Capítulo 8
Adriel
No sé cuántas horas han pasado, pero he decidido que ya no voy a volver a repasar el caso si ya había dado mi punto y final. Así que cierro el expediente y lo dejo a un lado mientras que agarro la caja que tenía a mi lado y la coloco encima de mi escritorio cuando comienzo a sacar todo.
Lo primero que hago es revisar es el expediente extensos del famoso fantasma, Martínez y su equipo como me lo había imaginado y dicho Fisher no habían querido que supiera más del tema por lo que cuando ellos llegaron después al hospital a ver si Malika había despertado no le dio más remido que volver a la oficina y me fui junto con ellos para ver si me decían algo más del caso o me daban una copia del expediente pero lo único que recibí por ellos fue el ignoro del año.
<<Como si a mí también me hacía gracias trabajar con ellos.>>
Por eso ignoro la mirada que me da King cuando le doy mi mejor sonrisa al percatarse lo que tengo en manos.
— ¿Cómo... cómo?—ni siquiera la deje que terminara de hablar.
—Tengo mis contactos. — y volví mi mirada al expediente.
Su cara de estupefacción valió un millón de dólares por retratarlo en este momento pero no, el caso era más importante, así que me puse en ellos.
Ya me dolía la vista de tanto leer y se lo aseguro que mi estómago estaba más que revuelto, pero me dije que había visto cosas peores.
El primer cuerpo apareció en el 2016, y se lo aseguro que desde ese día mantuvo un patrón que nunca rompió hasta hoy con sus quince víctimas.
Si eran mujeres como había dicho King, siempre usaba la tortura en aquel gancho para después dejarla en una silla de madera amarada donde su cuerpo desnudo demuestra muchas cortadas y un sello.
Los hombres siempre le colocaban ratas en genitales, ácido, fuego, cortadas o cosas que hiciera que ellos sufrieran más.
No pasaban de los treinta años, y no entendía por qué Malika. Si ella no entraba en el perfil perfecto para esa persona. Y también debemos incluir a la familia de Martínez, ellos no entraban en su perfil. Era algo muy estúpido y absurdo.
Por lo que seguí leyendo, hasta que me levante de mi asiento guardando todo y saliendo de la oficina con las miradas de King y Williams en mí. Presione el botón que me llevaría a evidencias, y camine por aquel pasillo donde varios oficiales pasaban y saludaba, me acerque a la oficial que estaba tras de un escritorio alto.
—¡Pero miren a quien tenemos por aquí! ¡Si es mi Detective favorito!—la oficial Taylor hablo animadamente atrayendo las miradas hacia nosotros cuando llegue a su lado.
Coloque la caja arriba del escritorio mientras le regalaba mi mejor sonrisa de coquetería.
— Si hablamos de cosas favorita, tú lo eres en mi vida preciosa Taylor.—sus mejillas se colocaron rojas mientras alzabas las manos como si se estuviera echando aire.
—No me hables así, que me vuelvo a enamorar y después no podre soltarte de nuevo mi amor. Ve que ya me voy a casar y soy capaz de dejarlo todo por ti. —sonríe más y solo por provocarla me incline hacia adelante para que nuestros rostros estén lo suficiente cerca.
—Sabe que si voy al matrimonio, soy capaz de robarte de ese absurdo casamiento. —hable para los dos, y solo bastaron como dos segundo para que ella me empujara hacia atrás y los dos rompiéramos en risa.
— Es tu funeral si Bravo se entera que quieres robarte su prometida.
—Me juego el cuello solo por ti preciosa Taylor.
Y sin dejar las risas dos dimos un pequeño abrazo, y es que la oficial Taylor y el jefe están comprometidos. Es algo que todavía no hallo respuesta como alguien tan dulce puede estar comprometida con alguien tan gruño como el jefe.
Después que las risas calmaron, ella me sonrió sacando una tableta con hojas para que la llenara.
—¿Qué evidencias buscas? —pregunto y pude ver por el reflejo sin apartar la vista de la hoja que llenaba, que su sonrisa se había apagado y estaba intentado sacar el tema sin que me afectara un poco.
