El peliblanco caminaba con rumbo a su trabajo, en su mente no dejaba de pensar quién estaría detrás de todo que ha estado sucediendo. No tenía sentido de que alguno de sus compañeros quieran hacerle quedar mal y más con Dana, con quién desde que se conocieron supo desde ese momento que ella es una buena persona, y también una excelente amiga.

Mientras más lo pensaba no llegaba a una sola posible respuesta. Aún recuerda lo que Demian le dijo, de que Scott podría estar detrás de esto, aunque no podía echarle la culpa hasta que haya pruebas en su contra, por lo que solo lo dejaría como un sospechoso nada más. Llegó a su trabajo en donde fue a su puesto de trabajo.

Durante el tiempo que el albino estaba preparando las pizzas estaba muy pensativo, tanto que casi se le quema una pizza. Vio lo que casi hubiera sido un incendio al lugar, sacudió su cabeza para así despejar su mente, toda esta situación le carcomia su mente. Por lo que primero lo que haría será en buscar pruebas de que él no fue el causante de poner ese cañón de pintura en el casillero de Dana.

Lincoln hizo una pizza, la cual era mitad vegetariana y mitad carne. La llevó a una mesa en donde vio a los clientes que la pidieron. Al poner la pizza sobre la mesa Lincoln pudo reconocer a una de las personas que estaban ahí, el cual era uno que estuvo la noche anterior, previo a la broma que le hicieron a Dana.
_ Oiga, usted lo conozco. Usted vino hace unos días aquí para celebrar una fiesta.- decía Lincoln al cliente.

La persona con la que hablaba Lincoln era un tipo de unos 25 años, cabello rubio y de cuerpo algo trabajado.

_ Así es, vine aquí para celebrar una despedida de soltero a un primo mío. ¿Por qué lo pregunta?- preguntaba el cliente.

_ No tengo mucho tiempo para hablar, se lo diré luego, ya que es importante y usted me puede ayudar. Solo le pido que pueda regresar más tarde y así le contaré todo.- pedía Lincoln al cliente.

_ Si es importante para ti no hay problema. Puedo volver luego y así me dices el por qué yo soy de ayuda para ti.- dijo el tipo a Lincoln.

_ En verdad se lo agradezco, lo veré luego, debo seguir trabajando.- dijo el albino.

Así Lincoln regresó a la cocina en donde siguió preparando varias órdenes, Mario había visto que su empelado de cabello blanco estaba platicando con un cliente. No es por ser chismoso, solo que se le hizo curioso verlo platicar con el cliente como si lo conociera. Aprovechó hablar con él ya que estaba en su hora de descanso.

_ Lincoln, hace unos momentos atrás te vi hablar con un cliente. No es que esté molesto ni nada, solo quisiera saber, ¿De que estaban hablando?- preguntaba Mario a su empleado.

_ Es complicado de contar, pero trataré de resumirlo lo mejor que pueda.- comentaba el peliblanco.

Seguido de eso Lincoln procede a contarle de manera resumida a su jefe lo que ha estado sucediendo en torno a él y Dana, de como alguien o algunas personas han estado haciéndole bromas a Dana y que de forma descarada lo han culpado de todo. Hasta le contó la última broma que le hicieron a la castaña y que a él, lo señalan de culpable, cosa que no lo es.

_ ¡Mama mía! Eso es inaudito, no puedo creer que haya mocosos con ese tipo de intenciones. ¿Acaso ellos tendrán algo en contra de ella o contigo?- exclamó totalmente sorprendido el italiano.

_ Dudo mucho que alguien le quiera hacerle daño a Dana por venganza, ella es una chica ejemplar y que nunca se metería en problemas. Y de que alguien esté en mi contra también lo dudo, del tiempo que llevo estudiando en esa preparatoria no he tenido problemas con nadie, solo un pequeño altercado con un compañero, de ahí nada.- explicaba el peliblanco.

_ Sea quienes estén detrás de eso espero que los atrapen como las sucias ratas que son. Y que dejen en paz a tu novia y a ti.- dijo el hombre con bigote.

_ Daba no es mi novia, es solo mi compañera y mi amiga nada más.- corrigió Lincoln a su jefe.

_ ¿En serio? Yo creía que esa chica Dana era tu Sposa. Por el modo en que te preocupas por ella, no muchos harían ese tipo de cosas por una bella ragazza. En fin, te dejaré que descanses y luego vuelves al trabajo.- decía el hombre a su empleado.

Lincoln siguió descansando para así luego seguir con su trabajo, a su mente le llegó lo que había dicho Mario acerca de él y Dana, de que él pensaba que Dana era su novia. No le molestó que él pensara en eso, ya que de momento no está interesado en conseguir una novia, solo quiere concentrarse en sus estudios, y también puede que Dana piense lo mismo, sobre conseguir un novio en estos momentos.

Mientras tanto.

Dejaremos a Lincoln unos instantes para ir a otro lugar, nos dirigimos a nada menos que la casa donde vive Dana. En su interior podemos ver a la castaña, quien estaba en su habitación, haciendo su tarea mientras escuchaba música en su celular.

La castaña tenía su vista puesta en su cuaderno, y en su mano derecha tenía un lápiz. Escuchaba una canción, la cual se llama "Neon Lights" de la cantante Demi Lovato. Estaba muy concentrada en lo suyo, no obstante a su mente le llegó el recuerdo del momento en que vio el vídeo de las cámaras de seguridad, donde vio que Lincoln fue el responsable de hacerle esa broma.

Apagó su celular y se quitó sus audífonos, llevó sus manos a su rostro y de ahí se quedó pensando en lo que le ha pasado en los últimos días. Ha sufrido muchas humillaciones, las cuales en lo que lleva de vida nunca le tocó vivir, pero ahora lo estaba sufriendo y de una manera para nada agradable. Y todo eso gracias a nada menos que Lincoln.

Cuando pensó en el causante del por qué ahora es la burla en su escuela fue que recordó en las cosas que pensó sobre Lincoln cuando lo conoció por primera vez. En ese entonces ella creyó que Lincoln no era la clase de chico que solo se fija en el cuerpo de las chicas, que se la pasa soltando piropos a diestra y siniestra a cada mujer que viera, o que se cree superior que los demás. Nada de eso, en él ella vio a un chico normal como ella o como su amiga Karen, el cual solo quería seguir con sus estudios y llegar a la universidad.

Pero ahora su punto de vista hacia Lincoln ha cambiado demasiado, nunca antes en su vida ha estado realmente decepcionada y molesta con alguien, ella por lo general no tienta a enojarse mucho, ni cuando tiene alguna discusión con su hermano menor, aunque eso es normal con los hermanos, pero ya con otras personas la cosa es diferente. Con Lincoln ha sentido eso que nunca antes creyó que le pasaría.

_ Debo dejar de pensar en eso, es mejor que me aleje de él para así evitarme que me suceda algo igual o peor con lo ocurrido en la cafetería. Iré a la cocina por algún refrigerio.- se dijo a si misma la castaña.

Se levantó de su silla y salió de su habitación. Bajando las escaleras vio a su hermano menor, el cual veía sus programas favoritos. Estando cerca del pelinegro le quiso saludar.

_ Hola Dylan, ¿Está bueno el programa que miras?- saludaba Dana a su hermano.

_ La verdad está aburrido, no hay nada bueno en la tele. Mejor miro que hay en internet, al menos eso me entretiene.- respondía el chico a su hermana.

Dana vio a su hermano, quien sacó su celular y se acostó a lo largo del mueble. No quiso seguir molestándolo, lo conoce muy bien y sabe que él se desespera y suele ser temperamental, retornó su camino hasta la cocina, fue al refrigerador donde abrió la puerta y buscó algo que le aparecía comer.

Vio una rebanada de pay de mora que su madre hizo, lo tomó sin preguntar de quién sería, luego de eso tomó un poco de limonada que había también, se sirvió en un vaso y luego de eso regresó a su habitación para seguir con sus estudios. Más tarde se puede ver a los padres de Dana y Dylan, quienes estaban bien cambiados, lo cual indicaba que ambos van de salida.

Dana, quien se encontraba en la sala mirando una serie para adolescentes, la cual trata de un chico que quiere volver a enamorar a una chica, pero esta última no le da importancia, el nombre de ese programa llevaba unas siglas tipo "t k +" o algo así. La castaña vio a sus padres, pudo notar que ambos estaban bien cambiados, lo cual le indicaba que los dos tendrían una cita.

_ ¿Van a salir en una cita? Sino mal recuerdo su aniversario es dentro de dos meses.- preguntaba Dana a sus padres.

_ No es eso hija, tu madre y yo iremos a una cena que mi jefe nos invitó a nosotros dos. En donde también hablaremos de cosas relacionadas al negocio y otro tipo de cosas.- respondía el padre de Dana.

_ Ooh ya veo.- entendió la castaña.

_ Así es, por lo tanto te quedarás a cargo mientras no estamos, cuida a tu hermano y no dejes que haga alguna locura. Aquí tienes dinero para que compren lo que ustedes quieran. Ya nos tenemos que ir, vendremos más tarde, adiós mi vida.- dijo la madre de Dana.

_ Descuida, yo cuidaré de la casa y de Dylan, ustedes dos vayan a divertirse, no hay de que preocupar.- decía la castaña.

Sin nada más los esposos salieron de la casa, donde se despidieron de su hija mayor, se subieron al auto y de ahí partieron al lugar donde ambos señores tendrían una cena con el jefe del padre de familia. Dentro de la casa se puede ver a Dana, quien está a cargo de cuidar la casa y de su hermano, y hablando de este último, Dana vio a su hermano, quien bajaba las escaleras.

_ Dylan, mamá y papá salieron a cenar con el jefe de papá, por lo que me dejaron a cargo. Por cierto, ¿Que te gustaría de cenar? Mamá me dejó dinero para comprar lo que sea.- le preguntaba Dana a su hermano.

_ Una pizza, que no tenga nada de vegetales ni mucho menos que tenga piña.- respondió el pelinegro.

_ Okey, entonces será una pizza.- decía tras la respuesta de su hermano.

En eso Dana tomó el teléfono que había en la sala y llamó a la pizzería y ordenó una pizza para ella y su hermano. Escogió una que no tuviera vegetales ni nada parecido, solo pura carne y ya, luego de pedir su pizza le tocaría esperar a que llegase.

Con Lincoln.

