Al día siguiente Gromar parte de la cueva hacia la montaña del faro, en la lejanía hay un cruce de caminos, Gromar empieza a decirse a si mismo que mejor vaya por otro lado, se sube a un arboles y va a la zona más alta a ver más allá donde pueda ver en la lejanía, y ve en la meseta a un grupo de soldados demonios, por un momento pensó que podían estar allí por él, pero Gromar cree que es casualidad y que están allí por otra asunto. Gromar tiene curiosidad de él porque están esos demonios en medio de la nada, de repente sin que lo esperalo Gromar escucha un estruendo en el cielo, lo vuelve a escuchar por segunda vez, está vez el sonido es más claro pero a vez más tenebroso, justo detrás de el aparece un fuerte viento que hace que el arbol se mueva, Gromar tuvo que agarrase fuerte para no caer de arriba del todo del árbol, y de pronto ve como se posa en el suelo con sus patas traseras con majestuosidad el dragón rojo, en miedo empezó a ponerse de Gromar. Gromar tenía la sensación en todo momento que el dragón rojo sabía donde estaba y que en cualquier momento se abalanzaria sobre el. Del cielo vuelve a salir otro dos sonidos no tan fuertes que los del emitía el dragón rojo, era el dragón azul y el dragón blanco, ver a los tres dragones allí era algo espectacular pensó Gromar, ver la majestuosidad de los tres dragones era impagable, nadie nunca vio a los tres dragones juntos, la verdad que daba mucho miedo verlos y escuchar sus gritos.

Gromar decidido bajar del árbol y ponerse más cerca para ver a los dragones y su masgestuosidad, logra esconderse en unos arbustos, cual fue la sorpresa que allí está Azrael encima del dragón rojo, de ahí a un rato Azrael baja del dragón y le acaricia y el dragón asiente, del dragón azul y del blanco bajan dos demonios uno de cada dragón, Gromar está confuso, no sabe quiénes son esos dos demonios, cuando se acerca un poco más, ahora los ve con mas nitidez, no puede crese lo que ve, el demonio que bajo del dragón azul es Malakar

En los abismos más profundos del inframundo, donde la oscuridad es absoluta y el mal se manifiesta en formas indescriptibles, emerge una figura temible:

Malakar, el Demonio de las Sombras Eternas. Su apariencia es un reflejo de los horrores más profundos de la mente y un símbolo del poder corrupto que reside en las entrañas del infierno.

Descripción de Malakar

Cuerpo:
Malakar posee un cuerpo que desafía la lógica de lo mortal y lo divino. De una altura imponente, supera los ocho pies, con una complexión musculosa y robusta que emana fuerza bruta. Su piel es de un negro absoluto, tan oscuro que parece absorber la luz a su alrededor, creando un aura de tinieblas perpetuas.

Cabeza y Rostro:
Su rostro es una máscara de terror, con características bestiales que recuerdan a las más oscuras pesadillas. Tiene dos cuernos largos y retorcidos que emergen de su frente, curvándose hacia atrás como los de un carnero demoníaco. Sus ojos, de un rojo incandescente, son pozos de fuego líquido que arden con una malevolencia insaciable, capaces de penetrar el alma de quienes se atreven a mirarlo. Una boca llena de colmillos afilados como dagas esboza una sonrisa cruel y perversa.

Manos y Garras:
Las manos de Malakar terminan en garras largas y afiladas, de un metal oscuro y oxidado, que pueden desgarrar la carne y romper el acero con facilidad. Sus dedos, largos y delgados, se mueven con una gracia mortal, capaces de realizar gestos mágicos y letales.

Alas:
De su espalda brotan dos enormes alas membranosas, similares a las de un murciélago gigante, desgarradas y cubiertas de cicatrices, como si hubieran atravesado innumerables batallas. Estas alas le permiten volar con una velocidad y maniobrabilidad sorprendentes, dejando un rastro de oscuridad a su paso.

Cola:
Una larga cola con escamas de obsidiana se agita detrás de él, terminando en una punta afilada que puede ser usada como arma en combate. La cola es flexible y fuerte, capaz de romper huesos y derribar enemigos con un solo golpe.

Tipo de Demonio

Malakar es un Archidemonio de las Sombras Eternas, uno de los señores más poderosos del inframundo. Como archidemonio, tiene autoridad sobre legiones de demonios menores y controla vastos territorios en el reino infernal. Es conocido por su habilidad para manipular las sombras y la oscuridad, creando ilusiones y portales que pueden transportar a sus enemigos a dimensiones de pesadilla.

Poderes y Habilidades

Manipulación de Sombras: Malakar puede controlar y solidificar las sombras, usándolas como armas o barreras. Puede envolver a sus enemigos en oscuridad impenetrable, privándolos de sus sentidos y volviéndolos vulnerables.

Ilusiones: Es capaz de crear ilusiones tan realistas que pueden engañar incluso a los ojos más entrenados. Estas ilusiones pueden ser usadas para desorientar, confundir y aterrorizar a sus adversarios.

Teletransportación: Utiliza las sombras como portales para moverse instantáneamente de un lugar a otro, apareciendo de la nada para atacar o desaparecer para evitar el peligro.

Control Mental: Con su mirada ardiente, puede penetrar las defensas mentales de sus víctimas, induciendo miedo, confusión y obediencia.

Personalidad y Comportamiento

Malakar es astuto, cruel y calculador. Disfruta del sufrimiento y la desesperación, y tiene un intelecto agudo que usa para manipular y corromper. Es un maestro de la estrategia, prefiriendo vencer a sus enemigos mediante el engaño y la manipulación antes que mediante la fuerza bruta. Sin embargo, cuando se ve obligado a luchar, es una fuerza imparable de destrucción.

Mitología y Leyendas

En las antiguas leyendas, se dice que Malakar fue una vez un ángel de la luz que cayó en desgracia por su ambición desmedida. Su caída lo transformó en una criatura de pura oscuridad, destinada a gobernar las sombras por la eternidad. Los textos antiguos hablan de su participación en las guerras infernales y su rol en la corrupción de almas inocentes.

Los bardos cantan canciones de advertencia sobre él, y los magos lo invocan con extrema precaución, sabiendo que un trato con Malakar casi siempre termina en ruina y destrucción.

Malakar, el Demonio de las Sombras Eternas, es una encarnación del mal puro, un ser cuya presencia en el mundo es un recordatorio constante del poder y la corrupción del inframundo.

El demonio que bajo del dragón blanco es Azaroth

En las profundidades de los abismos del inframundo, donde las llamas arden eternamente y el aire está cargado de desesperación, habita otro ser de pesadilla: Azaroth, el Demonio de las Llamas Destructoras. Su presencia es una manifestación del caos y la destrucción, y su mera existencia inspira terror en los corazones de aquellos que conocen su nombre.

Descripción de Azaroth

Cuerpo:
Azaroth es una figura imponente, de una altura que rivaliza con las criaturas más gigantescas del inframundo. Su cuerpo es una mezcla de carne y fuego, con músculos definidos y poderosos cubiertos por una piel escarlata que parece estar constantemente al rojo vivo, como si estuviera al borde de la combustión. De su piel emanan pequeñas llamas y humo, creando una visión de un ser en perpetuo estado de incandescencia.

Cabeza y Rostro:
La cabeza de Azaroth está coronada por una serie de cuernos afilados y curvados hacia atrás, similares a los de un ciervo, pero de un color negro obsidiana que contrasta con el rojo brillante de su piel. Sus ojos son orbes de fuego puro, sin pupilas, que arden con una intensidad que puede hacer retroceder incluso a los guerreros más valientes. Su boca, llena de dientes afilados como cuchillas, exhala humo y fuego con cada respiración.

Manos y Garras:
Las manos de Azaroth son grandes y terminan en garras de un metal negro y brillante, capaces de desgarrar la tierra y cualquier material conocido por los mortales. Sus dedos, largos y articulados, se mueven con una precisión mortal, y sus garras pueden incinerar cualquier cosa que toquen.

Alas:
De su espalda surgen dos enormes alas de fuego, parecidas a las de un fénix en llamas. Estas alas no solo le permiten volar, sino que también pueden generar ráfagas de fuego que consumen todo a su paso. Cuando Azaroth se eleva en el aire, las sombras y la luz del fuego crean un espectáculo de destrucción y belleza aterradora.

Cola:
Su cola, larga y serpenteante, está cubierta de escamas de un rojo brillante que se asemejan a brasas ardientes. La punta de la cola es un extremo puntiagudo y afilado, capaz de perforar armaduras y generar explosiones de fuego al impactar.

Tipo de Demonio

Azaroth es un Demonio del Caos y la Destrucción**, un ser cuyo propósito es sembrar el caos y la aniquilación en todas partes. Es un comandante de las legiones infernales, liderando ejércitos de demonios menores en batallas cataclísmicas contra las fuerzas de la luz y del orden.

Poderes y Habilidades

Piroquinesis: Azaroth tiene un dominio absoluto sobre el fuego. Puede generar llamas de la nada, moldearlas y dirigirlas a voluntad. Sus incendios no solo queman la carne, sino también las almas de sus víctimas.

Invulnerabilidad al Fuego: Es completamente inmune a cualquier tipo de fuego o calor, y puede absorber las llamas para aumentar su poder.

Teletransportación a Través de las Llamas:** Azaroth puede moverse instantáneamente de un lugar a otro a través de las llamas, utilizando cualquier fuego como portal.

Grito Ígneo: Puede emitir un rugido tan poderoso que genera ondas de fuego y explosiones, capaces de derribar murallas y reducir ejércitos a cenizas.

Personalidad y Comportamiento

Azaroth es la encarnación del caos y la destrucción. No tiene piedad ni compasión, y disfruta del sufrimiento y la desesperación de sus víctimas. Es astuto y despiadado, utilizando su poder para manipular y destruir todo lo que se interpone en su camino. Aunque es un ser de pura destrucción, posee una inteligencia maligna que lo hace aún más peligroso.

Mitología y Leyendas

Las leyendas cuentan que Azaroth fue creado en el momento de la primera gran guerra entre los cielos y el inframundo, forjado a partir de las llamas del caos primordial. En las antiguas escrituras, se dice que su aparición es un presagio del fin de los tiempos, un heraldo del apocalipsis que traerá el fuego y la ruina al mundo de los mortales.

Los antiguos textos de los magos oscuros mencionan rituales para invocarlo, pero advierten del precio terrible que conlleva tratar con una entidad tan destructiva. Incluso los demonios menores lo temen, sabiendo que la ira de Azaroth es incontrolable y que su deseo de destrucción no conoce límites.

Azaroth, el Demonio de las Llamas Destructoras, es una fuerza de la naturaleza infernal, un ser cuyo poder y malevolencia son una amenaza constante para la existencia misma.