— Las evidencias del caso: 2016-01578—le dije mientras lo marcaba en la cabecilla que lo pedía en el papel. Ella hizo un gesto de desagrado pero lo entendía.
— Ese caso fue un desastre y te lo aseguro que tanto las evidencias de aquel día todas se contaminaron, solo quedaron pocas y eso porque alguien si fue más inteligente que el equipo de Martínez—la vi alejarse entre las estantería mientras me hablaba.
Yo en cambio no dejaba de mirar la caja que de ahora en adelante andaría conmigo para arriba y para abajo.
Aunque ahora que lo pienso, puedo hacer mi pizarra de sospechoso en mi lindo apartamento.
—Ni me lo digas, ya leí el informe de ese día. —blanquee los ojos un poco molesto y cansado.
16 de mayo del 2016, primera víctima. Thor Torre, chico de 16 años encontrando en las afueras de un molino por lo paramédicos que fueron atender la emergencia. Su cara estaba inconocible, por la huellas se pudo saber que era de nacionalidad extrajera que había venido en un viaje escolar.
Fue el primero que se le hallo en la costilla el sello hecho con un cuchillo en forma de una cruz invertida. Al principio en aquel entonces la mayoría creyeron que era un culto satánico, porque no se encontró huellas más que una desconocida que no aparece en el sistema y las otras de unos oficiales, paramédicos y el grupo de Martínez como siempre no protegiendo la escena.
Tanto fue el descuido que la mayoría de las evidencia se contaminaron, y casi cierran el caso dándolo por cosas satánicas hasta que apareció en el río otro cuerpo de otro joven con el mismo patrón de siempre.
— A lo mejor tú logras ver algo que los otros detective no vieron.—y era verdad, siempre comienzo desde el principio desde el inicio, nunca desde el momento que me dieron el caso sino antes que yo lo tuviera.
Y es algo que Martínez y su equipo pasan siempre por alto, un perfil como el fantasma es muy extenso y se tiene que llevar con cautela, no importa cuántas veces revises el casos desde el momento uno, siempre encontraras algo nuevo que descubrir hasta el mismo habla por sí solo.
— Aquí esta.—coloca la caja frente a mí, y le sonrió como agradecimiento antes de abrirla.
— ¿Crees que Tina siga trabajando en reconocimiento de huellas?—saco las bolsas de ropa del chico mientras sigo husmeando a ver si falta algo en mi lista mental
—Por lo que se, la última vez que la vi la ascendieron y ahora está trabajando con los técnico-científico le gusta más estar en el campo que estar en el laboratorio. Pero creo que si se lo pides de buena manera no dirá que no. —asiento mientras que termino de chequear todo y no me falta nada y sostengo las dos caja.
— Entonces iré a ver si ayuda a este pobre hombre en su trabajo.—ella se cruzó de brazos sin borrar su sonrisa pero en un momento a otro desapareció para que su bonito rostro lo cubriera una de lastima.
— Lamento lo de tu amiga, se cuánto eran unidos y espero de todo corazón que se mejore.
—Yo también lo espero Taylor, gracias nos estamos viendo.
No espere que me volviera a decir algo más de Malika, quería mantener mi mente ocupada cuanto más fuera de aquellos pensamientos porque estaba comenzando a tener culpa por todo.
Y es algo que ya se estaba comenzando a notar, no he pegado un solo ojo desde que la encontraron. Ni siquiera he vuelto a pisar mi apartamento por miedo de que si salgo de la ruta más corta por si me llaman del hospital diciéndome que ella despertó quiero está ahí. Por más que me costó irme después de la visita, no podía dejar de pensar que pasaría si ella no sobrevivía después de toda la mierda que le hicieron.
¿Sería yo el responsable por no aceptar el casos desde el momento que me llego la primera carta? O ¿Era por qué me sentía la peor persona del mundo por no estar con ella en casa desde el momento que había salido de la oficina?
