Frisk acordó finalmente con Flowey hablar sobre el tema al día siguiente debido a que Toriel estaba empezando a sospechar, la flor no tuvo problema y le deseó felices sueños mientras reía tétricamente y acto seguido desaparecía de su vista.

Pero cuando logró dormirse, una vez más volvió a aparecer en esa sala blanca con ese monstruo extraño allí, mirándolo fijamente con su único ojo abierto.

El humano ya se imaginaba que quizá podría volver a suceder, por lo que trató de intentar hablar con él para sacar información.

"Eres Gaster, ¿Verdad?" Preguntó Frisk mientras se acercaba al monstruo, el cual respondió nuevamente con sus signos extraños.

"🏱✌☼☜👍☜ ✈🕆☜ ☹✌ ⚐💧👍🕆☼✋👎✌👎 ☠⚐ ❄☜ ❄☼✌☝⬄ 🏱⚐☼ 👍⚐💣🏱☹☜❄⚐📪 ✡✌ ✈🕆☜ ☼☜👍🕆☜☼👎✌💧 💣✋ ☠⚐💣👌☼☜" Frisk no era capaz de entender nada de lo que decía por mucho que se esforzara, su idioma era extraño e incomprensible.

El humano frunció el ceño mientras continuaba mirando fijamente al monstruo, esta vez no quería ser tomado por sorpresa y ganar más dolores de cabeza en consecuencia.

"¿De qué sirve que me transportes aquí si no puedo entenderte?" Preguntó Frisk con algo de frustración por ser incapaz de ayudar a aquel ser que quería comunicarse con él.

El monstruo esqueleto medio derretido se acercó mucho más de lo normal en respuesta mientras sus dos manos flotantes comenzaban a moverse de forma extraña.

Frisk se alteró y retrocedió instintivamente, no queriendo que ocurra nada extraño que ponga en peligro su mente, pero aquel monstruo no se detenía y si Frisk se alejaba, él se acercaba, comenzando un ciclo extraño del que Frisk se desesperó.

"¡¿Qué quieres de mí?!" Gritó el humano mientras observaba a Gaster no detenerse y acercarse a él para acto seguido notar como una de las manos se posaba en su boca.

Frisk quedó confundido ante eso, por lo que no pudo reaccionar cuando observó que esas manos flotantes se dirigieron a las orejas, haciendo que el agujero de ellas coincidiera con su orificio auricular.

"¡Maldito! ¡Estoy maldito por la vida misma!" Comenzó a decir Gaster en su idioma pero ésta vez Frisk era capaz de comprenderlo, seguramente gracias a algún tipo de magia con esas dos manos.

"¿Qué? ¿Qué quieres decir?" Trató de preguntar Frisk pero repentinamente notó como la manos pasaron de sus orejas a su cuello.

El humano trató de zafarse sin éxito mientras una de esas manos dejaba su cuello y se posaba en la cabeza del niño, pero todo fue interrumpido cuando una voz que Frisk reconoció comenzó a resonar en la habitación, era la voz de Toriel.

Gaster pareció estremecerse un poco, haciendo que las manos flotantes soltasen a Frisk mientras, una vez más, todo era envuelto en oscuridad.

Frisk despertó algo sobresaltado, sorprendiendo a Toriel, la cual intentó despertar a su hijo debido a que era Lunes y tenía que ir a la escuela.

"Mi niño, ¿Estás bien? ¿Has tenido otra pesadilla?" Preguntó la mujer cabra algo preocupada, Frisk no respondió inmediatamente, sino que se tomó unos minutos para volver a la realidad.

"Sí... Tuve otra pesadilla, pero no tienes que preocuparte, estoy bien" Dijo Frisk con una voz algo débil que hizo que Toriel se preocupase aún más

La madre adoptiva del niño pasó su mano por la frente de Frisk, apartándola inmediatamente debido a que estaba ardiendo.

"Mi niño, parece que tienes fiebre" Dijo Toriel con preocupación mientras Frisk pensaba en que seguramente esos encuentros con Gaster le están pasando factura en la salud de su cuerpo.

"No te preocupes mi niño, ahora mismo voy a por medicamentos" Dijo la madre cabra para salir acto seguido de la habitación.

Aunque esto es realidad hizo sonreír débilmente a Frisk, tenía pensado fingir estar enfermo para no ir a la escuela y poder hablar con Flowey tranquilamente, pero parece que no va a hacer falta fingir.

Mientras tanto, Toriel agarró unos medicamentos que compró de una farmacia por si su niño enfermaba, pero aún así también suspiró, en ese estado no podría ir a clase, pero ella sí debe de ir a trabajar a la escuela.

Ella no podía tomarse el lujo de quedarse con su niño, era la directora y fundadora de la escuela, que al mismo tiempo es uno de los lugares clave de la sociedad, demostrando que puede haber convivencia entre niños monstruo y humanos.

"Debo de llamar a alguien para que cuide de mi niño" Dijo la mujer mientras agarraba su celular y trataba de llamar a los hermanos esqueleto, sabiendo que Sans trabaja de comediante en bares únicamente por las tardes y Papyrus está desempleado, pero por alguna extraña razón ninguno de los dos contestó a las llamadas.

"¿Qué ocurre?" Se preguntó Toriel mientras volvía a llamar a Sans y a Papyrus pero ninguno contestó.

Y eso era porque ambos hermanos esqueleto se encontraban en la comisaría de policía, donde les tuvieron que requisar los celulares al entrar.

"¡Esta vez aprobaré el examen de admisión y conseguiré ser policía! Nye je je" Dijo Papyrus con una sonrisa confiada mientras Undyne se encontraba a su lado, la mujer pez ya era policía y le estaba dando ánimos para tenerlo de compañero.

Mientras que Sans estaba sentado en una silla cercana totalmente dormido, cosa que enojó al esqueleto alto.

"¡Sans despierta!" Le gritó Papyrus con rabia mientras notaba como Sans estiraba sus huesos en señal de estar desperezándose.

"¿Qué pasa hermano?" Preguntó mientras sonreía, el esqueleto bajo estaba acostumbrado a levantarse tarde debido a que trabajaba por la tarde, pero prometió acompañar a su hermano menor y eso fue lo que hizo, aunque el cansancio siga presente.

"¡Ya sabes que pasa! ¿Acaso alguien tan genial como yo no merece el apoyo de su hermano?" Preguntó algo deprimido, haciendo que Sans se altere un poco ante esa reacción inusual de Papyrus.

"Hermano, desde que éramos niños siempre te he recordado lo genial que eres, ahora vé y demuestra a los demás de lo que eres capaz" Animó Sans con un tono de voz cariñoso hacia su hermano menor, haciendo que Papyrus se conmueva un poco e incluso Undyne pareció sonreír ante eso, parece que el vínculo que ambos hermanos esqueleto tenían era irrompible.

Volviendo con Toriel, ella buscó otras opciones, pero eran muy pocas, Undyne estaba trabajando en la comisaría y no tenía tiempo por lo que no merecía la pena llamarla siquiera.

Probó llamar a Alphys, pero ella le dijo que estaba a punto de salir a presentar uno de sus inventos al público en una especie de charla ante más científicos, y se notaba que era verdad por el aparente nerviosismo que mostraba, incluso hiperventilando en el proceso, pero parece que su relación con Undyne la ha hecho más valiente y no parecía estar acobardada.

Toriel tampoco contó con Mettaton ya que esa misma noche, en cuanto terminó la fiesta volvió a irse de gira con su primo Napstablook ayudándolo.

La mujer cabra observaba únicamente dos contactos más, Asgore y Muffet, y se negaba a dejar a su hijo con su ex esposo, por lo que probó con la adolescente araña.

"¡Hola señora Toriel! Lamento decirle que hoy no aceptamos pedidos, la venta de dulces de la fiesta nos fue tan bien que mis arañas se merecen un descanso, a no ser que nos ofrezcas una generosa cantidad de dinero, ahuhuhu"

Comenzó a hablar Muffet a través de la llamada telefónica, Toriel solo suspiró y respondió.

"No es nada relacionado a tu pastelería, me gustaría que te hicieras cargo de Frisk durante ahora mientras trabajo"

Dijo Toriel con algo de prisa debido a que iba a llegar tarde al trabajo, pero su hijo importaba mucho más, ante esas palabras no hubo respuesta durante unos incómodos segundos, hasta que Muffet finalmente respondió con un tono de voz que representa interés.

"¿Me está pidiendo que haga de niñera? Dijo mientras se quedaba callada un par de segundos y continuaba hablando. "Podría aceptar ya que mis arañas le debemos mucho a Frisk, pero me tendrá que pagar 7000 de oro por cuidarlo"

En cuento dijo el precio Toriel casi se desmaya de la exorbitante cantidad que exigía, pero al no tener idea de a quién más contactar acabó cediendo.

"¡Está bien! Pero ven ahora mismo"

Dijo la mujer cabra para acto seguido terminar la llamada y suspirar lentamente, el dinero no importaba sino que le preocupaba la salud de su hijo.

Toriel le dió la medicina a Frisk en minutos siguientes hasta que alguien tocó el timbre de la casa, ese alguien era Muffet, la cual llegó rápidamente montada en su mascota Muffin.

El humano pareció confundirse ante eso, haciendo que Toriel le sonría suavemente. "No podía dejarte solo, por lo que he llamado a Muffet para cuidarte" En cuanto su madre dijo eso Frisk frunció el ceño, eso complicaba su idea de hablar con Flowey, pero igualmente lo haría, estaba determinado a llegar al fondo del asunto.

Toriel le abrió la puerta a Muffet al mismo tiempo que se marchaba rápidamente al trabajo. "¡Te pagaré cuando vuelva y vea que mi niño está bien!" Le dijo la mujer cabra a la chica araña mientras se metía en su auto y comenzaba a conducir hacia la escuela donde trabaja.

"Esto será dinero fácil, chicas" Le dijo Muffet a unas cuantas arañas que había llevado con ella mientras dejaba a Muffin descansando en el jardín.

Muffet entró en la casa y se dirigió a una habitación que tenía pegado un cartel con el nombre de Frisk, encontrándose con éste tumbado en la cama con un paño en su frente.

"¡Saludos cariño! ¡Yo me encargaré de cuidarte igual de bien que cuando tú me ayudaste con las arañas!" Dijo de forma alegre como si su acto fue desinteresado y no hubiera pedido dinero de por medio.

"Gracias" Dijo Frisk un poco a regañadientes mientras observaba como Muffet sonreía confiada.

"Estaré en la sala de estar, pero dejaré a Sally aquí por si necesitas algo" Dijo Muffet mientras una pequeña araña se posaba en la silla del escritorio del niño mientras la monstruo araña salía de allí.

En cuanto observó a Muffet salir de su habitación, Frisk se levantó y miró por la ventana, alertando a la pequeña araña que se había quedado allí.

"Tranquila Sally, solo quiero traer a un amigo" Habló Frisk con la araña para intentar tranquilizarla, y aunque esta no pareció muy convencida decidió quedarse callada para darle una oportunidad al niño.

Cuando Frisk se asomó por la ventana observó que Flowey se encontraba en el jardín mirando fijamente aquella ventana mientras intentaba no llamar la atención de la gran mascota de Muffet.

"Flowey, sube" Frisk extendió el brazo, sabiendo que la flor era capaz de alargar su tallo a voluntad, cosa que Flowey acabó haciendo a regañadientes ya que no le gustaba abandonar la tierra firme, se sentía mucho más inseguro y débil.

El tallo de Flowey creció lo suficiente y Frisk pudo agarrar a la flor para traerla a su cuarto, aunque el humano todavía no se sentía seguro de traer a Flowey a su habitación, pero tampoco tenía más alternativas.

La aparición de la flor parlante en la sala hizo que la pequeña araña que estaba presente no emitiera ningún chillido para alertar a Muffet, ya que Frisk le estaba diciendo la verdad y al parecer había traído a un amigo.

"Parece que tus planes no salieron como tú pensabas" Se burló Flowey, pero su risa se interrumpió al notar la cara de malestar del humano.

"Espera, ¿De verdad te has enfermado?" Preguntó Flowey, y cuando recibió el asentimiento por parte de Frisk la flor parlante rió ante la situación.

Mientras tanto, en la sala de estar, Muffet se encontraba viendo un documental humano sobre las arañas, enojándose con el presentador por usar adjetivos muy negativos con ellas, como desagradables o salvajes.

"Parece que Frisk es el único humano al que le importan las arañas" Dijo Muffet mientras se enojaba con los humanos, pero al poco tiempo apagó el televisor y fue entonces que notó voces de la habitación de Frisk, pero como no había recibido ningún aviso de Sally, Muffet supuso que el humano estaba hablando a través de su celular y le restó importancia.

"¡Ya sé! ¡Hagamos un pastel para Frisk! Quizá Toriel nos dé una propina y todo, ahuhuhu" Ideó la adolescente de piel púrpura mientras las arañas que estaban con ella chillaban de emoción ante esa idea y acto seguido Muffet se dirigió a la cocina.

Mientras tanto, en la habitación de Frisk, Flowey ya había dejado de reírse del humano y comenzó a hablar.