Regresando con Lincoln, vemos al ya mencionado, quien se encontraba en la cocina preparando unas pizzas. Pero no fue hasta que apareció su jefe, quien se acercó a su empleado para pedirle algo.

_ ¿Sucede algo señor Mario?- preguntaba Lincoln.

_ Si, necesito que vuelvas a ser repartidor, ya que uno de los repartidores tuvo que irse ya que su madre se encuentra enferma. Y el otro anda dejando un pedido.- decía Mario lo que sucede.

_ No hay problema con ello, me haré cargo de eso, aunque debería de contratar a más personal para que así no haya problemas con eso.- dijo Lincoln a su jefe.

_ Lo voy a hacer, pero antes de que te vayas prepara esta orden y luego la entregas. Aquí está la dirección de la casa donde la debes de llevar.- dijo Mario al peliblanco.

_ Muy bien, enseguida lo preparo y la iré a dejar.- acató Lincoln.

Ya dejando de hablar fue que el peliblanco se puso a preparar la pizza que Mario le pidió que hiciera. Tras hacer la pizza fue que se preparó para así volver a trabajar de repartidor. Recordó la primera vez que hizo esto, le había ido muy bien, esperaba que nuevamente le fuera igual, o incluso mejor que la otra vez.

Ya con la pizza en la parte trasera de la scooter fue que Lincoln partió con rumbo a la casa en donde ordenaron la pizza, veía la ubicación gracias a la aplicación de su celular. Estuvo así en donde había llegado con tiempo de sobra, bajó de su vehículo y caminó hasta la entrada de la casa para así entregar la pizza.

Regresando con Dana.

Retomando con la castaña, vemos a la ya mencionada, quien seguía mirando la televisión. Vio a su hermano, quien se le acercó para preguntarle algo.

_ ¿Ya pediste la pizza? Muero de hambre.- preguntaba Dylan.

_ Ya la pedí y ya debe de estar en camino. Solo espera un poco más.- respondía Dana.

_ Eso espero, si llega tarde no le pagaremos al repartidor. Iré a la cocina por un refresco, avísame cuando ya llegue la pizza.- dijo el pelinegro a la castaña.

Dylan fue a la cocina por un refresco para así tenerlo listo para cuando llegue la pizza. Dana escuchó el timbre sonar, lo que le dio a entender que la pizza había llegado.

_ Debe ser el repartidor, mejor no hago esperar a Dylan y recibo la pizza y luego le pago al repartidor.- dijo la castaña.

Dana se levanta y toma el dinero que dejó en la pequeña mesa que tenía enfrente suyo. Fue hasta la puerta y la abrió para así recibir su comida, cuando la abrió se llevó una sorpresa que no se esperaba para nada.

Lincoln tocó el timbre de la casa para así alguien saliera y reciba la pizza, esperó unos segundos hasta que vio la puerta abrirse. Ya cuando se abrió totalmente el albino vio algo que no se esperó para nada. Y es que quien abrió la puerta de esa casa era nada menos que Dana.

Por su parte la castaña, al igual que Lincoln estaba sorprendida de encontrarse al peliblanco, y más que nada él sea el repartidor. Ninguno de los dos no sabían que decir o hacer, Lincoln por su lado estaba nervioso, no se esperó esto para nada, de que la chica con la que quiere arreglar todo este mal entendido y que ambos pudieran volver a como era antes cuando se conocieron, ser amigos.

Estuvieron así hasta que Dana fue la que rompió el silencio, ya que no quería estar cerca de Lincoln, luego de todo lo ocurrido y que ahora sabe que él es una mala influencia, eso le daba muchos motivos para no seguir estando con él.

_ Vaya sorpresa con la que me topé.- comentó la castaña.

_ Ho-Hola Dana... que casualidad encontrarte aquí.- saludaba Lincoln a su compañera.

_ Aquí vivo yo, ¿Que es lo que quieres?- preguntaba Dana.

_ Vi-vine aquí ya que ordenaron una pizza, y pues... vine a dejarla.- decía Lincoln entregando la pizza.

_ Creí que eras el cocinero y no repartidor. Cómo sea, aquí tienes, adiós.- dijo Dana pagando la pizza.

La castaña procede a cerrar la puerta para así irse a comer la pizza junto a su hermano, pero no pudo hacerlo debido a que Lincoln puso su pie para evitar que Dana cierre la puerta. Dana vio lo que hizo el peliblanco, por lo que se dirige a él.

_ No esperes propina de mi parte, ya vete.- exclamó la castaña.

_ Dana espera, solo déjame que te explique todo. Yo nunca te haría todas esas cosas a ti, jamás lo haría. Pero si te puedo decir que alguien ha estado haciendo todo esto, de hacerte daño y echándome la culpa a mí, debes de creerme.- trataba de explicar el albino.

_ Aya ja, ¿Y como explicas el vídeo donde se ve a ti colocando esa cosa en mi casillero? Se nota que fuiste tú, ¿O será un clon malvado tuyo que vino de otra dimensión para desatar miedo, pánico y muerte a su paso de una manera inhumana con poderes mágicos?- decía sarcástica la castaña.

_ Te juro que esa persona de ese vídeo no soy yo, alguien se hizo pasar por mí para así hacerme quedar mal. Cómo te dije, nunca haría algo así, ni mucho menos con alguien como tú, eres alguien realmente genial y que me gustaría seguir llevándome bien contigo.- volvía a explicar el peliblanco.

