciones.

_ Vaya, si que me tardé demasiado. No me imagino esto a muchos cantantes hacer esto. Ya tengo listo la parte difícil, solo es de esperar a que Karen nos avise si podemos ensayar en la casa del amigo de su padre. Espero que nos confirme pronto.— dijo Lincoln mirando lo que había hecho.

Guardó las canciones en su mochila y luego de eso fue a darse una ducha, si. En ese tiempo no se fue a ducharse, además de que también se preparó algo para cenar para después irse a dormir.

Al día siguiente.

Es de día en Detroit, y vemos a nuestro amado peliblanco, quien había llegado a su escuela, listo para un nuevo día de estudios. Llegando a la entrada fue que Lincoln se topó con sus amigos. Quienes habían llegado minutos antes que él, por lo que se acercó a ellos para saludarlos.

_ Buenos días chicos.— saludó el albino.

_ Hola Lincoln, buenas noticias, ayer hablé con el amigo de mi papá y me dijo que si nos dará permiso de usar su estudio de grabación y también, nos prestará unos instrumentos para el show.— contaba Karen lo que consiguió.

_ Fabuloso, yo también quisiera contarles algo. Y es que ayer me puse a escribir las letras de las canciones que vamos a cantar. Se las mostraré cuando ya estemos en el estudio de grabación y así nos pongamos de acuerdo sobre como irá la melodía.— dijo Lincoln lo que ha hecho.

Así Dana, Demian y Karen asintieron y fueron hasta el interior de la escuela y fueron hasta su salón. Durante las horas de clase los cuatro amigos estaban emocionados de que tocarían frente a varias personas, tal como en varios conciertos. Otra cosa a resaltar es que durante ese tiempo Scott se le veía confiado, además de ver a Lincoln de la misma manera que lo ha hecho desde que se conocieron, con seriedad y con asco.

Para cuando las clases terminaron y que todos fueran a sus hogares, los cuatro amigos se juntaron para asi ir a prepararse y ensayar las canciones que deberían de tocar para el show.

_ Ya es momento de que vayamos a prepararnos para el show. Tenemos un mes para repasar y aprendernos las letras.— dijo Lincoln a sus compañeros.

_ Tú lo has dicho amigo, vámonos ahora mismo. Solo síganme y llegaremos pronto.— dijo Karen a los chicos.

Los cuatro partieron con rumbo a la casa del amigo del padre de Karen. Tomaron un taxi en donde la propia Karen le dio la dirección al taxista. El viaje no duró mucho, solo fueron unos 10 minutos o menos en llegar, pagaron por el viaje y los cuatro fueron hasta la entrada de la casa, la cual luce bastante bien. Karen tocó el timbre y de ahí salió un hombre de unos 30 y tantos años, cabello negro corto, bigote y usaba unas ropas para nada limpias.

_ Hola Karen, veo que trajiste a tus amigos para ensayar. No se queden ahí y entren.— dijo el hombre a los chicos.

_ Muchas gracias tío Bill, vamos chicos entren.— dijo Karen a sus compañeros.

Los tres hicieron caso y acompañaron a Karen y al hombre de nombre Bill. En eso mientras caminaban fue que Demian se acercó a Karen para preguntarle.

_ ¿No que dijiste que él era amigo de tu padre?— le preguntó Demian.

_ Claro que lo es, yo le digo tío ya que él me conoce desde que era una bebé. Y me trata como si fuera su sobrina.— respondía la castaña al pelinegro.

Llegaron a un cuarto en donde se podía ver todo un equipo profesional de audio, como el que usan los estudios en las discografías para muchas bandas y cantantes solistas.

_ Aquí está, aquí podrán ensayar las canciones que ustedes cantarán. Yo les ayudaré y así puedan estar listos para ese concurso en que participarán.— decía Bill a los chicos.

_ Muchas gracias tío Bill, nos vendría bien de tu ayuda. Ya que sabes mucho de esto.— respondía Karen a su tío.

