Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 19


Ciertamente, mi olfato no puede fallarme, él tomó esta dirección y no hay duda de eso... Se nota como no le gusta andar tanto en los pueblos, sino al contrario, intenta internarse en el bosque. El chico de la cicatriz no reprochaba nada, cuando lo conocí, él también era así, no se dejaba ver tan fácilmente como lo hace ahora, desde que llegué a su vida él ha cambiado, no es el mismo y eso es notable. Aunque debo admitir que desde que salimos del palacio, su posición ha sido muy firme y cortante, no me he atrevido a preguntar el POR QUÉ de su actitud.

En el fondo creo que es porque tiene miedo de encontrarse con alguien de su pasado, alguien que pueda señalarlo y hacerlo ver como una Mala Persona, alguien que lo lastime nuevamente y lo haga ponerse nuevamente como era al comienzo, créanme que si eso llegase a pasar en mi presencia... No sé como voy a reaccionar.

— Hisui — Dije para romper el silencio — ¿En que piensas?

Riku nos observa y se aparta de nosotros.

— Cosas — Me mira de reojo — No tiene importancia.

— Si la tiene — Busco su mirada — Estas muy serio y eso me preocupa.

— Moroha — Su voz ronca se hace presente y se coloca en mi una expresión de sorpresa — Tengo un mal presentimiento.

Mi expresión de sorpresa pasó a preocupación, ya que sé perfectamente que cuando El Chico de la Cicatriz tiene un mal presentimiento, es porque de verdad va a pasar algo... Debo estar alerta por cualquier cosa.

— No va a pasar nada — Intentaba darle confianza — Y si pasa... Lo enfrentaremos juntos.

Me observó detenidamente y ahuecando mi rostro con sus manos, me dijo con firmeza: — No voy a dejar que nada malo te pase — Me mira a los ojos fijamente — Te lo prometí y voy a cumplirlo.

— Hisui...

Por un segundo, creí que me iba a besar, pero antes de que llegaran a concretar, Riku nos interrumpe diciendo que debíamos apurarnos a salir de este lugar a lo cual asentimos sin renegar nada. Resulta y acontece que mi olfato ya no solo capta el olor de Sesshomaru, sino que hay una mezcla de olores extraños... Olores que no soy capaz de reconocer a ciencia cierta, son humanos, pero... Tienen consigo algo que intimida, algo que hace que quieras HUIR de ellos.

— Están aquí — Pensaba Hisui — Están aquí y necesito alejarme LO MÁS QUE PUEDA.

Hisui no escuchaba a nadie, solo se limitaba a avanzar y avanzar hasta salir del bosque... Y una vez que estuvimos fuera... Riku y él se frenaron de golpe, troto para alcanzarlo y cuando echo la vista hacia adelante me fijo en lo que estaban viendo y al darme cuenta de lo que pasaba... Me he quedado helada. Nanasuke y los exterminadores se encontraban en frente de nosotros... Hisui se volteó casi al instante y echo a andar sobre sus pasos, no fue sino hasta que Nanasuke me reconoció y sin pensarlo  dos veces me llamó pero no le hice caso.

— ¡MOROHA! — Insistía — ¡NO TE VAYAS! 

Mi reacción fue correr al instante ya que Riku se había ido detrás de él... Soy consciente de que pudieron haberse dado cuenta, de que quizás pudieron reconocer a Hisui y por ende, decirle a Setsuna... Frené de golpe al ver su insistencia y no quería tampoco que llegaran a donde estaba Hisui quien se encontraba muy cerca de por si. Giré sobre mis talones para encararlo y sin pensarlo dos veces le pregunté de malas ganas:

— ¿QUÉ QUIERES? — Resoplé fuertemente por la nariz.

— No puedo creer que estés con esa gente ahora — Una expresión preocupada se dibuja en su rostro — ¿Estás bien? ¿Te han hecho algo?

Sin pensarlo dos veces estrellé mi mano contra su cara con mucha fuerza, este se sorprendió de mi reacción pero no se atrevía a decirme algo al respecto.

— Ese no es asunto tuyo Nanasuke — Espeto.

