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Capítulo 40

-¿Y porque no fueron a vernos todo este tiempo si nos querían? – pregunto Astrophel mirando a su hermana y luego sus padres

-Claro que fuimos a visitarlos, pero...-dijo Lilith un poco triste

-Pero los del Cielo nos permitían ir arriba por cuestión de juntas para el Infierno y el Cielo. Nos dejaban subir dos veces al año el día de su cumpleaños. Nosotros íbamos en la tarde, pero esas juntas tardaban horas justo cuando se hacía de noche, y el día antes de su cumpleaños, llevábamos regalos que nosotros hacíamos-dijo Lucifer con una sonrisa

-El día en que los íbamos a ver por primera vez cuando fuimos separados...les llevamos regalos...y justamente están ocupando los regalos que les hicimos, yo a Astrophel le hice la bufanda que traía puesta-dijo Lilith con una sonrisa

-Y tú Dánica, llevas puesto unos aretes que hice para ti, los hice cuando eras una bebé-dijo Lucifer con una sonrisa

Los hermanos estaban aún más sorprendidos por lo que escuchaban, ahora entendían porque en sus cumpleaños aparecían regalos en sus camas

-Su padre y yo...les compusimos una canción...cuando los vimos nuevamente... yo estaba embarazada de Aloqua. Al momento en que entramos a la habitación donde estaban los dos tan pequeñitos, se les cantamos...-dijo Lilith con una sonrisa haciendo que sus ojos se llenaran de lagrimas

Los 2 se enamorados se miraron entre si para asentir con la cabeza

"Canten pequeños príncipes. Buenas noches hijos míos

Descanse en el abrazo de la luna. Alcen mi arrullo, espíritus de la tierra

A través de las nubes, el cielo y el espacio.

Carguen con la paz y el frescor de la noche, y carguen con nuestra pena con amabilidad

los hermanos con demasiadas lagrimas derramadas estaban escuchando la canción que sus padres estaban cantando, muchos recuerdos atravesaban su mente. Ese recuerdo de tristeza.

Los 2 hermanos pequeños en una habitación oscura con la luz de la luna iluminando ese cuarto, recordando por fin la cara de sus padres que los vieron llorando. Astrophel y Dánica por fin recordaron que esas siluetas que vieron...eran sus padres

"Serán mucho más amados de lo que creen.

Por favor hijos míos, que los problemas se alejen de su mente.

Y perdónenos por desde ahora para ustedes faltar"

Los padres estaban llorando, cantar esa canción después de mucho tiempo sin cantarla, les trajo demasiados recuerdos dolorosos para ambos, vieron a sus hijos los cuales no dejaban de llorar. Todos se acercaron para darse un abrazo incluyendo a los bebés de la familia.

Después de un rato se separaron del abrazo para mirarse a los ojos. Astrophel y Dánica, tomaron una decisión, que cambiaría las vidas de ellos.

-Mamá...papá...creo que mi hermano y yo tomamos una decisión sobre todo esto-dijo Dánica tomando la mano de su hermano

-¿Qué decisión es esa hermana? – pregunto Fenri curioso

-Una decisión sobre como vamos a vivir de ahora en adelante-dijo Astrophel

-Hermanos por favor explíquenos lo que quieren decir-dijo Charlotte confundida

-Bueno, nosotros queremos vivir aquí con todos ustedes, pero a la vez queremos vivir en el cielo solo por nuestro tío Miguel que os ha cuidado todo este tiempo-dijo Dánica con una pequeña sonrisa

-Díganos de que se trata hijos-dijo Lucifer

-Queremos vivir con ustedes todo el tiempo, pero solo un tiempo, nos gustaría vivir en el Cielo, pero seria por poco tiempo, ya que con ustedes queremos pasar mas tiempo con nuestra familia-dijo Astrophel con una sonrisa

Ambos padres sonreían felices

-Bien. Si es algo que nuestros hijos quieren hacer, los apoyaremos, siempre hemos estado soñando el día en que estuviéramos juntos nuevamente, los apoyaríamos en todo-dijo Lilith con una sonrisa

-Amigos y señores, si no es molestia, también quiero quedarme a vivir aquí en el Infierno con mis amigos si no les molesta-dijo Josué con una pequeña sonrisa

-¿Y eso Josué? ¿Por qué cambiaste de opinión? – pregunto Astrophel curioso

-Bueno, la vida en el Cielo puede cansar un poco, es por eso que quiero experimentar está nueva aventura con ustedes, si me lo permiten-dijo Josué con una sonrisa

-Claro que te puedes quedar con nosotros el tiempo que quieras, incluso, vivir aquí en el palacio. Es lo mínimo que podemos hacer por ti, por traernos de regreso a nuestros hijos-dijo Lucifer con una sonrisa

-Ahora, vayamos a descansar, que ya son las 3:30, mañana no trabajaremos vamos-dijo Lucius con una sonrisa

Todos fueron a sus cuartos a descansar, los hermanos a sus cuartos correspondiente.

