Prólogo: Cosas que un Bourgeois no puede hacer
La lista era sencilla de seguir y aún así, Chloe la rompió. Generaciones de Bourgeois orgullosos habían seguido la lista al pie de la letra aún siendo bastante jóvenes y ninguno había tenido tropiezos.
Y aún después de eso, Chloe hizo listas, buscando alguna que pudiera descifrar cómo había terminado en esa situación tan enredosa y complicada que le había hecho terminar enamorada de un chico jovial de tentadora sonrisa y espíritu libre que tocaba en el club todas las noches brincando hombro a hombro con ella mientras soltaban a alaridos las letras de aquellas canciones.
Complicando aún más esta situación, se le podría agregar que ella se había convertido en el mejor amigo de él, y se recalca que sea masculino el sujeto y no femenino; ya que en el club de los rechazados, sólo se admitían varones.
Aunque, haciendo un recuento de los hechos, era más que claro en qué se había equivocado y cómo aquel alboroto había comenzado: rompió la regla número 1 de lo que un Bourgeois no puede hacer.
Regla No. 1: Un Bourgeois jamás podrá ser rechazado. En caso que vea este evento amenazando con su proximidad, el Bourgeois tendrá que fingir desinterés ante aquel que planea rechazarlo.
Y así fue como, Adrien Agreste, sin darse cuenta de lo que su "Te veo sólo como una amiga" provocaría; Chloe se convirtió en la primera Bourgeois que rompió no sólo una de sus reglas, ni un par, sino todas las reglas que dictaba esa lista.
(Próximamente: Octubre 2019)
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