Siete
(último)

Maldigo en voz baja cuando rompo el bolígrafo. Bien, debo dejar de morderlos.

Algo golpea mi cabeza y lo ignoro dándome cuenta que es una bola de papel; que maduros. Vuelvo mi vista al puesto que está a mi lado, contengo una sonrisa cuando veo el hilo de baba que va de su boca a su suéter, Está dormida y apuesto que ni siquiera sabe lo hermosa que se ve.

Tomo el cubo de Rubik y comienzo a armarlo de nuevo mientras le doy vistazos a América. La chica del periódico entra al salón y le doy un “gracias” cuando me entrega un ejemplar, me ignora.

Nunca es malo tener un poco de educación aunque sea de vez en cuando, alguien debería enseñarle eso.

El profesor de geometría continúa dando su clase y por las veces que ha borrado el pizarrón, creo que ni él sabe lo que está explicando. Aburrido abro el periódico para ver los “nuevos acontecimientos”, paso la página hasta que me detengo en una que llama especialmente mi atención.

“El chico de las cartas”

Mierda.

No.

No.

No.

Comienzo a leer el artículo y me doy cuenta de lo que el idiota profesor de literatura acaba de hacer ¡Y todo el puto instituto lee el periódico escolar! Censuró mi nombre y cambió el cubo de Rubik lo que no tiene mucho sentido cuando se lee que puedo armar cartas en diez minutos. Es un tonto, es un traidor, es del jodido montón.

Tomo mi mochila y guardo rápidamente mis cosas, me levanto sin siquiera reparar en los llamados del mediocre profesor de geometría Busco entre los salones y doy con él. Toco la puerta apresuradamente y sale disculpándose con su clase, de inmediato estampo el periódico contra su pecho y se sorprende.

—¿Qué mierda es ésto? No puede hacerlo —le susurro aunque nadie está en el pasillo.

No tiene que ver el periódico para saber a lo que me refiero. Apuesto a que ha esperado toda la mañana a que viniera en su búsqueda para meterle un puñetazo y ganas no me faltan para hacerlo.

Mete las manos en sus bolsillos despreocupadamente. Jodido idiota. El parpado comienza a temblarme por la rabia.

—Técnicamente sí puedo Jacob, tengo el derecho de publicar informes, tareas y artículos de los estudiantes en el periódico. Soy el profesor.

Está sereno, demasiado y yo solo quiero jalar mi cabello y golpearlo muy fuerte en el rostro.

—Pues a la basura su título de profesor ¡Ella lo sabrá! ¿¡Acaso está loco!? —ya no me importa que alguien escuche. Ésto no puede pasar.

Mis nervios están a flor de piel y más aún cuando el profesor esboza una sonrisa.

—Jacob, tú mismo censuraste los nombres en la historia así que no…

—¡¿Cuántas malditas personas conoce con nombre de continente y apellido de un ESCRITOR FAMOSO?!

Respiro hondo y me ordeno calmarme.

Relájate Jacob, sabes que es ilegal asesinar a una persona, lo haz investigado.

—Jacob —pone su mano en mi hombro y quiero romperla —Nadie sabrá que eres tú y que estás hablando de América

—Yo lo sé, es muy obvio.

Mierda.

No quiero voltear, no quiero, por favor, no.

Miro al profesor pidiendo ayuda y éste sonríe mirando algo, o más bien alguien detrás de mí.

—Pues creo que has encontrado el tesoro, de nada Jacob.

Sin más entra al salón dejándome petrificado. Volteo lentamente y allí está ella, lo sé porque observo sus pies, no me atrevo a mirarla al rostro pero carraspea y cierro mis ojos. Mi corazón late tan fuerte que duele un poco y temo porque se salga de mi pecho y huya. Yo quiero huir.

Abro mis ojos y levanto el mentón lentamente. Me observa con una sonrisa tímida en el rostro, ha llorado y hay una notoria mancha de baba en su suéter. Da dos pasos hacia mí.

—Bienvenido al tesoro, chico del cubo de Rubik.

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¡Hola hola hola!

Bien, por ahora ésta historia ha llegado a su fin ya que tal como lo dice su género es una historia corta.

No sé si más adelante escribiré una segunda parte narrada por América (Asia) pero por ahora espero que hayan disfrutada de Jacob (Jake) y sus peculiares pensamientos.

Gracias por haberse tomado el tiempo de leer ésta historia y a los que les gustó pues los invito a pasarse por mi perfil y leer mis otros bebés, prometo no defraudarlos.

Saludos, besos y muchos agradecimientos.

MaVaFb.