14: desiciones
-¿Todo bien papá?- sabía que esa pregunta era tonta, pero no estaba de más hacer un esfuerzo, pensaba el castaño.
-cómo quieres que este bien si me entero que mi Hijo es un pandillero- respondió irritado por la inmadurez de su hijo.
-uoh, uoh, uoh papá cálmate, en eso te equivocas, no soy pandillero, ninguno de mis amigos lo es, solo fue una carrera entre amigos- trató de calmar, sabiendo que con Estoico no se podía razonar cuando está enojado.
-¿y esa carrera incluía destrozar el gran salón?- inculpo haciendo recordar aquel suceso al ojiverde.
-¡si!… lo hicieron ellos, y tú que me culpabas papá- interrumpió Patán mientras se dirigía a Spitelout, tratando de culpar a los demás, empeorando la situación.
-no señor, yo… lo hice yo, todos los actos vandálicos fueron obra mía- habló Heather tratando de mejorar esta situación.
No podía quedarse sin hacer nada, además, su mejor amiga tenía una declaración que hacer.
-Heather que estas…- preguntó confundido el castaño.
-no culpe a Hipo señor presidente, todos los desastres fueron mi culpa, yo jugué sucio- confesó sabiendo maso menos que le esperaba.
Un castigo valía menos que la felicidad de su amiga, podía soportarlo.
-Heather yo…-trató de proteger el ojiverde.
-deja que las personas sean responsables por sus actos…- cortó el pelirrojo mientras se acercaba a la pelinegra de ojos verdes.
Estoico caminó hacia Heather, ella estaba un poco nerviosa, de hecho nunca había tenido una figura paterna, si es que la había tenido, era una bebe, así que no sabía cómo dirigirse a él.
-¿eres responsable de todo los desastres de esta pandilla?- preguntó un tanto molesto por la irresponsabilidad de todos los jóvenes presentes.
- así es señor, las consecuencias deben caer sobre mí- aceptó con tal de librar el tema de una vez y que su amiga hiciera su declaración…
Aunque ya no estaba segura si este sería el mejor momento para Astrid.
-muy bien papá ya tiene al responsable, si me permites, puedo atenerme a las consecuencias como líder de grupo que soy, ¿podemos seguir mis amigos y yo en lo que hacíamos?- dijo un poco exasperado por la cacería de culpables que dirigía su papá.
Aun si Estoico no estuvo presente en gran parte de su infancia, había aprendido algo muy marcado…
El respeto hacia sus mayores.
No se atrevió a levantarle la voz ni un poco al pelirrojo, solo pregunto educadamente por su situación.
-o nono, tú no te salvas de esta conversación, después pueden seguir, con la condición de no destruir más propiedades- advirtió mientras se llevaba a Hipo dentro de uno de los cuartos del condominio.
-dos agentes conmigo, los demás vigilen el área- dio instrucciones el mayor de los Haddock- y tú- se dirigió a Bocón- hablaremos después.
Bocón sabia en los problemas en los que se había metido, le dio a Estoico la dirección del anterior reto en el lago, no fue exactamente un error, casualmente los muchachos si se encontraban en aquel lago cuando su jefe preguntó, más no le dijo su destino final.
Un enigmático misterio como logró conseguir la ubicación de Hipo.
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Una vez dentro de las instalaciones de la universidad…
-en que estabas pensando Hijo- trató de regañar de una manera calmada, todavía tenía un anuncio que dar.
-solo me divertía con mis amigos padre, nada más- respondió calmadamente.
Lo menos que quería era otra pelea.
*Flashback*
-¡cuántas veces te diré que tienes que estar listo!- exclamó airado.
-ya lo estoy- respondió de la manera más calmada posible, solo levantando un poco la voz.
-¡solo te la pasas desarmando un motor!... ¡necesitas aprender lo que realmente se necesita!- replicó una vez más.
-si quiero trabajar en la empresa, debo aprender robótica básica, ese “motor” que tanto me ves desarmar es parte de mi proyecto- respondió comenzando a irritarse disimuladamente por la falta de conocimiento de su padre.
Se supone que era dueño de la empresa, debía conocer su establecimiento, que distribuía y que comerciaba.
Al parecer solo financiaba los proyectos y ayudaba en la comercialización.
Estoico calló avergonzado, cada que llegaba tarde a casa, encontraba a su hijo desarmando un viejo motor de automóvil de los 70, este día se molestó ya que nunca lo veía hacer otra cosa y el necesitaba estar listo para ser presidente de la empresa.
