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33. Epílogo

Un beso podía significar muchas cosas, sin embargo para la acaramelada pareja, siempre demostraría todo lo que sienten uno por el otro.

Un corto beso, uno largo, un beso acaramelado o ya sea apasionado, sea como sea, ellos siempre sentirán a través de sus besos que su amor es real.

La hermosa pareja se encontraba abrazada en medio de la playa, sintiendo la fría brisa acariciar sus cuerpos. Jimin mantenía su rostro recostado sobre el pecho de su novio, mientras Yoongi lo envolvía entre sus brazos y reposaba su barbilla sobre la cabeza de su amado Minnie, una imagen tan tierna que podía ser fotografiada.

- Cariño - Llamo el mayor.

- ¿Mgh? - Susurró el chico, con sus ojitos cerrados y disfrutando de la calidez que su pareja le regalaba.

- ¿Vamos a cenar? - Jimin solamente asintió, causando la risa del mayor - Vamos, que se que debes comer mucho, no creas que no sé qué casi no estuviste comiendo pequeño...

- Tú tampoco - Contraatacó el chico. Yoongi río y lo acepto.

- Por eso iremos juntos - Dijo Yoongi, tratando de evadir el tema.

Jimin río y se mantuvo en la misma posición, era el que menos se quería mover. Así que Yoongi optó por llevarlo sobre su espalda, se separó un poco de su chico, viendo con ternura el puchero de este a lo cual no pudo evitar besar.

- ¿Te he dicho que eres una masita de amor? - Dijo Yoongi.

- ¿Yo? - Preguntó el chico, negando ante la pregunta - No me has dicho, pero tampoco lo soy, no soy meloso, no soy masita de amor, no soy tierno, no...

- Eres una ternura cariño, eres meloso conmigo y me encanta, eres un amor, un ángel, mi ángel, me encanta que seas así pequeño - Aseguro el mayor.

Las mejillas de Jimin se sonrojaron y sonrió levemente. Yoongi depósito un casto beso sobre la frente de su amado Minnie y después se agachó frente a él, para cargarlo.

Jimin no dudó en subirse sobre la espalda de su pareja. Para él, Yoongi era muy cómodo, tierno y amoroso con él, algo que amaba demasiado.

Se veían realmente tiernos.


- ¿Estás seguro de querer quedarte conmigo unos días Minnie? - Preguntó Yoongi.

- Claro Yoonnie, mis padres nos dieron permiso. Ya soy mayor de edad, no estamos rompiendo ninguna ley, soy feliz contigo, quiero estar contigo siempre, me gusta... Tú me gustas - Con un poco de vergüenza por sus palabras, el chico dejó un dulce beso sobre la pálida mejilla de Min, quien mostró su emoción con su tierna gummy smile.

- Entonces estaremos aquí los días que quieras cariño, podremos salir a caminar, comer juntos, pasear en yate, dormir juntos cuanto el clima no sea muy favorable para salir, siempre tenemos temas de qué hablar, así que eso no será ningún problema.

- Me agrada la idea Yoon - Sonrió el menor.

Yoongi no había tenido ni una vez, una idea morbosa con su chico, sabía que Jimin seguía siendo mucho menor que él y aunque ahora era mayor de edad, esperaría a que su pequeño esté listo para tener intimidad, de lo contrario él se asegurará de respetarlo en cada segundo y minuto de su vida. Ama demasiado a Jimin como para forzarlo a nada.

Cuando llegaron a la linda cabaña que Min había alquilado durante aquella noche, pero que se aseguraría de hacerlo durante aquella semana. Yoongi bajo a su pequeño de su espalda y abrió la puerta, ambos entraron y de inmediato suspiraron.

Adentro era muy cálido, la chimenea regalaba un calor satisfactorio, era tan adecuado y cálido que deseaban recostarse sobre la cama y dormir profundamente con aquel increíble calor.

- Esto es hermoso Yoonnie - Aplaudió con emoción el chico, mientras se agachaba frente a la chimenea y colocaba sus manitos al frente, dándose calor.

La cabaña era tan poco común, toda de madera, incluido los muebles, era tradicional, una de las que casi no habían más. Por esa razón a Jimin le encantaba, ¡Él amaba las cabañas!, Era como un sueño hecho realidad para él, estar en una.