_ ¿Y en donde están los instrumentos que usaremos?— preguntaba Dana.

_ Las guitarras y bajo los tengo guardados, la batería está ahí debajo de la sábana. Ahorita traigo las guitarras.— decía Bill a traer las guitarras.

_ Esto es perfecto, y como les había contado, ayer hice las letras de las canciones. Véanlas y opinen que les parece.— decía Lincoln entregando las letras de las canciones.

Cada quien tomó una hoja de papel con las letras de las canciones, a todos ellos les encantaban lo que leían. Cuando acabaron se dirigen a Lincoln para preguntarle el como le hizo para hacerlo.

_ Amigo esto es hermoso, ¿Enserio lo hiciste tú mismo?— preguntaba Demian a su amigo.

_ Por supuesto, tengo mis métodos, los cuales son únicos.— contestaba orgulloso Lincoln.

_ Esto es único, la letra es perfecta, tienes talento puro, ya que esto pareciera un poema para alguien especial.— dio su punto de vista Karen.

Dana por su lado le había gustado lo que había hecho Lincoln. Le sorprendía que él supiera mucho sobre escribir canciones, como si lo ha hecho toda su vida y que, por alguna razón no quisiera sacarle provecho, de que tiene talento lo reconoce. Bill había llegado con dos guitarras, una acústica y otra eléctrica, además del bajo.

_ Aquí está, solo debo de conectarlas y así empezar esto de una vez.— dijo Bill a los chicos.

Deja a dónde estaba varios amplificadores y conectó la guitarra y el bajo. Ya listo y afinadas como deben de estar fue que Lincoln se dirige a sus compañeros y a Bill.

_ Bueno, ahora lo más importante es hablar de cómo irán las melodías de cada una de las canciones. Toda opinión es válida.— habló el albino.

_ Yo puedo ayudarte con eso, y también quisiera que ustedes dieran su opinión si les gusta o no.— miró Bill a los chicos.

_ No soy experto en música, pero daré mi opinión y también quiero que ustedes opinen de como quieren el ritmo de la batería.— comentó Demian.

_ Okey muchachos, tenemos mucho por hacer. Es mejor comenzar ahora mismo.— dijo para todos Karen.

Fue así que todos empezaron con los ensayos, donde Lincoln junto con Bill se intercambiaron ideas, en donde Dana, Karen y Demian no se quedaban atrás, ellos dieron su punto de vista y opinaron que les parecía. En el primer día habían logrado crear la melodía para la primera canción. En los siguientes días hicieron lo mismo con las demás canciones.

Cabe mencionar que a la hora de cantar Dana es quien acompañaba a Lincoln en los coros. Eso debido a que Karen no es buena cantando, y Demian por qué está en la batería, y al igual que Karen, no es bueno cantando. Por lo que Dana aprovechó esa oportunidad para así acompañar al peliblanco. Faltando pocos días para que fuera el show de talentos, fue que los chicos hicieron unos cuantos ensayos más hasta que decidieron en parar por hoy.

Dana vio a Lincoln, quien acomodaba el micrófono que había usado momentos antes. La castaña al ver a Lincoln sentía esa sensación en su pecho, ahora ya sabe el por qué sucede eso, y es por qué está enamorada de Lincoln. Se acercó a Lincoln para así tener una breve charla con él.

_ Si que nos hemos mejorado, cuando sea el día del show nos vamos a lucir.— dijo Dana comenzando una conversación.

_ Y que lo digas, cada quien ha dado lo suyo. Eso es más que suficiente como para dejar claro que vamos con todo.— respondía Lincoln a su amiga.

_ Aunque tengo mucha curiosidad de saber, ¿En donde te inspiraste en crear esas canciones? Y más que nada, ¿Cómo aprendiste a hacerlo tan bien?— preguntaba Dana al peliblanco.