Sé que mi trabajo me exige mucho, sé que no puedo tener una vida normal desde el momento que decidí esta carrera. Pero hay cosas que no se pueden dejar pasar, razones número uno porque nunca tuve una relación seria era por esto. Tenía el maldito miedo que en cualquier momento me ganaría un enemigo y terminara pagando la consecuencia esa persona.
<<Y nunca me equivoque, y volvió a pasar como la última vez. >>
Las puertas del elevador se abren para mí y salgo de mis pensamientos en el momento que camino por aquel pasillo largo que me llevara a los técnicos forenses. Solo le echó un vistazo a mi reloj que marcan que es la hora del almuerzo y sé que más nadie estará aquí.
Y lo confirmo cuando entro y veo a la única rubia que anda con una braga blanca que la identifica del área que corresponde mientras tiene una lupa en manos e inspecciona algo que está en una mesa gris.
—Hola preciosa. —dejo lo que traía en manos en su escritorio y me acerco a ella.
A pesar de que me oyó entrar y hablar no deja de hacer su trabajo.
— ¿Sabía que con una mínima gota de sudor puedo conseguir maravillas de mil resultado de tu ADN?
—¿Si? Ni lo sabía.
Me acerque a ella con cautela dejándonos dos metros de distancia y ahora podía ver que era lo que había en la mesa metálica y era ropa rasgada de una infante.
— Pues enterarte, el hombre y las mujeres sudamos hasta cuando hace frío. Ya que la prueba de sudor mide la cantidad de cloruro en el sudor. El cloruro es parte de la sal que se encuentra en el sudor. Por lo que cada uno no tiene el mismo tipo de cloruro en el sistema, y con solo una gota puedo conseguir que estuviste en la escena del crimen.—la veo ajustarse las gafas y después agarra otras cosas y la coloca en un solo lugar de la ropa.—Es impresionante como el violador creyó que nunca lo atraparían. —sonrió orgullosa y la vi tranquilo hacer su trabajo.
— ¿Qué edad tenia?—me cruce de brazos viendo como ella anotaba cosas en un cuaderno y después se movía de un lado a otro en su modo de técnica forense.
— 8 añitos, Franco tiene un sospecho pero le hace falta la prueba de ADN ya que obtuvieron la del sospecho. Solo falta comparar la que encontré con las del sospechoso y listo. —deja lo que estaba haciendo después de terminar para después quitarse los guantes y ajustarse las gafas acercándose hacia mí.
Sus ojos azules son hermoso a pesar de que con las gafas le da su toque nerd a la rubia que se mantiene en forma que oculta en un traje feisimo.
— Creo que oí que era el tío.—di un paso para acercarme cuando ella se quita las gafas y me dio aquella mirada que significa que debía detenerme.
— Mmm es mejor que te mantengas donde esta Adriel, porque desde que entraste estoy usando todo mi auto control para no matarte aquí mismo.—si, y ahí estaba la chica ruda que la nerd ocultaba.
Coloque mi sonrisa de angelito que no sabía nada y volví a dar otro paso corriendo a mi suerte.
— Vamos preciosa Tina, sabes que solo vengo por trabajo.—ella se cruzó de brazos mientras enarcaba una ceja un poco molesta.
— Si, trabajo mis nalgas. Tu y yo sabemos a qué has venido Adriel, solo dame las evidencia y te largas.—me extendió su mano para que le entregara la ropa que se mantenía en una bolsa de evidencia.
— ¿Ni siquiera algo rápido, como en los viejos tiempos?—me arrebato la bolsa de las manos furiosa y se apartó de mí para hacer su trabajo.
—¡No! —dijo firme pero yo seguí insistiendo, porque sabía que si salía de aquel lugar volvería andar pensando cosas estúpidas y quería mantenerme ocupado.
— Vamos Tina, sabes que aquel día estaba borracho.
—Ya lo sé, y dice un dicho por ahí que los borrachos son como los niños, que no mientes y solo dicen la verdad.