- Ven amor, hay que cenar - Llamo Yoongi mientras servía la cena en platos. Sabía que no hacía mucho la habían ido a dejar como él había indicado antes.

Jimin sonrió, le gustaba mucho que Yoongi lo llamará de aquella manera, aunque no tenía el suficiente valor de admitirlo, le encantaba.

Ambos tomaron asiento en la pequeña mesa de dos, con una vela aromática al centro, dos rosas de las cuales Jimin quedó encantado, haciéndole recordar a la bella historia que había leído antes y la cena estaba exquisita, más para ambos que morían de hambre desde hacía horas, pero hasta ese momento se daban cuenta.

- Tenía una sorpresa similar para ti Minnie, era en una cabaña, pero en un bosque que está a una hora y media de la ciudad, pero tuve inconvenientes con el lugar, al parecer no prepararon nada, así que tuve que buscar algo diferente y encontré esta playa, se que amas estos lugares así...

- Me encanta Yoon, aún si me hubieras llevado a un puesto de comida rápida, hubiera sido feliz, mientras estés conmigo, siempre será perfecto - Yoongi sintió su corazón derretirse de amor por su pequeño, en verdad lo amaba.

- Ten, este es tu regalo - Obsequio el mayor, una vez terminaron la cena.

- Yoon, con la cena, la cabaña era más que suficiente, no debiste...

- Minnie, no digas nada y ábrelo, no pienses en gastos ni nada parecido, solo ábrelo y disfruta el momento cariño - Jimin sonrió y asintió.


Al abrir el regalo que de encontraba envuelto en un hermoso papel en color negro con un moño en naranja, que Jimin supo que era un libro por la forma que tenía, pero la sorpresa fue mayor cuando vio que era la primer copia impresa de su primer libro. El Omega de la mafia.

- No puede ser - Dijo con asombro - Es... ¡Es mi libro Yoon! - Grito con emoción, felicidad, agradecimiento.

Jimin no creyó que su libro saliera tan pronto, trabajo mucho tiempo en el y tenerlo entre sus manos, de forma física era el mejor regalo que pudo haber recibido en sus 18 años de vida.

Las lágrimas se acumularon en sus ojitos, un tierno puchero se formó en sus labios, abrió el libro y pudo ver una fotografía de él, con su nombre como autor único de aquel increíble libro, era tan increíble que sintió la primer lágrima ser derramada de sus ojitos.

Elevó la vista queriendo agradecerle a su novio, pero las palabras parecían no querer salir de sus labios. Yoongi al ver aquel tierno puchero y esas lágrimas acumuladas en sus ojitos y siendo derramada una tras otra, sonrió con ternura y abrazo a su pequeño bebé.

- ¿No te gusto cariño? - Preguntó, aún sabiendo que a su pequeño le encantó. Jimin asintió, puesto que las palabras seguían sin querer salir - Ya mi bebé, te mereces esto y más, eres increíble, la historia es... Simplemente perfecta, así que quise sacarla antes únicamente para ti, eres el único en tener la copia original.

Yoongi abrazo a su pequeño chico, escuchando los sollozos de felicidad de este. No pudo evitar reír bajo, en verdad que Jimin era una masita de amor y ternura y le alegraba mucho poder ser él quien le obsequie algo por lo que su pequeño tardo mucho y se esforzó.

- G-racias Yoonnie... - Dijo entre hipidos el menor.

- No tienes que agradecer amor - Min beso la frente de su pequeño y lo consoló durante minutos.

Le susurraba palabras lindas y tiernas, le regalaba uno que otro beso en su pequeña naricita, en su frente, mejillas, párpados y labios, hasta que logró calmarlo y hacerlo sonreír. Así se mantuvieron durante largos minutos, sin darse cuenta que las horas trascurrian, tenían mucho tiempo para darse cariño.

- Yoonnie - Llamo el menor, elevando la vista hacía su amado, quien le prestó toda la atención del mundo.

- Dime pequeño de mi vida - Jimin sonrió y se sonrojo.

- Eres el mejor de todos, te amo - Susurró el chico. Min se emocionó tanto, puesto que no muy seguido ocurría que Jimin le dijera te amo primero.

