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No. 6: No se mostrará nervioso

N/A: Aquí se hará referencia a algo llamado "seña propia" o "tu señal" en la Lengua de señas. Esto se refiere a un gesto creado por ti mismo o un sordo para referirse a tu nombre sin necesidad de deletrearlo. Este gesto es muy aleatorio y cada quien lo puede inventar. Esto es a lo que se refiere cuando digo "se pronuncia".

N/A: Las palabras subrayadas es lo que está diciendo el personaje en Lengua de señas.

Los nervios de Chloe estaban a flor de piel. En serio debía poner atención a la clase, pero el hecho de que estuviera Luka Couffaine en la misma aula de ella simplemente lograba enloquecerla por completo.

¿Cómo era posible que un chico que acababa de conocer la pusiera así?

Y si consideraba que también se trataba de la razón por la que estaba tomando lengua de señas, esto se tornaba aún peor.

—Hola, buenos días.— una chica de apariencia joven únicamente movía las manos, parada frente al que era el instructor de la clase.— Mi nombre es O-l-i-v-e y se pronuncia Olive.— al parecer el hombre estaba interpretando las palabras que transmitía la chica.—Soy su maestra, y soy sorda.— el instructor por fin miró hacia enfrente y tomó aire con profundidad.— Y mi nombre es R-o-n-a-l-d L-e-v-i-l-l-a-n-t, y se pronuncia Profesor Levillant.— dijo mientras sus manos seguían haciendo señas que ella todavía no entendía.—Y también soy su profesor. Caballero.— señaló a Luka.—¿Puede repartir estas hojas?

Chloe intentaba calmarse mientras él repartía, pero las risas que provenían del fondo no hacían más que inquietarla ¿Estarán hablando de ella? ¿De los múltiples errores que ha cometido últimamente?

La hoja cayó sobre su mesa, ni siquiera miró cuando Luka pasó por ahí para dejársela, lo cual agradeció infinitamente: lo que menos quería era que sus nervios la terminaran traicionando y que él lograra identificarla.

Regresó a ver de reojo al par de amigas sentadas en el fondo, al parecer solamente tenían una charla casual sobre cualquiera anécdota que habían vivido recientemente. Debía tranquilizarse, no debía alterarse por cualquier cosa.

La seguridad de un Bourgeois era una de sus principales cualidades, pero estos últimos días sentía que su corazón se aceleraba por cualquier pequeñez y que era cuestión de segundos para que volviera a cometer otro error que manchara el apellido.

—La hoja que se les ha dado es el alfabeto de la Lengua de señas francesa. Como sabrán, cada país tiene su propia lengua de señas, es importante que consideren esto porque no todas las señas significan lo mismo en todos los países.— habló Levillant. Tenía un carácter similar al de Rose, con un rostro que inspiraba confianza y dulzura.— A continuación elegirán a alguien de la clase, les enseñaremos el alfabeto y quiero que les deletreen sus nombres.

Si algo había agradecido Chloe toda su vida, era tener a Sabrina; y no tanto por el hecho de que ella hiciera todo el trabajo, sino porque ella siempre la buscaba para los trabajos en pareja y no la hacía caer en cuenta de que si no la tuviera a ella, estaría sola pues todos en realidad la evitaban.

Y ahora estaba en esa situación. Todos rápidamente se acoplaban con alguien y ella se quedaba sola.

Un Bourgeois es buscado, jamás tiene que buscar a otros.

—Profesor, no tengo...

—¿Quieres trabajar conmigo?

Las oraciones salieron al unísono. Chloe reconoció aquella voz con claridad, pero tenía miedo regresar su vista. El Profesor Levillant sonreía tranquilamente como si aquella situación le hubiera resultado divertida.

—Al parecer ya sabes con quien trabajar, Señorita Bourgeois.

Chloe soltó un suspiro tratando de no hacer muy evidente su nerviosismo. Ahí estaba otra vez, ese joven de ojos azules y sonrisa jovial.

Luka.

"Respira Chloe, no te muestres nerviosa, respira."

—Está bien, como sea.—dijo fingiendo repulsión. Aún así el joven no reaccionó de mala manera, solamente le sonrió con entusiasmo.

—Siéntense con sus compañeros y practicaremos el alfabeto, después les daremos un par de frases para que puedan presentarse de manera adecuada.

Y así fue como ese martirio llamado "tener al sujeto que te ponía los vellos de punta como compañero" empezó.

A él por su parte se le notaba muy centrado en la clase, tomaba demasiados apuntes y constantemente le hacía preguntas a la maestra.

