Yoongi estaba decidido, seguiría el consejo que le dio su amigo Hoseok, iría a buscar esas pruebas sea como sea, estaba seguro que Seokjin era un sujeto extraño y no podía confiar en él, algo le decía en su interior que alguna situación sucedía y no le daba buena espina.

Se dirigió a la cocina y se asomó por la puerta, notando al enemigo a la distancia, estaba de espaldas moviéndose alegremente mientras lavaba la loza, entonces decidió actuar -Hyung- Jin se asustó de sobremanera al escuchar la ronca voz de su amigo provenir de la puerta y lo miró con su enorme sonrisa nerviosa y cariñosa a la vez.

-Me asustaste Yoongichi, ¿sucedió algo? - el chico pálido lo miró y le pareció tierna la imagen, aunque no se dejaría engañar, seguramente Seokjin estaba actuando, ¿por qué ese chico seria tan amable con él? a menos que quiera conseguir algo en específico de él.

-Ya ordené todo en la mesa, faltan tus cosas ¿quieres que las vaya a buscar por ti? -

-No es necesario, puedo ir yo tranquilo, no me falta mucho por lavar – el chico pálido lo miró analizando la situación, seguramente estaba escondiendo algo realmente grande en su pieza, debía insistir y de una vez obtener las pruebas suficientes.

-Hyung, así ahorraremos tiempo, dime donde están y las traeré a la mesa -

-Está bien, en mi habitación hay un mueble blanco, en la parte de arriba hay un cuaderno con un dibujo de una alpaca, dentro de ese cuaderno tengo los papeles, también hay un estuche con la misma alpaca, ¿podrías traerme esas cosas por favor? –

-Claro hyung, vengo de inmediato – dicho esto, el pianista sonrió de lado, ya tenia la escusa perfecta para subir a la habitación del mayor.

Tomó las escaleras que llevaba hasta las piezas de los dos hermanos menores y se dirigió a la del mayor de estos, como era de esperarse se veía impecable, a su derecha había un escritorio lleno de cuadernos, un computador, lápices, una pequeña lampara, entre otras cosas, se veía algo desordenado, como si lo hubiesen ocupado recientemente, seguramente el mayor estuvo estudiando en la noche para el ingreso a la universidad.

Posterior al escritorio estaba la cama de Seokjin, la cual poseía un cubre camas azul con blanco. En este pudo divisar unos cuantos almohadones, una alpaca blanca con un pañuelo rojo de peluche adornando, pero lo que mas le llamó la atención en su meticuloso análisis fue el inesperado calcetín plomo junto a uno rosa sobre la cama.

Dio unos cuantos pasos para llegar a este y lo tomó entre sus manos, olía bien, se veía algo normal, como un calcetín corriente y seria así si no fuera porque su tía tiene la costumbre de marcar todas sus prendas con su nombre bordado dentro, una estúpida y horrible costumbre a su parecer, no obstante, ahora le ayudaría a saber si realmente Seokjin se quedó con este calcetín hace un tiempo atrás o no.

Lo dio vuelta y efectivamente su nombre yacía en aquella prenda ploma, una gota de sudor frio recorrió su frente e hizo que tragara lentamente la saliva acumulada en su boca, ¿Qué mierda hacia Seokjin quedándose con un calcetín de él? ¿Para que le servía? Por lo que había leído y aunque no fuese creyente de esas cosas, existen ritos de magia negra para unir parejas en la cual necesitas una prenda del otro. Volvió a tragar lento y prefirió no pensar mas en ese tipo de cosas o su piel se volvería más pálida de lo que ya era.

Guardó el calcetín dentro de su bolsillo y siguió su expedición por el cuarto del mayor mirando minuciosamente cada centímetro del lugar. Tras la cama azul del mayor se encontraba una ventana que daba al exterior, seguramente la ventana de la otra casa que estaba justo al frente de la habitación de Seokjin era la de Jungkook o al menos eso pensaba Yoongi, no sabía por qué le molestaba tanto ese chiquillo, pero era mejor seguir en su búsqueda y no enfadarse por cosas que no vienen al caso.

Se acercó a una estantería que se encontraba cerca de los pies de la cama, tenía una gran cantidad de figuras de anime, algunos mangas y peluches en aquel lugar, se estaba frustrando de no encontrar nada extraño más que el calcetín, todo era tan normal que se sentía incomodo, pronto encontró el cuaderno de alpaca junto con los papeles y los dejó en la cama, en caso de no encontrar ninguna otra prueba contundente que le dijera que Seokjin era un chico psicópata tal como él lo pensaba.

Movió la ropa de Jin dentro de los cajones por si había escondido algo importante por ahí, sin embargo, todo era inútil, después de todo al parecer Hoseok tenía razón, todo era un malentendido, perfectamente el calcetín se le pudo quedar. Suspiró y se sentó en la silla del escritorio mirando hacia la habitación por si le faltaba alguna parte por revisar, fue cuando notó que en la silla se encontraba un sobre, lo sacó de debajo de sus piernas y lo abrió.

En su interior vió un documento que le pareció conocido, demasiado para ser cierto, su primo menor se lo había echo firmar para un tal admirador secreto, ahora entendía todo, esto era para Seokjin, el tal admirador era Seokjin, ¿cómo no lo pensó antes?, le sorprendía no haberse dado cuenta que todo esto era parte del plan. Pero ¿para que querría su firma? Indagó por el papel y notó que había una firma ajena cerca, levantó la ceja sin saber que estaba pasando, hasta que leyó más arriba "Contrato de matrimonio".

-¿¡Pero que mierda es esto!? – gritó sin darse cuenta de lo elevada que salió su voz, se tapó rápidamente la boca esperando que el mayor no lo haya escuchado y siguió revisando – esto es legal... - se echó un poco para atrás en la silla por la impresión que tenía -¿Cómo mierda consiguió esto? ¿Estoy casado con él? - su corazón palpitaba incesante a velocidad rápida. Sin darse cuenta pasó a llevar algo y un marco de foto calló al suelo, miró de soslayo la foto caída, sin darle importancia, el documento le causaba más preocupación en aquel instante, todo hasta que notó que él estaba en aquel retrato digital, no podía entender cuando se tomó esa fotografía con Seokjin, es más, nunca se han tomado una fotografía juntos ahora que recuerda, menos ambos durmiendo acomodados en el otro en un salón de clases, es como si alguien más la hubiese tomado desde lejos.

De pronto sus ojos parecían desorbitados por el impacto de reconocer la situación de la fotografía, su corazón paró y un frió recorrió su espina dorsal. Ese día usó ese abrigo porque pronosticaron que estaría helado y Jimin le recomendó usarlo, además, el único momento en que durmió con Seokjin en el suelo fue ese mismo día, el día que ambos se quedaron encerrados en la sala de música, el día de la tormenta, el día que seokjin lloró en sus brazos por la supuesta fobia a las tormentas, el día en que lo invitó a desayunar a su casa y su calcetín se perdió. ¿por qué tenía esa foto? ¿acaso todo fue planeado? Es decir, era imposible que conservara esa fotografía si el no conocía a su captor en esa sala ¿Cómo dudar ahora que Seokjin no es un psicópata si fue capaz de encerrarlo toda una noche en el colegio para estar a su lado? Esta situación era demasiado peligrosa como para quedarse más tiempo a solas con él, debía huir, irse, pero ahora ya.

-¿Pasó algo Yoongichi?- Se escuchó desde la puerta de la habitación y el chico pálido lo miró con miedo, estaba atrapado.  

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Comentario: :D   holis,  terminé temprano lo que tenia que hacer así que tenia demasiado tiempo libre en el trabajo, por lo que me puse a escribir el cap  y bueno, salió  

UwU eso, tengan un bonito día y ahora se viene la parte que mas quería escribir :P  así que puede que cambie un poco la forma de escribir (a una mas dramatica (?))  xD.