Puesto que, el castaño no sabía que obtendría.
Él quería que sea una sorpresa para su hijo.
Pero ahora se arrepentía haber dejado que estudiara lo que quisiera, lo más recomendable hubiera sido administración de empresas, ya que como empresa internacional, según las leyes de Berk, no se otorgaban a cualquiera, solo a herederos.
Pero no se percató en lo que hacía su hijo.
No lo sabía, y ahora se arrepentía.
Fue un terrible error.
-hi…hijo yo…- trató de disculparse.
-está bien papá, estás muy ocupado para siquiera saber mi carrera y que se necesita para trabajar en el área de ingeniería- cortó el tema molesto por la ignorancia de su padre.
Sin más que decir continuó con su proyecto, el cual era para su examen final.
Al ver la situación tan tensa que había generado, Estoico decido retirarse.
*Fin del Flashback*
-pero esa no es la manera de hacerlo, se necesitas ser responsable, estar presente en las desiciones de tus conocidos si el tema o situación te incluye para poder guiarlos a las mejor opciones…-
-por favor padre, no me hables de estar presente en la ida del otro, no eres el gran ejemplo…- cortó el castaño dolido y molesto por el tema que tocaba su padre.
¡¿Cómo podía pedirle tal cosa si él no hizo lo mismo con él?!
-yo… lo sient… el punto es que debías ser más responsable, eres un líder y el líder da el ejemplo- explicó más calmado el mayor de ojos verdes.
- está bien… ¿ahora ya me puedo retirar?- cuestionó impaciente por salir de esa incomoda situación.
-no, todavía tengo un anuncio que darte-
-por favor no otro juego de carreras de barcos- dijo cansado de las peticiones constantes de su padre.
El castaño tenía muchos talentos, que descubriremos poco a poco, y uno de ellos era la programación de sistemas, apps, juegos, códigos, software, etc.
Y cada año, desde que entró a la universidad, su papá le pedía programar un nuevo juego de competencias con barcos y vikingos con el sello presidencial, por el hecho de publicidad y esas cosas.
-no, será algo aún mejor…- dijo emocionado.
Hipo estaba confundido, no entendía la emoción de su padre.
Quizás por fin le diría que tomaría unos días libres y pasaría tiempo con ellos.
Su mamá, su papá y él…
Lo único que quería con ellos, detrás de todo el rencor y frialdad, lo único que buscaba era pasar tiempo con ellos, recuperar lo que no estuvieron con él.
Tenían sus razones tal vez, no le importaba por ahora, solo quería ese tiempo con ellos.
-¡serás presidente de la empresa Haddock!- exclamó con emoción.
Los problemas de Hipo no podían aumentar más…
-¡¿qué?!- sus ojos se abrieron como platos, a la vez que una expresión de terror aparecía en su cara.
-deja que firmes un trato por primera vez… y que programes un vuelo comercial… JAJA que emoción- decía completamente feliz y riendo a carcajadas.
-¿y por qué esta decisión?- preguntó todavía en shock…
-todos estos años pensando que desperdiciabas tu don… Odín, fue difícil, por poco me doy por vencido-
-pe.... Pero que hice…- trataba de pedir explicaciones.
-… y todo el tiempo estuviste fingiendo… ¡Ay Thor santísimo!- continuaba extasiado- con lo bien que te va en el ruedo… por fin tendremos algo de qué hablar…-
-papá no estas entendiendo, okey… no puedo ser presidente- dijo nervioso.
-aah pero vas a ser presidente- dijo bajándose de su emoción y hablándole convencido.
-por favor quieres escucharme…- pidió como único recurso para escapar.
-está hecho- le dijo para finalizar la conversación que creyó encantaría al castaño.
-¿y como se supone que lo haré padre?- cuestionó una vez más antes de que su padre saliera del lugar.
-conseguí las notas de tu último semestre y de tu postrero examen- explicó volviendo sus pasos – ya te graduaste con honores de esta carrera.
Una cara de asombro y alegría se mezcló en las expresiones del ojiverde.
-soy ingeniero…- apenas musitó en voz baja para sí mismo- pero no dieron los resultados…-
-no es necesario esperarlos, ya te los dije yo, ahora…. Tendrás que estudiar administración de empresas…- menciono como si fuera lo más normal.
La alegría del castaño se desvaneció.