_ De dónde me inspiré, fue una combinación de cosas que he vivido y en algunos libros que he leído. Todo eso y algunas cosas más me sirvieron de mucho. Y sobre como aprendí eso, lo aprendí de alguien a quien consideraba un modelo a seguir, pero he visto la clase que es, alguien que solo buscaba el beneficio propio a base del esfuerzo de otros y sin dar un simple gracias.— contaba Lincoln más que nada, lo último referente a Luna.

_ Vaya, eso debió ser muy duro para ti. Lamento si toqué un tema sensible que no quieras hablar.— se disculpaba Dana.

_ Tranquila, no pasa nada. A esa persona pronto le caerá el castigo de la vida. Lo importante es seguir adelante y mejorar, el show es en pocos días y hay que estar preparados.— dijo Lincoln a su compañera.

Los últimos días pasaron en donde ya había llegado el día esperado, donde se realizaría el show de talentos es en la propia escuela. Donde había una cantidad considerable de personas, quienes vinieron a ver lo que los alumnos tenían para entretenerlos. Por otra parte había varios alumnos, quienes se estaban preparando para cuando fuera turno de ellos de salir al escenario.

Por otra parte, la banda Héroes del Silencio ya estaban listos, los instrumentos estaban en su lugar, solo era de que ellos salieran y los tomara para así hacer algo de música para los presentes.

_ Viejo estoy nervioso, hay muchas personas allá afuera. Siento que me dará pánico escénico.— decía Demian notablemente nervioso.

_ También me dará un pánico escénico, nunca antes había hecho algo parecido. Es mi primera vez haciendo esto.— dijo ahora Karen.

_ No son los únicos, siento que también me dará un ataque de pánico. Tengo miedo de que haga algo mal y seamos el hazmerreír de todos.— comentaba Dana también nerviosa.

_ Chicos tranquilos, no hay que ponerse así. Sé que están nerviosos, y no mentiré, también lo estoy, pero no hay que pensar en que lo van a hacer mal, solo piensen que todo mundo les encantarán lo que haremos ahí afuera y pedirán más y más.

_ Por lo que no piensen que lo van a arruinar, solo mantengan la mente fría y piensen a todos en ropa interior. Solo hagan eso y verán que si les va a funcionar.— ayudaba Lincoln emocionalmente a su banda.

Los chicos escucharon las palabras de motivación que Lincoln les dijo, por lo que hicieron lo que él les dijo, mantener la calma y pensar que nada saldrá mal. Justo en ese momento apareció a quien nadie quiere, estoy hablando de Scott. El cual estaba vestido como si fuera un rapero, con cadenas de oro y anillos, y no solo eso, también sus secuaces venían igual como a su jefe, como unos raperos.

El trío se acercaron a nuestros protagonistas, quienes vieron a los tres llegar y no sabían que estaban haciendo. No fue hasta que Lincoln se dirige al oxigenado para hablarle.

_ ¿Que hacen ustedes aquí?— preguntó Lincoln al rubio.

_ ¿Que no es obvio? Estoy aquí para participar y ganar.— respondió el egocéntrico.

_ ¿Tú, participar? Ja, no nos hagas reír amigo.— se burlaba Demian del rubio.

_ Veamos quien ríe de último cuando yo les gane a ustedes. Vámonos muchachos.— dijo Scott a sus secuaces.

Así el trío se fueron para así prepararse cuando sea el momento de salir a escena. Por su lado nuestros amigos estaban pensativos al ver qué Scott participará en este show de talentos.

_ No sé que estará tramando Scott, pero sea lo que sea no hay que dejar que gane.— opinaba Demian a sus amigos.

_ Opino igual, no dejemos que esos tarados ganen. Me da mala vibra del por qué están aquí.— aportó Karen.

_ Ya, ya chicos, no dejemos que Scott nos arruine esto. Por ahora enfoquémonos en nosotros mismos y poder dar un buen espectáculo.— habló Lincoln a sus compañeros.