_ No sé si creerte, yo creí que eras un buen chico, que se preocupa por los demás, que no es alguien presumido, o que le gusta acosar a las chicas. Pero veo que estoy equivocada, eres alguien al cual no quisiera volver a acercarme, por ti soy el hazmerreír de muchos por ese vídeo en la cafetería. No quiero volver a ser humillada así otra vez.

Mientras los dos adolescentes estaban hablando de la cocina apareció Dylan, quien vio a su hermana en la entrada hablando con alguien. Notó que ella tenía en sus manos la pizza, por lo que sin rechistar fue a dónde está su hermana para así pueda comer.

_ Ya llegó la pizza, dámela que tengo hambre.- decía el pelinegro.

En eso Lincoln vio a Dylan y este último también lo mira, ambos chicos hicieron contacto visual, Lincoln al verlo se le hizo familiar, como si ya hubiera visto a ese chico antes. Haciendo memoria fue que le vino a la mente cuando entrenaba con la tía de Demian, cuando vio a un chico pelear con dos que eran más altos que él.

Lo vio detenidamente y pudo corroborar que era él, el chico que le hizo recordar a sus hermanas Lynn y Lucy. Tampoco se esperaba encontrarse con ese chico al cual salvó de recibir una paliza de esos dos grandulones de su escuela.

_ Oye, yo te conozco. ¿No eres el chico que hace unos días te salvé junto con Demian de unos dos tipos de tu escuela?- le preguntaba Lincoln a Dylan.

El pelinegro al oír lo que Lincoln dijo fue que lo miró nuevamente, al verlo fue que recordó lo sucedido ese día. Estaba molesto de que Lincoln y Demian fueran a ayudarle, ya que no necesitaba la ayuda de nadie, además de que no se fijó en el color de cabello de Lincoln, de lo molesto que estaba no se percató de ello.

_ Espera, ¿Cómo que lo salvaste? ¿Que está ocurriendo aquí?- preguntaba Dana.

En eso Dylan se fue de ahí con la pizza en mano e ignorando lo que la castaña preguntó, Dana lo vio irse sin decirle nada, conocía ese comportamiento de su hermano, por lo que sabía que algo ocultaba, sin embargo Lincoln le respondería la pregunta a su compañera.

_ Yo puedo explicarte lo que sucedió. Lo que pasó es que Demian y yo íbamos caminando cuando vimos a él, quien estaba peleando con unos tipos más altos que él. Por lo que los dos lo defendimos de que él recibiera una paliza mayor.

_ Y por cierto, ¿Quién era él?- preguntó Lincoln.

_ Él es mi hermano menor Dylan. Con quien debo de hablar sobre esto. En fin, ya no quiero seguir hablando, ya te pagué así que adiós.- dijo Dana cerrando la puerta.

_ Espera Dana aún no he....- fue interrumpido por la puerta en su rostro.

_ Rayos, no pude seguir hablando con ella, aún sigue molesta y además aún cree que soy yo el del vídeo de seguridad. Solo espero que el tipo venga para así pedirle que me pase el vídeo que él grabó la noche anterior. Para así demostrar que soy inocente.- dijo a si mismo Lincoln.

Fue a dónde estaba su scooter y regresó a la pizzería para seguir entregando otros pedidos. Mientras que adentro de la casa Miller, Dana estaba parada dándole la espalda a la puerta, ya que estaba ahí pensando en lo que Lincoln le dijo, de que había defendido a su hermano de dos bravucones. Vio a Dylan, quien llevaba tres rebanadas de pizza y su refresco, estaba por subir las escaleras hasta que lo detuvo su hermana.

_ Espera Dylan, aún me tienes que explicar el como Lincoln te conoce a ti.- quería una explicación la castaña.

_ ¿Conoces a ese tipo de cabello blanco?- ahora preguntó Dylan.

_ Es un compañero de preparatoria. No me cambies la conversación, respóndeme, ¿Es cierto que él te defendió de dos tipos?- preguntaba Dana a su hermano.

_ ¡Está bien si, él y un tipo gordo me defendieron de esos dos idiotas de Austin y Mack! ¿Ya estás contenta?- exclamó molesto el chico.

_ Ya te hemos dicho que no andes peleando con varios chicos. Uno de estos días te mandarán grave al hospital.- reprochó a su hermano.

_ Esos dos idiotas querían quitarme mi dinero, por lo que tuve que defenderme. Pude haberles dado una lección si no fuera por el cabeza de hisopo ese y el gordinflón. Ya me voy a mi habitación, no quiero que me molesten. Buenas noches.- terminó para luego subir las escaleras.

El chico de cabello negro subió las escaleras dejando a su hermana en el primer piso, Dana estaba procesando en lo que su hermano le había respondido. Estaba pensativa, ya que no se imaginó que Lincoln haya defendido a su hermano menor, algo que le cuesta un poco creer, ya que sabe perfectamente que su hermano suele meterse en problemas, y que en ocasiones llega a la casa con golpes y moretones en su rostro, lo cual era indicios de que se peleó con alguien. Además de que ha visto a los chicos con los cuales se peleó, y como los dejó a cada uno.