Resople cansado dándome por vencido mientras tomaba asiento en una silla dejándola trabajar.
— Solo necesito que encuentres evidencia nueva, y las huellas que las vuelvas a colocar en el sistema a ver si aparece.—me lleve las manos a la cara cansado.
Y es que Tina era una chica preciosa la cual me llamo la atención desde el día que la conocí cuando me mude a New York, estuvimos como dos años saliendo hasta el día que Malika se vino a vivir conmigo al apartamento.
Creí que mantenerme lejos de mi mejor amiga por la cual mantenía sentimientos ocultos iba a funcionar y lo hizo, ya estaba haciendo mi vida con Tina hasta que ella volvió y revivió todo aquello que había matado.
Y adivinen, una noche de fiesta me emborrache y termine confesándole a Tina que me gustaba Malika. Y hasta ahí llego todo.
<<Que enredo era mi vida.>>
Enredo no, era una porquería.
—¿Tienes sospechoso? —me pregunto sin dejar de hacer su trabajo.
Negué aunque sabía que no me veía.
—No, tengo que comenzar de nuevo. Ya Fisher me consiguió el expediente, entre un rato saliendo de aquí, voy a la granja.
—Me imagino que no vas a ir solo ¿verdad?
— Je en eso te equivocas, tengo que ir yo mismo porque si involucro a alguien más el jefe me corta la cabeza.—ella se ríe y me gusto.
Extraña aquel sonido.
Y lo perdí por ella.
<<Jode, si Malika despierta le vamos a confesar todo porque ya basta de esconder todo otra vez.>>
<<Esto es canso.>>
Claro que lo que es.
— Como extrañe ese sonido.—sus hombros se pusieron rígido pero después se calmó.
— Creo que deberías irte, cuando esté listo yo te llamo.—a pesar de que me daba la espalda se podía notar en el aire que estábamos más que incómodo.
— Si, es lo me...—me detuvo en el momento que mi mirada se posó en el televisor pantalla plana que mantenía el canal de noticia.—Mierda. —me levante de golpe de la silla y fui por el control para subirle el volumen.
Tina que me imagino que se había asustado por mi arranque también se había colocado a mi lado y aunque no podía ver su rostro sabía que mantenía el mismo que yo.
De estupefacto y miedo.
— ¿Dime que no tuviste ese caso?—aunque estaba rezando para que no lo fuera si lo era.
— Si.—apreté mis dientes molesto antes de ver como las imágenes pasaban y una periodista hablaba y una mujer vestida de negro junto con un grupo grande de personas estaban con carteles fuera del departamento policial.
A mí no me daba miedo que mi foto apareciera en la televisión, si no la mujer que tenía un micrófono y gritaba impulsando que las demás gentes e iniciara el caos.
—¿Dime que no te equivocaste por ella? —ella jalo mi mano preocupada para que mirara sus ojos azules un poco más que preocupada.
Y por primera vez en años de experiencia no tenía una respuesta para darle.
***
—¡QUEREMOS JUSTICIA!
—¿PARA QUIÉN?!
—¡PARA CARLOS FICK!
—¡¿QUÉ QUEREMOS?!
—¡JUSTICIA!
—¿PARA QUIÉN?!
—¡PARA CARLOS FICK!
Desde el vestíbulo se podía escuchar los gritos de los fans del ex cantante que ahorita deberían estar haciéndole el velorio, pero por lo que veo el muerto está bailando en plena carretera.
—¡Miller a mi oficina! ¡Y Ustedes mantenga la puta barricada y que nada se salga de control! —ordeno el Jefe Bravo desde las puerta del elevador en el vestíbulo.
Todo era un caos, oficiales corrían de un lado a otro y no olvidemos que algunos preso que fueron arrestado los metieron todo en un sola celda porque la central se estaba preparado para todo.
—¿Voy contigo? —Tina apretó mi mano para llamar mi atención, pero es que mi mente estaba más en la vieja loca que estaba montada en una tarima en plena avenida con un micrófono gritando a lo loco.
Mientras que su difunto bailaba en pleno ataúd en la calle.