¿En serio estaba haciendo todo esto por Star Wars? Es que le parecía si quiera loca la idea que él haya decidido invertir tantas horas por alguien que acaba de conocer, y que aunado a eso, realmente le estuviera invirtiendo esfuerzo ¿Qué clase de persona hacia eso así nada más?

Sea como sea tenía claro una cosa: debía aprender, más rápido que el mismo Luka si eso era posible; y eso implicaba invertirle más tiempo a esto. Lo menos que deseaba es que Luka se diera cuenta de su farsa.

—Bien, ahora sí. Empiecen a practicar su presentación con sus compañeros.— Luka de repente volteó hacia ella y ella tomó aire profundo para no ponerse nerviosa.

—¿Quieres empezar tú o empiezo yo?— preguntó con amabilidad. Chloe bufó fingiendo que le había caído pesado ese tono amable, cuando en realidad le había resultado sumamente tierno.

—Empiezo.— dijo tomando la iniciativa.—Hola, buenos días ¿Cómo estás? Mi nombre es Chloe Bourgeois y se pronuncia Chloe.

Realmente no se complicó mucho, su seña propia se limitó a una C con la mano que subía y bajaba como su par de gafas de sol.

—Veo que te aprendiste demasiado rápido el abecedario, pudiste deletrear hasta tu apellido.— comentó Luka con una pequeña sonrisa.

—Por supuesto ¿Subestimas mi inteligencia?— le cuestionó con una ceja alzada. Él negó.

—No, por supuesto que no; eres una Bourgeois después de todo.— Chloe no sé esperó un comentario así, sin embargo tampoco fue capaz de entender lo que había querido decir con eso.

—¿A qué te refieres? — le cuestionó Chloe de regresó, pero antes que pudiera contestarle se apareció el instructor con ellos.

—Chicos, menos plática y más práctica. ¿Cómo van? ¿Ya hicieron su seña propia?—les cuestionó el Profesor Levillant.

—En realidad Profesor, estaba preguntándome si podía esperar mi seña para la siguiente semana. Es que quiero que alguien que conozco sea quien me la haga.— pronuncio Luka sin perder la vista sobre aquel hombre.

Chloe aguantó la respiración un segundo. No se estaba refiriendo a ella ¿verdad? Bueno, no a ella, sino a Star Wars.

—¿Y piensa utilizar esa seña que le den desde ahora en más para presentarse a la comunidad sorda?— Luka asintió sin atisbo de duda.

Esto era malo, ni siquiera se sentía digna puesto que todo eso se trataba de una mentira ¿En serio tanto valor le iba a dar a Star Wars? Maldición, ahora no sólo había creado su seña propia, sino que también tenía que crear una para Luka y sin duda también una para Collin alias Star Wars.

Las prácticas continuaron normales y Chloe intentó mejor concentrarse en hacer bien las cosas, sin meterse en problemas con nadie y evitar socializar más con Luka si era posible; si tenía suerte la hora se pasaría rápido y junto con ello su martirio también.

Para cuando faltaban 15 minutos para que se terminara la clase, el profesor les repartió un escrito; algo que explicó como una oda a la lengua de señas. No le presto mucha atención, había terminado agotada mentalmente así que lo leería más tarde.

Por fin la limusina había llegado con ella, pero antes de abordar escuchó algo a sus espaldas.

—¡Hey, Chloe!— en serio tenía una pésima suerte para siempre toparse con Luka. Volteó a verlo molesta.

—¿Qué quieres?— interrogó fastidiada; pero él parecía no haberlo notado.

—Quería pedirte tu numero, si no es mucha molestia.— esto tenía que ser una mala broma del destino; pero realmente se sentía agotada de luchar y buscar más excusas a sus mentiras.

—Sí, como sea. Dame tu teléfono.— el chico rápidamente le dio su celular y la joven se anotó en él. Ya ni siquiera le interesaba cuestionarle el porqué lo hacía, pero esperaba que no le mandara un mensaje pronto.

Finalmente vio a la chica subirse al auto e irse.

Luka dibujó una pequeña sonrisa: para todo lo que le había contado su hermana, Chloe en realidad no le pareció tan mala persona, sólo una que lucía realmente hastiada todo el tiempo.

—Fue un honor tenerte con nosotros hoy, Luka.— el padre de la mejor amiga de su hermana estaba ahí, viéndolo con tranquilidad.— La verdad estoy admirado de todo el esfuerzo que te vi dar hoy ¿Por qué de repente tuviste ese interés en particular por aprender esto? Luces demasiado motivado ¿es una novia acaso?