No sabía que decir, le costaba mucho creer que Lincoln defendió a su hermano, por un lado estaba alegre de que hiciera eso, y por otro lado no sabía que opinar sobre esto que hizo el albino. Ya que esto fue un gesto de heroísmo y de buena voluntad el proteger a su único hermano de esos dos chicos, a los cuales ha visto en ocasiones, ya que cuando los ve inmediatamente recibe piropos para nada lindos de esos dos.

_ No puedo creer que Lincoln haya defendido a Dylan. Conozco bien a ese jovencito y sé que él no se dejaría ayudar de nadie, pero esto que hizo me dejó sorprendida, nunca antes nadie ha hecho eso por Dylan, y eso me alegra.

Fue entonces que a la mente de la castaña comenzaba a durar de que si Lincoln es una mala influencia, aunque no estaba confiada sobre eso. Puede que solo lo hizo por conveniencia, o quizás no y que de verdad lo hizo para protegerlo sin saber que él es su hermano.

_ Mientras tanto tendré el beneficio de la duda sobre él. Ya que aún quiero ver si consigue pruebas de que él no fue el causante de la broma a mi casillero.- se dijo a si misma Dana.

Dejó de pensar en eso y fue a la cocina a tomar unas rebanadas de pizza, ya que le dio hambre. Al tenerlas fue de regreso a la sala a seguir mirando la televisión.

Con Lincoln.

Regresamos otra vez con Lincoln, el cual luego de entregar la pizza a la casa de Dana siguió con su trabajo. Durante un buen rato no dejaba de pensar de que ese chico al que ayudó días atrás se trataba de nada menos que el hermano menor de Dana, simplemente no sabía que decir.

Las horas pasaron y ya era momento de que Lincoln saliera de la pizzería, pero no iría a su casa, ya que debía de esperar al tipo rubio para que le ayude a proporcionarle el vídeo en donde él aparece. Estuvo afuera de la pizzería esperándolo, veía a todos lados por si llegaba a aparecer.

Pasaron y pasaron los minutos, Lincoln ya estaba empezando a creer que el tipo no vendría, o sucedió algo y no podrá venir. Ya para cuando pasó media hora Lincoln ya se había resignado, el tipo no vendría, estaba por tomar camino a su casa hasta que vio que el tipo apareció.

_ Lo siento amigo, es que sucedió una emergencia y no pude venir antes.- decía el rubio a Lincoln.

_ Descuida amigo te entiendo. En fin a lo que te cité aquí horas atrás, te estarás preguntando el por qué te pedí a que vinieras a la pizzería.- decía Lincoln al sujeto.

_ Por supuesto viejo, pude notar que es importante y que sería de ayuda para ti. Así que cuéntame qué ocurre para así ayudarte.- pedía explicación el tipo.

En eso Lincoln le resume lo que sucede y el por qué lo necesita, y es para que le proporcione el vídeo donde él y unos amigos estuvieron la noche anterior previo a la broma que le hicieron a Dana.

_ Es por eso que te necesito. Tú tienes pruebas de que yo no le hice esa broma a mi amiga.- terminó de explicar Lincoln.

_ Diablos amigo, quien sea que esté detrás de todo eso debe de estar loco. No te preocupes, puedo ver que eres un buen sujeto, ahorita mismo te daré el vídeo de esa noche en la despedida de soltero de mi primo.- decía el tipo al peliblanco.

_ Si lo subiste a una de tus redes sociales me gustaría que me muestres tu perfil para que así crean que no manipulé el vídeo.- pedía otra cosa Lincoln.

_ Está bien, el vídeo lo subí en mi Facebook. Solo dame tu nombre y yo te mando una solicitud y así mandarte el vídeo.- decía el tipo a Lincoln.

El albino le mandó la solicitud de Facebook al tipo, quien este le dijo su nombre, así Lincoln pudo encontrar el vídeo que el chico subió de la noche antes de la broma pesada a Dana. Ya una vez que hicieron todo fue que Lincoln se dirige al chico.

_ Muchas gracias... Elliot. En verdad te agradezco que me hayas ayudado. Ahora podré comprobar que soy inocente y que no fui el responsable de esa broma a mi amiga.- agradecía Lincoln al rubio.

_ De nada Lincoln, luego de lo que me acabas de contar me sorprendió. Espero que logren atrapar a los verdaderos responsables de hacerle eso a tu amiga, me tengo que ir, nos vemos luego viejo.- se despedía Elliot del peliblanco.

_ Está bien, adiós y gracias nuevamente por ayudarme.- se despedía Lincoln del rubio.

Acabado con esto ahora sí Lincoln prendió viaje a su hogar, estaba contento de que tiene prueba más que suficiente de que él no fue el de la broma hacia Dana. Mañana mismo se lo mostraría a su director y así vea que él no es un alumno busca pleito ni mucho menos un bromista como su hermana Luan.

Al día siguiente.

Es un nuevo día en Detroit. Y en la preparatoria se puede ver a Dana, quien había llegado a su centro educativo. Cerca de ahí se encontrabq Scott, quien estaba a la espera de que su amor platónico llegase, por lo que finge que apenas acaba de llegar, camina para así "casualmente" toparse con Dana.

_ Buenos días Dana, ¿Lindo día no te parece?- saludaba Scott con una sonrisa fingida.

_ Buenos días.- dijo sin más la castaña.