_ Lincoln tiene razón, no dejemos que Scott nos distraigan. Debemos de prepararnos para cuando sea nuestro turno de ir al escenario.— apoyó Dana a Lincoln.

Y así fue que el show empezó, en donde durante varios minutos algunos alumnos entretuvieron a los presentes, ya sea con algunos trucos de magia, contando chistes, haciendo imitaciones, etcétera. No fue hasta que le tocaba el turno a nuestros protagonistas en salir al escenario.

_ Y ahora démosle un aplauso a la banda Héroes del Silencio. Quienes vienen a cantarnos algunas canciones.— dijo una maestra al público.

La gente empezó a aplaudir dándole paso a los siguientes alumnos. Los cuatro fueron a sus lugares, en donde tomaron sus instrumentos. Lincoln se acercó al micrófono con una guitarra acústica preparada.

_ Espero que estén preparados, por qué van a gozar de buena música. Así que disfruten.— dijo el albino a los presentes.

A la gente les había gustado la canción, más que nada el sonido, el ritmo, todo. Pero esto apenas comienza. Lincoln dejó la guitarra para así prepararse para la siguiente canción.

Al público les impresionó el como ellos tocaron esa canción, como si en verdad estuvieran presenciando a una verdadera banda de rock. Lincoln se preparó para cantar la siguiente canción.

Nuevamente a la gente les fascinó la canción. Por lo que los chicos se prepararon para cantar una canción más.

Con esa canción los chicos fueron ovacionados por el público. Luego de eso los cuatro fueron a tras bambalinas para así darle paso a los siguientes alumnos a salir al escenario. Los cuales eran Scott y su séquito.

_ Ustedes verán quienes son los mejores. Andando.— dijo Scott a los presentes.

A la gente les pareció un poco ofensivo y obscena la letra de dicha canción. Aunque no pueden negar que fue un poco pegajosa el ritmo. El trío de patanes se prepararon para la siguiente canción.

Nuevamente la canción les pareció obscena y subida de tono. Aunque también debieron de reconocer que fue buena. Ya el trío se prepararon para la última canción que cantarían para darle paso los siguientes concursantes.

Tras cantar esa última canción el trío de idiotas salieron del escenario para darle paso a los demás participantes que quedaban. Cuando terminaron de pasar al escenario los últimos participantes era momento de escoger quienes estarían en el primero, segundo, y tercer lugar de este show de talentos.

Uno por uno fueron saliendo los participantes, quienes no fueron del agrado del público, estos últimos serían los jueces, ellos decidirían quienes quedan y quienes se van. Ya solo quedaban los tres primeros lugares, los cuales eran la banda de nuestros protagonistas, Scott y sus secuaces, y un chico que hizo un espectáculo de magia.

_ Apalusos para Ronald y su acto de mago.— dijo la maestra a los presentes.

Hubo una cantidad mínima de aplausos, pero dejando claro que les encantaron el acto que había hecho ese chico.

_ Apalusos para la banda Héroes del Silencio.— ahora le tocó a la banda del peliblanco.

Hubo una gran cantidad de aplausos y silbidos, dejando más que evidente que les había gustado las canciones que la banda habían tocado y cantado.

_ Aplausos para Scott y sus compañeros.— seguía Scott y su séquito.

Al igual que la banda de nuestros protagonistas, hubo la misma cantidad de aplausos y apoyo para el oxigenado.

_ Por lo que vemos hay un empate entre ambas partes. Por lo tanto deberán de cantar una canción más para así decidir quién será el ganador de este concurso.— dijo la maestra a sus alumnos.

Tanto Lincoln, como Scott no podían creer que habían empatado en la cantidad de aplausos que recibieron del público. Por lo que ambas partes se prepararon para dar su última carta y así poder ganar.

_ Okey chicos, cantemos la última canción que habíamos ensayado. Es todo o nada.— dijo Lincoln a sus amigos.

_ Lo haremos, hemos llegado lejos para no perder contra Scott. Vamos a darlo todo hasta el último suspiro.— dijo Dana a su compañero.