<<Que puto circo me vine a meter aquí.>>
—No te preocupes puedo solo, solo necesito que tengas lo que te pedí a tiempo por favor y que esto quede entre nosotros dos. —ella asintió y la vi ir por las escaleras de incendio mientras que yo me iba directo a elevador.
Y antes que presionara el botón vi como un Fisher corría con una Tablet en mano mientras hacía todo lo posible para que sus gafas no se le cayeran, se detuvo frete de mi agotado mientras se llevaba una mano al pecho y clamaba un minuto de descanso.
—¡Habla que mi parca me está esperando para llevarme a la muerte! —exigí rápido porque sabía cómo era el jefe odiaba que uno llegara tarde.
— Solo... dame un minuto por favor.—y eso hice hasta que se colocó firme y encendió su Tablet dando un paso hacia mí. — Estuve revisando las cuentas como me pediste y si, fueron cancelado. Pero el problema está en que...
—Ve al banco, yo me encargo de lo demás.—lo corte presionando el botón y cuando el elevador se abrió, entre y lo deje afuera.
Fisher me miraba como si me fuera salido otra cabeza, pero la realidad era que yo si tenía razón y no iba a ir a perder mi tiempo en juegos infantiles de una loca viuda con deudas.
—Pero con esto podemos hacer que ella se vaya y hablar con los reporteros.—metió la mano para impedir que la puerta se cerrara extendiéndome su Tablet pero yo negué quitando su mano.
—Ve al banco como te pedí, y hazme un favor ve con el teniente Sánchez. Le encantara salir por primera vez de todos esto años de su escritorio.
Ni siquiera le dio tiempo chitar cuando las puertas se cerraron y yo contaba del uno al diez pidiendo paciencia.
Ya en el piso pude ver como la mayoría de algunos detective y oficiales se me quedaban viendo, otros murmuraban y otros me daban miradas de lastimas.
Jennifer la nueva secretaria del jefe solo levanto sus dos pulgares dándome ánimos y es algo que no sabía cómo explicarle que ni eso ayudaría, toque la puerta y solo escuche un adelante pero cuando abrí la puerta me agache en el momento que vi pasar un portarretrato por los aires que iba directo a mi cara.
Me cubrir para que los pedazos que volaron por los aires no me dieran.
— ¡Entra y cierra la puta puerta!—grito y no sé cómo reí cuando Jennifer pego un grito de horror.
Y lo entendía era su primera vez ver al jefe así, y ya todos aquí estaban más que acostumbrado.
—Bravo, te voy a pedir que por favor deje de estar lanzando cosas a tu gente, alguno te puede demandar por maltrato, imbécil. —el capitán Mack estaba sentado en el sillón de cuero mientras bebía algo de su taza con su uniforme puesto.
La oficina del jefe estaba más que destruida y yo solo pase cerrando la puerta.
—No me digas que es lo que puedo hacer y no hacer con mi gente Mack, porque te lo aseguro que un día de esto tu cerras el próximo que veras algo volando a tu cara. —le gruño el jefe molesto mientras lo señalaba y después dio un giro a una velocidad luz se güiro hacia mi más furioso.—¿No me habías dicho que era suicidio?
—Y si lo es...
—¡Claro que no, te dije que no lo iba a dar todavía por cerrado porque solo te basto resolverlo en dos putos días y ahora mira lo que está pasando allá afuera! —una patada al escritorio y se agrietó.
El capitán Mack solo blanqueo los ojos mientras dejaba que su amigo descargara la rabia en el pobre escritorio que no le había hecho nada.
El jefe no le gustaba los giros inesperados o los cambios, odiaba que algunos de su equipo estuviera revuelto en tramas locos como el que me acaba de meter sin saber por aceptar el caso de un famoso.
— ¿Listo? ¿Ya te calmaste?—pregunto cuando vio que el jefe ya no golpeaba más su escritorio y se pasaba las manos por su pelo. Él asiento y después el Capitán me miro a mi.—Por favor dinos cuál fue el resultado que diste.
