Esta mañana Naruto despertó con ánimos de aprender. Ya estaba cansado de ser un ignorante, quiere aprender más sobre las emociones humanas y sobre lo que significa tener una pareja. Solo lo había visto en varias ocasiones, pero no quería imitar, quería sentir y dejarse llevar por sus instintos. 

En su forma original, camino hacia el árbol mas grande del bosque. Rasa el mapache, tenia una gran colección de libros y era muy chismoso, por eso algunos animales lo consideraban sabio. Rasa vive solo con tres hijos, dos son adoptados, quedaron huérfanos por culpa de los cazadores, por lo que decidió quedarse con ellos. 

Al llegar al árbol, lo primero que hizo fue afilar sus garras, cuando vio varias marcas quedo satisfecho y luego alzo la pata para tocar la puerta. 

-Estúpido zorro, ¡¿Como te atreves a rayar mi casa?! -

Rasa abrió la puerta de golpe -¡¿Te gustaría que vaya a la tuya y la orine?! -

El zorro se soplo las uñas y se limpio en su pecho - Sabes que si lo haces, serás una bufanda y ¿Sabes? Sasuke necesita una -

El mapache fingió componer su puerta y respondió como si no hubiera escuchado- ¿Qué quieres? -

-Necesito algunos libros que me hablen sobre el amor -

El mapache lo miro extrañado y luego sonrió como si hubiera comprendido la razón - Oh ¿Nuestro pequeño guardián esta enamorado? -

-No lo se - 

El mapache esperaba a que se enojara, pero se sorprendió al ver la sinceridad de su respuesta. 

-Deja que este viejo te ayude - de repente se sintió motivado y decidió ayudar al pequeño zorro -Pasa, por favor - se hizo a un lado.

El zorro dudo -Es que... no iba a tardar, Sasuke esta solo y...-

-Pretextos, ¿No quieres saber lo que sientes? ¿Quieres seguir siendo un ignorante bueno para nada? -

-Ugh- sin previo aviso fue empujado hacia adentro y la puerta se cerro con seguro.

-¡Deja que este viejo sabio te enseñe todo! - el mapache se rio a carcajadas como un villano-¡Después de todo fui conocido como un maestro del amor!, ¡Gracias a eso, tuve a mi pequeño Gaara! - guiño el ojo izquierdo como si estuviera orgulloso de si mismo. 

"Fue una mala idea" pensó Naruto, mientras era disparado con palabras sin sentido. 

Sasuke por su parte, limpio la pequeña casa de madera. No tenia queja alguna, ya que estaba acostumbrado, pero lo que si le hacia incomodo es que no llevaba más ropa y la que tiene puesto ya esta muy sucia e incomoda. 

Olio la parte del cuello y arrugo la nariz "Si sigo así, Naruto huira de mi" no pudo evitar lanzar un suspiro. "No me dio tiempo de empacar y creo que no era posible traer mis cosas" miro hacia afuera "¿Debería de ir a la aldea?" negó con la cabeza "No, se supone que ya estoy muerto" .

De repente la puerta se abrió, Naruto en su forma humana entro a la habitación con una sonrisa satisfecha.

-Sasuke ¿Quieres una bufanda? -

El doncel lo miro con varios signos de interrogación. 

-Es por si acaso, tengo uno apartado para ti... pronto será invierno y habrá mas frio -

Sasuke asintió en comprensión -Espera... si puedes conseguir una bufanda ¿Puedes conseguir ropa? -

Naruto lo miro de pies a cabeza -Es verdad, desde que te fuiste cargas la misma ropa...no te preocupes, conseguiré para ti -

El Uchiha se sonrojo levemente, por alguna extraña razón se sintió tímido -Yo... lo puedes conseguir ahora, necesito bañarme -

-¡Claro! ¡Déjamelo a mi! - se transformo en animal y salió por la ventana.

-Espero que no piense que soy patético - dijo en voz baja y salió por la puerta de atrás. 

En la parte trasera de la casa, hay un pequeño lago, sus aguas eran claras como un cristal, se puede observar a los peces nadando. Sasuke toco con la punta de su pie el agua azul y se sintió feliz al descubrir que estaba tibia. El agua ya fue bañada por el calor del sol, sin dudarlo se quito el Kimono maloliente y lo tiro a un lado.

El agua cubrió su cintura para abajo, dejando descubierto su pecho blanco. A pesar de ser un doncel tenia marcado levemente su abdomen, gracias a los ejercicios secretos que su hermano le enseñaba, para defensa propia. Por lo menos sus dos hermanos se encargaron de enseñarle cosas para sobrevivir, que técnicas para complacer a un hombre bueno para nada.

Bueno, en esta ocasión sintió que eran necesarios, nunca en su vida había coqueteado, siempre había sido al revés, pero la persona que le gustaba no era nadie normal. Con esos pensamientos se sumergió en el agua, sin notar la llegada del zorro. 

Naruto llego con una bolsa verde en su boca, dentro había varias prendas hermosas de todo tipo de colores. Cuando escucho el chapoteo, no dudo en salir. El ya había visto el cuerpo desnudo de un hombre, después de todo cuando se transformo por primera vez, tuvo curiosidad de como funcionaba cada extremidad. 

Pero al parecer, no todos tienen la misma estructura, como por ejemplo Sasuke, su piel era blanca, su cintura era delgada y su pecho era tan delicado, que estaba seguro que se pondría rojo con su toque. 

Los latidos de su corazón aumentaron al imaginarlo "Cuando pienses lascivamente, significa que sientes un deseo sexual hacia esa persona" la voz del mapache llego a su mente y sacudió su cabeza para deshacerse de esa voz chillante. 

Se aclaro la garganta antes de hablar -Yo... traje la ropa -

Sasuke miro sobre su hombro y se cubrió su pecho por instinto.

-Esta bien... -

Naruto soltó la bolsa en la orilla del lago y se sentó como un perro guardián. 

El azabache se sintió incomodo al ser observado -Si quieres... puedes bañarte conmigo -

-¿Eh? no es necesario, aquí estoy bien -

"Pero para mi es incomodo" .

-Insisto -

El zorro miro el lago con algo de pavor, pero luego obedeció. Se transformo de nuevo en humano y se quito la ropa como si nada. 

Sasuke se sonrojo de pies a cabeza y aparto la mirada al ver el tamaño de "eso".

"No fue una buena idea" pensó, queriendo retroceder el tiempo. 

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Naruto es como Boxito (Una ferretería aquí en México, la verdad no se si hay Boxitos en otros lados, perdón por ser tan ignorante uwu) "Ahorita lo pides, ahorita lo tienes.