- Te amo mi pequeño chico - Respondió, mientras unía sus labios con los del menor.

El beso era tierno, como todos, siempre eran cálidos, amorosos y llenos de amor. Se mantuvieron así durante unos minutos, hasta que sin darse cuenta, el beso y los movimientos subieron un poco de tono.

Ni Jimin ni Yoongi fueron conscientes del momento en el que el menor se subió a orcajadas sobre su novio.

El beso fue subiendo de tono, mientras sus movimientos y caricias acompañaban a tan apasionados movimientos de labios. Ambos estaban completamente nublados y cegados por el momento, que no fue hasta que Jimin soltó el primer gemido que ambos fueron conscientes de tal situación.

Jimin sintió vergüenza inmediata. Por lo que se separó y se puso de pie rápidamente, alejándose de su novio, mientras tocaba sus labios y cerraba sus ojitos, sintiendo todo su rostro arder en vergüenza. ¡Él no era así!, Pensaba.

Por otro lado, Min se recriminó mentalmente por haber perdido el control, él quería ir lento, hasta su chico se sienta seguro y preparado, no creyó que ninguno se daría cuenta antes de la situación en el momento en que el beso empezó a subir de tono.

Yoongi se puso de pie y tomo aire antes de acercarse a Jimin y abrazarlo por detrás, oculto su rostro en el cuello de este, sintiendo al instante como el chico se tensaba, sabía que Jimin moriría de vergüenza.

- Lo lamento cielo, no fue mi intención propasarme, te prometo que no volverá a suceder, sabes que te respeto y jamás sería capaz de forzarte a nada que no quieras cariño - Decía el mayor.

Sin embargo, jamás espero escuchar las palabfas que Jimin dijo, lo dejo tan asombrado que creyó haber escuchado mal.

- ¿Qué... Dijiste Minnie? - Preguntó mientras volteaba a su chico.

Jimin tenía la mirada gacha, solo dijo lo que sentía, el tener confianza con Yoongi, requería también siempre decir la verdad. Ellos siempre habian sido muy sinceros uno con el otro, ¿Por qué no también en esta ocasión?, En algún momento el tema debía salir entre ellos y Jimin realmente estaba siendo muy honesto.

- Q-ué.... Yo quiero... Estar contigo Yoon... - Susurró, mientras elevaba la vista.

Yoongi tenía los ojos muy abiertos. Jamás creyó que aquellas palabras llegarán a salir de los labios de Jimin tan pronto. ¡Su chico era muy tímido muchas veces! Pero debía admitir que las palabras le agradaron mucho, ¿Como no?, Si Jimin estaba siendo sincero con él.

- ¿Estás seguro Minnie? - Preguntó para asegurarse de no ver a su pequeño forzado a nada, aunque su mirada no demostraba nada de aquello.

- Estoy seguro Yoon - Dijo con más seguridad el chico - Yo quiero estar contigo, ahora... Esta noche - Sus mejillas ardían en vergüenza, pero realmente lo deseaba.

- Minnie... - Min moriría en cualquier momento - Sabes que esto es delicado, ¿No? - Jimin asintió - Sabes que... Dolerá un poco, ¿Verdad? - El chico volvió asentir - Y sabes que... Esto es precipitado, ¿No es así?

- Lo sé Yoongi, se que... Apenas cumplo la mayoría de edad, se muy bien que el tema es delicado, se que es muy precipitado o muy pronto, se que muy probablemente dolerá, pero... Sabes tú qué yo confío ciegamente en ti, ¿Verdad?

Entonces Min no tuvo ninguna duda en que Jimin estaba preparado, en que su lindo y tierno chico será suyo de todas las formas posibles en muy poco tiempo. Yoongi sonrió y atrajo hacia sus brazos a su amado Minnie, beso su frente y acarició su cabello.

- Se que confías en mí cariño, así que haré que está noche sea mucho más especial e inolvidable para ti mi cielo.

Dichas aquellas palabras Min unió sus labios en un hambriento y apasionado beso con su chico, un beso que no solían darse mucho, pero que deseaban más que nadie poder hacerlo.