Fue primero la banda del peliblanco para cantar la última canción y así, poder desempatar este duelo y no permitir que Scott gane.

Muy impresionante, esa fue la reacción de los presentes al oír la canción, más que nada el solo de guitarra que se lució Karen. Los chicos dejaron el escenario para dejar pasar a Scott.

_ Muy lindo, ahora solo vean como los hacemos polvo.— dijo Scott a su competencia.

Los tres fueron al escenario en donde cantarían una canción, o mejor dicho Scott la cantará. Ya que él se quiere lucir y dejar impresionados a los presentes, ya que tiene un as bajo la manga.

Scott había dejado a más de uno impresionado al oír como cantaba esa canción de una manera que casi nadie podría igualar. Y no solo eso, sino que también había dejado impresionados a nuestros protagonistas.

_ ¡Rayos, eso fue genial!— exclamó frustrado Demian.

_ Lo sé, el como lo hizo en esa parte donde cantaba rápido me dejó impresionado.— le dio la razón Lincoln a Demian.

Ambos grupos fueron al escenario para así decidir de una vez quien es el ganador de esa noche.

_ Aplausos para la banda Héroes del Silencio.

Hubo más aplausos que la primera vez, cosa que emocionó a los chicos de que les habían encantado la canción.

_ Aplausos para Scott y su grupo.

Pero con Scott la cosa fue distinta, obtuvo más aplausos que la banda de nuestros protagonistas. Con lo que la maestra había tomado su decisión de quién sería el ganador.

_ Y los ganadores son Scott y su grupo.

Los presentes aplaudieron para celebrar el triunfo del oxigenado, quien solo hacía la seña de amor y paz a su gente. Por su lado la banda de nuestros protagonistas estaban algo dolidos de haber perdido, y más que nada por el propio Scott, algo totalmente imperdonable.

_ Felicidades chicos, ustedes son los ganadores de este concurso de talentos.— dijo la maestra con el trofeo del primer lugar.

_ Muchas gracias, y para festejarlo les volveré a cantar la canción con la que ganamos. Para que lo vuelvan a gozar.— dijo el rubio a la maestra.

Dicho eso Scott se preparó para cantar nuevamente la canción con la cual los declararon ganadores. Los chicos en cambio estaban aún deprimidos de haber perdido, cuando estaban por recibir su premio del segundo lugar ocurriría algo que cambiaría todo.

En cierto punto de la canción que cantaba Scott, empezó a repetir una frase de la canción una y otra, y otra, y otra vez, como si se tratara de un disco rayado. Estuvo así por unos momentos cuando de la chaqueta qué usaba Scott cayó algo al suelo, el cual era nada menos que su celular. El cual cuando cayó al suelo la música se detuviera, y de paso, la voz de Scott quien estaba cantando.

La maestra miró lo que había caído al suelo, por lo que fue a recogerlo antes de que Scott lo hiciera. Al revisarlo vio que era un celular, pero lo que más le extrañó, fue que en el dispositivo móvil estaba reproduciendo la canción que Scott estaba cantando.

_ ¿Me puede explicar esto, joven Scott?— dijo la maestra al rubio.

_ Es mi celular, obviamente.— dijo sarcástico el oxigenado.

_ No es solo eso, ¿Por qué estaba reproduciendo la canción que estaba cantando? ¿Acaso usted y sus compañeros hicieron trampa?— volvió a preguntar la maestra.

_ No es trampa, solo estaba haciendo Playback. Lo cual no es del todo trampa si lo piensa de otra forma.— trataba de defenderse Scott.

La maestra vio seriamente al rubio, tomó el trofeo que le había dado anteriormente y se aproximó al micrófono.

_ Hubo un cambio de planes, el alumno Scott y sus compañeros quedan descalificados. El alumno Ronald McCurdy obtiene el segundo lugar, y la banda Héroes del Silencio son los ganadores de este show de talentos.