— Esa gente es peligrosa — Toma mi mano y me suelto de inmediato.

— Esa gente — Decía con mucha seguridad — Fue la única capaz de sacarme de mi mundo de mierda. Así que no te atrevas a hablar mal de ellos o no respondo.

— Voy a llevarte a casa Moroha — Me toma nuevamente, pero ahora con mucha más fuerza.

Empezamos un forcejeo ya que yo me resistía a irme con ellos, Rokuta me cargó en su hombro sin pensarlo dos veces para así empezar a caminar hacia donde se encontraba el jefe Kohaku. Pensé que lo haría, pero justo antes de que pudiesen hacerlo por completo... — ¡BAJALA ROKUTA! — Una familiar voz truena por todo el lugar. El muchacho volteó en dirección hacia el sitio de donde provenía la voz... Mis ojos distinguieron a lo lejos una figura imponente y vivaz, esa figura que podría reconocer a donde sea que vaya.

Hisui, hizo acto de presencia en aquel lugar y Riku venía detrás de él sin chistar... Estaba atónita ya que no podía creer que se haya atrevido a salir de ahí — Entonces si era cierto eso de que sería capaz de hacer cualquier cosa por mí — Pensaba. 

— ¡HE DICHO QUE LA BAJES YA! — Se para frente a nosotros para así dejarse ver por completo.

Rokuta estaba tenso, puedo asegurarles que se huele el miedo en él... Estaba paralizado, pero se obligó a cumplir la orden que le había dado El Chico de la Cicatriz; una vez en el suelo, corrí y me coloqué a su lado de inmediato, Riku tira de mi brazo y no me soltó más...

— No puede ser — Dijo Nanasuke — No puedes ser tu.

— Si lo soy — Dice imponente y luego lanza una mirada de furia hacia los demás.

— Hisui no vayas a cometer una locura — Susurró Riku.

Todo el ambiente se ha puesto muy tenso, por un momento, creí que Hisui se descontrolaría y lo golpearía... Pero simplemente no ha hecho nada al respecto, quizás está intentando contenerse para no asustarme, no sé que piensa hacer, solo espero que no haga una locura.

— ¡No tienes vergüenza si quiera! — Decía Rokuta enfadado — Todo el mundo sabe lo que hiciste y aún así te atreves a gritarnos así.

— Yo no la maté — Espeto — ¡YO NO LO HICE!

Me sentía impotente ya que sabía perfectamente que él no hubiera hecho daño a su hermana favorita, yo le creo el hecho de que fue mi tío quien la asesinó sin pudor, creo en SU INOCENCIA. Por eso es que siento rabia y ganas de golpearlo por hablar así de él.

— Quiero que dejes a nuestra amiga en paz — Dice Nanasuke mientras me mira — No le vayas a hacer daño.

Me suelto bruscamente de Riku, estaba muy molesta ya que ¿QUIÉN SE CREE QUE ES PARA DECIDIR POR MÍ? Hisui no sería capaz de lastimarme, él no sería capaz de golpearme siquiera... Gracias a él mi vida dejó de ser un infierno y no voy a permitir que OTRO venga a insultar a la única persona que se ha preocupado por mí.

— ¿Y sino lo hago QUE? — Empuña sus manos con mucha fuerza.

— Moroha — Me dice — Es mejor que tengas cuidado, si le das la espalda puede que te atraviese con una espada.

Y fue así como empezó el caos.

Hisui no lo pensó dos veces y atestó un golpe fuerte en la cara de Nanasuke, y este a ciegas responde ante la agresión. Todos se abalanzaron hacia ellos para intentar separarlos pero era imposible hacer que pararan, había mucha ira y odio de por medio, mezclada con la brutalidad y la fuerza que ambos poseen; pero yo sabía que lo que realmente quería Nanasuke era que Hisui quedara mal ante su propio tío para así negarle toda clase de perdón y que no volviese a aparecer nunca más.

En vista de aquello, decido intervenir de inmediato, sujeté lo más fuerte que pude uno de los brazos de Hisui pero este se liberó de mi agarre con un solo movimiento, volví a intentarlo pero me fue inútil, cuando El Chico de la Cicatriz se vuelve VIOLENTO es muy difícil poder controlar a ese MONSTRUO que se esconde en su interior.

