Cap. 8
Leslie: según mi abuela, creo que mas de 30 años.
Fernando: ¿y como lo conservaron?
Leslie: abuela dijo que su relleno y tela esta hecha para durar mucho tiempo si no se expone a temperaturas explosivas.
Mario: ¿y como sabe eso?
Leslie: en su época así eran diseñados para durar mas tiempo incluso cuando los más pequeños juegan con ellos.
"Debió de haber tenido uno cuando ella era niña ¿no?"
Leslie: ella dijo que si, mencionó que era un bombero.
Y así nos fue contando como la abuela encontró al conejo, lo habia encontrado después de una explosión que ocurrió en una vieja casa cuando la guerra se desató y como la abuela de Leslie era una niña le gustó el muñeco y lo tomo para cuidarlo hasta sus 25 años, una señora lo compró para su hija, pero casi un año después lo devolvió sin pedir su dinero, no lo quiso vender otra vez desde ese día hasta ahora que ya no puede contener muchas de sus cosas, es una suerte que me haya dejado ese conejo tan especial y raro.
Luego de terminar de comer nos fuimos todos al parque a seguir con nuestro entrenamiento en patineta, Leslie usaba patines pero igual estaba con nosotros en esas practicas, deje mi mochila junto alas demás, en eso incluye el muñeco alado de ellas como si las cuidara y me fui con el resto de los chicos hasta que al casi terminar la vi... No puede ser ella estaba ahí, no me esperé tal sorpresa que Angélica estuviera caminando justamente aquí adentro, mi corazón palpito con fuerza y me puse totalmente nervioso, tanto así que no me di cuenta cuando fue que tropecé con la rampa, desperté cuando me llamaban mis amigos y me reincorporé lentamente sentándome en el suelo mientras sobo mi cabeza.
"Auch, duele un poco..."
Angélica: ¿estas bien?
No podía creer lo que escuchaban mis oídos, levante la mirada y si era verdad ¿o es ilusión? Ella estaba ahí, me miraba preocupada y yo solo pude a intentar actuar normal y solo día una boba sonrisa.
"e-eh si estoy bien, no paso nada."
Angélica: que bueno, me preocupo verte así.
Mi momento no pudo seguir en sorpresa ¿acaso a ella le preocupé? Soy realmente un tonto pero... ¿eso es bueno? No lo sabía con exactitud, entonces me rasque la nuca.
"¿E-enserio? Lo siento..."
Angélica: descuida, no ha pasado nada.
Ella dio una pequeña risa, yo di una sonrisa ampliada mientras me levanté para así ir con todos y angélica de compañía, mi día no podría mejorar para mi corazón.
-mientras que el conejo azul estaba quieto observando a los humanos, sobre todo a su maestro quien estaba cerca de esa chica, le parecía curioso y quería saber más de esa chica pues parece que sería una buena amiga como la otra. En fin cuando los humanos han terminado, aparentemente, por dentro se alegró cuando su maestro se le acercó, pero lo raro es que de una en vez de presentarle a la chica lo ocultó ¿porque? No lo entendió, solo vió el bolso cerrarse y lo que escuchaba eran como susurros a sus orejas, la curiosidad le mataba pero lamentablemente no puede levantarse ni moverse...-
La conversación entre Angélica y yo fue realmente agradable, no quería que todo esto acabase pero tiene que ser, acordamos vernos mañana en la escuela para reunirnos en ciencias y así poder terminar la tarea de la profesora, entonces sin dudarlo acepté, mis amigos cuando ella se fue me picotearon con los codos las costillas diciendo cosas que no deberían, solo les ignoraba por un tiempo hasta que se hizo tarde, iba caminando solo por las calles camino a mi casa cuidando que mis espaldas estén bien.
*¿maestro, se encuentra bien?*
Nuevamente me asuste un poco, pero cayendo en cuenta que era solo el peluche me relaje bastante hasta el punto de que lo fui sacando de la mochila sin dejar de caminar.
"Si estoy bien, solo que estuve pensando es todo. ¿Y tu?"
*Estoy bien, solo que estoy algo nervioso...*
"¿nervioso? De que..."
*Su mochila... Es muy oscura...*
"Aaah, entonces es eso... Perdona, intentare no cerrar la mochila por completo para que no sea tan oscura ¿si?"
*esta bien.*
No hubieron más palabras, tuve al muñeco entre mis brazos mientras caminaba hasta llegar a casa, mi mamá no estaba pero si mi papá, deje al muñeco en la mesa y fui con el para jugar un poco y hablar sobre diferentes cosas, incluso de como poder ser agradable con las niñas, el me decía que debo relajarme y estar confiado y con la guardia alta, eso sonaba fácil por lo que me le quede escuchando por un rato.
-mientras tanto, Plush estaba en la mesa, son moverse y viéndolos reir y jugar, una sonrisa interna le cubrió literalmente la cara hasta que llega la madre a la casa, todos cenan y tal, pero parecía que ignoraban al muñeco por completo hasta apagar las luces, su sonrisa se borró por completo y nuevamente la oscuridad lo invadió en el momento, como no hubo nadie se hizo un ovillo abrazando sus piernas sobre la mesa sin intenciones de bajarse, no hasta que tocaron las 12pm.-
-el ambiente era callado, las calles silenciosas, pocas casas estaban encendidas, no era nada grave, solo que una habitación de la casa donde vive ahora se encendió, el muñeco se quedo normal para solo ver que era la madre del maestro, se le acercó con indiferencia y lo agarró, lo miró un poco y sonrio para dejarlo entre sus manos y subir a lo que sería la puerta de la habitación de su hijo pues como esta estaba cerrada lo dejo en la puerta y sin decir nada mas lo dejó ahi.-
-el conejo solo parpadeo un par de veces mirando a la mujer bajar hasta que apaga la vela cuando llega a su habitación, la noche pasó su curso y la mañana siguiente llegó junto al alba con los rayos de sol llegaron a tocar las paredes de la casa y traspasando las cortinas de las ventanas, un nuevo día comienza y eso significa que nuevamente la rutina comenzará dentro de poco... Pero no importaba, solo se molestaba a estarse quieto... Y esperar...-
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro