El ying y el yang: En toda oscuridad ha luz, y en toda luz hay oscuridad. Así como en el bien hay mal y en el mal hay bien.

Toda mi vida se basaría en esa simple definición, donde hay felicidad, también debe haber sufrimiento.

Esa es mi vida. Ese es mi mundo.

— Despierta!

Abro los ojos de golpe. Toda la información se comienza a restaurar al instante.

Nombre: Núm. 15.

Edad: 17.

Creador: Dr. Gero.

Misión: No hay información.

Familiares: No hay información.

Datos completados.

Parpadeo un par de veces antes de mirar a Núm.17.

—Levántate, perezosa.

17 se retira de ahí con rapidez. Siempre está así de molesto. Suelto un suspiro antes de incorporarme del frío piso y seguirlos a ambos entre bostezos.

—Vaya, hasta que te despiertas. — 18 me mira mal. — Quiero ir a una nueva tienda de ropa, así que vamos.

Una vez más prefiero guardar silencio y seguirlos a ambos. Hacerlos enojar solo empeoraría las cosas. Ya lo hice una vez antes en mi pasado, recién cuando fui despertada. Creían que tendría la misma sed de venganza que ellos y los ayudaría a matar al Dr. Gero. Pero la verdad es que al despertarme, interrumpieron mi proceso para perfeccionarme, por lo que no alcancé a tomar una misión.

Hasta ahora lo único que han hecho es llevarme con ellos, pero la diferencia es que yo no ataco, yo no les hablo, yo no hago nada.

—¡Vamos aquí! — dice 18 emocionada. Llegamos a una tienda de ropa humilde, 18 comenzó a probarse diferentes tipos de combinaciones.

—Eres extraña. —dice 17 a mi lado. — ¿No quieres algo de ropa? Digo, es gratis.

Niego con la cabeza.

—¿No hay nada que te guste? ¿Nada que quieras?

Vuelvo a negar con la cabeza. 17 suelta un suspiro, desanimado.

—Bien.

Después de unos minutos, 18 sale con una gran cantidad de ropa en sus manos.

—¡Número 15! ¡Ayúdame!

Me apresuro a alcanzar a 18 y tomar la ropa en mis manos. Era demasiada y ella no usaría toda, solamente era la satisfacción de robarle a los pobres.

—Ni se te ocurra tirarla. —me amenaza 18. Caminamos ambas hasta el automóvil y ahí dejo toda la ropa.
Núm. 17 levanta su dedo índice y lanza un poder que destruye la tienda. La explosión solo mueve mis rizos blancos.

—¡17! ¡No hagas eso! ¡Las tiendas de ropa son mi debilidad! —Se queja Núm. 18.

Núm. 17 se ríe.

—No lo volveré a hacer, lo prometo.

Núm. 17 estaba por subirse al automóvil, sin embargo un individuo aterrizó frente a los tres.

Mi corazón comenzó a latir con rapidez. Yo lo conozco, no es la primera vez que intenta enfrentarse a ellos, él era el único que no les tenía miedo. Era valiente y fuerte.

—¿Otra vez tú? —se queja Núm. 17 con enfado.

—Esta vez no se escaparán. —dice el chico de cabello corto.

El chico era alto, y con un cuerpo bien formado. Llevaba encima un Gi naranja con azul, pero lo que más me llamaba la atención era su mirada, llevaba tristeza, odio, y posiblemente estaba llena de sed de venganza.

—Vamos 17, acaba con él.

Núm. 17 comenzó a pelear contra aquel chico. Yo como siempre, me hice a un lado a observar tal batalla. Se veía a leguas que aquel chico podría ganarle a 17, pero cuando esto estaba pasando, 18 se metió y entre ambos comenzaron a pelear contra el chico.

Y si seguían así, él no iba a ganar.

—¿Qué pasó Gohan? ¿Es que ya te cansaste? —pregunta 17 desde el aire, divertido. Lo había lanzado contra una de las casas.

Gohan se incorporó de un salto, y siguió peleando contra ellos.
Debo admitir, y como siempre desde todo este tiempo que he observado a este chico, no puedo evitar las emociones acumuladas en mi interior deseando que ganara por fin. Era la única persona que me hacía sentir de está manera, lo admiro con mucha fuerza. Es por ello que inconscientemente, al momento de que 17 iba a lanzar la última esfera de energía contra él. Yo me metí y tomé de la muñeca a 17 para eliminar su poder.

—¿Pero qué carajos estás haciendo? —me mira con enfado.

Y como pocas veces en mucho tiempo, hablé.