Todo se volvía mucho más intenso cada vez, hasta que de repente se mete en el medio el líder del grupo, Kohaku quedó en medio de ellos dos, yo le sujeté el brazo izquierdo a  Hisui lo más fuerte que pudiera para no dejarlo continuar y fue que paró.

— Basta sobrino — Dijo con serenidad — No puedes seguir así.

No responde.

— Nanasuke, vete de aquí con los demás — Dio una orden.

— Pero...

— ¡OBEDECE! — Su voz truena en el ambiente.

Sin decir ni una sola palabra, se retiró junto con sus compañeros, dejándonos a nosotros y a él en aquel lugar. Hisui seguía imponente, pareciera que no quiere ceder ante la impetuosa necesidad de hablarle a su tío, simplemente no quiere ceder ante alguien que claramente quiere culparlo de un delito que no cometió.

— ¿Por qué haces esto? — Pregunta el estimado personaje.

Sigue en silencio.

— Hisui, sabes que todo te...

— Tu sabías que era inocente — Dice fuertemente — Y no hiciste nada para ayudarme.

No resistí más el impulso y me vi obligada a decir algo, simplemente no podía permitir que se metan con la persona que amo, sé que este es un asunto que no me incumbe, pero ¡BASTA YA! Él no está solo, ahora estamos juntos y por ende me veo obligada a ayudarlo.

— No te atrevas a culparlo Kohaku-kuh — Me coloco frente a él — Hisui no es una mala persona.

— Moroha, solo queremos protegerte — Decía — No quiero que termines equivocándote.

— ¿Crees que alguien así podría apiadarse de una niña a la que claramente iban a destruir? — Decía en un hilo de voz.

— Moroha basta — Decía Hisui — No tienes que hacer esto.

— ¡SI TENGO QUE HACERLO! — Espeto — Ustedes son los que están equivocados, este Monstruo lo crearon ustedes... Y ¿Sabes algo? ESE MONSTRUO fue el único que ha hecho mi mundo mejor.

Kohaku se ha quedado perplejo ante mi comentario, creo que no se esperaba que aún hubiera alguien en este mundo que fuera capaz de defenderlo, desde hace años se encargaron de que toda a región donde vivía LO ODIARA por algo que no hizo. Seguía en mi postura imponente ante él, no voy a permitir que le haga daño, no voy a permitir que le toquen un solo cabello a mi amado.

— Solo aléjate de nosotros — Dijo Kohaku — No eres Bienvenido.

— Piensa lo que se te pegue la gana — Espeta — Tu y tu PATETICA GENTE no me importan en lo más mínimo, hace mucho dejaron de ser mi FAMILIA.

— Hisui... — Dije sorprendida al escuchar esas palabras.

— Bien — Dijo, aunque a decir verdad, puedo notar como algo en él se había quebrado, creo que aunque lo niegue, si le afectó lo que su sobrino le acaba de decir, pero seamos realista un momento, a pesar de todo es su sobrino y el rechazo de tu propia sangre duele.

El Chico de la Cicatriz se ha dado la vuelta, tomé su brazo para luego mirar una vez más a Kohaku quien se encontraba mirandome fijamente a la distancia, yo volví a colocar la mirada en el camino para después soltar un suspiro largo y tendido. Rato después, decidimos que era necesario quedarnos aquí por lo que resta de la tarde y eso ME FRUSTRA ya que con ese inconveniente solo perdimos el tiempo y ya mi tío tiene que estar bien lejos.

Hisui se encontraba muy alterado por el encuentro de hace unos instantes, Riku no decía absolutamente nada al respecto, creo que sabe lo que va a pasar ahora, por ende Setsuna se va a enterar y puede ocasionar un problema grabe. Si les soy sincera eso me importa poco, yo no tuve la culpa de que Hisui se enamorara de mí, yo no tuve la culpa de amarlo como lo amo; de un momento a otro, se puso de pie y se apartó de nosotros...

