042: Yoon Hyunshik
Jake veía a través del vidrio de esa ventana como Ni-ki estaba conectado a una máquina que medía sus signos vitales.
A pesar de que Sunoo lo había tratado de convencer para que se vaya a dormir, Jake se negó. Quería quedarse un momento más junto a Ni-ki.
Se sentía culpable. Verlo en ese estado, al borde de la muerte, le traía recuerdos del pasado.
Ni-ki por poco se moría y él ni siquiera pudo pedirle perdón por todo lo que le hizo.
彡 La lluvia comenzó a caer, pesada y fría, como si el cielo compartiera el peso del momento que se avecinaba. Ni-ki se detuvo en medio del parque, empapado, con el cabello pegado a su rostro, mirando a Jake que ya intentaba irse. Sus ojos suplicaban por quedarse, por un segundo más, por una palabra que no terminara en despedida.
— Jake, espera - la voz de Ni-ki tembló, casi ahogada por el retumbar de la lluvia. Jake se giró apenas, impaciente, mirando hacia la salida del parque —. Necesito decirte algo.
Jake suspiró, limpiándose el agua de la frente. Su tono fue más cortante de lo habitual.
— Ni-ki, tengo que irme. Mis tías me van a regañar si llego tarde.
Ni-ki dio un paso hacia adelante.
—¡Estoy enamorado de ti, Jake! - gritó, con la voz rota, como si al decirlo su corazón mismo se desgarrara. La confesión flotó en el aire por un segundo, acompañada solo por el murmullo de la lluvia. Jake se detuvo, pero no se giró de inmediato.
El silencio entre ellos se hizo insoportable. Finalmente, Jake se volteó, su expresión endurecida, casi fría.
— Ni-ki - empezó, pero su voz no tenía ni rastro de la dulzura con la que él la había imaginado tantas veces —. Estás confundido. Esto no es amor, es...no sé, solo te estás aferrando a una idea.
— No, no lo estoy - Ni-ki lo interrumpió, acercándose más, desesperado, con la voz quebrada—. Estoy seguro de lo que siento. ¡Te amo, Jake! Esto no es un error. No estoy confundido, sé lo que siento. ¿Por qué no puedes entenderlo?
Jake cerró los ojos, respirando hondo, como si tratara de contener su propia frustración.
— Ni-ki, no deberías haberme dicho esto - dijo, su voz llena de dureza mientras volvía a abrir sus ojos —. Te lo dije antes, no puedes sentir eso por mí. No funciona, no va a funcionar.
— ¿Por qué? - Ni-ki preguntó, incapaz de comprender —. Jake, ¿por qué me rechazas de esta manera? ¿Qué he hecho mal?
Jake lo miró directamente a los ojos, como si cada palabra que iba a decir fuera una puñalada más profunda.
— Porque jamás me enamoraría de alguien como tú, Ni-ki. Este tipo de cosas es todo lo que mi familia me ha dicho que debo evitar.
— Jake—
Jake apretó los labios. Sus ojos, que una vez parecieron tan brillantes para él, ahora eran duros, casi impenetrables.
— No puedes sentir eso por mí, Ni-ki. No está bien. ¿No entiendes? Mi madre me mataría si supiera que estoy siquiera considerando estar con un chico.
— ¿Qué? - Ni-ki murmuró, atónito, dando un paso atrás—. ¿Me estás rechazando con la excusa de que soy un chico al igual que tú?
— No encajamos, Ni-ki. Eres... - Jake lo miró, y su mirada se llenó de algo cercano al desprecio—. Una relación entre tú y yo es algo que genera asco en mi familia. No eres el tipo de persona con la que se supone que debo estar. Mi madre nunca te aceptaría, y no pienso decepcionarla por algo que ni siquiera debería haber comenzado.
— Jake, no puedes vivir toda tu vida siguiendo las expectativas de tu madre - dijo, su voz firme, aunque rota por la desesperación —. No puedes negarte lo que sientes, lo que queremos ¡Tienes que pensar en ti! No puedes seguir solo lo que ella te diga. Tienes que ser libre, elegir lo que te hace feliz.
Jake lo miró con una mezcla de tristeza y fastidio.