Scott solo caminaba al lado de su futura esposa. Al entrar al recinto estudiantil fue que se podía ver a varios alumnos, quienes se reían y comentaban cosas a Dana, quien solo agachaba la cabeza por la vergüenza que sentía. El rubio notó eso y no le era de sorprender, ya que lo sucedido en la cafetería aún siguen en las mentes de todos los alumnos, y todavía sigue en tendencia en internet.

Fue en eso que Scott aprovechó para hablarle a Dana y así entablar una conversación, más que nada así tratar de manipular a la castaña y llevar a cabo la siguiente fase de su plan.

_ Tal parece que sigues siendo el centro de atención de todos en la escuela. Y todo por ese vídeo.- decía Scott hablando a la castaña.

_ Por favor, lo último que quiero yo en estos momentos es recordar eso. Cómo quisiera que ese vídeo se borre para siempre.- pedía la castaña.

_ Aún no puedo creer que el director no haya expulsado a Lincoln por lo de la broma con la pintura en tu casillero. Si fuera él ya lo hubiera echado a patadas de aquí.- volvía a hablar Scott.

_ El director lo había expulsado, pero Lincoln le dijo que no fue él y que lo demostraría que no lo hizo. Y que encontraría pruebas para ello.- comentaba Dana sobre lo que pasó.

_ No creo que encuentre pruebas que compruebe que no lo hizo. Solo está ganando tiempo para así hacerte una nueva broma.- comentaba el rubio oxigenado.

_ Pese a todo eso, yo creo que Lincoln no es tan malo, digo. Sigo creyendo que él lo hizo, aunque por un lado pienso todavía que él es un buen chico, y no sería capaz de hacerle algo a alguien.- decía Dana recordando lo que hizo Lincoln con su hermano.

Scott vio y escuchó lo que dijo su próximamente novia, de que Dana cree que Lincoln no fue el responsable de hacerle esa broma, pero se le hizo muy sospechoso el tono de voz que usó para decir eso último. Por lo que sin previo aviso detuvo su andar y tomó del hombro a Dana para que así le viera a su rostro.

_ Escucha Dana, no sé que puedes estar pensando, pero solo diré que lo mejor que puedes hacer es alejarte de ese tipo, por qué lo último que querrás es que él te vuelva a humillar, pero aún peor a comparación con lo ocurrido en la cafetería.

_ Lo que trato de decirte es que sería mejor para tu bienestar es mantenerte lejos de él. No dejar que él se te acerque, intentar estar con alguien más, como yo, yo nunca haría ese tipo de cosas contigo, puedes que pienses lo contrario, pero es verdad. Solo piénsalo, no volverás a ser la burla de todos, incluso te podré defender de quién trate de burlarse de ti, ¿Que dices?- trataba de persuadir Scott a Dana.

La castaña escuchó lo que Scott le había dicho, de mantenerse lejos de Lincoln y evitar ser la burla nuevamente. Eso ya lo estaba haciendo desde hace días, y aún lo sigue haciendo, aunque por otra parte no se juntaría con Scott, aún no olvida los múltiples intentos de que ella sea la novia de él, cosa que nunca va a pasar.

Lo pensaba más a profundidad, recordó lo de ayer de lo que se enteró por parte del propio Lincoln y confirmado por el propio Dylan, de que el albino defendió a su hermano menor, algo que nadie haría eso gracias al orgullo de su hermanito de no necesitar ayuda de alguien, ni aún cuando pueda estar muy mal herido.

Estaba pensando muy francamente lo que Scott le había dicho. Ya que entre todos en la preparatoria, Scott es de las pocas personas con la cual se juntaría, y no olvidando el como este trata de enamorarla y pedirle una y mil veces que sea su novia. Algo del cual Dana no está para nada interesada, aunque no estaría de más pasar, por lo menos, un pequeño momento con él, para evitar que le suceda algo estando cerca de Lincoln.

_ Yo... déjame pensarlo mejor. Debemos de ir a nuestro salón.- le respondió Dana a Scott.

La castaña entró a su salón dejando al rubio afuera en el pasillo. El oxigenado al ver la reacción de su chica supo en ese momento que la tenía como quería, ya que se podía ver qué estaba por aceptar, aunque no le haya dicho que si no quitaba el hecho de que estuvo a punto de decirle si.

Los alumnos llegaban al salón en donde Lincoln había llegado, se le podía notar en su rostro una sonrisa, pero no cualquier sonrisa, sino una que de podía notar seguridad. Demian lo vio y su instinto le decía que algo estaba ocurriendo, por lo que aprovechando de que la profe no ha llegado decide preguntarle que sucede en voz baja.

_ ¿Que ocurre amigo, por qué tan sonriente el día de hoy?- preguntó el pelinegro.

_ Pude encontrar la evidencia suficiente para demostrar mi inocencia.- respondía Lincoln también en voz baja.

_ ¿En serio, como lo hiciste?- volvió a preguntar Demian.

_ Luego te lo cuento, como dije, es más que suficiente para comprobar que no fui el que puso ese cañón de pintura al casillero de Dana.- contestaba el peliblanco.

Las clases comenzaron en donde todos prestaron de su total atención. Fue así hasta que llegó la hora del recreo, Dana estaba almorzando con su amiga Karen. Quién esta última había visto a su mejor amiga acompañada de Scott, algo que se le hizo raro, ya que su amiga no le gusta estar cerca del pelo teñido ese.