Yo asentí mientras me colocaba firme y me preparaba de nuevo.
—Los forenses no vieron el nailon trasparente debajo de la cama que estaba amarrado a su dedo de la mano del difunto que se conectaba desde la bomba de gas que estaba, que iba directo a la azotea, donde se podía ver con mucha claridad si fuera de día el pequeño detalle que pasaron por alto los experto. La argolla que descubrir pertenecía a un hombre y no a las prostitutas. Lo mande a los forenses y me lo confirmaron con los resultados, así que no busque un asesino si no por qué la víctima se suicidio, había llegado a la conclusión después de revisar las cuentas que era por deudas que heredaría su mujer, no había seguro de por medio hasta ahora. Estuve investigando las cuentas del cantante y me di cuenta que debe mucho dinero por drogas, y que tiene un seguro de vida de más de 500.000$. ¿Casualidad que un mes después que la abrió, muera? No, uní todos los cabos suelto y los uní antes que saliera el sol como caso cerrador. Bueno en realidad si lo di como caso cerrado, hoy tuve mucho tiempo libre y pude encontrarme que todo es un fraude y aunque la viuda lo sepa o no, igual ella a lo mejor fue la autora intelectual dándole la idea porque estuve viendo algunas entrevista del cantante... Y que si era un retraso mental para hablar. Lo único que conseguía para dar la fama era lo "hermoso" que era y su voz que era puro auto túnel.
Cuando termino respiro hondo porque no sabía en qué momento deje de hacerlo y es que cuando hablaba demasiado rápido me olvida de muchas cosas y más cuando me estaban cogiendo de los cojones en este momento.
El Jefe y Mack se quedaron viéndome con una impresión hasta que carraspeo para que digan algo y el primero que salió de su estupefacción fue el Capitán Mack. Donde miro al jefe que le dio una mirada que no pude entender.
— Entonces todo fue un fraude para cobrar el seguro y pagar las deudas que tenían.—repitió el Capitán como confirmándolo y yo asentí.
—Y si crees que la viuda es la autora intelectual ¿Por qué no la arrestar? —el Jefe me pregunto llevándose la mano a su barbilla achinando los ojos.
— Porque aquí nos basamos en prueba y no en teorías, además esa mujer se ve desde lejos que es una gran manipuladora y si la llevo a juicio terminare soy yo perdiendo y ella ganando. Por lo que no quiero eso, pero ahora que lo preguntas puedo llevarla demostrando con las entrevista que ella pudo plantar la idea en él, pero sin una declaración no tengo nada.—ahora era yo el que me perdí en mi pensamientos.
El jefe se levantó del otro sillón mientras se dirigía al suelo y entre todo aquel papelerío que estaba alzo una carpeta marrón y sabía que era el caso.
—Claro que si puedes, la podemos arrestar por incitar odio y alteración del orden. — sonrió él feliz pero aquella sonrisa era como si le gustara disfrutar ver caer a una de esa personas que se creían intocable.
—Y ahí aprovechas y la vuelves a interrogar, y le saca la confesión.—concluyo el capitán y yo asentí dándolo por hecho.
Y ya estaba a punto de irme cuando me llego un mensaje de Fisher, solo lo leí por arriba y sonreír porque esa vieja ya me estaba cansando.
—¿Qué harán con las demás personas?—pregunte guardando mi celular y listo para ya irme.
El jefe solo se encogió de hombros mientras que el capitán solo se terminaba de tomar su café y echarle su última mirada a la ventana que daba una gran vista preciosa a la gran ciudad.
—Mala suerte para ellos que hoy no es el día para nadie.—después de eso vi como el jefe enviaba un mensaje y solo segundos después se escuchó un grito de una persona y después las demás personas le seguían.
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Holis, Feliz Navidad a todos y gracias por estar siempre ahí en todas la actualizaciones se le quiere mucho.
No olviden de votar y comentar si le gusto mucho, me ayudaría en la historia.
Besos y abrazos 😘🤗
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