Me acerqué a él pero me puso el alto de inmediato, lo cual a mí me sorprendió demasiado Necesito estar solo — Puso distancia entre nosotros. Retrocedí un par de pasos antes de darle la espalda y encaminarme hasta donde estaba Riku quien al verme así de nerviosa, se acercó y me dijo con suavidad:

— No te preocupes por él — Me sonríe un poco — Va a estar bien, no es la primera vez que lo hace.

— Es que... No sé porque me aleja si yo...

— Va a estar bien — Me asegura — Confía en él. Unos ojos color verde se posan sobre mí, su mirada me transmite mucha seguridad, parece que está empeñado en hacer que me tranquilice, aunque a decir verdad, es lo menos que puede hacer por mí en estos momentos.

Decidí por fin el esperarlo, a decir verdad me esta costando bastante, ya ha pasado mucho tiempo desde que se apartó de nosotros y eso me pone a sobre pensar... ¿Y si le pasó algo? ¿Estará bien? ¿QUE HABRÁ PASADO? Pero mi parte sensata me dice que debo tranquilizarme y esperarlo, que no me va a dejar sola y que va a regresar con nosotros en cualquier momento. Riku solo se limitó a observarme con el fin de verificar que estaba tranquila y que no cometiera una locura.

No sé cuanto tiempo ha pasado, pero ya me impacienté, así que puesta en pie, dije en voz alta:  — Voy a ir a buscarlo. Riku intentó detenerme pero yo lo aparté del medio y justo antes de alejarme del sitio en donde estaban mis cosas, me percaté de un familiar aroma el cual era de — Hisui. Corrí hasta él, quien al verme no dudó ni un segundo en estrecharme entre sus fuertes brazos; siento como una sensación de alivio recorre mi pecho, esta conmigo y está bien... Es lo que realmente me importa ahora.

— Pensé que...

— No iba a dejarte sola pequeña. Sus hermosos ojos grises se posan sobre mí al instante justo antes de continuar —  Y mucho menos con Riku. Rueda los ojos.

—  ¿QUÉ ESTÁS DICIENDO? — Dijo Riku algo indignado por el comentario. 

— Ya sabes — Bufó —  Así que silencio.

Una risa se me escapa de inmediato, no puedo creer que haya pasado algo así... No me digan que a estas alturas de la vida Hisui se haya puesto "CELOSO" de su mejor amigo, quiero creer que es actuado, así que no le voy a prestar mucha atención o voy a terminar haciendo preguntas que no debería ya que iniciarían una guerra. 


. . .


Ya es de mañana, el chico de la cicatriz se encontraba puesto en pie, listo para el viaje, mientras que Riku y yo apenas estábamos procesando que debíamos despertar bien, así que después de dar un par de estirones, por fin pude estar de pie y una vez guardadas mis cosas, me dirigí hacia donde se encontrada Hisui quien al verme, no dudó ni un instante en tomarme de la mano para luego tomar mi barbilla entre su mano libre, acortó rápidamente la distancia entre ambos y depositó en mis labios un tierno beso, el cual me estremeció por completo...

Cada vez que siento sus labios en los míos, para mí es como la primera vez que lo besé, se siente tan bien... Es que de por si, Hisui es el único que ha despertado en mí esta clase de emociones y siento que si el ya no está conmigo, jamás voy a experimentar algo así con otra persona. Me deja ir después de un momento y mirando en dirección hacia Riku, le hizo una seña para indicarle que ya debíamos avanzar, es mejor que nos apresuremos o será demasiado tarde.

 Estoy desconcertada, ya que hasta el día de ayer, estaba segura de que el olor de mi tío estaba en el ambiente, pero puedo asegurar que se ha esfumado por completo, el olor que hay ya es viejo... Eso quiere decir que se ha marchado, o que ha ocultado su esencia para no ser encontrado, eso nos complica nuestra búsqueda ya que solo estaríamos dando vueltas sin sentido alguno por el norte mientras él está en otro sitio muy tranquilo.



. . .


— Papá — Dice Setsuna algo confundida — ¿Qué haces aquí?

El imponente peli-plateado no responde ante aquella pregunta.