_ Oye Dana, hace unas horas te vi que estabas con Scott, además de que estabas platicando con él. ¿De que estaban platicando?- preguntaba la chica a Dana.

_ No mucho, solo que él me comentaba que debería de alejarme de Lincoln y que busque otras personas para estar mejor acompañada. Y se puso a si mismo como ejemplo.- respondía la castaña.

_ ¿Y que fue lo que le contestaste?- preguntaba nuevamente Karen.

_ Le dije que lo pensaría mejor, nada más.- respondía Dana.

_ ¿De verdad estás dispuesta a Ester con Scott? Lo digo por qué ese cabeza de aire ha intentado de todo para que seas su novia, y si estás dispuesta a pasar tiempo con él le estarías dando un pase libre para que lo siga haciendo hasta el cansancio.- comentaba Karen a la castaña.

_ ¿Tú crees que no he pensado sobre eso? Es claro que eso hará él. Lo que pienso yo es que debería de pasar tiempo con alguien más, si estoy cerca de Lincoln me podría pasar algo así como hace días.- le respondió Dana a Karen.

_ Y hablando de Lincoln, ¿Él ha encontrado "pruebas" que demuestre que él no tuvo la culpa?- preguntaba Karen por Lincoln.

_ Aún no lo sé, lo más posible es que no haya encontrado nada. O puede que si, aunque lo dudo mucho.- contestaba Dana.

Ambas chicas estuvieron así hasta que terminó el recreo, salieron de la cafetería con rumbo a su siguiente clase. No obstante, en ese preciso momento los altavoces se encendieron en donde el director haría un llamado.

"Dana Miller a la oficina del director. Repito, Dana Miller a la oficina del director"

Dana se preguntaba que estaba pasando, no quiso hacer esperar a su director y fue a la oficina a ver qué pasaba. Entró y vio a su director, acompañado de nada menos que Lincoln. Se preguntaba que estaba haciendo ahí, posiblemente sea lo de que si consiguió pruebas o quizás no, eso pronto lo sabrá, se sentó en la silla a la par de Lincoln y de ahí el director habló primero.

_ Muy bien, ya que la señorita Miller se encuentra aquí es momento de que nos muestre que pudo conseguir, señor Loud.- dijo el director a Lincoln.

_ Okey, como les había contado hace días, yo no fui el que puso ese cañón de pintura en el casillero de Dana, ya que la noche anterior estaba trabajando hasta tarde, debido a que llegaron varios clientes a festejar una despedida de soltero, y tuve que atenderlos.

_ Lo que les voy a mostrar es un vídeo que uno de los clientes grabó en ese momento, y aquí lo tengo, el chico lo subió a su perfil de Facebook. Aquí se los mostraré para que vean que no les estoy mintiendo.

En eso Lincoln le dio su celular al director, el cual lo tomó para ver qué había. Dana se puso a la par de su director para ver también el vídeo. Ambos pudieron notar la fecha en que se subió el video, había sido el día en que sucedió el hecho donde la castaña fue bañada en pintura. En el vídeo se podía ver a varios tipos en la pizzería festejando la despedida de soltero a uno de ellos, llegado a un punto se puede ver a Lincoln, quien aparece con unas pizzas a sus clientes.

_ Como pueden ver en el vídeo yo estoy ahí atendiendo a esos chicos. De ser así no hubiera ido hasta aquí y colocar ese cañón de pintura. Eso demuestra que no fui yo.- decía Lincoln al director y a Dana.

El hombre le puso pausa al vídeo, lo que vio lo dejó pensando, ya que Lincoln pudo encontrar evidencia que no había sido él el causante de poner ese artefacto en el casillero de la castaña. Aunque no estaba convencido del todo.

_ Aunque haya traído evidencia no estoy convencido, puede que usted haya aprovechado un momento en salir de su trabajo y venir hasta aquí y colocar esa cosa en el casillero de su compañera.- dijo no muy convencido el hombre.

_ Sabía que usted diría eso, además de que no habrá visto el vídeo completo. Si no mal recuerdo, en el vídeo de seguridad de la noche anterior previo a la broma a Dana, en el reloj marcaba las 9:28 PM, quiero que adelante un poco el vídeo y lo verá.- le pidió Lincoln al director.

El hombre hizo caso a su alumno, adelantó un poco el vídeo, Lincoln se ouso al otro lado del director, ya que en el lado izquierdo se encontraba Dana. En eso en el vídeo se podía ver el brazo de uno de los chicos, el cual llevaba puesto en su muñeca un reloj, y gracias a la calidad del vídeo se podía ver que hora era en ese momento, eran las 9:26 PM.

_ Ahí, como pueden observar en el reloj que lleva ese tipo se muestra la hora exacta que era en ese momento, lo cual es prueba suficiente que no fui el causante de provocar esa broma pesada a Dana.- dijo Lincoln a su director y a Dana.

Tanto el hombre, como Dana vieron mejor el vídeo y pudieron comprobar que si, Lincoln había estado trabajando todo ese tiempo en la pizzería y que no pudo haber sido él quien instaló ese artefacto en el casillero de Dana. El director le entregó a Lincoln su celular y se pone firme en su silla.