— No entiendes, Ni-ki - Jake respondió —. Mi madre es todo lo que tengo. Todo lo que soy, lo soy por ella. Y si me pusieras a elegir entre mi madre y tú - hizo una pausa — siempre elegiría a mi madre. Siempre.
— ¡No puedes decir eso! - Ni-ki gritó, el dolor y la impotencia reflejados en cada palabra —. No puedes dejar que ella controle cada aspecto de tu vida, Jake. Yo te amo. Te amo de verdad. No puedes decirme que eso no significa nada. Te conozco, Jake. Sé que no eres tan cruel como lo estás siendo ahora conmigo.
Jake lo observó por un momento, con una expresión vacía, como si estuviera viendo a un extraño. Y entonces, su voz, afilada y cruel, cortó el aire.
— No quiero estar con alguien que sólo traerá vergüenza a mi familia, Ni-ki. No quiero a alguien que no sabe lo que es importante en mi vida. Tú no eres importante.
Ni-ki se quedó inmóvil.
— ¿Qué? - Ni-ki susurró, incapaz de procesar lo que acababa de escuchar.
— Tú no eres nadie importante en mi vida, Nishimura Riki. Nunca lo has sido y nunca lo serás.
— Jake, y-yo solo quería que fueras feliz. Quería estar contigo, cuidarte. Nunca he dejado de pensar en ti y cuidarte, desde que te conocí - La voz de Ni-ki se rompió, casi ahogada en su propio dolor.
Jake bufó, sacudiendo la cabeza con exasperación.
— No quiero que me busques más, Ni-ki. ¡No me interesa lo que sientas! Nunca voy a corresponder a esos sentimientos. No quiero verte nunca más en mi vida, ¿me oyes? No me busques, no me hables, no te acerques a mí. ¡Olvídame!
— ¿De verdad piensas eso? - susurró, su voz rota, casi inaudible entre la lluvia —. ¿De verdad quieres que desaparezca de tu vida así?
Jake lo miró por un largo instante, su expresión de puro desprecio fue la respuesta que él no quería oír.
— Sí. No quiero verte nunca más en mi vida. Ya te lo dije, no eres nadie importante en mi vida ni nunca lo serás. Jamás te elegiría a tí.
La lluvia seguía cayendo, empapándo a Ni-ki, mientras Jake se alejaba sin mirar atrás, dejándolo solo en un parque vacío, bajo una tormenta que reflejaba el caos que acababa de estallar en su interior.
Ese fue el último día que se vieron, el último momento en que compartieron palabras.
Cuando estuvo lo suficientemente lejos del parque, Jake afianzó su espalda contra una pared y rompió en llanto mientras su mano arrugaba su camisa de colegio y se golpeaba su pecho.彡
Jake decidió que era momento se irse a dormir. Tomó un taxi que lo llevó hasta su departamento. Se metió en su habitación. Dejó su celular sobre la mesa de su escritorio.
Se detuvo al observar el sobre de papel que le había dejado su padre. Con todo lo que había pasado, ni siquiera se había tomado el tiempo de terminar de ver todo lo que había en ese sobre.
En la mañana tuvo que encargarse del entierro de su padre. Afortunadamente, Hana estuvo junto a él, al igual que Sunoo. En la tarde había estado en el hospital esperando a que Ni-ki despierte, cosa que no sucedió.
Abrió el sobre de papel, dejó la carta a un lado y sacó otros papeles.
* Nombre del paciente: Park JongSoo.
* Edad: 3 años.
* Diagnóstico: Psicopatía.
Jake se sentó sobre su cama y empezó a leer la descripción del caso.
* Descripción: Desde muy temprana edad, el paciente va presentado comportamientos agresivos y poca empatía. Se le ha echo los estudios necesarios y se puede confirmar que sufre de psicopatía. Se desconoce las causas.
Para salvaguardar la integridad de su familia, el niño ha sido internado y seguirá un estricto tratamiento junto a psiquiatras para que cuando crezca el niño, pueda integrarse a la sociedad como un ciudadano normal.
Jake continuó leyendo lo que habían en esas hojas. Mencionaban los estudios médicos, los medicamentos y las cantidades que se le suministraron al niño. En la conclusión de los médicos, todos coincidían que ese niño no podría ser integrado a la sociedad cuando tenga mayor edad. Lo catalogaban como alguien peligroso. Describían al niño como alguien muy inteligente y calculador.