Jimin apretó sus puñitos sobre la camisa de su novio, le encantaba aquellos besos con Min, eran realmente mágicos, amaba sentir como Yoongi lo besaba con tanta pasión y anhelo, como si todos fueran el primer beso.

Dicho beso subía de intensidad a cada segundo, hasta que sus manos no pudieron detenerse y tocar más de cada uno. Yoongi bajo sus manos hasta el muy prominente y atractivo trasero de su chico, quien suspiro de gusto cuando sintió tal toque. Mientras esté no se quedaba atrás, aún si no se atrevía a tocar a su novio como él lo hacía, sus manitas se aferraban al cabello de este, disfrutando cada toque.

Mientras sus apasionados besos y toques se mantenían subiendo de tono, Min fue avanzando junto a su chico hasta la recámara que se encontraba en aquella pequeña cabaña.

Jimin sintió como sus piernas chocaban con la cama, pero estaba tan concentrado devorando los labios de su amado que no le prestó mucho importancia. Yoongi por otro lado, fue metiendo sus manos bajo la sudadera y camisa del menor, pudo tocar aquel marcado y perfecto abdomen. El mayor no perdió el tiempo en irse deshaciendo prenda por prenda del chico, hasta dejarlo únicamente con su rompa interior, claro que Jimin moría de la vergüenza a cada segundo, pero como él mismo dijo. Confía ciegamente en su novio.

Yoongi se deshizo de su propia ropa, bajo la atenta mirada de Jimin, quien aunque pareciera inocente en muchas cosas, no lo era mucho. El leer libros también puede eliminar todo rastro de inocencia, así que estaba disfrutando del espectáculo.

Ambos se encontraban solo en boxer. Yoongi llevo sus manos hasta el elástico de dicha prenda de su novio, quien no se movió, solo se dejaba ser. El mayor bajo el bóxer del chico dejándolo completamente desnudo frente a él. Jimin parecía tomatito de sus mejillas pero debía admitir que le encantaba todo.

Min regreso a los apasionados y fervientes besos, apegandose más al chico, tocando su voluminoso trasero, escuchando los jadeos de este, que se estaban convirtiendo en uno de sus sonidos favoritos. Yoongi fue recostando a Jimin sobre la cama, hasta quedar entre medio de las piernas de este, no sin antes deshacerse de su única prenda también.

Ambos sentían sus pieles unirse, ambos sintieron escalofrío, pero ambos estaban disfrutando del momento.

Jimin inconscientemente movía sus caderas, no resistía un segundo más. Quería sentir más, deseaba y necesitaba mucho más de su amado novio, pero también sabía que debía ser paciente y saber controlarse. Yoongi daba pequeñas embestidas, solo sentían sus miembros rosarse y vaya que les encantaba.

- A-mor - Llamo entre jadeos el mayor - Debo... Prepararte antes - Susurró sobre el oído de este, dejando un húmedo beso sobre su cuello.

Jimin gimió y levantó sus caderas un poco, chocando con las de Yoongi. Min gruñó levemente, en verdad le había encantado aquel movimiento, su chico se retorcia debajo de él y ese apenas era el comienzo de su noche de pasión.

- H-azlo... Mgh~ - Jadeo el chico.

Yoongi sonrió y siguió con sus húmedos besos. Fue bajando lentamente pasando por las clavículas de su sexy chico, por el abdomen de este mismo, hasta llegar al vientre y muy cerca de su miembro en el cual no perdió el tiempo de pasar una lenta y caliente lamida, escuchando el gutural gemido de su novio, el cual lo dejo encantado.

Min abrió lentamente las piernas de Jimin, sentía que estaba frente al paraíso, a un mundo de ángeles y su amado era el protagonista. Jimin era perfecto.

- Te haré sentir bien cariño - Dijo antes de pasar una, dos, tres lamidas sobre la entrada del menor.

Jimin gemía fuertemente. Aferrándose con todas sus fuerzas a la sábana, elevaba sus caderas ante tan increíble satisfacción. Su novio se lo estaba haciendo perfecto y aún no existía ningún tipo de penetración. Aunque claro, Min no perdió mucho el tiempo en aquello.

Cuando Min sintió que había humedecido lo suficiente a su chico, fue metiendo su lengua poco a poco, esuchaba los quejidos dolorosos de su pequeño, sabía que le dolería o le resultaría incómodo, pero parecía que Jimin se estaba acomplando bastante bien, eso solo quería decir que Yoongi lo estaba preparando de la forma correcta.

- D-uele... Mgh~ - Se quejó el chico.

- Lo sé cariño, lo sé - Respondió el mayor sin detener sus movimientos.

Optó por humedecer bastante bien sus dedos e irlos introduciendo uno a uno, preparando lo mejor que podía a su chico. No tenía lubricante, así que le tocaba hacerlo él mismo, pero vaya que era una de las sensaciones más increíble.

Al cabo de unos minutos, sintió que su chico estaba perfectamente preparado para él, Jimin ya era consciente del tamaño que tenía Yoongi y como el momento lo ameritaba, ansiaba sentirlo completamente.

- Minnie - Llamo con un poco de preocupación el mayor - No tengo... Preservativos.

- Yoongi... Hemos llegado hasta aquí cielo, ¿En verdad te detendras solo por no tener un condón?, Estoy bien con ello, ya te lo dije. Confío en ti.

Jimin acariciaba el rostro de su novio, mientras le sonría. Yoongi agradeció enormemente que su chico confíe plenamente en él. Tenía muchos años sin tener relaciones, mucho menos con un hombre, pero vaya que necesitaba sentir a su chico como debe ser.

Min alineó su prominente miembro sobre la entrada de su chico y acerco su rostro al de este, besando sus labios tan apasionados como al inicio.

- Tendré cuidado cielo, pero dime si duele - Susurró.

Jimin asintió. Pero sus labios se abrieron cuando fue sintiendo como el miembro de Yoongi iba entrando lentamente en su cavidad anal. Min se detenía cada cierto segundo, sabía que aún si lo había preparado bastante bien, le dolería, puesto que era su primera vez, claramente sería muy cuidadoso.

- ¡Mgh!~ - Gimió fuertemente el menor.

- ¿Duele cielo? - Preguntó Min, un poco preocupado por ello.

- U-n poco... Pero, Ah~ se siente... Increíble - Respondió. Yoongi río y se alivio de cierta manera al escucharlo.

Yoongi entro completamente en su chico. Se mantuvieron en la misma posición durante largos minutos, uno acostumbrándose al otro.

- Yoon - Susurró Jimin, admirando los ojos gatunos de su amado - Me encantas, ¿Sabías? - Min sonrió ladino y asintió.

- Y tú a mí cariño - Unieron sus labios.

En medio del beso, las embestidas dieron inicio, eran lentas, delicadas, con una pizca de dolor de parte de Jimin, pero realmente fascinate, una sensación tan increíble, tan satisfactorio que no querían acabar. Las estocadas fueron subiendo de nivel poco a poco, convirtiéndose en rápidas y mucho más placenteras.

- ¡Oh por la santa mierda! - Si, Jimin realmente lo estaba disfrutando.

Yoongi no pudo evitar reír y aumentar el ritmo mientras devoraba todo el cuello y labios de su novio, era increíble todas las sensaciones tan exquisitas que sus cuerpos estaban experimentando. Min disfrutaba como las paredes de su chico lo apretaban fan deliciosamente, mientras Jimin disfrutaba como nadie cada embestida, cada movimiento. Sus pieles creaban un sonido chocante, obseno, pero maravilloso, sus cuerpos sudorosos y apasionantes estaban creando arte en aquella cama.

- Ou, Ah~ Y-oon... Mgh~ - En definitiva Jimin querrá hacerlo más seguido.

- J-imin, Ah~ - Sus gemidos eran la viva muestra que estaban encantados, fascinados y satisfechos con su encuentro carnal y placentero.

Quién diría que hacer el amor fuese tan fascinante, ¿No?

Yoongi gruñía y gemía fuertemente, siendo sus sonidos acompañados por los de Jimin, quien no se quedaba atrás a expresar con sonidos y palabras lo maravillado que se encontraba.

Hasta que ambos no resistieron más y terminaron corriendose al unísono. Jimin sobre sus abdomenes y Min al no lograr salir antes, dentro de su chico. Era la sensación más alucinante de todas.