No es que no le gustará ser líder, administrador, jefe…
Pero no sentía el valor para poder dirigir a tantas personas…
Trabajaba mejor solo, o exclusivamente solo con sus amigos.
Por esa razón simplemente dirigía una pequeña parte de la empresa, a petición de su padre y estudió para dar lo mejor de él y sus conocimientos.
-pe…pero… papá- no entendía el porqué de sus decisiones.
-esto es por ti hijo, no podrás vivir toda la vida a costa de alguien, además que eres un heredero, si tienes la oportunidad, atrévete y no la desperdicies.- hablo con tono de sabiduría sorprendiendo al ojiverde.
¿Porque no sabía la sabiduría que portaban sus padre?...
Claro… lo recordó.
La ausencia.
-son 3 años más de estudio aquí en Berk…- comenzó a aceptar su destino.
-y 5 en el extranjero…- completó adivinando sus pensamientos-
-si quieres escapar, adelante- continuó el pelirrojo – pero ten en cuenta que ya está en el testamento, en la herencia, en el documento de posesión de la empresa y casi en dos minutos en las noticias internacionales- tenía un as bajo la manga por si su hijo no reaccionaba como quería.
Por poco un castaño de ojos verdes se desmaya.
Su padre se había encargado que le sea imposible huir de su voluntad.
No quería decepcionarlo.
Solo tenía miedo de no cumplir con sus expectativas.
Anhelaba la aprobación de su padre, tal como él era.
Pero al parecer, aún no se daría la ocasión.
-está bien- rendido aceptó su nuevo futuro.
Quizás no sería tan malo, solo necesitaba tiempo para acostumbrarse.
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-¿Qué está pasando?- preguntó curioso el gemelo pegando su oreja a la puerta de la habitación.
-cómo quieres que lo sepa si no dejan espacio para escuchar a nadie más- dijo la rubia enojada por la actitud infantil de los gemelos en ese momento.
-sí, pero ni nosotros con nuestro gran oído podemos escuchar los susurros de nuestro líder y del presidente- objetó Brutilda ante el reclamo de la ojiazul.
-civiles, hagan el favor de alejarse del sitio asegurado por favor- una voz firme de un agente habló desde la entrada del edificio.
-estos civiles tiene la autorización de la agencia secreta de avanzar hacia el área, agente- respondió Stormfly llegando junto a Astrid.
-nosotros nos encargamos- llegó juntamente Toothless a la escena mientras el anterior agente se retiraba del lugar.
-gracias- dijo la ojiazul hacia la peliazul y al pelinegro de ojos verdes- la verdad se me hizo muy impresionante como llegaron aquí si estaban en el hospital-
-truquillo de agente- respondió Tooth con su típica sonrisa extraña pero adorable, guiñándole un ojo a Astrid y Stormfly.
Sacando una sonrisa de ambas.
La chica de ojos azules se dirigió a la mesa de concursante, que momentos antes estuvo lleno de harina y masa, aprovecho el tiempo y ordenó un poco, ya tenía la rebana lista en un platillo para entregárselo al castaño.
-Astrid…- habló Heather apareciendo por detrás- ¿estas segura de hacerlo hoy?- preguntó algo dudosa.
-claro que si Heather, que no eras tú la chica que tanto me animaba y me dijo que era ahora o nunca…- dijo un poco triste e irritada, ella igual sentía que ya no era el momento adecuado, pero se aferraba a la esperanza de lograrlo.
Su seguridad iba disminuyendo con el paso del tiempo.
Y eso la ponía de mal humor, no era del tipo de chica que por cualquier situación se desvanecía, pero había alguna en esta cuestión de sentimientos que lograba lo que tanto odiaba.
Ser vulnerable...
-si… pero ya se tardaron mucho y según me dijiste, Hipo no suele hablar con su padre, tal vez este en aprietos-
-estará bien, es Hipo, lo conozco cuando habla con su padre, seguramente se le ocurrirá algo y saldrá como si nada- trataba de convencer a la pelinegra.
Sin darse cuenta que trataba de convencerse a sí misma.
-solo… am… que tal si escuchamos que dicen- cambio de tema rápidamente para no aumentar su inseguridad y se dirigió a la puerta, abriéndose paso entre los gemelos, que la dejaron pasar, y se dispuso a escuchar.
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-entonces daré el anuncio mañana, como primer día de la semana, será la fecha indicada- aseguraba el pelirrojo, después de discutir los términos del nuevo plan.