El público habían quedado impactados de que Scott había hecho trampa todo este tiempo, por lo que los abucheos no tardaron en caerle a él y a sus secuaces. Luego de eso celebraron la victoria justa de Héroes del Silencio, quienes estaban felices de que ellos fueron los ganadores.

_ ¡Lo logramos chicos, ganamos!— exclamó Lincoln a sus amigos.

_ ¡Lo hicimos, le dimos su merecido a Scott, un premio doble!— celebró Demian este logro doble.

_ ¡Es increíble, esto se siente bastante bien!— dijo Dana festejando.

_ ¡Nos aman, realmente nos aman a nosotros!— dijo por última Karen.

Luego de eso se les entregó el premio al primer lugar. En donde todos posaron para así les tomara una foto para el recuerdo.

_ ¿Quién se llevará el trofeo, chicos?— preguntó Lincoln a sus compañeros.

_ Deberías de llevarlo tú. Para que así lo presumas con ya sabes quienes.— le dijo Demian a Lincoln.

El pelon asintió y guardó el trofeo para hacer eso que dijo Demian, de presumirlo a sus hermanas que ganó otro premio. Ya cuando todos se fueron los chicos recogieron los instrumentos, se ve a Lincoln, quien había ayudado a Demian a desarmar la batería, luego de llevarlo al auto de Bill fue a traer las guitarras, junto a él estaba Dana para ayudarle.

_ Tenías razón Lincoln, esto fue divertido. Ahora sé cómo se siente ser una estrella del rock, fue asombroso.— dijo Dana a Lincoln.

_ Verdad que lo es, hace unos años viví algo parecido, y esto me hizo recordarlo y disfrutarlo aún más.— contaba Lincoln de cuando estuvo con su banda favorita Smooch.

Guardaron las guitarras en sus estuches y fueron donde estaban sus amigos. En eso fue que Dana no se fijó por dónde iba y terminó por tropezar con un cable que estaba ahí. Al hacer eso fue que cayó encima de Lincoln, provocando que ambos soltaran las guitarras que llevaban consigo.

Lincoln como pudo evitó que Dana se lastimara, por lo que al momento que soltó la guitarra que llevaba atrapó a Dana, para que así él recibiera el golpe. Cuando abrió sus ojos luego de caer al suelo, fue testigo de algo que nunca se imaginó que pudiera suceder.

Lo que ocurría era que Dana estaba encima de él, sus caras estaban demasiado cerca del uno al otro. Ambos se veían a los ojos fijamente, ninguno de los dos decían nada, es como si de un momento a otro habían perdido completamente el habla. Dana al ver más de cerca a Lincoln volvía a sentir esa sensación en su pecho, además de sentir cosquillas en su panza, aunque sabe que eso se debe a qué está enamorada de Lincoln, y tenerlo así de cerca podía apreciar mejor su rostro.

Por parte del albino estaba en un trance, ya que al ver mejor a Dana podía apreciar su hermoso rostro, esos ojos color avellana, esas pestañas finas, su cabello castaño que con solo verlo podía decir aquí y ahora que debe de ser suave. Sus labios, todo en ella era perfecto. Al verla así de cerca volvía a sentir lo mismo que sintió el día en que Dana le envió ese mensaje que le decía que lo quiere.

Pasaron unos segundos, los cuales parecían eternos, fue Lincoln quien rompió ese silencio que había entre ellos dos.

_ T-te encuentras... b-bien Dana?— preguntó Lincoln a su amiga.

_ S-s-s-si, estoy bien... g-gracias por evitar que cayera al suelo.— agradeció Dana al peliblanco.

Lincoln ayudó a Dana a levantarse del suelo, y tal como dijo ella no le pasó nada. Fue ahí que apareció Karen a buscar a sus amigos, quienes se estaban tardando demasiado.

_ Chicos por qué tardan tanto, mi tío Bill los están esperando en el auto.— dijo Karen a sus dos amigos.