Sus alientos eran entrecortados, acelerados, cansinos, pero totalmente satisfechos. Yoongi se dejó caer sobre su chico, aún dentro de este, sintiendo como su atractivo chico acariciaba su húmedo cabello, y repartía besos sobre su cien.

Yoongi beso el cuello de su chico y salió lentamente de él, en su mente sabía que no debió haberse corrido dentro, pero el placer era tan grande que no pudo contenerse.

- Lamento haberme venido dentro de ti Minnie...

- Yoon - Detuvo el chico - Esas no son las palabras que esperaba en este momento. ¿Sabes que tan increíble me siento ahora? - Dijo sin pena alguna.

Min sonrió ladino y beso los labios de su chico, en verdad amaba besarlos. Eran siempre tan esponjosos y deliciosos, tan adictivos.

- Me encantas mi amor - Susurró sobre los gruesos belfos.

- Y tú me encantas a mi cariño - Respondió el chico.

Cómo cualquier otra pareja, deberían haberse limpiado después del acto carnal, pero ellos se sentían demasiado cómodos, así que lo dejaron pasar.

Yoongi atrajo hacia su pecho a su hermoso chico. Jimin se aferró a este y dejó sus labios sobre el cuello de su novio, suspiró cansado pero satisfecho, escuchando también el suspiro de Min.

- Mi no tan pequeño Minnie - Se escuchó al mayor - Me encantas tanto, me fascinas, te amo demasiado.

- Siempre seguiré siendo tu pequeño, Yoonnie - Respondió el chico, Yoongi río y asintió - Tú me encantas a mi. Te amo mucho.

Sus cuerpos eran como un imán, se atraían uno al otro. Estaban tan unidos que no quedaba ni un solo hueco entre ellos.

- Yoonnie~ - Llamo el chico - ¿Podemos hacerlo otra vez? - Min carcajeo por tales palabras de su chico.

Jamás creyó conocer tan pronto aquel lado de Jimin. Era tan fascinante que claramente no se negaría, tenía energías para más y estaba más que claro que ambos disfrutarían cuántas veces sus cuerpos resistan y lo necesiten aquella noche. Después de todo, su nuevo hobby era hacer el amor.

♡♡

A la mañana siguiente, ambos despertaron casi al mismo tiempo. Jimin sintió un malestar en su espalda baja, dedujo la razón rápidamente, pero no le importaba, quizá hasta deseé una ronda matutina. Min gruñó como cada mañana al despertar, algo que le causó gracia al menor.

- ¿Siempre despiertas pareciendo un gatito gruñón? - Preguntó Jimin con voz levemente ronca. Min sonrió al instante.

- Buenos días amor de mi vida - La gruesa, imponente y ronca voz de Min, embobo a Jimin.

- Buenos días cariño - Jimin beso los labios de su novio siendo correspondido. Importandoles poco su mal aliento mañanero.

Si así despertaría cada mañana, ambos deseaban hacerlo durante años, o toda su vida y las que siguen.

La pareja disfruto cada día durante aquella semana se estuvieron juntos en aquella cabaña cerca de la playa. Tal y como dijeron, salían a pasear, admiraban la playa juntos, los pocos días lluviosos pasaban con una taza de chocolate en manos o quizá haciendo el amor en toda la habitación o el sofá.

Jimin es un chico joven con un gran apetito sexual y Min un hombre que estaba dispuesto a complacerlo cuántas veces su novio deseé.

Así hasta que llegó el momento de regresar a sus casas. Jimin no deseaba separarse de su novio, eso era una tortura para él, pero debían hacerlo, el chico debía hacer examen de admisión para la Universidad, mientras Min tenía trabajo que atender.

Dos años de su relación y todo iba de maravilla. El primer año, se mantuvieron viviendo cada quien en su casa, solían visitarse todos los días, con algunas excepciones, cuando realmente algo se los impedía. Jimin se quedaba en casa de Yoongi cada que podía y quería y no siempre solo para dormir, aunque muchas de ellas sí.

El segundo año, de su relación cuando Jimin cumplió los 20 años. Ambos decidieron vivir juntos, por sugerencia de los Park, ya que Jimin parecía que vivía más con Yoongi que con ellos y como siempre, los Park solían viajar mucho, así que decidieron dejar ir a su pequeño retoño.