La familia Couffaine y los Levillant se llevaban bastante bien, por lo que el señor era casi un tío para él; era normal que a veces curioseara demás en su vida.

—No es eso. Se trata de un nuevo amigo que conocí, pero me entiende tan bien que en seguida se volvió en un socio.— dijo con la mirada perdida en el frondoso árbol que sacudía su follaje frente a los cristales del edificio.

—¿Y él es sordo?— Luka agachó su cabeza cuestionándose.

—En realidad creo que no lo es tanto, he hablado con él y parece entenderme; pero quiero yo poder entenderlo a él.

El Profesor Levillant sonrió. Le agradaba ese chico y la importancia que le daba a las personas que conocía.

—Deberías invitarlo un día aquí, sería grato para que otras personas pudieran practicar.— sugirió. Luka asintió.

—Veré si él quiere. Hace días le pase mi número pero aún no me ha enviado ningún mensaje; aún así le insistiré este viernes que lo vea.

Finalmente tomó su bicicleta y se despidió. La ciudad esa tarde lucía tranquila, las calles poco transitadas de ese fragmento de la metrópoli le permitía perderse un poco en sus pensamientos.

Últimamente se sentía fuera de sí, como si hubiera un desequilibrio. Ya ni siquiera se sentía triste por el rechazo que sufrió del pasado, pero tampoco podía decir que había vuelto a ser el de antes: sentía que sólo actuaba porque sí, lo primero que se le viniera a la mente lo hacía.

Aunque tenía que admitir que las clases le habían resultado gratas. Un momento para llenar su cabeza de otra cosa que no fueran sus emociones.

Llegando se aventó sobre su cama. Su madre no estaba porque había salido a practicar con su banda y Juleka probablemente había salido con Rose. Vio el estuche de su guitarra recostado en una esquina de su cama pero sólo pasó. No tenía ganas de componer.

Prendió su celular y se dirigió a ver los mensajes.

Marinette.

"Oye, Luka; necesitamos
hablar ¿Puedo verte
mañana a la hora de
siempre?"

Volvió a sumergir su cara en la almohada y después nuevamente levantó su vista agotada hacia el celular.

"Claro, nos vemos
donde mismo"

Una vez más sumergió su cabeza por un segundo cuando su celular vibró por una notificación. Alzó la mirada esperando que fuera Marinette, pero para su sorpresa fue un número desconocido.

"Hola. Soy Star Wars"

Luka sonrió inevitablemente. Al fin el mensaje que había esperando toda esa semana.

"¿Eres Viperion, verdad?"

En serio que la sonrisa no desaparecía de su rostro. Imaginaba al chico escribiendo cuestionándose si había anotado en su celular bien su número o no.

"Sí, socio, soy yo.
Al fin mandaste un
mensaje, yo pensé
que ya te habías
olvidado"

"Nooo, es sólo que
no acostumbro esto
del celular"

¿Podía ser más tierno este sujeto?

"Justamente hoy
me acordaba de ti
¿Te parece salir
mañana o cuando
puedas? No quiero
soñar muy precipi-
atado, es sólo que 
creo que de vez en
cuando debemos
hacer reunión de
socios"

"Lo debo pensar"

"No me digas ¿Eres
de horario saturado,
señor importante?"

"No, tonto. Pero salir
tampoco es lo mío."

"¿Entonces qué es
lo tuyo?"

"No sé. Me gusta la
fotografía y edición"

"Perfecto. Conozco
un lugar bueno
para eso. Anímate,
socio."

"No lo sé"

"Me vas a hacer
suplicarte de rodillas"

"Jajaja, foto y
lo pienso"

Luka sonrió. Sin duda esto era el inicio de una gran amistad. Se arrodilló a tomarse la foto y se la envió cuando recordó que le había pedido su número a Chloe. Tenía que mandarle el mensaje ahora que se acordaba, sino le sucedería lo mismo que a Star Wars y le enviaría el mensaje días después.

"Hola Chloe, soy yo
Luka"

"Aja ¿Qué quieres?

"Pues ya que somos
compañeros y veo que
aprendiste rápido, me
gustaría practicar
contigo ¿Te parece?"

"Como sea. Sólo no
me interrumpas que
estoy en el spa"

Bueno, a comparación de Star Wars, con Chloe sí sería todo un caso convivir.











En serio pido mil disculpas por la tardanza. Al principio había escrito esto hace un mes, pero cuando los escribía tomando sus clases me sentí muy incómoda de estar representando mal las clases de Lengua de señas así que me puse a tomar clases hasta que fuera capaz de representarlas de manera correcta.

¿Adivinen quien aprobó primer Nivel en lengua de señas?

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