Los soberanos del Infierno al momento de entrar a su habitación el Lucifer le dio paso a su esposa con sus hijos en brazos para que entrara primero después de él, al entrar al cuarto Lilith puso con cuidado a sus hijos en la cuna, los bebes ya estaban completamente dormidos, después de dejarlos se acercó abrió la ventana para ir al balcón y ver la luna roja. Su esposo al ver el comportamiento de la reina extrañado vio a los recién nacidos, tomo una cobija de la cama para acompañar a su amada en esa noche

-Mi amor ponte esta cobija, está muy frio aquí afuera-dijo Lucifer poniéndole la cobija a su esposa

-Gracias amor-dijo Lilith tapándose con la cobija que le dio su esposo

-¿Estás nerviosa por lo que vamos hacer mañana? - pregunto Lucifer mirando a su esposa y luego al cielo

-Sí, estoy nerviosa...después de lo que paso, hace años que tu hermano Miguel nos dijera que solamente íbamos a ir a las juntas en el Cielo y que ya no podíamos ir a ver a nuestros hijos...me da cierta desconfianza ir allá arriba, no se lo que van hacer con nosotros ni con nuestros hijos, ni siquiera sabemos lo que será con nuestro reino si algo malo pasa -dijo Lilith mirando al cielo rojo de la noche

-Tranquila mi vida tenemos que subir, pero es para que lleguemos a un acuerdo en la manera en que vamos a vivir nosotros de ahora en adelante con nuestros hijos, podemos vivir juntos todos juntos, es por eso que tenemos que llegar a este acuerdo. Créeme mi amor, yo tampoco quiero que subamos, es más me niego a subir al Cielo, pero el motivo que lo hago, es para estar con Astrophel y Dánica-dijo Lucifer mirando a su esposa mientras que Lilith desviaba la mirada

Lucifer al notar esto tomo las manos de su esposa haciendo que quedaran de frente a frente para luego plantarle un beso en sus labios dejándola sonrojada por la acción de su esposo, pero luego de los pocos segundos ella correspondería al beso.

-Yo sé que no quieres ir amor, pero es la única forma en que podemos vivir tranquilos y estar con todos nuestros hijos, y por fin vivir en paz-dijo Lucifer mirando a su esposa

-Creo que tienes razón amor, está bien iremos al cielo más tarde, pero con la única condición es que Dusk y Layla se queden aquí, no quiero que me vuelvan a quitar a mis hijos-dijo Lilith con una mirada triste

-No te preocupes amor, solamente llegaremos al acuerdo y regresaremos a nuestro hogar, te lo prometo-dijo Lucifer con una sonrisa

-Eso dijiste hace eones cuando Astrophel era un niño y Dánica era una bebé recién nacida y mira como resulto todo-dijo Lilith alzando una ceja mirando a su esposo

Lucifer ante esto sonrió nervioso por lo que dijo su esposa causando que ella se ría

-Mejor vamos a descansar ya que mañana será un día muy pesado y estresante-dijo Lucifer estirándose y entrar nuevamente al cuarto

Lilith miro como su esposo entraba nuevamente al cuarto, entro también, pero antes de hacerlo miro nuevamente al cielo viendo la luna roja dejando salir un suspiro.

Después de unas horas salió el sol

Al medio día todos se habían despertado, fueron al comedor para desayunar, comieron todo lo que podían ya que no sabían si el Cielo les iba a dar de comer o no, así que comieron todo lo posible. El ambiente era tenso, pero no lo demostraban, los reyes trataban de disimular que todo iba a salir bien.

-Muy bien, al finalizar el desayuno, nos reuniremos donde fuimos ayer, para que nos esperen ahí-dijo Lilith con una sonrisa

-De acuerdo-dijeron todos los príncipes princesa y su visita

Al finalizar el desayuno, se levantaron y se fueron a preparar para ir al cielo, toda la familia.

En el cuarto de los soberanos, Lilith estaba arropando a sus hijos recién nacidos ya que no sabia cuanto tiempo iba a tardar allá arriba. Lucifer ya estaba preparado miro a su esposa que estaba viendo a Dusk y Layla.

-Amor, tenemos que irnos ya, nuestros hijos nos están esperando-dijo Lucifer poniéndose su corbata

-Si amor, ya estoy lista es solo que no quiero dejar a los niños aquí solos, me preocupa que algo malos les pase-dijo Lilith preocupada

-Amor, nada malo les pasara, tranquila, ¿sí? Para eso, les pediré a unos guardias que se queden aquí en el cuarto para que proteja a nuestros hijos estén seguros-dijo Lucifer acercándose a su esposa y a la cuna de sus hijos

-De acuerdo amor-dijo Lilith besando la frente de sus hijos

Posteriormente le tomo su mano para salir de la habitación e ir juntos a la biblioteca, cuando llegaron vieron a todos sus hijos y su visita esperándolos. Lucifer le dio indicaciones precisas a 7 de los mejores guardias del palacio que estuvieran con los recién nacidos a toda costa, que si algo les pasaba lo pagarían con su vida.

-Muy bien hijos míos y Josué, ¿listos para irnos? – pregunto Lucifer con una sonrisa

-¡Estamos listos! – gritaron todos a la vez

Lucifer asintió con la cabeza, dio la espalda un momento con sus manos empezó a hacer un portal para luego lanzarlo haciendo que creciera para poder cruzar todos. Cuando termino sus hijos se quedaron sorprendidos por lo que hizo su padre

-Bien, este portal nos llevara a una parte del Cielo que me gustaba ir cuando todavía seguía ahí, lo vamos a cruzar. Pero escúchenme bien Aloqua, Fenri, Lucius, Charlotte, no se separen de nosotros, ¿escucharon? Si lo hacen verán el castigo eterno que les meteremos por el resto de su vida-dijo Lucifer serio

Sus hijos al escuchar la amenaza de su padre empezaron a tragar saliva nerviosos y empezaron a temblar.