Jimin y Yoongi eran felices viviendo juntos. Se coordinaban tan bien, su relación eran tan increíble, perfecta, que era envidiada, pero la confianza entre ellos eran tan sana, tan real y sincera que jamás dudaban de ellos. Sabían trabajar en equipo, sabían cómo llevar su relación sin que fuese tóxica o dañina.

Ellos se complementaban a la perfección.

- ¡Amor, ya llegué! - Se escuchó el grito de Jimin.

- ¡En la cocina! - Respondió Yoongi.

Jimin sonrió y se encaminó hasta la cocina, donde vio a su amado novio de espaldas preparando la cena. Rápidamente se apegó a la espalda de este y suspiró dejando un dulce beso sobre la mejilla de su amado.

- Hola pequeño - Saludo Min.

- Hola mi amado - Regreso el saludo Park.

- ¿Cómo te fue en la Universidad?, ¿Salió bien tu proyecto? - Min siempre era tan atento, que cada día lo enamoraba más.

- Me fue de maravilla gracias a tu ayuda cielo. ¿Qué cocinas?, Tengo mucho hambre.

Así era cada día. cómo se mencionó antes, su relación era perfecta, ambos se sabían complementar. Un día Jimin preparaba la cena y recibía a Min, el otro día era al contrario, ellos siempre sabían cómo sobrellevar su casa, su hogar y su vida juntos.

- Yoonnie - El menor volteó a su pareja cuando esté apagó la estufa y le sonrió mientras acariciaba sus mejillas mientras admiraba su belleza.

- Dime cariño mío - Sonrió Min, tomando la cadera de su chico y sentandolo sobre la encimera de la cocina.

- Gracias por haber llegado a mi vida, gracias por haber sido mi profesor, gracias por haberte metido en mi vida, gracias por fijarte en mi, por enamorarte de mi, gracias... Por ser el único amor de mi vida. Te amo Min Yoongi - Dijo con sinceridad el menor.

Yoongi mantenía una cálida sonrisa en su rostro, acariciando la cintura de su chico, mientras se encontraba entre las piernas de este.

- Gracias a ti mi pequeño chico, por aparecer en mi vida, gracias por haber creado insconentemente interés en ti. Gracias por fijarte en mi cielo, gracias por ser ese misterioso chico de la esquina, gracias por amarme. Te amo Park Jimin - Respondió con amor el mayor.

Los labios de ambos se unieron en sus tan atrayentes, cálidos y amorosos besos. Cada uno de ellos siempre era especial, unido y dulce.

Su amor era único y especial.

Aún si se conocieron siendo un profesor de literatura y alumno, crearon el vínculo más fuerte y real.

Aún si la relación parecía ser prohibida, ellos supieron manejarla.

Aún si se presentaron grandes y dolorosos problemas y tropiezos, ellos supieron sobre llevarlos y salir adelante.

Las edades no importa en el amor, siempre y cuando exista el respeto y la confianza.

Cómo existía, existe y existirá entre Park Jimin y Min Yoongi.

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¡Hola amigos!

¿Qué les pareció el epílogo?

¡Mil gracias por su lindo apoyo!💜

En verdad les agradezco de todo corazón a los que llegaron hasta aquí, estubieron siempre pendientes de cada actualización, que leyeron desde el inicio o avanzado, no importa, lo importante es que hayan disfrutado esta corta historia.

Espero de todo corazón que la hayan amado tanto como yo ame escribirla. No fueron capítulos largos y por esa razón les traje capítulos bastante largos en los últimos, compensando lo que demoré en actualizar.

Una vez más llegó al final de una historia y me complace saber que a muchos les encantó, me doy por bien servida con su lindo apoyo.

¡Los amo!

Traté de escribir un Lemon, la obra lo ameritaba, fue un poco detallado, pero trate de agregar todo lo necesario, espero haberlo logrado. En lo personal ame escribir el epílogo.

Repsondere sus preguntas referentes a esta obra...

[Aquí ↓]


¡Nos leemos pronto en mis otras obras o nuevos proyectos!


Bye💜


No olviden dejar su estrellita si les gusto El chico de la esquina ⭐

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