Dió una breve leída a esas hojas que señalaban tantos términos médicos relacionados a ese campo de estudio que no lograba comprender.
Al final encontró otra hoja.
* Nombre del paciente: Park JongSoo.
* Edad: 4 años
* Diagnóstico: No definido.
* Descripción: El tratamiento que siguió el niño no fué de mucha ayuda. Las actitudes del niño no han disminuido ni han sido controladas. Sin embargo, nos acabamos de enterar por parte de los padres del paciente que el niño, aparte de psicopatía, tiene otro diagnóstico médico del cuál no sé conoce mucho.
Se le empezarán a suministrar tranquilizantes para contrarrestar los efectos del segundo diagnóstico.
Al final de la hoja, vió que había una firma de su padre junto a otra firma.
* Autorización concedida: El padre del paciente autoriza al personal médico a encargarse completamente de su hijo y hacer lo que sea necesario para estudiar el caso especial de su hijo. Incluso si eso conlleva a la muerte del niño.
Jake se sorprendió cuando leyó esa autorización. ¿A ese hombre debería llamarsele 'Padre'?
Dejó las hojas de lado. Sentía curiosidad por saber cuál era el otro diagnóstico médico de ese niño.
Revisó que más había en ese sobre de papel. Eran algunas notas escritas por su padre donde también mencionaba el tratamiento hacia el niño. Aunque una parte le llamó la atención porque no la había leído en los documentos del diagnóstico médico de ese hospital.
→ Se intentará separarlos. Los padres prometieron guardar el secreto.
→ El tratamiento no está teniendo el éxito esperado. Ellos sienten la separación. Están conectados.
→ Si no logra ser mentalmente fuerte, los ataques de ira se harán más intensos y podría lastimarse gravemente.
→ Nota final: Fué una mala idea separarlos. Se creó una idea equivocada y el comportamiento agresivo de Park JongSoo aumentó. Es considerado un peligro en el hospital y piensan liberarlo a pesar de que puede llegar a convertirse a futuro en un gran peligro para su familia y la sociedad.
→ Extra: los padres murieron. El niño está en peligro.
Jake frunció el ceño. La curiosidad aumentaba.
¿Park JongSoo seguiría vivo?
Sacó su celular y escribió el nombre del niño pero no salió ningún resultado. Al final decidió entrar a una página del gobierno donde podían encontrar a una persona introduciendo su nombre.
Escribió el nombre y le salieron varios resultados. Habían demasiadas posibilidades.
Suspiró y siguió deslizando su dedo mientras veía la imagen de tantas personas hasta que una imagen lo hizo detenerse.
Miró con atención la imagen y el nombre.
El chico de la imagen era Park JongSeong. Estaba completamente seguro que era él.
Decidió escribir en el buscador el nombre de Park JongSeong. Le salieron algunos resultados. Buscó entre todas esas personas una imagen que coincida con el Park JongSeong que conocía pero no encontró nada.
¿Acaso 'Park JongSeong' no era su verdadero nombre?
⛅⛅⛅
El sol ya había salido. Jungwon fué el primero en empezar a abrir sus ojos. Lo primero que vió fué a JongSeong profundamente dormido. Se veía tranquilo a diferencia de otras veces que se despertaba por alguna pesadilla.
Jungwon acarició el cabello rubio de su ahora novio. Sonrió mientras recordaba todo lo que hicieron durante la noche.
Luego, JongSeong empezó a abrir sus ojos. Sintió su corazón acelerarse cuando vió el hermoso rostro de Jungwon. No pudo evitar darle un fugaz beso en los labios.
— ¿Ni siquiera un 'buenos días' primero? - Jungwon preguntó.
— Buenos días, Wonnie - JongSeong sonrió y agarró la mano de Jungwon que estaba acariciando su cabello —. ¿Estás bien? ¿Te duele? ¿Fuí muy brusco?
— Te ves tan tierno preocupándote por mí - Jungwon se apegó más al cuerpo de Jay —. Estoy súper bien, aunque quizás me cueste un poco caminar.
— Lo siento - JongSeong se sintió apenado.
— No me arrepiento de nada y espero tú tampoco lo hagas.
