En el "Paraiso" estaba el tipo de la banda Nirvana, un rubio muy sentido con lo que le dicen. Así que siempre tenían cuidado con no hacerlo llorar.

En esto Kurco se rascaba su melena dorada(ksi Brad Pitt :v) maldiciendo no estar en el infierno, pero Diosito no queria que este saco de weas se lo quite Satanás, por esta razón siempre le contaba cuentos de hada a su Kurki vein para que coinciliara el sueño y no le llegue la maña de irse donde no debe, los únicos permitidos de pasearse por el infierno eran Malcom Young, Bonzo y otros tantos malotes que SÍ estaban autorizados.

Dios tenía claro como eran cada uno de sus "rockeritos" en el palacio, a Kurt ya lo tenía como su niño malcriado, este llevaba sus años ahí pero con los escándalos que armaba con tonterías, en el infierno dejaría la cagada.

A veces Kurt sollozaba porque su escopeta Diosito se la entrego a Satán y no se la iba a devolver nunca más.
A esto una noche que Dios estaba durmiendo, Cobain escapo al abismo a conseguir su arma.
Pero a Dios nunca se le escapa nada y lo atrapó para llevarlo de confesión con su hijo Jesús.

Kurt no quería ir y empezó a cantarle "Jesus doesnt want me for a sunmbeam", el santo solo se quedó observando con toda la pasión que el cantante daba.

-Bueno por esta vez te salvaste, pendejo.

Y Kurt luego de engañar a Yisus se sintió avergonzado y se arrepintió de bajar al Tártaro, acompañando así a el santo para que le diera consejos de como aliviar su dolor estomacal, Jesús le recomendaba té de las carmelitas y un día de descanso sin abastecerse de  drogas.

Dios al ver a Cobain y su hijo tener una entrentenida charla se reía por sus adentros de que como Kurt debería ser tan malo siendo un alma tan sensible con falta de cariño.