"No sé si está relacionado con ese *Gaster*, pero durante mis reseteos me ocurrió algo muy raro" Comenzó a hablar Flowey, aunque su tono de voz era bastante bajo para que la pequeña araña no escuche su conversación.

Frisk se mantuvo atento y continuó escuchando, por lo que Flowey comenzó a relatar su anécdota.

"En este reseteo me interesó saber qué ocurriría si me hago amigo y ayudante personal de Alphys, pensando que podría encontrar la manera de aumentar mi determinación, pero en esa línea temporal comenzaron a suceder cosas extrañas que no se volvieron a repetir" Comenzó a relatar Flowey, y Frisk reconoció que su relato estaba siendo verídico, no tenía sentido mentir.

"En esa línea temporal me encontré en Hotland con algunos monstruos extraños, tenían la piel totalmente gris y los ojos aún más vacíos que los míos, me hablaron de hechos extraños que nunca había escuchado antes, como la inteligencia del anterior científico real y que de forma extraña desapareció sin dejar rastro de su existencia, nunca volví a encontrarme con ellos de nuevo" Dijo Flowey con curiosidad sobre lo que deducirá Frisk pero también algo de inquietud al recordar aquellos extraños monstruos.

Frisk se quedó callado varios minutos sin decir una sola palabra, hasta que finalmente chasqueó los dedos y sonrió.

"Ese científico real seguro que era Gaster, tiene mucho sentido, ¿Pero de dónde salieron esos monstruos que me dijiste? Aun con esa información es todo muy extraño." Dijo Frisk mientras se llevaba la mano al mentón.

Flowey no estaba tan interesado, sino que sonrió cuando su retorcida mente tuvo una idea. "Frisk, ¿Por qué no bajamos de nuevo al subsuelo y buscamos a esos monstruos por Hotland?" Propuso Flowey, haciendo que Frisk reflexione sobre esa idea.

Si algo había aprendido de su travesía por el subsuelo es que nunca debía confiar en Flowey, pero esa idea que propuso la flor tampoco le parecía tan mala, ya que esos monstruos grises no los había visto en la superficie, y actualmente el subsuelo está abandonado a excepción de algún turista interesado.

"No me parece mala idea, pero no creo poder ir ahora" Dijo Frisk, era obvio que estando enfermo no podría llegar muy lejos, y menos ahora con Muffet y sus arañas presentes.

"¡Vamos! ¿¡Acaso no eres aquel niño que salvó a toda la raza de los monstruos!? ¿Acaso tienes miedo?" Provocó Flowey con una sonrisa tétrica, haciendo que Frisk se moleste un poco, pero no se dejaría engañar nuevamente por la flor parlante.

"No volveré a caer en tus engaños" Dijo Frisk, haciendo que Flowey comience a reír.

"¿Qué engaños Frisk? ¿Acaso crees que mejorarás tu estado de salud? Si lo que me has dicho es correcto y has enfermado por culpa de tus encuentros con Gaster, ¡Lo que pasará es que empeorarás cada vez más!" Comenzó a decir Flowey mientras comenzaba a reír, alertando a la araña, la cual escuchó esa risa malvada.

Frisk suspiró, derrotado por esa pelea verbal con Flowey, por mucho que odiara admitirlo, la flor tenía razón, por lo que el humano volvió a levantarse de su cama y, sorprendiendo a la pequeña araña presente, saltó por la ventana de un primer piso.

Frisk sabía que habían cultivado flores doradas y sabía por experiencia que estas amortiguan mucho una caída, no sufriendo casi ningún daño en el proceso.

Acto seguido, Frisk agarró una bicicleta que le regaló Toriel hace unos meses por su cumpleaños y salió de allí rápidamente, aún con fiebre era capaz de ir de forma veloz.

La araña comenzó a chillar desesperadamente, llamando la atención de Muffet, la cual dejó de cocinar para ir directa a la habitación de Frisk y gritar de horror al ver que no estaba.

"¿¡Qué ha pasado Sally!?" Preguntó Muffet con desesperación la chica araña mientras la pequeña Sally solo era capaz de decir que vino una flor parlante amigo de Frisk y que logró oír que se dirigían al subsuelo.

"¡Maldita sea Frisk!" Se quejó la chica araña mientras se montaba en Muffin en dirección al monte Ebott, la salud de su amigo y el dinero que le acordaron dar dependían de ello.

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Hasta aquí, espero que les haya gustado, pueden comentar su opinión si lo desean.

Ahora sin nada más que decir, adiós.