-Bien hijos, primero cruzaremos su padre y yo, luego ustedes-dijo Lilith poniéndose seria cruzando el portal

-Bien hijos, nos vemos del otro lado-dijo Lucifer cruzando también

-Ya escucharon, no nos tenemos que separar de nuestros padres o castigo eterno-dijo Lucius con una sonrisa

-Claro que no va a pasar, hermano, ¿una competencia? – dijo Fenri desafiante

-¿Qué? No, yo jamás... ¡Yo gano! – grito Lucius entrando por el portal

- ¡Ven aquí hermano! – grito Fenri sonriendo cruzando el portal

-Bueno, ya escucharon, mejor hay que alcanzarlos antes de que se cierre este portal-dijo Charlotte emocionada.

Después de que Charlotte cruzara el portal los demás cruzaron al llegar a un bosque que parecía mágico

Los demás vieron a Lucifer ahí quieto sin moverse, sus hijos se preocuparon querían ir con él, pero su madre no se los permitió, con su mano alzo su mano en modo de que no avanzaran, ella camino hacia su esposo para tomarlo de la mano y mirarlo dándole una sonrisa cálida, esa sonrisa significaba "todo estará bien". Lucifer le correspondió la sonrisa besando las manos de su esposa para continuar su recorrido.

Salieron del bosque para ir a la ciudad plateada, todos los ángeles se quedaron sorprendidos al ver a los soberanos del Infierno invadiendo su hogar, algunos entraron a sus casas por miedo, pero la familia real estaba caminando con elegancia sin mirar a sus alrededores, ya que no les importaba que unos simples ángeles estuvieran hablando de ellos, pero Astrophel, Dánica y Josué no estaban a costumbrados hacer el centro de atención, estaban escuchando muchos chismes sobre ellos, cosa que no iban a permitir, entonces Lucifer les dijo

-Hijos míos, no se preocupen, les aconsejo que hagan oídos sordos, porque estos ángeles son solamente ignorantes que no conocen el hecho del por que estamos aquí, así que no se preocupen, como les dije, mientras no se separen de nosotros estarán bien-dijo Lucifer mirando a sus hijos en sus ojos se reflejaba una mirada melancólica

Astrophel, Dánica y Josué se quedaron sorprendidos por la actitud de Lucifer, pero más fue su sorpresa al ver que él no soltaba ni por un momento la mano de su esposa. Caminaron por un largo rato, pero se toparon con alguien que no se imaginarían que se volverían a topar, pero más fue el desagrado para Lilith...reencontrarse con su ex marido.

-Vaya, vaya, ¿pero que tenemos aquí? La zorra arpía de mi ex esposa-dijo Adam con una sonrisa

Lilith se estaba enojando, sus ojos cambiaron por un color rojo, por suerte ella todavía no había sacado sus cuernos que ella tenía, por suerte para todos, Lucifer apretó levemente su mano haciendo que ella se calmada, eso funciono y sus hijos respiraron aliviados, ya que su madre les daba miedo cuando se enojaba.

-No puedo creer que han pasado eones y tu sigas siendo el mismo hombre de siempre-dijo Lilith seria

-Vamos dulzura, es claro que me extrañaste, si no, ¿Por qué estarías aquí en el Cielo? – pregunto Adam con una sonrisa fastidiosa

-Eso no es asunto tuyo Adam, ¿Qué es lo que quieres? – pregunto Lilith furiosa

Adam noto de inmediato a los hijos de su ex esposa y a Lucifer

-Vaya, pero aquí está el señor ladrón de esposas, nunca imagine verte por este lugar al que fuiste expulsado desde hace tiempo-dijo Adam con una sonrisa

-Como dijo MI esposa, ese no es asunto tuyo-dijo Lucifer serio

-Ah pues si es asunto mío, ya que soy el primer hombre, necesito saber todo lo que pasa aquí-dijo Adam noto a Astrophel y a Dánica los reconoció

-Vaya, pero si están aquí están tus bastardos, ja, los que me confundieron con ser su padre, pero lastima que tuvieron que ser hijos de este ángel miserable-dijo Adam acercándose a ellos

Lucifer y Lilith se dieron vuelta inmediatamente para ver qué es lo que le hacía a sus hijos

--Lastima que si hubieran sido mis hijos, este par de mocosos que te quitamos hubieran salido a mí, pero no, se parecen al idiota del ángel caído-dijo Adam frustrado

Lilith le iba a contestar algo, pero su esposo la interrumpió mostrando una sonrisa de orgullo

-Bueno, al menos mi esposa no me abandono para irse con alguien mejor y al menos le pude dar 8 hijos, no que tu ni le pudiste dar un hijo ni siquiera tuviste el valor darle al menos un hijo-dijo Lucifer con una sonrisa de orgullo

Con ese comentario que Lucifer le dijo a Adam el orgullo del primer hombre fue lastimado, desviando la mirada, mientras que los otros hijos de Lucifer y Lilith estuvieron aguantándose la risa por el comentario de su padre

- ¿Y ustedes mocosos que están mirando? Pero si son los otros bastardos, al parecer tuviste más bastardos con ese idiota, ¿verdad Lilith? Lastima que ellos tuvieron la mala suerte de nacer en un lugar repugnante, en cambio aquí arriba literalmente es el puto paraíso-dijo Adam con una sonrisa

