(Narr.kuroo)

Mi pasado no es mucho que me guste hablar a pesar que no tenga a nadie con quién hablar, solo desperté en una casa, había una mujer cocinando, era tan solo un niño.

Mi madre, supongo, estaba conmigo, no conocía a mi padre, pero viéndome en el reflejo del agua, no me parezco en nada a mi madre, ella tiene piel más clara que yo, con su cabello claro y brillante, sus ojos azules, una hermosa dama, mientras que yo era lo contrario, cada vez que me miraba en el reflejo del agua, solo me veo como un monstruo, piel oscura, pelo negro y mis ojos, no sabia el color de mis ojos, si me compro con mi madre, ella sería claridad y yo oscuridad.

Mi madre siempre me decía que era un niño hermoso.

Si salía a jugar un rato con los niños de afuera, las niñas siempre se me acercaban pero cada vez que íbamos a un lago o con algo que tenía reflejo, se iban corriendo llorando de miedo.

A los 9 pudo presenciar su casta, Alfa pero no uno cualquiera, uno dominante y por esa misma razón, casi todos los niños se iban de mi, ya no querían estar cerca de el

En las noches, siempre me iba llorando con mi madre, cuando cumplí hasta que cumplí los 13 años lo ví, ví a mi otro progenitor por asi decirlo, mi madre estaba en el suelo mientras que el estaba parado como si nada, cuando me vio, desapareció al toque, me fui donde estaba mi madre, estaba muy mal herida, tenia unas marcas oscuras en los brazos, desde ese día, no sali de mi casa.

Mi madre me contó que cuando ella era más joven, conoció a un hombre muy opuesto, pasaron tiempo juntos y ella se enamoró, su familia no estaba dispuesta a esa relación pero ella cometió un grave error, entregarse a ese hombre, al día siguiente, desapareció el hombre, semanas después, tuvo los síntomas, esperando a una criatura, su familia no estaba contenta, la botaron, todos le dieron espalda menos unas personas que la ayudaron; que cuando yo nací, me amo más que a nadie, pero cuando se vio en el reflejo conmigo, vuo como aparecía y que en ese mismo momento se dio cuenta que con el hombre con quién había estado pero que igual me amó.

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Las cosas volvieron a ser como antes, bueno, empezaron a ser como antes cuando eche un poco de esa agua de la iglesia, mi madre siguió estando conmigo.

Después de 1 año, ese mismo hombre apareció de nuevo en la puerta de la casa, yo estaba trabajando y cuando regrese a casa, había una multitud de personas que iban con antorchas, no sabía lo que pasaba hasta que ví a mi madre siendo quemada, escuchando cómo las personas le gritaba bastante cosas, no se que pasó luego, no me acuerdo, solo se que el lugar donde vivía, donde crecí estaba destruido, las personas estaban hechas en cenizas, no habia nadie cln vida.

Descubrí que podía sobrevivir sin alimentar me,en fin, era, mejor dicho, soy el hijo del rey demonio, osea, del diablo por así decirlo.

Me iba a aldeas para convivir con ellos para ver que tanto cambian, a los largo de todo, descubrí que podía levantar objetos y moverme sin ti ar el suelo, aunque eso sí doliera, no quise a hacer eso, quise ser un humano normal, cosa que nunca se pudo.

A los 60, por ahí de esa edad, descubrí un reino, por obvias razones, yo podía cambiarme la identidad pero está vez, me puse como era a los 16, la gente me trató bien, el pueblo me trató bien, y paseando por el pueblo, lo conocí, el tenía 19, tuve que fingir mi edad, dije que tenia 21; el era hermoso, un ángel caido del cielo, lo que más me llamaba la atención eran sus ojos, como el de un gato, empece a hablar con el, un hermoso Omega, de pelo no tan largo y de la realeza.

Comencé a sentir algo, ¿es posible que el hijo del diablo se sienta así?