— Sabes que sigo molesta contigo por lo que ocasionaste la última vez que estuviste aquí — Lo mira con furia — Vete.

Le da la espalda sin siquiera decirle nada, sus pasos enérgicos se encaminan hacia afuera de la casita donde mora la castaña a la que le dice "hija", pero justo antes de desaparecer por completo, se voltea una vez más para mirar si su hija menor seguía adentro de la casa, pero al observar que se encontraba mirándolo desde la distancia, no dudó en decirle: — Perdóname — Para después desaparecer de un solo salto.

Las palabras de su padre retumbaron en el corazón de la Hanyo, tanto que sentía que iba a estallar en cualquier momento, ¿Acaso acaba de escucharle decir que "Lo perdone"? ¿Acaso está arrepentido de lo que hizo hace varios años? ¡Quien sabe! Pero ella no está segura de querer averiguarlo, no está segura de saber el verdadero motivo por el cual él está haciendo todo eso.



. . .


Pasamos el día entero buscando en lo que sería la última zona situada en el norte donde podría encontrarse mi tío pero... No encontramos ABSOLUTAMENTE NADA... Como les dije, es desconcertante, hemos llegado a pensar que ya no se encuentra aquí y lo mejor es que nos devolvamos a casa, nunca habíamos salido por tanto tiempo y no sabemos que podría estar pasando, ya que sabemos que Ryusei está buscando desesperadamente como ingresar al palacio a matarnos a todos, así que... Necesitamos poner todo en orden allá, sé que Haruka y los lobos están custodiando la zona, pero será mejor que volvamos.

— ¿Crees que sea correcto? — Pregunta Riku un poco confundido.

— Confío en el olfato de Moroha — Sisea un poco — Si ella dice que el aroma ya es viejo, es porque lo es y eso quiere decir que no esta.

— No es que no confíe en ella — Se apresura a aclarar — Es que... Es mejor esperar a ver que pasa.

— Algo me dice que debemos regresar — Insiste — Así que vamos a hacerlo.

Riku estaba muy en desacuerdo con la situación, él confía en que aún podemos encontrar a mi tío, pero Hisui por otro lado, no se encuentra muy convencido de ello... Tenemos una corazonada y no sabemos si se trata de algo bueno o malo... Solo esperemos que no sea algo de que lamentarnos después.




Riku se preparaba para abrir el portal, por ende necesita tranquilidad, como ya he mencionado en ocasiones anteriores, la concentración para hacer el portal es MUY IMPORTANTE si queremos que todo salga como lo hemos planeado. El Chico de la Cicatriz y yo le dimos espacio mientras caminábamos por allí, intentábamos no alejarnos demasiado para estar justo al momento en que se abriera el portal.

No paro de observar a Hisui, sigue frío y calculador conmigo, es como si estuviese perdido en sus pensamientos, desde que Kohaku habló con él, toda la alegría y bondad que irradiaba se ha desvanecido, como si el encontrarse de frente con algo de su pasado le haya hecho aún mas daño del que ya le había hecho, aunque a decir verdad, no es para menos lo que pasó ayer en la tarde.

Quiero decir algo, quiero hacerlo sentir mejor, quiero... Que se olvide de todo y de todos y que simplemente se quede a mi lado y cumplamos la misión que se nos ha encomendado desde un principio la cual es DESTRUIR A RYUSEI Y ENCONTRAR LA PERLA NEGRA

— Tranquilízate — Dijo sin mirarme a la cara siquiera — Todo va a estar bien.

— ¿Y tu? — Mi pregunta lo desconcierta un poco, pero no me detengo en absoluto. Sino que tomé un poco de aire y seguí con lo que decía — ¿Vas a estar bien?

Sus ojos color gris se encuentran con lo míos, he de admitir que cada vez que lo hace mi desnuda el alma, es como si arrancara cada trozo de mi coraza y me dejaran así... Totalmente desnuda ante él; no se crean, él parece disfrutarlo cada vez que lo hace, es como si lo hiciera a propósito solo para verme INDEFENSA ante él.

Seguidamente, tocó mi mejilla con mucha delicadeza, por obvias razones me he obligado a verlo a la cara, su expresión pasó de estar alterado a lucir un poco más tranquilo, supongo que quiere estarlo para así poder responder con cuidado lo que acabo de preguntar.