Lilith se soltó del agarré de su esposo y miro a Adán enojada

-¡No te atrevas maldito hablar mal de mi familia! – grito Lilith enojada

La soberana del Infierno se acercó enojada a Adam para poder decirle las cosas en su cara, haciendo que sus hijos se quedaran atrás de su padre, mientras Lucifer la veía con una sonrisa orgulloso de mirar a su esposa, cada paso que daba Lilith hacia Adam el temblaba de miedo, ya que nunca la había visto así de enojada, solamente la había visto en el juicio toda débil, hasta no sabe que decirle en ese momento

-Tú no tienes ningún derecho de estar hablando de mi familia! ¡Se te olvida que por tu culpa fui separada de mis hijos por todos estos miserables años de la humanidad! ¡Al menos Lucifer me dio algo que tu no eres capaz de hacer algo! ¿Si sabes a lo que me refiero? – dijo Lilith señalando la parte intima de Adam

Adam se enojo demasiado por lo que comento su ex esposa, mientras que Lucifer no aguantaba la risa ni siquiera sus hijos aguantaban la risa al ver que el orgullo del primer hombre fue lastimado por la primera mujer. En cambió con Lucifer al ver que su esposa termino de pelear con Adam el empezó a enojarse, claramente no iba a dejar que nadie ni siquiera los miserables del Cielo ofenderían a su familia.

Lucifer dejo escapar una carcajada, lenta y condescendiente, mientras veía a Adam temblar ante la furia de Lilith. Con calma, ajusto un poco su traje y dio un paso adelante, su sonrisa nunca se desvaneció mientras caminaba hacia Adam.

-Vaya, vaya... el "primer hombre" temblando como una hoja ante una mujer, y no cualquier mujer, si no con la primera mujer que es mi esposa, madre de mis hijos y reina de todo el infierno, te recuerdo que tu eres primer causante de nuestras desgracias Adam. Que patético. Aquí entre nos pensaba que eras el favorito del Creador solo por entregarnos como basura hace tiempo ¡Pero eso se a cabo ¿me oíste?! Pues mírate...apenas puedes sostenerte en tu arrogancia-dijo Lucifer serio

Sus ojos se encendieron con un fulgor carmesí y su mera presencia hizo que el aire a su alrededor se sintiera pesado, aplastante. Dio otro paso obligando a Adam a retroceder. Aunque ellos están en el Cielo que es un ambiente demasiado tranquilo, los habitantes del cielo se encontraban resguardándose dentro de sus casas por su propia seguridad.

-Hablas de mis hijos como si fueran menos, cuando lo único que hicieron fue nacer libres, lejos de la sumisión y la ignorancia en la que te ahogas, no solamente tú, si no todos los ángeles de este miserable lugar. No son bastardos Adam. Son príncipes y princesas del reino más poderoso. A diferencia de ti, ellos no necesitan esconderse detrás de insultos para sentirse superiores-dijo Lucifer serio y con un tono de voz de autoridad.

-Dime, Adam... ¿realmente crees que puedes faltarle el respeto a mi familia sin consecuencias? Por que si no lo sabes yo...yo no perdono. ¿Y sabes por qué? Mi nombre es Lucifer Estrella de la Mañana. Y yo no perdono-dijo Lucifer enojado

-Te recuerdo maldito gusano que estás en el Cielo, tienes que seguir nuestras reglas si no quieres que te destierren como lo han hecho eones-dijo Adam nervioso y serio

-No me digas eso Adam, si ustedes mismos no respetaban las reglas de mi reino, mucho menos obedezco las reglas que hay en el Infierno-dijo Lucifer serio

De pronto su vista se fijo en los hijos de Lucifer que estaban detrás de su madre viendo con asombro a su padre transformarse en algo que jamás habían visto hace tiempo, solamente lo habían visto en esa transformación cuando eran pequeños, sin duda esa transformación de su padre les gustaba demasiado.

-¿No querrás que te volvamos a quitar a tus hijos nuevamente verdad? ¿Qué te parece si se los quitamos otra vez y les borremos la memoria para que se olviden que son hijos y que se olviden para siempre quienes son sus padres? Aunque, debo admitir que hubiéramos hecho eso con los primeros 2 bastardos que se quedaron aquí arriba como si nada. Se salvaron por que son sobrinos de los arcángeles en primer lugar-dijo Adam enojado

Lucifer al escuchar las amenazas vacías de Adam simplemente sonrió ante tales palabras

-Con que amenazas al mismo rey de todo el infierno, eh-dijo Lucifer serio

La sombra de Lucifer pareció alargarse, envolviendo a Adam en una oscuridad momentánea. La presión se hizo insoportable como si la misma existencia de Lucifer le recordara cuán diminuto era en comparación.

-Si sigues hablando, lo único que probaras es que tu orgullo es lo único que te queda...y créeme, me encantaría destrozarlo por completo-dijo Lucifer sonriendo

Lucifer inclinó levemente la cabeza, dejando que la amenaza colara en lo más profundo de Adam. Luego, con un chasquido de dedos, la opresión desapareció...pero el mensaje quedó más que claro. Un paso en falso más y Adam conocería el verdadero terror y la furia del soberano de todo el infierno.