Hipo ya no estaba tan sorprendido como antes, sentía inseguridad por no ser un buen líder, no saber ser como su padre.
Pero tendría tres años más para prepararse.
-bueno papá, creo que terminamos con la conversación- dijo para finalizar, tratando de levantarse, pero el mayor lo detuvo.
-aún falta algo más hijo- dijo esta vez algo nervioso por la reacción del castaño.
-se podría saber de una vez- expresó algo impaciente.
Ya quería darle su regalo a su mejor amiga.
-viene visitas esta noche, la reina de un clan- explicaba poco a poco para que lo digiriera bien- los clanes fuera de país no son considerados estados reconocidos, pero este es el más grande de todos.
La intriga se apoderó de Hipo y de una rubia que lograba escuchar atentamente la conversación.
-la reina del clan Dunbroch vendrá a quedarse unos meses a Berk… esta buscando…- dudó en si debía decirlo ahora.
“deja que el chico esté listo Estoico” repitió en su mente las palabras de su amigo…
Pero no hizo caso.
-estaba buscando un pretendiente para su hija, y para unir fuerzas, pensaba en…-
-NO… NO NO NO Y NO- dijo firmemente el ojiverde adivinando las intenciones de su padre.
En parte esas palabras aliviaron a Astrid, pero…
¿Esto significa que no quiere una relación con la princesa?, ¿o con nadie?...
-COMO PUEDES PENSAR TAL COSA, PAPÁ NO SOY UN NIÑO, ACEPTO QUE TOMES DECISIONES LABORALES POR MI, AUNQUE NO DEBERÍAS, PERO ESTO ES MI VIDA PERSONAL- se exaltó demasiado.
El respeto, lamentablemente se fue de lado por el momento...
Esto pasaba los límites del descaro.
Primero no estuvo en su vida.
No valoraba su vocación.
No respetaba sus decisiones.
Y ahora quería decidir sobre sus sentimientos.
-es tu deber como mi hijo hacer lo mejor para el país, es como si fuera un reino, sabes que no somos como el resto del mundo…- alzó también su voz…
- si lo sé, pero eso no te da el derecho de tomar mis decisiones personales, padre no puedes hacerme esto…- su enojo comenzaba nuevamente a resurgir.
Estaba tratando de averiguar sus sentimientos con Astrid, y ahora su papá ya tomaba la delantera con la respuesta, y ni siquiera con la chica por la que él estaba interesado.
-ya tome la decisión Hipo, conocerás a la chica y al menos trata de socializar con ella, luego si la reina decide si eres lo mejor para su hija, entonces te casarás con ella- habló con severidad.
Berk necesitaba este aliado tan poderoso, no podía arriesgarse a perder esta alianza.
-¡CASARME!, ¡NI SIQUIERA TUVE O TENDRÉ UNA RELACIÓN Y YA ME QUIERES CASAR!- explotó finalmente…
- MIDE TU TONO JOVENCITO- se enfadó por el tono empleado de su hijo.
-NO PUEDES DECIRME ESO, NO ESTUVISTE CONMIGO CASI TODA MI VIDA, Y AHORA ME DICES ESTO COMO SI NADA… ENTIENDE, YO NO QUIERO UNA RELACIÓN… ¡JAMÁS!- enfrentó a lo que Estoico calló.
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Lentamente se apartó de la puerta, dejando a todos asustados por la expresión de tristeza de la rubia…
Ella nunca dejaba ver su lado débil, es más, algunos no sabían que tal cosa existía en la chica de ojos azules.
-tenías razón…- musitó débilmente pasando cerca de Heather, que también la miraba con algo de pena - no es el momento correcto…-
Sin más que decir, avanzó hacia la salida, tirando todo el pastel y la rebanada al basurero.
Salió lentamente de la universidad y se dirigió hacia su motocicleta, a la vista de todos.
Necesitaba procesarlo…
Lo había escuchado bien.
Hipo no quería nada con nadie.
Sus miedos y tristezas la consumieron, y salió de allí, acelerando peligrosamente, con lágrimas traicioneras que tentaban salir de sus ojos azules.
Necesitaba despejarse…
Y también el consejo de alguien…
Continuará…
Hola uwu
Bueno como ya saben no pude actualizar antes por cuestiones de salud, pero estoy de vuelta...
Con tarea de fisica por los cielos pero trataré de escribir lo antes posible XD
PREGUNTA IMPORTANTE
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Listos para el drama 😏 :3...
Eso es todo 🤣 XD
BAIS nwn
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