Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Cap. 11

Las clases continuaron normal pero aun tenía esa inquietud de hace poco, sin embargo prestaba atención para no quedarme atrás ahora que viene un examen como para finalizar la materia cosa que tendré que concentrarme un poco más en lo que queda del tiempo libre esperando que esta vez si pueda estar con un ambiente tranquilo con mis amigos sin tener que preocuparme por cosas que en primer lugar no tiene nada de lógico con la realidad y en segundo lugar me hace querer preocupar hasta el punto de creer que necesite ayuda adulta para resolver mis problemas.

Finalmente terminamos las clases, estaba apurado en armar mis cosas y de despedirme de Angélica antes de que ella saliera al auto de su padre que la viene a llevar, a veces me preguntaba como la gente de alto rango puede tener mejores cosas, y como sería tener esa capacidad, no es que no me guste en estar como ahora estoy pero solo me imaginaba pues hay niños que presumen sus cosas que a la mayoría de nosotros no tenemos, pero bueno es algo que podría dejar de un lado por un tiempo, me gusta de mi libertad o lo que tengo de ella, no tuve que ir al entrenamiento hoy así que me quede en mi habitación y desempaque todo hasta dejarlo en su sitio correspondiente.

Cuando saque el conejo me quede a verlo en silencio unos minutos, estaba inquieto porque el hecho que este enojado conmigo y no me quiera hablar es algo inquietante, por eso me decidí de empezar.

"¿estas ahí?"

*¿Qué ocurre maestro?*

Por fin estaba aliviado de que me respondiera.

"No nada es solo que... Lamento mucho haberte regañado de esa forma y..."

*No, es mi culpa... No quise entrometerme en eso sin saber que ella... Te... G-gustaba...*

Bien, ese tono de voz parecía muy deprimido, como si tuviera miedo o algo así, pero notaba bien en su voz que estaba triste, genial ahora me hace sentir culpable de solo haberle regañado... Pero bueno ya admitió que estaba curioso de Angélica así que lo tomare con calma.

"Bueno, dejemos el tema de un lado y sigamos con otro ¿te parece?"

*Esta bien.*

"Primero ¿Por qué me llamas maestro?"

*Es que... Se parece a alguien...*

"¿a quien?"

*Pues... A mi antiguo maestro...*

Bueno no me espere eso, de verdad es que no me imaginé que me dijera algo como eso en un momento así, me empecé a sentir algo mal pues no sabía que antes tuvo quien le enseñara muchas cosas así como... ¿hablar por ejemplo? Eso aun lo tengo en duda pero supongo que le ha enseñado a ser humilde por como habla y me trata con respecto, así que seguro lo enseñó bien para ser un... Muñeco.

Luego de quedarme pensando en ello por unos minutos me acerque al conejo al que agarre entre mis manos para verlo mejor.

"Disculpa, no sabía que tenías un dueño anteriormente."

*no te preocupes por eso.*

"¿Cómo te trataba tu antiguo maestro?"

*me trataba bien, me gustaba cuando dormía junto a mi.*

"¿enserio? Seguro debe de ser agradable."

*mucho.*

Así nos quedamos a hablar durante unos minutos hasta que me llamaron por teléfono, era mi abuela quien viene este fin de semana para visitarnos, me emocioné pues ella me puede ayudar con algunas tareas porque ella fue maestra antes y tendría ventaja sobre ello, entonces cuando colgué fui a mi habitación a arreglarla escuchando nuevamente al muñeco.

*¿Qué ocurre?*

"Vendrá este fin de semana mi abuela, quiero que todo este bien arreglado"

Dije como si fuese un juego, entonces comencé a levantar mis ropas con ayuda de mis brazos para así irlos acomodando en sus respectivas cestas ya dobladas y apiladas una sobre otra, luego de ello fui a buscar mis calcetines y como siempre no los encontraba aún por eso mismo estaba en una constante "pelea" contra ellos pues siempre se pierden.

*¿Estas buscando esto?*

Escuche decir del peluche lo que me pareció curioso hasta que volteo a ver tenía mis calcetines a un lado de el, me sorprendí demasiado que al acercarme vi que estaban todos juntos en pares exactamente iguales, a lo que me di cuenta que tal vez...

"¿de donde los sacaste?"

*estaban abajo acompañado de los zapatos, maestro.*

Bien ahora que me doy cuenta nunca revise ese lugar, ni siquiera se me ocurrió la idea de revisar ahí así que ahora todo puede tener sentido, que estupidez la mía.

"vaya, ni me di cuenta que llegaban ahí... Gracias"

Y así fue como empezamos a ordenar mi habitación, en lo que yo no podía encontrar el peluche me ayudaba y lo encontraba rápidamente para que yo pueda acomodarlo como es debido... aunque es raro que lo diga de este modo pero... Me agradaba mucho que me ayudaría a encontrar mis cosas pues así nos entretenemos para hablar de diversas cosas, entre ellas como fue domesticado de esa forma para hablar y para aprender palabras nuevas de la época que yo no conocía y que poco a poco conocería más de él, parezco paranoico con decir eso pero ahora que lo veo solo me quiere ayudar ¿Por qué debería de decirle que no? Sería muy egoísta de mi parte si me negara ante su ayuda tan amable.

"muchas gracias por ayudarme."

*no hay de que maestro, cuando requiera mi ayuda puede decírmelo.*

"sin dudarlo lo haré jeje"

Y cuando lo recogí mi mama llamo para bajar a preparar la mesa de esta noche, me lleve al peluche hasta abajo y lo deje en la mesa mientras que ordenaba los platos mirando de vez en cuando al peluche por si alguna cosa que necesitaba el que me señalara donde estaban algunas cosas que podemos necesitar para cuando la abuela llegue encuentre todo limpio y ordenado, se sentirá muy contenta con todo esto... Estoy seguro que eso le va a animar demasiado, y a mi también... Y además espero que me ayude con el peluche, o eso espero...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro