Pasaron unos días y a veces Yoongi lo podía ver a la distancia, cuando éste miraba en su dirección el simulaba que estaba observando otro lugar, aunque de reojo podía notar la cara triste del chico y como bajaba la mirada decepcionado, formando un notable puchero con sus hermosos labios, de cierto modo se sentía triste por la situación, en años alguien no se interesaba en él.

Dos semanas habían pasado y Yoongi ya no podía tocar por completo su canción, le pesaba el corazón cada vez que la tocaba, ¿por qué se sentía tan mal? ¿Por qué si nadie le había provocado esto hasta ahora? se suponía que había entrenado lo suficiente su corazón para tener una fuerte coraza, entonces ¿por qué ese chico le tiene de esa manera tan preocupada? 

 A veces cuando no podía continuar tocando el piano, se ponía de pie solo para ir a verificar si el chico lo estaba escuchando tras la puerta, pero nunca lo volvió a ver más que en algunos encuentros casuales en los recreos. Ese día estaba estresado, ya no podía tocar su canción sin pensar en el alto joven de labios abultados, no lo podía sacar de su mente y menos sus tristes ojos cuando le dijo que no usaría esa letra. Caminó unos cuantos pasos por la sala para poder desestresarse cuando pisó algo en el suelo, parecía un papel arrugado. Se agachó para recogerlo, expandirlo y leerlo, era la letra de la canción de Yoongi que Seokjin había creado para él en todos estos meses, le costó decidir si leer el contenido de ese papel, se supone que es su canción, nadie tenía que inmiscuirse en sus asuntos, ese chico no sabía nada de su vida, sin embargo, tuvo la osadía de darle letra a su canción.

Minutos después las lágrimas no pararon de salir de sus ojos, brotaban y brotaban nublando su vista y tapando su nariz, se había atrevido por fin a leer la letra y lloraba por que se había dado cuenta que si estaba incompleta, por que si faltaba algo en su canción, que Seokjin tenía la razón y que quizás ahora no podría completarla jamás, pero le gustaba tanto la letra, no sabía cómo había acertado en cada frase de lo que él quería trasmitir. ¿Tan emotiva era la melodía para que el otro chico pudiese adivinar la historia de trasfondo?, no, esto no era coincidencia, Seokjin debía saber algo sobre él, esto era una trampa, seguramente se quiere burlar de él y se había dado el tiempo de averiguar sobre sus asuntos del pasado.

Angustiado, confundido y enojado salió de su sala de música en busca del chico, era del colegio y era muy guapo, seguramente debía ser un chico popular. Se acercó a una chica quien estaba sentada descansando en una banca – hola, ¿conoces a un tal Kim Seokjin?-

-No, lo siento, ¿de qué salón es? -

-No lo sé, bueno gracias – dicho esto se fue, preguntó a un grupo de chicas que se encontraba mas allá, preguntó a todo a quien veía por el patio, algunas chicas lo conocían, pero nadie era su amigo para darle más información de él, es más muchas decían que el chico era guapo, pero sus gustos eran muy infantiles y eso no les atraía, así que más allá de ser un chico muy guapo las chicas no le tenían interés.

Viendo que no encontraría información del chico de esta manera, se dirigió directo a la sala de profesores para preguntar por el rubio alto, a lo que uno de estos le contestó – ¿quién lo busca? - dijo un profesor alto, joven y moreno, con la particularidad que en una de sus mejillas poseía un tierno hoyuelo.

-Min Yoongi, ósea yo, quería hacerle una pregunta, ¿sabe donde puedo encontrarlo? - El profesor se acercó hasta el adolescente mirándolo de arriba abajo – Jin jamás me ha hablado de ti, ¿quién eres? –

-Ah, bueno yo, en realidad no nos conocemos, yo... es decir, un amigo toca piano y el lo ha ido a escuchar y mi amigo quería contactarse con él, así que le estoy ayudando a encontrarlo – desvió un poco la historia para poder obtener mejores datos, o al menos eso pensó él.

-Ah, así que el chico del piano... - siseo el profesor negando con la cabeza – no está bien que te diga esto, es más, Seokjin me va a matar si se entera, pero últimamente ese niño parece bastante interesado en aquel pianista, lleva meses hablando del chico del piano y de algo que quería hacer para él. Aunque hace dos semanas que no ha vuelto a hablar de ese sujeto, llega a casa y se encierra en su habitación como si toda su ilusión se hubiese borrado, así que escúchame, ya que eres amigo de ese sujeto, dile que si me llego a enterar que le hizo daño a mi Jinnie hablaré con el director Jung para expulsarlo- dijo con una sonrisa tétrica pero a la vez tierna debido al hoyuelo. Ahora Yoongi tenía muchas más dudas, ¿por qué el profesor Namjoon pareciera ser tan cercano a Seokjin? ¿Por qué viven juntos? ¿Jinnie?

-Mi amigo no hizo nada... pero... profesor, ¿Seokjin vive en su casa? - preguntó sin siquiera pensarlo, después de todo era un chico curioso sin pelos en la lengua.

-Es mi hermano menor, es normal que viva conmigo – sonrió y enrutó nuevamente el tema anterior– entonces, dile a tu amigo que haga algo para animar a Jinnie, dile que vaya a verlo a casa, en casa también tenemos un piano y Jinnie canta muy bello, quizás serian buenos amigos, me alegraría mucho que Jin tenga amigos-

-Oh... bueno, le diré... pero no sé dónde vive, ¿podría darme la dirección para decirle a mi amigo que vaya? –

Yoongi caminaba con la dirección de la casa de Seokjin en la mano, era muy tarde para ir hoy, aunque aún no se decidía por completo a ir, sin embargo, el solo recordar la hermosa letra que escribió ese chico le hacía volver a pensar que ir era una buena decisión.

Al otro día tras salir del colegio, miró la dirección con duda, ¿sería realmente una buena idea ir a hablar con ese chico? Hace tiempo que no toma interés por alguien, seguramente ya perdió la práctica, aunque quizás Seokjin sería igual que él, según el profesor Namjoon, Seokjin no tenía amigos, por lo que podrían empatizar estando juntos ¿quien sabe?. Dio un paso fuera del colegio y fue cuando vio al joven alto de rubios cabellos yéndose a su casa y se arrepintió, los nervios le calaban los huesos así que caminó rápido de forma tensa hasta llegar a su casa, sin pensar en nada mas que en el rubio chico de ojos grandes.

-¡Hyung!, ¡hyung! yoongi... Yoon... - iba ensimismado cuando de repente escuchó una voz que le hablaba, era su pequeño primo Jimin quien estaba en la entrada de la casa sin poder entrar porque se le habían quedado las llaves y llevaba aproximadamente 15 minutos fuera, su madre había salido a comprar algunas cosas para el hogar y su padre aun no volvía del trabajo. – ¿Jiminie? –

-Me quedé afuera hyung, ¿tienes llaves? -

-No las traje... generalmente hay gente en casa –

-¿Y que hacemos?, mamá llegará como en dos horas y papá hoy tiene reunión así que volverá a la noche-

-...Te... Tengo que ir a ver a alguien... ¿me acompañas? -

-¡Hyung! ¿¡Hiciste un amigo!?- dijo sorprendido y alegre. 

-No... no es mi amigo... yo... hice algo malo y quiero ir a disculparme –

-Woah, hyung tiene sentimientos, pensé que siempre los mantendrías ocultos-

-Mocoso...-

-Te quiero Yoongi hyung- dijo el niño de 11 años abrazando a su primo mayor, para luego correr más allá – vamos, te acompaño – el de pelo teñido rubio sonrió al ver a su cachetoncito primo menor correr feliz, de esa manera caminaron hasta tomar un bus que los dejó bastante cerca de la casa de Seokjin, Yoongi no podía evitar tiritar de nervios, las únicas personas con las que ha hablado en este ultimo mes han sido sus tíos, Jimin, los profesores, ese chico llamado Seokjin, el director del colegio cuando llegó un día tarde y a las personas que les preguntó por el patio del colegio si conocían a Seokjin, ninguna conversación duró mas de cinco minutos, así que esta vez su ansiedad aumentaba, no sabía como iba a salir, que le esperaba de esa situación.

Pronto llegaron al lugar y tocaron el timbre, un alegre niño subió las escaleras de la casa para ir a ver a su hermano mayor – Jin hyung, están tocando el timbre, ¿quieres que abra la puerta? – Jin miró a su hermano pequeño con desanimo y siguió mirando por la ventana  hacia el cielo– deja que se vayan, no quiero hablar con nadie-

-Pero hyung ¿y si es importante? -

-... No estoy para nada importante tae – respondió el mayor, Taehyung bajó desanimado las escaleras y asomó su pequeña carita por la ventana para ver quien era, inmediatamente reconoció a Jimin y se alegró mucho, era su mejor amigo en la escuela así que abrió la puerta y gritó – ¡Jiminie! –

-¿!Tae!? – respondió el aludido alegrándose de inmediato, ambos niños se abrazaron - no sabía que esta era tu casa-

-¿No venias a visitarme entonces?-

-No, venía a acompañar a mi hyung que debía disculparse con alguien, pero no sabía que era con tu hermano – Taehyung miró con odio a Yoongi, por culpa de él entonces su hyung estaba triste.

– ¿Así que tú eres el chico del piano? – Yoongi tragó saliva, ¿que acaso toda la familia de Jin lo conocía? – por tu culpa hyung está triste, así que ve y soluciónalo – le exigió el pequeño Taehyung mientras no soltaba la mano de Jimin ya que tenía ganas de llorar por ver triste a su hermano Jinnie.

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Comentario:  Hola, les vengo a dejar otro trocito de ese fic, ojalá les guste. 

Si tiene algún error o quieren hacer alguna critica constructiva por favor dejen un comentario :3

Eso, espero tengan un muy lindo día y muchas gracias por leer <3