— Seré más cuidadoso.
— Cuando quiera que seas más cuidadoso conmigo, te lo diré. Tú no te culpes por nada - Jungwon besó la comisura de los labios de Jay —. Ayer te veías muy sexy - JongSeong se sonrojó por el comentario de Jungwon —. Es increíble como te pones tímido por mi comentario cuando ayer me dabas como cajón que no cierra.
— Jungwon - JongSeong se volvió a avergonzar.
— No parecías tan novato, ¿fuí un buen maestro? ¿Te gustaron mis lecciones? - Jungwon deslizó sus dedos por el pecho de JongSeong —. Y eso solo fué el principio. Podríamos probar otras cosas.
— Eres muy atrevido.
— Ayer también lo fuiste, ¿acaso te olvidaste cómo me pedías que gritara tu nombre?
— Jungwon.
— Creo que de ahora en adelante tendré muchos sueños húmedos contigo jadeando mientras yo saltaba en tu regazo.
— Suficiente - JongSeong se sentó en la cama. Sus mejillas quemaban debido a los comentarios de Jungwon. Era increíble como no sentía vergüenza cuando decía esos comentarios.
— Te amo - Jungwon también se sentó en la cama y besó la mejilla de JongSeong —. Buenos días, mi amor.
— Cursi.
— Por tí me vuelvo muy romántico.
JongSeong sonrió y abrazó a Jungwon mientras llenaba su rostro de besos.
De pronto escucharon que tocaron la puerta.
— Chicos, tenemos que irnos - Sunghoon habló desde afuera de la habitación.
JongSeong y Jungwon se bajaron de la cama y empezaron a recoger su ropa y ponérsela. Cuando estuvieron listos, abrieron la puerta.
— Buenos días, Sunghoon - Jungwon saludó.
— Son las nueve de la mañana. Está bien que hayamos decidido que hoy no íbamos a ir a la universidad, pero tampoco podemos quedarnos otro día por acá. También deberíamos ir a ver a Ni-ki y HeeSeung.
JongSeong cerró la puerta y caminaron hasta el ascensor. Jungwon tardó un poco más en llegar hasta el ascensor. Sunghoon miró al castaño.
— ¿Te duele algo? - Sunghoon preguntó.
— No es nada.
— Estás caminando muy despacio. ¿Te duelen mucho las piernas por jugar y correr con todos los niños en el orfanato? - Sunghoon preguntó, pero luego miró a JongSeong, quién miraba hacía otro lado. Parecía nervioso —. Un momento, ¿acaso ustedes...?
Las puertas del ascensor se abrieron cuando llegaron al primer piso. Jungwon fué el primero en salir, aunque no pudo avanzar mucho por el dolor.
— ¿Lo hicieron? - Sunghoon le preguntó en voz baja a JongSeong.
— Ahora somos novios.
— Ustedes no pierden el tiempo - Sunghoon palmeo el hombro de JongSeong —. Que bueno que no estaba durmiendo en una habitación cercana a la de ustedes.
Ambos chicos salieron del ascensor y caminaron hasta la puerta de salida del hotel donde Jungwon había llegado a duras penas.
⏳
Nuevamente estaban en el Seúl. Salieron de la estación de trenes. Jungwon ahora caminaba mejor.
— Nos vemos en un par de horas en el hospital para ver a Ni-ki.
La pareja asintió ante la orden de Sunghoon y se despidieron. JongSeong entrelazó su mano con Jungwon quién sonrió.
Luego llegaron hasta la casa de Jungwon y soltaron sus manos. Jungwon buscó su llave para abrir la puerta.
No se veía a nadie en el primer piso. Subieron hasta el segundo y cada uno se dirigió a su habitación para dejar su maleta. Jungwon entró a su habitación y se sorprendió al encontrar a su madre.
— ¿Qué haces aquí? - Jungwon preguntó.
— ¿En qué estás metido, Yang Jungwon? - la mujer se giró para mirar directamente los ojos de su hijo.
— No sé a qué te refieres.
— Un chico vino a dejar una carta para tí. La acabo de leer y menciona que quiere verte en un bar para tratar el tema de 'Lee HeeSeung'.
Jungwon se acercó a su madre y le arrebató la hoja de papel de su mano.
— No es algo de tu incumbencia.
— Claro que es de mi incumbencia porque somos tus padres y podríamos terminar involucrados en lo que sea en qué estés metido.
— A pesar de que no han sido los mejores padres, jamás arriesgaría la vida de ustedes. No soy tan egoísta, yo sí protejo a las personas que me importan.
— Eres igual a tu padre. Siempre metiéndote en problemas.
Sujin salió de la habitación. Jungwon suspiró y leyó lo que había escrito en la hoja de papel.
→ Veámonos a las seis de la tarde en el bar "Neón Lounge". Hablaremos sobre el tema de Lee HeeSeung. Te espero puntualmente.
A pesar de no estar escrito el nombre de la persona que envío esa nota, sabía que se trataba de Yoon Hyunshik. La persona que le había pedido que provoque que saquen del equipo de básquet a HeeSeung.
⏳
JongSeong había preparado el almuerzo más temprano de lo habitual porque luego se irían al hospital a ver cómo estaba Ni-ki.
Sunghoon estaba esperando a que llegara la pareja. Miró por la ventana como Ni-ki seguía durmiendo.
— Hola, Sunghoon.
El mencionado miró hacía su lado izquierdo y vió a Sunoo.
— Hola, Sunoo.
— ¿También viniste a ver a Ni-ki? - Sunoo también miró a través de la ventana —. No sé porqué aún no despierta.
— Al menos su corazón sigue latiendo.
— Si sigue sin despertar, podría haber entrado en un estado de coma.
— Ni-ki despertará. Estoy seguro de eso.
— ¿Estabas ocupado ayer? Pensé que vendrías a visitar a Ni-ki.
— Había echo planes junto a Jungwon y JongSeong. Ellos también están viniendo.
— ¿Sigues confiando en JongSeong?
— Por supuesto. Aunque todos digan lo contrario, yo confío en él y sé que hay más en su corazón de lo que los demás pueden ver.
— Estaba empezando a confiar en JongSeong, pero cuando ví como atacó a Jungwon, la confianza que empezaba a tenerle se desvaneció. Por poco mató a Jungwon enfrente de nosotros.
— No lo hizo porque él quería. Si te dieras el tiempo de conocerlo un poco más, sabrías que la vida de JongSeong ha sido muy complicada. Quizás hay alguien más detrás de todo esto. Alguien que le tiene odio a Jay y por eso está haciendo esto.
— Si hubiera alguien más, ¿cómo explicas que atacara él mismo a Jungwon?
— JongSeong tiene problemas para controlar sus emociones.
— Y eso puede ser peligroso. Sin embargo, Jungwon y tú siguen confiando en él. A veces me pregunto qué es lo que ustedes ven en él. ¿Cómo están tan seguros de que es alguien de confianza?
JongSeong y Jungwon aparecieron. Sunghoon les sonrió y Sunoo solo los miró.
— ¿Cómo está? - Jungwon preguntó.
— Sigue durmiendo - Sunoo respondió —. Es necesario que despierte para saber cómo lo atacaron. Pudo haber ocurrido un caso similar al de Sunghoon.
— ¿Cómo está Jake? - Jungwon pensó que Jake estaría en el hospital cuidando de Ni-ki.
— No está bien. Primero su padre fallece y ahora esto. Jake aparenta ser fuerte pero no lo es.
— ¿Ni-ki no tiene ningún familiar? - JongSeong preguntó.
— Jake me dijo que Ni-ki vive de manera independiente. Sus padres no se preocupan por él.
— ¿Jake conoce a los padres de Ni-ki? - Sunghoon preguntó.
— Creo que ellos se conocen desde antes - Sunoo dió su opinión.
Y justo en ese momento, Jake apareció y se acercó a ellos. Jake no dudó en acercarse a JongSeong y mostrar la pantalla de su celular.
El resto de chicos vieron lo que Jake estaba mostrando. Eran los datos personales de JongSeong, aunque el nombre era distinto.
— ¿Quién eres en realidad? ¿Cuántos nombres tienes? - Jake preguntó.
— Mi nombre es Park JongSeong.
— Que curioso. Tú rostro no sale entre las personas que tienen ese nombre. Responde de una vez, ¿eres JongSeong, Jay o JongSoo? ¿Por qué tienes tantos nombres? ¿Hay algo que quieras ocultar?
— No puedo responder con seguridad la primera pregunta. Esa respuesta solo podrían responderte mis padres, pero ellos fallecieron hace años.
— Si eres Park JongSoo, déjame decirte que tengo tu certificado médico en el cuál te diagnostican con el transtorno de personalidad de psicopatía. Incluso sé que medicamentos te suministraron.
— ¿Hospital? - JongSeong frunció el ceño. Aunque no podía recordar completamente todo su pasado, según los recuerdos que tenía y lo que le habían dicho otras personas, sus padres jamás lo sacaron de la casa y el doctor que aparece en sus sueños iba a su casa.
— Juro que destruiré cada una de las máscaras que has creado y descubriré quién eres en realidad - Jake guardó su celular.
Jungwon se acercó a JongSeong y agarró su mano.
Se quedaron varias horas en el hospital junto a Sunoo. Sunghoon había comprado unas bebidas y un sándwich para cada uno después de escuchar rugir el estómago de Sunoo.
Cuando fueron las cuatro de la tarde. Jungwon, JongSeong y Sunghoon se fueron hacía el hospital dónde estaba HeeSeung.
No había demasiada seguridad cuidando la habitación donde estaba HeeSeung. Tampoco estaban sus padres.
Solo vieron al detective Choi quién enseguida reconoció a Jungwon y se acercó a él.
— Buenas tardes, detective Choi - Jungwon hizo una reverencia. Acción que también imitaron Sunghoon y JongSeong —. ¿Cómo está HeeSeung?
— Por ahora está estable. Sus heridas se están sanando. Sólo falta que despierte. Se está evaluando la posibilidad de sacarlo del área de UCI.
— ¿Ha podido descubrir quién atacó a HeeSeung?
— Se revisaron las cámaras de seguridad del estacionamiento y se ve a un jóven atacarlo con una cuchilla. No podemos descubrir su identidad porque la cámara no logra grabar su rostro. Además, la persona que lo atacó parece que no pertenece a esa universidad porque luego de atacar a HeeSeung, salió de la universidad.
Jungwon no dijo nada pero lo que acababa de decir el detective confirmaba su sospecha que detrás de todo esto podría estar Yoon Hyunshik.
— ¿Ha ocurrido alguna otra amenaza? - Sunghoon preguntó.
— Por ahora todo está tranquilo. Esperemos que siga así en los próximos días.
El celular del detective Choi empezó a sonar. Leyó brevemente los mensajes que le habían llegado.
— Debo irme - Choo hizo una reverencia y se fué.
— ¿Lo conoces? - JongSeong miró a Jungwon.
— Lo conocí cuando HeeSeung fué traído al hospital. Él está investigando este caso.
El detective Choi había recibido unos mensajes por parte de sus asistente que le decían que habían encontrado algo extraño.
Salió del hospital y tomó un taxi para que lo llevara hasta su oficina.
⏳
Se quedaron un rato en la sala de espera mientras hablaban sobre los trabajos que la universidad les había dejado y luego Sunghoon se animó a preguntarle a JongSeong sobre sus diseños para el desfile de moda.
Después salieron del hospital. Jungwon miró la hora en su reloj. Tenía que ir al bar donde Hyunshik lo había citado.
— Podríamos ir a cenar - Sunghoon propuso esa idea.
— Pueden irse juntos. Necesito ir a otro lugar - Jungwon se fué sin permitir que JongSeong ni Sunghoon hicieran alguna pregunta.
— ¿Sabes a dónde se va? - Sunghoon le preguntó a JongSeong quién negó.
Jungwon tomó un taxi para llegar directamente hasta ese bar al cuál nunca había ido pero si había escuchado sobre él.
El bar estaba oscuro y lleno de gente, con el olor a alcohol impregnando en el aire. Jungwon se sentía tenso mientras caminaba hacia la mesa en el rincón, donde Hyunshik lo esperaba. Su corazón latía con fuerza en su pecho.
Hyunshik sonrió cuando vió a Jungwon.
— Llegas dos minutos tarde.
Jungwon se sentó frente a él, sin molestarse en responder.
— ¿Qué quieres? - Jungwon preguntó directamente.
Hyunshik dejó caer su vaso de licor sobre la mesa.
— Ya no necesito que te esfuerces tanto en sacar a Lee HeeSeung del equipo de básquet. Resulta que alguien más me está pagando bien por cada vez que lo lastimo. No pensé que valiera tanto dinero, pero al parecer, hay gente que lo odia tanto como yo.
Jungwon lo miró con frialdad, su estómago revuelto por la confirmación de lo que ya temía.
— Siempre sospeché que tú estabas detrás del ataque. Ahora que HeeSeung está en UCI y necesitará terapia para recuperarse, ya es obvio que no va a poder jugar en el equipo. No necesitas que yo haga nada más.
Hyunshik soltó una risa baja, inclinándose hacia adelante sobre la mesa.
— Claro, se podría decir que tu trabajo está hecho - Hyunshik habló con un tono casual —. Pero lo interesante es que, quien me está pagando por atacar a HeeSeung, me ha dado una advertencia muy específica: no hacerte daño a ti.
Jungwon lo miró con desconfianza y Hyunshik sonrió aún más.
— Eso me llamó la atención - Hyunshik continuó hablando —. ¿Por qué alguien se preocuparía tanto por ti? Parece que esa persona tiene un interés en ti que podría ser útil. Tal vez podrías saber quién es realmente.
— Yo no sé nada - Jungwon respondió rápidamente, intentando mantener la calma —. Y si ese desconocido tiene interés en mí, tal vez es porque quiere matarme.
Hyunshik soltó una carcajada, pero sus ojos se volvieron fríos en un instante.
— Vaya, eres tan ingenioso, Yang. Pero no me fío de lo que dices - Hyunshik hizo un gesto con la mano, y de las sombras aparecieron dos de sus cómplices, acercándose lentamente.
Antes de que Jungwon pudiera reaccionar, Hyunshik se levantó y se inclinó hacia él.
— Para estar seguro de que no estás ocultando nada, voy a tomar medidas adicionales - Hyunshik dijo en un susurro mientras sus hombres rodeaban a Jungwon. Uno de ellos sostenía una jeringa, con un líquido brillando bajo la tenue luz del bar —. Una pequeña inyección te hará hablar sin que puedas controlar lo que dices. No me gusta que me oculten cosas.
Jungwon sintió el pánico apoderarse de él, pero mantuvo su mirada fija en Hyunshik.
— No sé nada, Yoon Hyunshik - la voz de Jungwon temblaba ligeramente —. Si haces esto, no habrá vuelta atrás. Lo que sea que me quieras inyectar podría provocarme la muerte y estarás metido en problemas.
— Lo sé. Pero ya hemos pasado el punto de no retorno, ¿no crees?
Jungwon no esperó escuchar más. En cuanto vio la jeringa brillar bajo la luz tenue del bar, su instinto de supervivencia se activó. Se levantó de golpe y salió corriendo hacia la puerta, empujando a uno de los hombres de Hyunshik. Las voces y el bullicio del bar se apagaron cuando el miedo le dio la adrenalina suficiente para abrirse paso entre la multitud.
La calle afuera estaba llena de bares, de luces neón parpadeantes, y de gente que, aunque veía lo que sucedía, no se molestaba en intervenir. Algunos ni siquiera miraban, demasiado absortos en sus propios problemas o diversiones. Jungwon corría con desesperación, escuchando los pasos de los hombres de Hyunshik detrás de él. Ahora no sólo eran dos. El sudor caía por su frente, su respiración era rápida y agitada, pero no podía detenerse.
Uno de los hombres lo alcanzó, tirando de su brazo para detenerlo, pero Jungwon le dio un codazo en las costillas, haciendo que lo soltara momentáneamente. Otro de los cómplices de Hyunshik apareció por el costado, tratando de bloquearle el paso, pero Jungwon lo esquivó, forcejeando para librarse.
Pero el tercer hombre no falló. Hyunshik, quien había salido tranquilamente del bar, lo alcanzó con una velocidad inesperada y, sin dudarlo, le dio una patada brutal en el estómago. El impacto dejó sin aire a Jungwon, y su cuerpo cayó con fuerza al suelo. La multitud seguía pasando, ignorando la escena como si fuera parte del paisaje habitual de esa zona.
