O cuando un festejo te hace dar cuenta de la persona hermosa que tienes a tu lado

Faltaba muy poco para el cumpleaños numero 21 de Taehyung, el hizo algo bonito para los 20 de Jungkook pero ahora le tocaba a el. Tan solo faltaban cuatro días y no tenía idea de que hacer, nunca pensó en que le importaría tanto un cumpleaños de otra persona que no sean sus abuelos o el suyo.

Por eso aprovechó que Tae estaba en clase y citó a Jennie y Yoongi, dos personas que lo conocían mas que nunca y podían ayudarlo.

—Bueno, yo siempre le regalé lo mismo—comenzó a hablar Yoongi mientras tomaba una malteada en el comedor del instituto—Todos los años le regalo una pelota nueva de fútbol y siempre se emociona, esta vez le compré la nueva edición naranja

—Yo nunca le regalo nada, es la ventaja de ser su hermana—comentó Jennie

Jungkook ahora se sentía frustrado.

—¡Hey, se me ocurre algo! —dijo Yoongi y las esperanzas del menor volvieron —Ponte un moño y ¡Pum! Regalo perfecto

Yoongi rió y recibió un golpe en el hombro de Jennie

—Oye Jungkook, no estes triste, a Tae no le importa mucho eso de los regalos

Jungkook bajó su mirada e hizo un puchero, el tiempo se le agotaba.

—Ahora que lo pienso—dijo Jennie—Hace mucho Tae quiere comprarse una bandana pero siempre lo olvida

El menor abrió un poco su boca y formó una sonrisa

—¡Gracias Jennie! —dijo y besó la mano de la chica—¡Eres la mejor del mundo!

—Lo se, todos me lo dicen

Se levantó de la mesa y tomó su mochila para irse.

—¡Nos vemos! ¡Si Tae pregunta inventen cualquier excusa!

—¡Jungkook! ¡Aun te faltan dos clases!

Pero el menor no le hizo caso y salió corriendo de felicidad de la universidad  Se dirigió al centro y al llegar pudo notar que no había casi nadie.

Comenzó a ver las tiendas y a buscar lo que quería encontrar, hasta que vio una tienda gucci y se acercó a la vidriera. Había una bandana y un reloj que pensaba que podía gustarle a Taehyung. Luego miró el precio y entró sin dudar a la tienda.

Mientras tanto en la universidad, Taehyung buscaba por los pasillos y salones a su novio, hasta que vio a Yoongi

—¡Hey Yoongi! ¿Viste a Jungkookie?

—Ah, el fue a comprar tu re-

Jennie le tapó la boca al rubio y este comenzó a lamer su mano para que lo suelte

—¡Yoongi quería decir que fue al baño!

—Pero acabo de ir al baño y no está

—¡N-no! ¡Recien fue al baño! Ahora está... Ah...

Yoongi quitó la mano de la menor de su boca y habló

—Jungkook se fue del instituto porque tenía que comprar un libro de esos diseños que hace, no te preocupes

—Oh... No me avisó

—Es que era urgente, dijo que nosotros te avisaramos

Taehyung asintió y tomó su celular para llamar al menor, al menos quería saber como estaba. Comenzó a llamar y la voz de Jungkook se escuchó

-¡Hola Tae! Perdon si no te avise, fui a comprar algo para comer

Cuando Yoongi y Jennie escucharon eso, se miraron entre ellos

—¿Eh? Los chicos me dijeron que fuiste que fuiste comprar un libro de diseños.

-...... Oh... ¡Ah si! ¡Tambien eso! No llegaré a clase, hay mucha fila, nos vemos mañana

—Esta bien, albondiguita, nos vemos

Taehyung cortó la llamada y entrecerró los ojos al ver a su hermana y mejor amigo reír

—Asi que ¿Ahora lo llamas albondiguita?

Los dos chicos siguieron riendo y Taehyung se colocó la mochila

—Callense

—¡Yaaa! ¡Esque los dos son tan cursis! —dijo Jennie y miró a Yoongi intentando imitar a su hermano—¡Hola mi albondiguita tan dulce de mi alma!

—¡Aww! ¡Mi TaeTae osito de goma tan bonito! —respondió Yoongi entre risas intentando imitar a Jungkook

Taehyung rodó los ojos y una imagen de su novio se le vino a la mente

Tan tierno.

🍒💄🌈

Era un día martes, pero no era cualquier martes, era el cumpleaños de Taehyung.

Despertó en su cama, abrió lentamente sus ojos por lo rayos de sol y vio a su novio mirar algunos cuadros en su habitación. Sonrió al ver que su novio era lo primero que veía en su mañana y refregó sus puños contra sus ojos

Jungkook se dio cuenta de que Tae despertó y corrió a abrazarlo

—¡Feliz cumpleaños, corazón!

El mayor sonrió y correspondió el fuerte abrazo que le daba el castaño.

—Gracias Kookie, me alegre verte aqui

Jungkook quedó encima del azabache y comenzó a repartirle besos por todo su rostro

—¡Yoongi y tus amigos vinieron a desayunar! Nos levantamos tempranito para comprar las cosas para comer contigo y que tengas la mejor mañana de cumpleaños. Tus padres dijeron que vendrán en la noche y que te mandan un muy feliz cumpleaños

Taehyung asintió con la cabeza y se dedicó el tiempo para abrazar dulcemente a su novio otra vez. La puerta fue abierta de repente y la pareja pudo ver a Yoongi, Namjoon, Hoseok y Jennie entrar con globos

—¡FELIZ CUMPLEAÑOS!

Los tres chicos aprovecharon que Jungkook se apartó y abrazaron al cumpleañero mientras le daban golpes, era su muestra de cariño entre amigos.

—¡Adivina que señorito! —dijo Yoongi y sacó una pelota naranja detras de su espalda—¡Edicion nueva! ¡Kachau!

Todos comenzaron a darle los regalos a Tae mientras el castaño miraba en un rincón de la habitación. Jennie le dijo que su regalo podía ser el ultimo.

—¡Ahora a comer! ¡Yey! —grito emocionado Hoseok y salió de la habitación

—¡Esperame infeliz!

Todos menos Taehyung y Jungkook salieron de la habitación. El menor sacó una bolsita que estaba escondida detrás de un mueble y se la extendió a su novio

—Te amo

Se sentó en las piernas del mayor y este tomó la bolsa mientras con su otra mano acariciaba el cabello de Jungkook.

—Jungkookie, no hacía falta...

—Si hacía falta ¿Como no voy a darle un regalo a mi hermoso novio?

Taehyung abrió la bolsa y vio la bandana y reloj. El castaño sonrió al notar la sorpresa que tenía su novio y acarició su mejilla

—Jungkookie...

—Para mi TaeTae

Los dos chicos se abrazaron, Tae besó la mejilla de Jungkook y juntó sus frentes. Con esa mirada, Jungkook recordó el día que se conocieron, cuando entró a esa universidad nueva y Tae le hizo esa pregunta, era obvio.

El chico que le devolvió su ropa cuando se la robaron en el baño, el chico que lo ayudó a coser ese vestido roto, el chico con el que fue a una fiesta y terminó besandolo. El único chico que no lo miraba como si fuera lo mas raro el día que todos lo juzgaban, el que no lo presionó para tener una cita y lo ayudó a juntar esas hojas del suelo cuando todos solo se aprovechaban de el.

Entonces supo que eligió al correcto.