_ Enseguida vamos, puedes ir adelantando.— respondió el albino.

Tomaron las guitarras y fueron a dejarlas en el auto de Bill, seguido de eso subieron al auto, ya que el hombre los iría a dejarlos a sus hogares. Pero de lo que ninguno de los dos jóvenes supieron es que alguien los había visto cuando cayeron, y ese había sido nada menos que Scott. El cual estaba ahí para buscar a los chicos y buscar problemas, pero se encontró con otra cosa.

Esto por supuesto que no le gustó para nada ver, había sido testigo de como Dana y Lincoln estaban en una situación que pudo haber terminado de otra manera. Para este punto ya Scott estaba cansado de Lincoln, estaba tan molesto y enojado con Lincoln que su cara se puso color roja, esta era la tercera vez que Lincoln lo supera en algo y recibe la atención de muchas personas. Pero aún más el ver cómo Lincoln le estaba robando al amor de su vida.

_ ¡Ya basta! ¡Ya me cansé de jugar con ese anciano! Será mejor usar medidas aún más drásticas, fui un estúpido por usar a Dana como señuelo, ahora iré directamente contra ese estúpido, y sé cómo podré hacerlo.

_ Prepárate Lincoln Loud, estás a punto de ver a tu peor pesadilla hecha realidad. No habrá forma en la que puedas deshacerte de mí, yo estaré un paso más adelante que tú. Y así Dana será toda mía como es debido.— decía Scott dejando los juegos e ir con todo.

Dejó el lugar para ir al auto de sus padres. Ya adentro fue que pensó en lo que haría para así, dejarle un mensaje a Lincoln. Y ese es en que nadie puede burlarse de él, y de que se mantenga lejos de Dana, a menos que pague las consecuencias. No permitirá que Lincoln siga siendo más popular, solo hay un chico popular en la escuela, y ese era él, Scott.

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Hola amigos, ¿Cómo están? Espero que bien.

¡Al fin, luego de mucho por fin hemos llegado al capítulo donde se había quedado la historia tras lo sucedido con mi anterior cuenta! No sabe lo feliz que estoy, no fue nada fácil el volver a subir esta historia, eso lo digo ya que en su momento no hice copia de seguridad, y esa fue una gran cagada mía, pero ahora ya no volveré a cometer ese mismo error, ahora tengo todos los capítulos de esta historia guardados por si me llega a ocurrir nuevamente lo mismo.

Ya de aquí en los próximos capítulos se vendrán las partes chidas, en las cuales, algunos personajes tendrán un peso importante en la trama de la historia, como lo son las hermanas Loud, y también Peridot y Amatista, estas últimas en algunos capítulos le ayudarán a Lincoln con algunas cosas que sin duda será imperdible.

Además pido disculpas por no subir este capítulo hace unos días atrás, la razón del por qué no lo había subido antes fue lo siguiente.

Así es, este capítulo es el más largo de esta historia hasta el momento, re inspirado estaba ese día cuando hice este capítulo. Y no dudo de que más adelante haya más capítulos así de largos.

Otra cosa a mencionar, es que le quiero mandar un enorme abrazo y agradecimiento a SantiFollietti, ya que él fue quien me ayudó a traer de regreso esta historia. Sin él no habría más Danacoln. Man, sin duda te agradezco de aquí hasta el día que se muera Nicolás Maduro. Sin vos esto no hubiera sido posible. Denle las gracias a él.

Aviso de que me tomaré unos días de descanso de esta historia. Neta que me dejó cansado mentalmente, pero descuiden, solo será unos días nada más, y luego retomaré en donde se había quedado, en lo que se vendrá en el siguiente capítulo y en los siguientes que como digo, están para no perderselos.

Ya sin nada más que decir, aparte de estar nuevamente ustedes con la historia, cosa que agradezco. Los dejo con mis angelitos para despedir este capítulo.

¿Te gusta el pan?