Jungwon intentó arrastrarse para levantarse, pero Hyunshik no había terminado. Con un odio frío en su mirada, le propinó un par de patadas más en las costillas. El dolor lo envolvía, pero no podía hacer nada. Cada intento por levantarse era inútil. Entonces sintió la presión de la mano de Hyunshik en su cabello, tirando de el con violencia para que alzara la cabeza.
— No me gusta que no acaten mis órdenes, Yang Jungwon - Hyunshik hizo una señal con la cabeza, y el hombre que sostenía la jeringa comenzó a acercarse lentamente.
Jungwon estaba mareado, luchando por mantenerse consciente mientras veía cómo el hombre avanzaba, con la jeringa lista para inyectarla. Sus fuerzas lo abandonaban, y su cuerpo temblaba, pero justo cuando el hombre estaba a punto de alcanzarlo, un disparo resonó en la calle.
El hombre con la jeringa cayó al suelo, muerto instantáneamente. La jeringa rodó de su mano y quedó en medio del pavimento, olvidada. Hyunshik soltó a Jungwon y se levantó, alarmado. Miró a su alrededor, buscando al responsable.
De entre las sombras, varios chicos aparecieron, enfrentándose rápidamente a los cómplices de Hyunshik. Golpes y gritos llenaron esa calle. Los matones de Hyunshik se vieron superados en cuestión de segundos.
Jungwon, a pesar del dolor, supo que esa era su única oportunidad para escapar. Con dificultad, logró levantarse. Se tambaleó unos pasos, pero se obligó a seguir corriendo. Tenía que salir de allí antes de que Hyunshik o alguno de sus hombres pudiera recuperarse y atacarlo.
Sin mirar atrás, Jungwon corrió hacía la avenida principal para tomar un autobús e irse a su casa.
Hyunshik intentaba mantenerse en pie mientras la pelea a su alrededor llegaba a su fin. Todos los cómplices de Hyunshik habían sido reducidos, algunos inconscientes en el suelo y otros huyendo como ratas. El caos se había apoderado del lugar, y el miedo comenzó a apretar su garganta cuando se dió cuenta de que estaba solo.
En un último intento desesperado por salvarse, Hyunshik giró sobre sus talones y corrió, empujando cuerpos inertes a su paso. Pero no llegó muy lejos. Un golpe brutal en la espalda con una vara de fierro lo hizo caer de rodillas al suelo. El dolor lo paralizó por completo, obligándolo a soltar un grito. Alzó su cabeza lentamente, solo para encontrarse a un chico con una pistola, apuntando directamente a su frente.
El chico vestía una casaca negra. Tenía una gorra de lana que cubría su cabello y usaba una mascarilla que solo dejaba al descubierto únicamente sus ojos, fríos y calculadores. Hyunshik apenas podía respirar, sintiendo el miedo descender sobre él.
— Te lo dejé muy claro. Solo yo decido el destino final de Yang Jungwon. Tu único trabajo era atacar a Lee HeeSeung, y te pagué bien por eso. Pero trataste de averiguar más de lo que debías.
Hyunshik intentó hablar, pero ese chico alzó una mano y le hizo una señal para que se quedara en silencio.
— No me gusta que traten de investigarme. Desde el principio, fuiste un estorbo. Y ahora, te has vuelto completamente innecesario. Te dije que te cortaría en pedazos y los repartiría por tu universidad...
Hyunshik comenzó a sudar frío, su respiración se aceleraba. Intentó levantar las manos en un gesto de defensa, pero el chico le presionó la pistola contra la frente, sin darle tiempo para actuar. Con un movimiento rápido y decisivo, le quitó el seguro al arma.
— Pero me da flojera hacer eso. Esto termina aquí y descuida, no estarás solo en tu tumba, un detective te estará acompañando - dijo el desconocido con calma.
El disparo resonó por la calle vacía y el cuerpo sin vida de Hyunshik cayó al suelo.
El chico comenzó a reír mientras veía como la sangre de Hyunshik corría por la cabeza de su víctima y manchaba el suelo.
Dr13a.
Yoon Hyunshik se nos fué al igual que el detective Choi. ¿Qué cosa habrá sido eso importante que le informaron al detective Choi? 🤔
Gracias por leer y votar 💙
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro