LOVE ME HARDER

Seis meses después

Narra Alexander

—¡Ana! Vamos a llegar tarde —le grito desde el salón para que me escuche.

—Ya termino —responde con otro grito.

Formo una sonrisa cuando escucho como se mueve de un lado a otro en la habitación. Mientras tanto, salgo de la casita para observar las vistas que me ofrece Santorini. Porque sí, estamos en Grecia. Es un viaje que llevo planeando desde hace tiempo desde que supe cuando íbamos a terminar la temporada de voleibol.

Recuerdo la reacción que tuvo cuando le dije que preparara las maletas que nos íbamos de viaje. Maravilloso. Lo que no sabe aún es lo que hay detrás de este viaje.

Y es que quiero pedirla que sea mi novia. De manera oficial.

Hace seis meses atrás Ana quiso que lo intentáramos de nuevo, así que volvimos a las citas, planes y pasar tiempo juntos. Además de tenerla de nuevo en mis partidos. He estado disfrutando cada momento que he estado con ella. Es por eso por lo que quiero que nuestra relación sea oficial. Ya que Ana quería viajar algún día a Santorini, he visto que era la oportunidad perfecta para pedirla que sea mi novia.

Durante todo este tiempo Ana también ha estado triunfando dentro del periódico y, para ninguno es sorpresa, ha ido escalando puestos hasta ser una de las periodistas más reconocidas.

También, por lo que Ana me ha contado, Diana dejó el periódico para irse a otro. Parece que no soportaba más estar en el mismo círculo que ella que llegó al punto de marcharse.

Mejor.

Miro por encima del hombro cuando siento como una mano se posa en mi espalda. Sonrío al instante al ver que es Ana. Me giro hasta quedar cara a cara con ella y poder detallarla mejor. Ha dejado su pelo suelto y se ha maquillado un poco. Mis ojos se desvían hasta su cuerpo para ver un vestido blanco ajustado a cada una de sus curvas. Le queda de maravilla.

Está preciosa.

—Increíble —murmuro, maravillado.

Ana sonríe ampliamente.

—Gracias. Tú también estás increíble. —Me lanza un beso antes de entrelazar nuestras manos para comenzar a caminar.

Al tener el sitio cerca, nos limitamos a dar un paseo hasta llegar al lugar. La verdad es que Santorini es precioso. Se nota que Ana tiene muy buenos gustos.

Sin que ella se de cuenta, le desvío del camino inicial y comenzamos a bajar las escaleras hasta la zona de las playas. Le he dicho que le iba a llevar a cenar, pero no especifiqué dónde y cómo.

Ana me mira confusa, pero no digo nada cuando llegamos a una zona de la playa algo más privada para ambos. Hace poco me han avisado de que ya todo estaba listo y que vendrían para dejar los platos en cuanto les diera un aviso. Así que estamos completamente solos. Tal y como quería.

—¿Alexander? —susurra cuando ve que hay algo escrito en la arena con flores rojas.

Me muerdo el labio y sonrío.

No dejo que mire de más para colocarla en el sitio adecuado para que lo pueda leer bien.

Ana abre los ojos y la boca a la vez y se gira para mirarme.

Un "¿Puedo ser tu novio?" decora la arena con flores rojas.

—Nuestros caminos se cruzaron hace dos años en aquella gala. Y en ese momento supe que no ibas a ser una chica cualquiera que no iba a volver a ver más. Fue todo lo contrario. Ana, estoy enamorado de ti desde que empecé a conocerte. Cada mirada, risa, juego o desafío que teníamos iba afianzando lo que siento por ti. Cometí el error que hizo que nuestra relación se quebrara. Así que he estado un año entero conquistándote y recuperando tu confianza de nuevo. Es por eso por lo que hoy, después de haber pasado cada obstáculo en nuestra relación, me gustaría que me concedieras el honor de ser tu novio —termino el discurso sin dejar de mirarla a los ojos.

Ella sabe que la quiero.

No he parado de demostrárselo durante más de un año. Y más.

Pero, joder, la quiero mucho más de lo que ella sabe.

Y estoy dispuesto a hacer lo que sea por Ana.

Ella comienza a sonreír lentamente hasta formar una amplia que ocupa todo su rostro.

—Me encantaría, Alexander. Me gustaría ser tu novia. —Sin esperar más, se lanza a mis brazos para besarme.

Sonrío y no tardo en corresponderle el beso.

La inclino hacia atrás cuando nos separarnos para recuperar el aire y agarro su cintura con las manos. Ana ríe por el gesto antes de volver a besarla.

—Venga, vamos a cenar —dice ella con una sonrisa coqueta.

—Tú mandas, jefa.

Suelta una carcajada.

Ana se sienta antes que yo. Entonces, me agacho para agarrar una de las flores y me acerco a ella para colocársela en la oreja.

La observo con admiración.

Es preciosa.

Y ahora es mi novia.

Me ha tocado la lotería con ella.

Sin que Ana se lo espere, saco el teléfono y le hago una foto para luego subirlo a las redes sociales.

Quiero que todo el mundo vea lo guapa que está.

Ana se percata de lo que hago ya que me observa con curiosidad.

—¿Por qué ahora no te importa que sepan de nosotros? ¿Por qué no lo escondes? —cuestiona.

—Porque quiero que el mundo entero vea la mujer que tengo a mi lado.

Sonríe ampliamente.

—Quién lo diría.

Asiento.

—La periodista y el jugador de voleibol que no se llevaban bien al principio, ahora son pareja —comento.

—Bueno, ha sido todo un deporte llegar hasta aquí.

—Un gran deporte para amarme —agrego.

—¿El deporte de amarte? —bromea ella.

—El deporte de amarte —asiento con convicción.

Y con solo mirarla, allí con el atardecer iluminándose detrás de ella y mirándome de esa manera tan única que suele hacerlo, supe que ya había triunfado.

FIN

..................

Ay, ay, ay. Oficialmente la historia de Ana y Alexander ha terminado (no me lo creo aún).

Han sido unos meses llenos de intensidad, amor y obstáculos que superar dentro de su relación.

Muchísimos mensajes por parte de vosotras para brindarme tood vuestro apoyo, amor y admiración por la historia. De verdad, mil gracias. Cada mensaje ha hecho que siguiera inspirada y con ganas de subiros más capítulos.

Y, como cada libro mío, si habéis llegado hasta aquí, quiero daros las gracias por haberme dado una oportunidad a mí como escritoria, como a la historia. Mil gracias siempre.

Nos vemos en próximas historias. La historia de Alexander y Ana ha finalizado, pero ¿no creéis que dos personajes necesitan contar la suya? :)

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