_ Debo de confesar que me ha sorprendido señor Loud. No creí que en verdad haya encontrado evidencia que compruebe su inocencia. Por lo que no lo voy a expulsar por la broma hecha hacia su compañera.- dijo el director a su alumno albino.

_ No fue fácil pero nunca perdí la esperanza de que podría hacerlo. Le había dicho que no pude haber sido yo quien hizo eso.- decía Lincoln a su director.

_ Pero me pregunto ahora mismo, si no fuiste tú quien puso esa cosa en mi casillero, entonces, ¿Quién habrá sido?- se preguntaba la castaña.

_ De eso me podría encargarme yo mismo mirando los videos de las cámaras de seguridad. Por ahora vayan a su salón de clase, y nuevamente señor Loud, no está expulsado, y también le pido una disculpa.- dijo el hombre pidiendo disculpas.

_ Descuide señor director, si estuviera en su lugar también hubiera hecho lo mismo. Ya nos tenemos que ir, lo veremos luego.- le dijo Lincoln al hombre.

Ambos jóvenes salieron de la oficina del director, el cual estaba sin palabras al ver qué Lincoln fue todo este tiempo inocente, pero esto aún no había acabado, debía de buscar al verdadero responsable de esta broma, se pondría a buscar en su computador los videos de las cámaras de seguridad y así dar con o los responsables.

Por su lado Lincoln y Dana caminaban con rumbo a su salón de clase. Ninguno de los dos decían nada, Lincoln solo veía a la castaña, quien se le notaba su sorpresa al enterarse de que no fue él quien puso ese cañón de pintura en su casillero. Y Dana pues.... ella como se mencionó, estaba sorprendida, ya que sabe ahora que Lincoln nunca hizo esa broma a ella, las pruebas que él mostró lo dejó más que evidenciado.

También de que estaba pensando en lo que Karen le había dicho, con respecto a lo demás que ella sufrió por parte de Lincoln. El incidente de la cafetería, o de su ropa extraviada, que todo eso no fue del todo culpa de él, ahora todo empezaba a tener sentido, estaba completamente equivocada con respecto al peliblanco.
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Las siguientes horas pasaron volando, ya era momento de salir, Lincoln caminaba con Demian hasta la salida. El gordito había visto el vídeo que Lincoln usó de evidencia en la hora del recreo, estaba asombrado de que su amigo pudo conseguir las pruebas suficientes para demostrar que es inocente.

_ ¿Al final que dijo el director, Lincoln?- preguntó Demian al peliblanco.

_ No me expulsó, cambió de opinión al ver las pruebas a mi favor. Dijo que investigará para dar con los verdaderos responsables que me culparon.- respondía el albino.

_ Espero que logren dar con esos miserables. Me alegra que no fuistes expulsado, ya que eres el único amigo que tengo en este lugar, eres genial y único, y eso es lo que me agrada de ti.- decía Demian a su amigo.

_ Estoy halagado que pienses eso de mí, aunque también haré lo mismo que el director, buscaré a los responsables y así limpiar mi nombre de manera definitiva. No me importa quienes sean, de que van a caer caerán.- dijo Lincoln decidido en encontrar a los responsables.

Al salir cada quien se separaron y tomaron caminos distintos. Por otra parte vemos a Dana, quien en compañía de Karen subieron al autobús, ya adentro fue que Dana se dirige a su mejor amiga.

_ Karen... lo que dijiste hace días sobre Lincoln y que no fue del todo su culpa lo que me ha pasado, quiero que sepas que he cambiado de opinión con respecto a él.- le dijo Dana a su amiga.

_ ¿En serio? ¿Que pasó cuando estabas en la dirección?- preguntaba Karen.

_ Solo diré que... Lincoln es un buen chico, uno del cual nunca debí dudar de él. Me siento una tonta al ignorarlo cuando él trataba de explicarme que nunca tuvo la culpa de nada.- admitía Dana sentirse mal.

_ Me alegra que se supiera la verdad. Y no debes de sentirte mal, otra persona en tu lugar hubiera hecho lo mismo. Lo único que debes de hacer los dos es hablar tranquilamente y así dejar todo este asunto atrás.- comentaba Karen a su amiga.

Durante el viaje Dana solo se quedó mirando por la ventana, aún se sentía mal de culpar a Lincoln de todo lo que le ha sucedido. Él nunca tuvo la culpa, además de que quiere saber quién pudo estar detrás de todo sobre esa broma en su casillero, cuando lo sepa hará que no solo los expulsen, sino que confiesen si está detrás de los demás, como el incidente de la cafetería y su ropa pérdida.

Eso solo el tiempo lo dirá, por ahora lo único que debe de hacer es arreglar las cosas con Lincoln de manera civilizada y volver a ser amigos. Y que todo esto quede como un simple recuerdo que con el tiempo se irá enterrando al punto que nadie lo recordará.

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Hola amigos del metal, ¿Cómo están? Espero que bien.

Bueno, aquí el capítulo en donde Lincoln encuentra pruebas para comprobar su inocencia, así como también se revela que el chico al cual Lincoln y Demian salvaron se trataba de Dylan, el hermano de Dana.

Quiero decirles que este capítulo me costó resubirlo. Me costó un huevo y la mitad del otro para así volver a subir este capítulo. Pero al final todo quedó bien y estoy feliz por ello.

Ya sin más que decir, los dejo con mis bendiciones para despedir este capítulo.