—E-es suficiente.

Núm. 17 me mira sorprendido y mira a 18, ambos estaban igual.

—Vaya, hasta que hablaste. ¿Eso es lo que quieres? Bien... lo dejaremos.

18 se molesta al instante sin aceptar que 17 fuera tan vulnerable a mí.

—¡De qué hablas! Hay que matarlo...

—Suficiente 18. Vámonos.

Núm. 17 comenzó a volar hacia otra dirección. 18 solo me miro mal, y se fue detrás de él. Yo le lanzo una última mirada al cuerpo de Gohan antes de retirarme volando detrás de ellos.

•|0|•

—Siempre le has llamado la atención a mi hermano. —dice 18 furiosa. Toma otro mechón de mi cabello blanco y con unas tijeras lo corta.— No creas que hago esto porque te odio o algo parecido. Simplemente, no me agradas ni tú, ni tu cabello largo.

Cierro los ojos y suelto un suspiro. 18 me toma con fuerza otro mechón de cabello y lo recorta... siempre que me crece el cabello hace eso, también cuando Núm. 17 hace algo por mí... como hoy.

—Listo. A ver si mi hermano sigue pensando que eres linda.

Abro los ojos y me miro en un pedazo de espejo roto. Nunca he sabido qué es la belleza, por lo que no me sorprende verme con el cabello mal cortado, casi como de hombre.

—Ahora... largo de aquí.

Núm. 18 se dedicó a probarse una vez más toda su ropa, 17 estaba descansando... así que decidí hacer mi rutina.

Sin que se dieran cuenta, salí de nuestra base y comencé a volar. Desde hace meses, aquel chico llamado Gohan me comenzó a interesar, y por ello también comencé a espiarlo. Poco a poco descubrí sus amistades y los lugares donde frecuentaba, al igual que su casa que está algo lejos de aquí, pero no importa.

Cerca de cuarenta minutos después, aterrizo frente a la antigua Corporación Capsula. Me subo a un árbol y desde ahí miro a través de una ventana, donde estaba la chica de cabello azul, el joven de cabello morado y Gohan.

Gohan.

Gohan estaba serio, muy serio, sus cejas se fruncían ante la molestia y sus hombros parecían tensos, pareciera que hablaban de algo nada agradable.

Aún siendo un androide, no podía escuchar nada de lo que decían.
Gohan se incorpora de su lugar y camina hacia la ventana para mirar hacia afuera. No me da tiempo de esconderme por lo que él me ve.

Su cuerpo se tensa aún más y sus cejas se levantan de la sorpresa pero no dice nada, se limita a mirarme, al igual que yo a él.

Era muy guapo, a comparación de Núm. 17, Gohan era musculoso y había algo en él que me llamaba la atención.

Después de unos segundos mirándonos el uno al otro, percibo una leve sonrisa en la comisura de sus labios que no pude percibir bien porque al instante se giró y se fue. ¡Se fue!

Dejo escapar todo el aire que tenía acumulado.

Por poco y no salgo de esta.

•|0|•

—¡Qué divertido! —grita 18 subida en la montaña rusa. Núm. 17 estaba en su carro atropellando gente.

—¡Oye Núm. 15! Ven a divertirte. —me invita 17. Yo niego con la cabeza y me quedo ahí sentada. No quería causar más problemas.

Cuando 17 se dio cuenta de que 18 me había cortado el cabello de tal forma, éste se enojó mucho con ella y le exigió que no volviera a tocarme. Ambos tuvieron una discusión muy fuerte por mi culpa, tanto que 17 no le habló a 18 por tres días.

Y lo más sorprendente es que, yo causo todo eso sin hablar.

Suelto un suspiro y cierro mis ojos. Tenía una duda que me carcomía desde hace días, desde que fui a visitar a Gohan. ¿Por qué no hizo nada? Él me ha visto enumeradas veces junto con los androides 17 y 18, pero al verme simplemente se detuvo a observarme.

—Ya me aburrí. -dice 18. — Destruyamos el lugar, y larguémonos de aquí.

Abro mis ojos al sentir la corriente de aire que causó la explosión, moviendo mis cortos mechones del cabello.

—Bien. Vámonos.

Ambos androides vuelven a elevarse y a volar lejos de ahí. Una vez más, los seguí de cerca.

Hola. Bueno, decidí subir un capítulo... me encantaría de que le tuvieran un poco de paciencia al fic y bueno... esperar y emocionarse.

¡Nuevo fic de Gohan! ¡Yupi! En fin... Sí se puede.

"Extraño a Goku"