— Si lo estoy — Una sonrisa se dibuja en su rostro pero no toca sus ojos — Lo estoy porque tú estas conmigo ahora.

Una hilera de emociones se hacen presentes...

— Hisui...

— Solo tú haces que me sienta tranquilo — Suspira — Solo tú haces que esos malos recuerdos desaparezcan. Moroha, si ahora estoy serio es porque tengo un mal presentimiento y no quiero que se cumpla.

— Sea cual sea esa situación — Dije con firmeza — La vamos a afrontar juntos. Tomé su mano y le di un ligero apretón.


. . .


— Todo esto es desconcertante —  Bufó — Pareciera que se lo hubiera tragado la tierra.

— Sea como sea, no se nos va a escapar — Golpea fuerte en la pared a su mano derecha. 

— Tiene que estar en alguna parte — Insistía Hiroshi — Yo digo que deben estar ocultos en algún campo de energía... ¿Pero donde?

— No seas tonto Hiroshi — Una voz profunda es desprendida de la garganta de aquel sujeto — No se han movido del lugar... 

— Pero...

Una imponente figura se ha puesto de pie, tiene piel blanca y una portentosa dentadura que deja visible unos colmillos brillosos; sus ojos color violeta se posan sobre el hombre asustado que se encuentra postrado en el suelo, la poca luz que toca sus cabellos negros con dorado en sus puntas y sus cuernos sobresalientes de su cabeza le dan un aspecto un tanto tenebroso; su vestimenta hace referencia a su poderío, siempre a oscuras, nunca colores alegres, posee una larga y portentosa espada con la cual mata a sus enemigos de un solo golpe y por ende todos ellos le tienen miedo. Ryusei se coloca aún mas cerca de su sirviente para así darle un fuerte golpe para decir a fuerte voz: — ¡CIERRA LA BOCA IMBÉCIL! — Lo toma por el kimono para así estremecerlo con mucha fuerza — ¡Deja de lamentarte como si fueras una niñita...! Consigue la forma de entrar a ese palacio, o sino ya sabes de lo que soy capaz Hiroshi.

— N-No se preocupe s-señor — Dijo mientras se moría del miedo y el dolor — Eso haré.

— Hisui me las va a pagar por haberme traicionado — Dice en su mente — Va a pagar MUY CARO, de eso estoy bien seguro.

Dicho esto, se alejó de él para captar todas y cada una de sus facciones y luego de soltar una risa larga y tendida en tono malévolo para así abandonar la habitación de una sola vez; su presencia es imprescindible, no se puede negar que ha pasado por algún lugar ya que este queda impregnado con su aroma y esencia, eso es lo que lo hace tan único y peligroso.


. . .


Ya era hora de irnos, Riku ya se encontraba listo para abrir el portal, decidimos que lo mejor era no llegar directo dentro del palacio ya que no sabíamos si Ryusei logró ingresar o no al lugar, así que es mejor prevenir que lamentar, Riku se puso en pie en medio del claro del bosque en el que nos encontramos. Dicho eso, procedió a tocar su zarcillo y con un movimiento de sus manos abrió el portar en dirección al portón trasero, todo estaba tranquilo... Así que, tomé la mano de Cicatriz fea y dando un salto, atravesamos el portal el cual se cerró justo después que caímos al suelo.

Lo primero que hice fue olfatear, no había olor extraño, así que procedí a acercarme al portón el cual se abrió de inmediato y uno de los guardias del palacio nos hizo entrar — Muchas gracias — Sonreí — ¿No hay alguna novedad? — Este negó de inmediato, solo nos dijo que se habían roto unas cosas en el pasillo del jardín central pero ya estaba todo arreglado como es debido... Les agradecimos por su trabajo y procedimos a entrar nuevamente, Misuri y Saory se encontraban bien, me alegra saber que se encuentran bien, ellas sin dudarlo me ayudaron a llevar mis cosas a la recámara, a veces me da pena que hagan eso, para mí son como mis hermanas y no me gusta verlas así, pero por más que les digo que no es necesario que lo hagan, ellas lo siguen haciendo, dicen que les gusta este trabajo y ya allí no puedo discutir.