El soberano se dio vuelta con una sonrisa para ver a su familia mientras bajaba su ira camino nuevamente hacia su esposa y la miro

-Bueno, vámonos tenemos que ir a la casa del idiota de Miguel le tengo que romper la cara solamente por creerse el padre de mis hijos-dijo Lucifer haciendo puños

-Al menos tu ira bajo con atormentar al idiota del primer humano amor-dijo Lilith mirando al primer humano

-Dejemos a esta escoria aquí, después de todos nosotros vinimos hacer solamente una cosa-dijo Lucifer empezando a caminar

Paso un rato que estuvieron caminando, pero había un pequeño problema...Lucifer se perdió en el camino sin saber a dónde ir, esto lo percato Lilith mirándolo

-¿Te perdiste no es así? – pregunto Lilith seria

-Eh...creo que sí, nos perdimos-dijo Lucifer nervioso

Ese comentario que todos sus hijos y Josué se empezaron a reír haciendo que Lucifer volteara a verlos seriamente haciendo que todos ellos se callaran y se comportaran

-Esto va para largo, Astrophel y Dánica, díganos donde se encuentra la casa de Miguel-dijo Lilith mirando a sus hijos

-Sí, claro mamá, síganos

-No puedo creer que nuestro padre se perdiera y eso que ha vivido aquí casi toda su vida-dijo Fenri con una sonrisa traviesa

-Bueno eso es por que no he venido aquí desde hace eones, además...tus hermanos conocen bien el camino de cómo llegar a la residencia de los arcángeles, solamente subimos aquí por las juntas, pero solo vamos a un edificio, nada más, al parecer hicieron remodelaciones a este feo lugar-dijo Lucifer mirando otro lado

-Bueno, aun así, te amo-dijo Lilith besando la mejilla de su esposo

-Es por acá, síganos-dijo Dánica empezar a caminar

-Quisiera tener alas para poder volar, ya me cansé de caminar-dijo Aloqua

-Yo también estoy cansada de caminar, me duele mis pies-dijo Charlotte quejándose

-Eso les pasa por ponerse tacones, es más, ¿Por qué trajeron tacones? – pregunto Lucius

-Pensamos que era una caminata corta, no una larga que iba a durar demasiado tiempo-dijo Aloqua seria

-Nosotros les dijimos que no vinieran en tacones-dijo Fenri serio-

-¡Callate Fenri! – gritaron Aloqua y Charlotte al mismo tiempo

-¡Suficiente ustedes 4 dejen de pelear ahora o serán castigados en el hoyo por los próximos 10,000 años! – grito Lilith furiosa

Los 4 hermanos se pusieron nerviosos y luego se tranquilizaron

-¿Qué es el hoyo? – pregunto Astrophel dudoso

-El hoyo es un pequeño cuarto donde tiene pedazos de clavos y vidrio roto pegados en toda la pared, en completa oscuridad y tienes que estar ahí parado sin moverte hasta que se te acabe el tiempo de tu castigo-dijo Lucius

-¿Por qué siento que ya han estado ahí antes? – pregunto Dánica mirando hacia enfrente

-Bueno hija, veras, tus hermanos Lucius y Fenri han estado ahí 59 veces, pero si siguen peleando, así como están van a estar ahí para toda la vida-dijo Lucifer

-¿Cuánto falta hermana? Ya no aguanto caminar- dijo Charlotte quejándose

-De hecho, ya llegamos, la casa de mi tío Miguel es...esa-dijo Dánica señalando una casa muy blanca con 2 pisos

Los demás se quedaron viendo extrañados esa casa toda blanca, hasta el mismo Lucifer y Lilith sintieron asco al ver esa casa. Lilith se estaba poniendo nerviosa, pero su esposo la logro calmarla. Eso hizo que se calmara.

-Vamos entonces para acabar con este tema y después regresar a nuestro hogar quiero ver a Dusk y Layla-dijo Lilith nerviosa

-Tranquila amor, ya veras que regresaremos a nuestro reino y con nuestros bebes-dijo Lucifer acercándose a ella para mirarla con una sonrisa

Astrophel y Dánica abrieron la puerta para que su familia entrara a la casa de su tío Miguel. Al momento de entrar vieron casi todo un desastre, había fotos por todo el suelo, había un retrato de Lucifer y de Miguel estaba en el suelo y rota. Lucifer al notar esa foto, la recogió y su mirada se volvió a una melancólica.

Se adentraron un poco más a la casa hasta que vieron a Miguel muy mal estado todo deprimido con unas cuantas botellas de vino regadas por todos lados incluyendo en la mesa del comer, a Astrophel y Dánica se sintieron una parte mal por la situación de su tío, pero sabían una parte que no todo esto es su culpa, la mayor parte la tuve él por dejarse llevar y creerse el padre de los 2, cosa que no era cierto.

-Tío Miguel-dijo Astrophel nervioso

Miguel al escuchar la voz de su sobrino se alegro demasiado, cuando se dio la vuelta vio a toda la familia de sui hermano ahí parada frente a él, solamente Lucifer estaba serio, ya que no le alegraba ver a la persona que lo ayudo a desterrar y que le haya enterrado armas celestiales junto con sus hermanos. Lo primero que hizo Miguel fue preguntar por sus sobrinos

Miguel corrió hacia ellos para abrazarlos fuertemente haciendo que las lagrimas salieran de sus ojos de felicidad al ver a sus sobrinos

-Me alegra mucho que ustedes están bien, díganme, ¿no se lastimaron en el camino? ¿comieron? ¿todos estuvieron bien? – pregunto Miguel angustiado

-Estamos bien tío, pero necesitamos hablar contigo de algo serio-dijo Astrophel nervioso

-Claro díganme, ¿Qué es lo que quieren hablar? Pero primero díganme, ¿Qué hace mi hermano aquí y su familia? Se supone que no pueden estar en el Cielo-dijo Miguel confundido

-Terminemos este asunto y vámonos de una vez, quiero regresar a las tinieblas-dijo Lilith seria

Unos segundos después la familia se sentó en uno de los sillones de la sala y empezaron a hablar, Astrophel y Dánica empezaron a narrar todas sus aventuras del camino hacia el Infierno incluyendo como conocieron a sus hermanos, hermanos y sus padres, Miguel se sorprendía por todas las aventuras de sus sobrinos. Terminaron de narrar y todos estaban esperando una respuesta sobre su tío/hermano.