Pasamos mucho tiempo juntos, jugábamos por los ríos, el sabía quien era, el era inteligente, no fue como los niños de cuando yo tenía 13, el se me acercó tan solo al ver mi verdadera forma por el reflejo del agua, me dió un beso, yo por obvias razones, lo acepté, desde ese día siempre quise estar con el, su famila era reconocida por el nombre de Kozume, eso era lo que escuche, la persona con quien estaba, era el único Omega de la familia real, el estaba comprometido pero igual vino hacia mí.

Puse disfrutar de muchas cosas en ese pueblo, me divertí con ese chico, si, si sabía su nombre pero no queria decirlo; pasábamos más con los animales, los atardeceres eran nuestros favoritos.

Esa noche fue la mejor que sentí, estando juntos debajo de la luz de la luna, desde esa noche, las otras noches eran iguales, pero ese guardia, ese  guardia nos vio. Cuando desperté, el clima estaba nublado, estaba en una celda, el, el estaba en mi costado llorando, me contó todo.

Estamos ahí por mucho tiempo, era de noche, hasta que olí algo, olía a muchas feromonas de alfa y vinieron unos guardias, se lo llevaron, después de poco tiempo, el empezó a gritar, quería romper la reja, quería saber que sucedía, solo escuchaba más gritos y un grito, solo un grito me hizo romper las rejas e ir que le estaban haciendo, cuando me puse en el lugar donde probevinian las feromonas, pude ver esa escena, el, tumbado en el suelo, más o menos un cuarto lleno de alfa, el con marcas en todo sus cuerpo, marcas de mordida en sus hombros, la furia me ganó, ese mismo cuarto fue destruido por mi, el estaba en mis brazos, el ruido hice venir a otros guardias que al instante los maté, ahora solo me preocupaba el, me lo queria llevar y hacer lo mismo que hice en el pueblo donde vivía, destruir todo de aquí.

Luna llena, salió luna llena y yo en luna llena no soy nada, no puedo usar todo mi poder.

De repente, siento un dolor insoportable en mi espalda, uir con el, llegamos a un tipo cementerio, el dolor me quemaban, voltea y veo a persona con, con agua bendita, por eso el dolor, me lo empezaron a echarme más, no podía hacer nada, el seguía en mis brazos, me lo arrebataron, veía como la persona quien me lo arrebato sufría de dolor en sus manos, había tocado mi piel, iba a destruir ese lugar cuando me echaron de más, la luna seguía, no había nubes echaron más de esa agua llevándome a una especie de tumba para que luego me pusieran algo, un selló, no me pude mover, maldije, antes de que se completaba, maldije a esa familia, que cuando naciera otro Omega, ese mismísimo Omega mi liberaría y destruiria el pueblo, mi cuerpo estaba congelado, el sello se completó, veía como esas personas se ponían felices y se iban, su cuerpo, veía como lo golpeaban, lo amarraron, el miro el lugar donde me sellaron y pude ver una sonrisa antes de que le ponían fuego.

Podré estar sellado pero podría ver todo lo que sucedió, podía ver cómo los nuevos niños veían dónde estaba mi sello, la mayoría eran Omegas sin descubrir, pero cuando descubrían su casta, los quemaban, podia escuchar esos gritos de dolor.

Así pasaron años hasta que ví a ese niño, pelo no tan largo, osea, un poco arriba de los hombros, su cabello rubio con raíces negras, piel pálida, no podía ver su rostro, estaba jugando con la reina en ese entonces, su madre, esa mujer era buena, además de que ya perdio un montón de hijos por su casta, pude ver los ojos del niño, ojos dorados como el de un gato. Me recordó un poco a el aunque su personalidad no era la misma, ese niño era tímido con sus hermanos pero con su madre se ponia un poco mas alegre, mientras que el era siempre alegre con todos, no eran igual, lo unico era el color de ojos, supongo.

Ese niño siempre iba a dónde estaba mi sello, un día fue con otros 2 niños, uni con pelo naranja y otro con cabello azúl, este parecía el mayor.

Pude sentir como el me liberaba, yo sabía, yo sabía que iba a ser Omega pero no pensé que antes de descubrir su casta me liberaría, los niños se asustaron cuando la tumba se rompió y se fueron corriendo, escuché el nombre de ese niño, kenma, kenma kozume es su nombre.

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Aquí hablé un poco sobre el pasado de kuro.