Riku nos dice que va a ir a ver a su amada, necesita preguntarle unas cosas a Towa, quizás ella sepa algo, como puede que no, pero no hay que descartar la posibilidad de saber si ella sabe del paradero de su padre... Yo bromeé con él, diciéndole que solo buscaba una excusa para verse con ella, pero este solo rodó los ojos, eso me dio a entender que estaba en lo cierto — Solo no vayas a dejarte ver por alguien de Ryusei — Dije.

— Ellos no me harán nada — Dijo mientras se ponía la mano en la cabeza en señal de fastidio — A ti es que no te pueden ver. 

— Como sea, mejor me voy a mi habitación — Bufé. 

— Gracias al cielo — Dijo dando un suspiro de alivio — Yo no estaré aquí. 

— ¿Pero que te...? 

Riku se ríe al darse cuenta de la expresión que tengo, pero es que como se le ocurre que yo de verdad voy a hacer eso ahora, cuando es mas importante encontrar a mi tío...

— No creas que no me di cuenta del besote que te dio allá en el norte —  Se ríe — Aprovecha que voy a salir... No quiero escucharlos. 

— ¡SAL DE MI VISTA! — Dije toda roja por el comentario. Él se fue de inmediato, sabía que si no lo hacía iba a haber problemas.

¿QUE LE SUCEDE? Si besé a Hisui, pero... No es que quisiéramos llegar a eso... Ahorita hay cosas más importantes por hacer, necesitamos concentrarnos en esto para poder lograrlo lo más pronto posible, aunque no les niego que si se da la oportunidad... No la voy a desaprovechar, tenemos días de no estar junto y ya lo extraño de esa forma, ¡BUENO! Ya habrá tiempo para eso.




Han pasado un par de horas desde que llegamos, estuve un rato en mi habitación, pero cuando me aburrí, decidí ir a ver que estaba haciendo El Chico de la Cicatriz, al principio no lo encontraba, sé que no ha salido del palacio porque su olor lo delata, me concentré y ya había captado la dirección en la que se encontraba su aroma, él está en el jardín central, no sé que hace allí ya que estar en ese lugar le resulta FASTIDIOSO según él. 

Se percató de mi presencia y al instante se giró para encararme, sus ojos grises como la ceniza se han posado sobre mí, de inmediato se dibujo una sonrisa en su rostro lo cual me pone nerviosa al instante — Su sonrisa ¡POR DIOS! ¡SU SONRISA! — Decía en mi mente al mirarlo — No pude evitar sonreír casi de inmediato, es que me alegra saber que esa sonrisa autentica solo la he causado yo y nada más. Di unos cuantos pasos para así acortar la distancia entre nosotros quedando así bastante cerca... Tan cerca que siento como su aliento golpea mi cara.

— ¿Q-Que haces aquí? — Decía hecha todo un manojo de nervios.

— No sabes lo tierna que te ves cuando te pones nerviosa — Dice y de inmediato siento como mis mejillas se tornan calientes, dándome a entender que estoy totalmente sonrojada.

— Sabes que siempre reacciono igual — Desvío la mirada y sin pensarlo, el toma mi pequeña y delicada barbilla para así obligarme a verlo de frente.

— Oh vamos... ¿Me vas a negar que te gusta estar así tan cerca de mí? — Muerde su labio inferior.

— ¡BASTA! — Digo, pero en realidad no quiero que se detenga.

Creo que se ha percatado de mis verdaderas intenciones al decirle eso y acercándose aun más a mí, unió sus labios a los míos en un tierno beso, el cual hace estallar  mis emociones casi al instante, al principio era suave y amoroso pero poco a poco fue intensificándose cada vez mas. Nos separamos a la falta de aire y de inmediato buscó mi mirada. Mis ojos café se encontraron con aquel torrente imponente de color gris que posee en sus ojos, aquellos que me transmiten mucha seguridad, al verlos puedo deducir lo que está pensando, estoy casi segura de que está deseando que pase algo más, solo que quiere que sea yo quien inicie todo en esta ocasión.