-Bueno, me alegro que hayan encontrado y conocido a sus padres y a sus hermanos, y me da mucho gusto conocer a mis sobrinos y sobrinas. Debo decir hermano que hiciste una linda familia-dijo Miguel sonriendo

Lucifer serio se acomodó en el sillón y dijo serio

-Gracias, pero mi familia hubiera estado completa si no me hubieran quitado a mis hijos en primer lugar, y sobre todo ustedes nos han prohibido verlos todos estos años-dijo Lucifer serio

-Hermano...por favor, tu sabes bien por que lo hicimos-dijo Miguel triste

En ese momento Lucifer se levanto del sillón para sacar su forma demoniaca y decir

-¡NO ME IMPORTAN TUS EXCUSAS MIGUEL! – grito Lucifer enojado

- ¡POR SU CULPA NO HEMOS PODIDO PASAR TIEMPO CON ASTROPHEL Y DÁNICA, TU HAS PODIDO CONVIVIR CON ELOS, NOS QUITARON LA OPORTUNIDAD DE CONVIVIR CON ELLOS! – grito Lucifer enojada

Miguel bajo la mirada y empezó a mirar a su hermano a su cuñada y a sus 4 sobrinos se levantó también para quedar cara a cara con Lucifer

-No todo es mi culpa hermano, tú sabes bien como fueron las cosas, te enamoraste de la primera mujer, le diste la manzana a Eva, y más que nada, aparte de pelear con nuestro padre, tu renunciaste al Cielo para hacer tu familia. También Lilith, por favor, entiendan. No fue mi intención separarlos de ustedes. Solo quería proteger a Astrophel y Dánica de todo-dijo Miguel mirando serio y triste a su hermano

- Ja, ¿entonces estás diciendo que me hayas quitado a mis hijos de pequeños fue mi culpa? ¡¿Es una jodida broma Miguel?! – grito Lucifer

-Amor calma-dijo Lilith preocupada

-Amor...tranquila, ¿sí? Yo puedo con esto-dijo Lucifer serio

-Pero amor...-dijo Lilith, pero al ver la insistencia de Lucifer se negó

-Por ahora me quedare callada-dijo Lilith seria

Los hijos sin saber que hacer solamente se quedaron mirando todo lo que pasaba sin decir nada. Solamente querían comprender, por supuesto ellos sabían la verdad. El ambiente en la sala se estaba poniendo tenso y más por las paleas de su padre y tío.

-¡Claro que es su culpa! ¡Por culpa de ustedes mi esposa y yo hasta incluso mis hijos no pudimos convivir con Dánica y Astrophel! – grito Lucifer serio

-Hermano por favor...tu bien sabias que 2 niños pequeños no podían vivir en el Infierno. Por eso decidimos que se quedaran con nosotros, aquí en el Cielo-dijo Miguel triste

-Con que así fue, ¿verdad? Nosotros... ¡¿Sabes lo difícil que hemos sentido sin nuestros hijos?! ¡Todos estos años hemos vivido sin ellos! ¡Ahora que recuperamos a nuestros hijos...no quieres que estén con nosotros! – grito Lilith enojada

-Si tienen razón, tuve la oportunidad de ver a sus hijos crecer y verlos felices, pero por desgracia no quiero que estén con ustedes, pero...-dijo Miguel nervioso

- ¡¿Pero que Miguel?! ¡Dilo de una vez! ¡Hasta sabemos que le has mentido a nuestros hijos todo este tiempo! – grito Lucifer enojado

-¡Por qué no quiero que tus hijos terminen como ustedes! ¡Es por eso que les oculte la verdad a sus hijos! ¡Sabía que si ellos se enteraban que eran hijos del mismo Lucifer y de la primera mujer, ellos los buscarían, pero no, mi plan resulto un fracaso total! ¡Al final ellos descubrieron todo y ya los encontraron! – grito Miguel enojado

-Tío por favor, déjanos explicar por que todos mis hermanos hermanas y incluso mis padres están aquí, déjenos explicarte-dijo Dánica suplicando a su tío

-No Dánica, no me expliquen nada. Ustedes se quedan aquí en el Cielo, así que vayan a su habitación para que pueda hablar con Lucifer y Lilith-dijo Miguel tomando los brazos de sus sobrinos para llevarlos a su cuarto

Al ver esto los soberanos del Infierno se transformaron y gritaron ambos enojados

-¡No vamos a permitir que nos quites a nuestros hijos nuevamente! – gritaron ambos enojados

Los dos tomaron los brazos de sus hijos y lo jalaron hacia ellos abrazándolos y los demás se pusieron de lado de sus padres preparados para atacar

-¡No se metan en donde no les llaman niños! – grito Lilith enojada mirando desafiante a Miguel

Los 2 en sus formas demoniacas y Miguel preparándose para empezar a discutir fuertemente por sus sobrinos, el ambiente su puso tenso, solamente era cuestión de tiempo para ver quien ganaría esa pelea o simplemente ver que harían Astrophel y Dánica en esa situación.

-¡Vamos Lilith! ¡Nos llevaremos a nuestros hijos a nuestro hogar! ¡No hay trato! ¡No negociare con un maldito y un traicionero! – grito Lucifer enojado

-Es mejor así amor, para que los 10 podamos estar por fin tranquilos-dijo Lilith llorando de rabia

Por cada palabra que salía de ellos dos la ira de Miguel incrementaba cada vez más fuerte haciendo que el Cielo cambiara de color por uno gris y empezara a llover fuertemente, por fortuna, los demás arcángeles no estaban presentes. Pero para los 3 adultos, sabían que esto no iba a terminar bien.

¡No! ¡No pueden llevárselos! ¡Son mis sobrinos, yo los cuide, yo los ame, es conmigo con quien deben estar y no con ustedes! ¡Mientras estén aquí en el Cielo ellos 2 están bajo mi cuidado y protección! ¡Ustedes solamente los dejaron! – grito Miguel furioso

Lucifer al escuchar esto su enojo cada vez crecía cada vez más, cuando llegaba al tope de su enojo, ni siquiera Lilith, era capaz de detenerlo, sus hijos estaban al pendiente de la discusión debían interferir para que pueda acabar esa pelea y que haya paz de una vez por todas. Lucifer miraba desafiante a su hermano mayor

-¡N te atrevas a detenernos Miguel! ¡Tú no eres nadie para mis hijos! ¡Serás su tío, sí, pero como sus padres tenemos derechos a cuidarlos y recuperar el tiempo perdido que tú y los demás hicieron a separarnos de ellos! – grito Lucifer furioso

Al escuchar la respuesta de su hermano gemelo Miguel cambio a su forma de ángel para poder estar a la altura de la discusión y empezar a atacar con sus palabras, pero a Miguel estaba frente a su hermano que tanto amaba, estaba frente al rey del orgullo, y sería difícil herir el orgullo de su hermano.

-¡¿Derecho?! ¡Tú ni Lilith tienen ningún derecho a nada y menos sobre Astrophel y Dánica! ¡Ustedes dos han estado ausentes durante muchos años y ahora quien llevárselos sin si quiera considerar el bienestar de ellos dos! ¡El bienestar que por tantos años yo luche para que pudieran crecer tranquilos sin saber de ustedes 2! – grito Miguel furioso

En ese momento Lilith enojada y haciendo que su cabello se moviera y con sus ojos de color rojo fuego por la ira, contesto la primera mujer enfurecida.

-Además hermano, ¿Qué se siente ser el segundo plato? Recuerda que Lilith te escogió ya que tú eras su segunda opción-dijo Miguel sonriendo

Lucifer al notar que Miguel solo lo estaba molestando para lastimar su orgullo le contesto con una sonrisa

-Bueno, al menos mi esposa no se queja por lo que le puedo dar-dijo Lucifer señalando su miembro

-¡Cállate Miguel! ¡Tú no sabes lo que es ser padre o una madre! ¡No sabes nada por lo que nosotros hemos pasado sin nuestros hijos durante mucho tiempo! ¡No tienes ni la mínima idea lo que es sufrir por la ausencia de tus hijos! ¡Pero nosotros si lo sabemos, porque por su culpa, hemos podido estar con ellos! ¡En cambio tú idiota, has estado aquí con ellos todo el tiempo, en el Cielo, con tus ángeles, tus guardias y tus ciudadanos, pero sobre todo CON MIS HIJOS! ¡Tú no tienes idea de lo que es vivir sin estar al pendiente de tus hijos y sin saber que es lo que harán con ellos! ¡¿Y ahora te atreves a cuestionar nuestra capacidad para cuidar a los príncipes del Infierno?! ¡Eres un hipócrita Miguel! – grito Lilith enojada

Miguel al escuchar eso sus ojos se pusieron color azul celeste demostrando lo cual enojado que estaba, intento tomar nuevamente a sus sobrinos, pero los soberanos interfirieron antes de que él los pudiera tocar

- ¡No te atrevas a tocar a mis hijos nuevamente Miguel o te destruiré con mis propias manos! ¡Te juro que soy capaz de matarte si llegas a lastimar a mi familia o algunos de mis hijos! – grito Lucifer agarrando el brazo de su hermano

- ¡No me importa nada! ¡No me importa arriesgar mi vida! ¡Voy a proteger a mis sobrinos con mi vida para que no terminen como tú! – grito Miguel mirando seriamente a su hermano y a su cuñada.

Astrophel y Dánica al ya no aguantar de sus manos apareció su poder estiraron sus manos sacando un rayo para que sus padres y su tío les pusieran atención de lo que iban a decir para detener esta pelea de una vez por todas.

- ¡SUFICIENTE! – gritaron ambos hermanos

-.¡Astrophel! ¡Dánica! ¡¿Qué están haciendo?! ¡Apártense ahora mismo! – grito Miguel enojado

-¡NO VAS A LASTIMAR A MIS PAPÁS! – gritaron los dos hermanos furiosos

Al ver esto, los enamorados se quedaron sorprendidos al ver la actitud de sus hijos mayores, pero a la vez estaban orgullosos al ver a sus hijos transformarse en unos demonios, al igual que sus hermanos y hermanas estaban sonriendo, dentro de ellos sabían que ellos tarde o temprano se transformarían en demonios, y por fin lo habían demostrado, que son los príncipes del Infierno.

-¡Tío nos vas a escuchar quieras o no! ¡Nosotros no hemos venido aquí a pelear! ¡Hemos venido hablar, así que nos vas a escuchar quieras o no! – grito Dánica enojada

-¡Así que nos escucharas ahora! – grito Astrophel enojado

Todos se empezaron a tranquilizar, respiraban profundamente para poder llegar a un acuerdo. Al ver que ya todos se calmaron el clima volvió a la normalidad, hasta los demás hermanos respiraron con tranquilidad ya que sus padres por fin se calmaron. Ellos amaban a sus padres, pero les daba demasiado miedo sus padres, pero más su madre cuando se enoja, ella es un amor como madre, pero nunca la hagas enojar, porque da demasiado miedo.

Las horas pasaron explicando los motivos y reclamándole a Miguel del porque querían vivir de ahora en adelante, Miguel solamente miro a toda la familia de su hermano para ver que sus ojos se llenen de lágrimas al verlos, saco un largo suspiro y finalmente dijo

-Astrrophel, Dánica, yo...solamente quiero pedirles perdón-dijo Miguel con una voz quebrada

Sus sobrinos lo vieron extrañado y le preguntaron

-¿Por qué tío? – preguntaron ambos confundidos

-Por no haberlos devuelto con sus padres cuando eran niños...Me arrepiento de haber expulsado a mi hermano, me arrepiento de haberlos alejado de sus padres, también me arrepiento de haberlos mentido toda su vida-dijo Miguel llorando

Astrophel y Dánica estaban sorprendidos por la actitud de su tío ya que era la primera vez que lo veían en ese estado, Fenri por un lado al ver a su tío llorar, sus 3 hermanos le dieron un coscorrón en la cabeza haciendo que 3 chipotes salieran de su cabeza y pidió disculpas, luego Astrophel y Dánica sonrieron y le dijeron a su tío

-Tío...sabíamos que te arrepentirás de todo esto, pero no sabíamos de lo mucho que te arrepentirás de todo esto lo que sucedió-dijo Astrophel mirando a su tío

-Claro que me arrepiento, lo he hecho dese hace mucho tiempo. Pero ahora, veo que ustedes han encontrado quienes son ustedes, y lo felices que son, al saber que ahora podrán vivir con sus padres-dijo Miguel con una sonrisa mirando a sus sobrinos

-Ya firmemos esto de una vez que quiero ir a casa, deje mucho tiempo a mis hijos que quiero regresar con ellos-dijo Lilith interrumpiendo el momento

-Tío, no necesitas pedirnos perdón. Ahora que sabemos toda la verdad gracias a nuestros padres pudimos entender que solamente lo hiciste por nuestra seguridad y por nuestro bien-dijo Dánica sonriendo

-Bien. Y espero tener la oportunidad de poder conocer bien a mis sobrinos-dijo Miguel sacando un contrato

-No te lo tomes mal... ¿señor? Pero no creo que hablo por todos que no queremos establecer una relación entre tío y sobrinos por varias razones, y espero que respetes nuestra decisión. Sí, seremos familia, pero, dudamos mis hermanos y yo que no queremos establecer una relación con los seres del Cielo-dijo Lucius con una sonrisa

Al escuchar las palabras de su hijo Lucius, Lucifer quedó más que contento al escuchar eso sonrió orgullosamente, Lucifer miro a su amada esposa la cual beso con mucho amor, ya que ellos no acostumbraban a estar sin besarse mucho tiempo.

Pasaron los minutos, Miguel firmo el contrato, luego Lilith y por último Lucifer, finalmente se llegó al acuerdo en que Astrophel, Dánica y Josué vivirían en el Infierno. El acuerdo se trató. Que ambos hermanos y su amigo decidirían cuando subir al Cielo.

Miguel decidió respetar por primera vez la voluntad de sus sobrinos, incluyendo los soberanos decidieron respetar la decisión de sus hijos. Por fin, ellos podrán recuperar el tiempo perdido. Después de tanto tiempo, se les cumplió lo que deseaban.

Así paso durante 5 años

En el Cielo

Dánica, Astrophel y Josué estaban preparando sus cosas para poder irse al Infierno, estaban más que emocionados. En esos años, los 2 hermanos han podido conocer a toda su familia. Estar más cerca de sus padres y ver el crecimiento de sus hermanos menores.

Habían pasado 5 largos años de todo aquel

-¡Amigos! ¡Ya vámonos! ¡El portal se abrita dentro de poco! – grito Josué desde la sala

-¡Ya vamos! – gritaron ambos hermanos

Ambos hermanos salieron de su cuarto para ir a la sala donde los estaría esperando Josué

-Por fin llegan par de hermanos-dijo Josué con una sonrisa

-Perdón, pero esta vez llevamos regalos para todos-dijo Dánica con una sonrisa

-No te preocupes, pero si se tardaron, espero que no vuelva a pasar eso-dijo Josué con una sonrisa

-Claro que no volverá a pasar, tranquilo-dijo Astrophel mirando a su amigo

Los 3 se agarraron de la mano para poder cruzar el portal y vivir por un largo tiempo en el Infierno.

Y así los 2 hermanos. Pudieron estar con toda su familia felices. Mientras que Lucifer y Lilith vivieron más felices de estar con sus hijos nuevante.

De la nada se abrió un portal que irían al Infierno ahí se veio a Dusk y Layla esperando impacientemente esperando a sus hermanos mayores

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