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capitulo 15


Narrador omnisciente:



La pila de papeles sigue intacta sobre el escritorio y el hombre que recuesta la espalda en su silla suspira, dejando las gafas sobre la mesa. Los rayos del sol, se cuelan por la ventana y el, estresado por el trabajo, se afloja la corbata del traje. Las preocupaciones y las responsabilidades de su puesto como jefe, cada vez lo aplastan más y mas. Y pese a que aún es joven, no ve la hora de ceder el cargo a su primogénito. El puesto a sido suyo desde siempre, pero solo se ha retrasado para darle algo de tiempo de caridad con su propia familia.


Nadie mejor que Mikhael Ivanov, saben la importancia de la familia y del compartir con tus hijos cuando aún son unos pequeños. Y desea que su hijo experimente la experiencia de ser padre en todo su máximo esplendor. Y tal vez que sufra un poco del Karma que a él le tocó vivir, por sus travesuras. Y si para eso, debe seguir al frente de la organización por un tiempo más, puede hacer el sacrificio. Después de todo, se lo debe por haber tenido que ausentarse tantas veces, cuando Sasha aún era un pequeño. Sonríe mirando la foto familiar donde su hija «con varios años menos» abraza a su hermano y a su madre, sin dejar de sonreír a la cámara.


«Katrina Ivanova... su pequeña princesa.»


Endereza la espalda sintiéndose orgulloso de la familia que ha construido junto a su mujer. Recordándose a si mismo, que la llegada de Kiara del Castillo a su vida, definitivamente fue su más grande bendición.


Dos golpes en la puerta lo hacen desviar mirada a la madera y suspirar cuando Dimitri, su hombre de confianza, se asoma y asiente indicándole que tiene visitas.


El Pakhan se aferra con sus afiladas garras, a todo su autocontrol, y conteniendo la ira que le corre por las venas, hace un gesto con la mano dando la autorización para que permita en ingreso de la persona que ha solicitado una entrevista con el.


Mikhael es inteligente y sabe que algo trama, no le importa que sea en realidad de lo que quiere hablar alguien como el, pero aún así lo escuchará, porque quiere ver el rostro de quien se atrevio a intentar tocar a su princesa. Salir de cacería es entretenido, pero cuando tú presa se presenta frente a ti y pone por propia voluntad la cabeza en la guillotina... Nadie podría resistirse, además le interesa ver hasta donde son capaces de llegar las personas que creen que pueden verle la cara al Pakhan de la Bratva.


-Adelante.


Señala la silla frente a el, cuando el hombre de cabello castaño y ojos azules, atraviesa la puerta de su despacho, con soltura, pero con una notoria y fingida humildad. A simple vista parece un buen hombre, y entiende como pudo acercarse tanto a su hija, después de todo, parece un chico común y corriente.


-Es un honor conocerlo al fin Pakhan. -Sonríe amable, extendiendo su mano-mi nombre es Yago... Yago Sakharov.


El Pakhan lo detalla con la mirada sin dejar de juguetear con el cenicero en forma de cráneo, sobre la mesa, imaginando que es la cabeza del bastardo frente a el, mientras sus ojos permanecen fijos en el hombre que se sienta de inmediato, cuando le señala el asiento libre.


Yago se siente confiado, el Pakhan parece un hombre razonable y no el temido y oscuro ser, que todos profesan que es. Está seguro de que no le costará envolverlo en sus redes. Y a juzgar por lo pacífico que se ve, su seguridad aumenta ya que es evidente que no tiene idea de lo que ha pasado en el club, de hecho aunque Lev o la chica Ivanova lo acusaran de algo, no tendrían como probarlo. Fue un error de calculo intentar una jugada con la chica. ¿pero como iba a saber que era la hija del Pakhan? Para el todas las mujeres son iguales, solo recipientes en los cuales vaciarse y en algunas ocasiones, una buena fuente de ingresos.


-Me dijo tu padre que necesitabas hablar conmigo chico. Que tenías una propuesta importante que hacerme. Soy un hombre ocupado así que te pido que vayas al grano -asiente y Yago baja la mano al percatarse de que no la tomara.


-Si señor, como sabrá mi familia ha estado interesada en formar un lazo de negocios con los Ivanov, de hecho creemos que podemos serle de mucha utilidad para la organización...


El Pakhan alza el mentón sobándose la barbilla, mientras escucha y analiza dónde podría meterle la primera bala, hasta que recuerda las palabras de su esposa horas antes. "Hay castigos peores para gente como el, y verdugos que merecen y necesitan la redención, deja que sea el quien se encargue."


-Tengo entendido que mi padre, en más de una ocasión le ha informado de lo lucrativos que son nuestros casinos y el incremento de bienes y propiedades que hemos tenido en los últimos años, en diferentes partes del país; al igual que en el extranjero. Yo, personalmente me he encargado de extender nuestros negocios de forma internacional.


El hombre sigue hablando y con cada palabra que sale de su boca, mas aumenta el deseo de Mikhael de meterle un balazo, pero atendiendo a las suplicas de su esposa, dejara que se encargue de el, quien más conviene. Pero de todas formas, harto de escucharlo levanta su mano y lo interrumpe.


-Suponiendo que compro lo que vendes, chico... ¿Cuál es el precio que debería pagar? Porque asumo que no me saldrá gratis y que no solo buscas colaborar con Bratva, no sin obtener algún beneficio. Este es un negocio con un viaje de ida, una vez dentro no se sale. -Advierte y le dedicó una sonrisa que no tiene nada de amigable, pero que claramente Yago, malinterpreta.


El no lo sabe, pero justo ahora debería estar corriendo lo mas lejos posible de este lugar, incluso salir del país, pero la soberbia y las ansias de poder, no lo dejan ver el peligro que tiene frente a el. «La ambición y la lujuria son los peores enemigos de un hombre.» Así que en cambio, en lugar de marcharse, endereza la espalda y se inclina hacia adelante, sacando del bolsillo el cofre de terciopelo rojo y dorado que abre y deja expuesto sobre el escritorio.


Ivanov clava sus ojos en el anillo y aunque por dentro arde, se obliga a calmarse y mantener la expresión serena. Es el colmo del descaro y falta de respeto, pero aún así sabe que está en la mira por ser uno de los pocos que aún no ceden en matrimonio a su hija y matar ahora a Yago cuando viene a pedir oficialmente la mano de su hija no es prudente.


Las cosas en la hermandad, luego de lo de que Sasha raptara y se casará con Sarah Rinaldi, han traído consecuencias y la presión sobre las mujeres libres, de las diferentes organizaciones que conforman la hermandad sigue creciendo. Y aunque se ha encargado de deshacerse de los peligros que acechaban a su pequeña, hasta el, sabe que llegara el día en que la olla se destapara y las preguntas empezaran a surgir. En especial cuando todos y cada uno de los hombres que han pretendido a su hija, han muerto de diferentes y muy desafortunados accidentes. U otros, simplemente han desaparecido.


-Con el respeto que usted merece, quiero casarme con su hija. Unir nuestras familias, seria muy provechoso para ambos. Las dos familias más prestigiosas del país, unidas en una sola. -Alardea orgulloso y el Pakhan mira la gran sortija de diamantes sobre la mesa.


-Era de mi madre y estoy seguro que a la princesa le encantara.


Señala el anillo, sin dejar de sonreír, a la espera de una respuesta, mientras observa al hombre a la espera de una respuesta, sin percatarse de como el Pakhan lo observa, estrechando los ojos, preguntándose, si de verdad este chico es un suicida o solo quiere tocarle los cojones.


Cuando lo llamaron del club para informar lo que pasó con su hija y como Lev la había sacado de allí semi inconsciente, casi enloquece, pero para su buena cordura, su esposa recibió un mensaje donde Kat explicaba que pasaría la noche con su amigo Lev. El alma volvió al cuerpo del hombre que ardía en furia, ya que mientras estuviera con la sombra de la Bratva, su hija estaría a salvo, por lo cual, ansioso por encontrar al bastardo que intento dañarla, pidió que mandarán de inmediato copias de todas las cámaras de seguridad del lugar, en dónde vio como el chico aparentemente inocente que ahora sonríe frente a el, sacaba una botella oculta desde su traje y se la entregaba a su hija.


No había duda este chico aparentemente noble y con buenas intenciones había intentado dañar a su hija y eso era algo que no perdonaría, pero sabía que matarlo ahora no le daría la satisfacción de usarlo primero como el había intentado hacer con su hija.


-¿Qué te hace creer que aceptaré? Ni siquiera conoces a Katrina. -responde enarcando una ceja y el chico sonríe.


-De hecho la conocí ayer y me parece una chica muy dulce y amable. -El Pakhan tuvo que esconder los puños bajo la mesa para no romperle el cuello-Estaba con mi primo Lev, el dará fe de que nos vimos y charlamos amistosamente.


«Amistosamente.»


-Además... todos sabemos que pronto no tendrá opción, ella está en edad para casarse y los rumores ya han empezado a correr, se dice que la han sacado del país para no cumplir con los tratados que exige la organización.


-Sabes mucho al respecto, para no estar en el negocio me refiero. -Entrelaza los dedos sobre el escritorio mirando con recelo al chico.


-Debo conocer el terreno donde me desplazo si quiero formar parte de este mundo.


«No tienes mi idea chico» Pensó el hombre que tomó la sortija y le dedicó solo un breve asentimiento.


-Bien Yago... solo diré que, aunque no lo tenía previsto, me parece una magnífica idea, la de unir a nuestras familias. Puedes contar con que ese lazo se hará efectivo. Tienes mi palabra.


Lo había hecho, Yago lo había conseguido, las puertas al trono y al poder se le habían abierto y no disimulo su entusiasmo cuando se puso de pie sonriendo. Lo había conseguido, y a diferencia de lo que creía, le había resultado increíblemente sencillo meterse en la cabeza del hombre al que todos tanto temen, pero que para el, no es mas que un viejo idiota, al cual matará tan pronto ponga un heredero en el vientre de su futura mujer.


Y con ese pensamiento, se despidió y abandonó el despacho del hombre que no dejaba de observar la sortija de compromiso en su mano.


A Yago el dinero le sobraba y sabía que cuando su futura mujer viera la sortija plagada de diamantes no abriría la boca para negarse. Después de todo... no hay nada en el mundo que no se pueda comprar, y la hija del Pakhan de la Bratva, no era la excepción.


****

Ayy buenas buenas... 🤯👀

‼️Se prendió esto 💥🔥

Micky... ¿que hiciste? 🤯
¿Yago llegará al altar?

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Las leo hermosas... 👀


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