Así que, sin dudarlo ahuequé su rostro con una de sus manos y sin dudarlo planté otro beso en sus labios, él de inmediato reacciona a mi estímulo, pero esta vez es más urgente... Como si su vida dependiera de ello; la llama de la pasión y el deseo iba aumentando cada vez más, sus manos recorrían mi cuerpo por encima de mi ropa, parecía estar un poco inconforme y dudoso, creo saber porque se encuentra así ya que quiere pasar a la siguiente fase pero... ¡ESTAMOS EN EL JARDÍN! Así que tomé sus manos y las alejé de mi cuerpo para así decirle:  — Ahora no es el momento para esto — Susurro suavemente.

— Entonces vámonos a otra parte — Se suelta de mi agarre y clava en mis labios otro beso.

— Si quiero pero... Ahora no es el momento — Me alejo de inmediato.

— ¿Qué diablos pasa? — Pregunta mientras se instala en su rostro una expresión de confusión y ¿Dolor? Creo que le afectó un poco el hecho de que le haya rechazado esta vez.

No es que no quiera estar con él, esto de quedar a medias me frustra mucho, pero no creo que sea correcto, almenos no en este momento, pero a él no parece importarle en absoluto ya que sin pensarlo dos veces me alza en brazos y me coloca sobre su hombro. Yo lucho para bajarme y el me da una nalgada — ¡DÉJA DE QUEJARTE! — Dice ahogado en un mar de risa causada por mi pequeño berrinche; se dirigió hacia el pasillo y yo aún no dejaba de patalear como niña pequeña, pero justo antes de que abriera la puerta de su habitación, escuchamos la voz de Riku por todo el ambiente.

— ¡MOROHA! — Gritaba — ¡MOROHA!

— ¿¡QUÉ RAYOS QUIERES RIKU!? — Dijo Hisui algo alterado por la interrupción.

— Disculpen, no sabía que estaban "Ocupados" — Rueda los ojos — Pero es importante.

Hisui se ve obligado a ponerme en el suelo, pensó mucho en desistir pero al ver la urgencia con la que su mejor amigo hablaba, así que termina de acomodarme en el suelo y luego de llevar un mechón de cabello detrás de mi oreja, se volteó para encarar a Riku quien acortó un poco más la distancia entre nosotros; Hisui cambió su expresión de sonriente y juguetón a serio y preocupado casi al instante, parece ser que se tomó muy enserio eso de que ES IMPORTANTE. Sabía que había algo oculto, por eso es que no estaba segura de estar con él ahora.

— ¿Qué sucede? — Pregunto algo intrigada — ¿Por qué tantos gritos Riku?

— Se trata de Ryusei — Decía muy nervioso — Nuestra cabeza está en juego.

— ¿QUÉ? — Palidecí casi de inmediato.

— Cálmate, no va a poder tocarnos siempre y cuando este el...

Entonces sucedió...

De repente sentí como el campo de energía que habíamos hecho se esfumaba por completo... Un aroma conocido y desagradable se hace presente en el ambiente, cada vez más... Estaba ansiosa y a la vez deseosa de verle la cara al infeliz que ha estado amenazándonos desde hace bastante tiempo, Hisui se puso delante de mí de una forma enérgica e imponente, dando a entender que va a protegerme al mismo tiempo que decía: — Está aquí — Dice muy seguro — Ryusei está aquí.



**********************************


LA AUTORA:

¡SORPRESA! Ya hay nueva actualización y esta viene con una ilustración de regalo, ¡DIOS! Lo que se come Moroha... ¡QUE COMPARTA! JAJAJAJAJAJAJA Okey no.

Dios querido, las cosas se están poniendo cada vez más difíciles, cuando creemos que van a estar bien... ¡POOM! Vengo yo y les complico la existencia, por otro lado... ¿Creen que Ryusei les haga algo cuando los vea? 

¡YA PRONTO LO SABREMOS!

No se olviden de dejar su voto y comentario, eso me ayudaría muchísimo, les aprecio mucho y...

¡NOS VEMOS EN LA PRÓXIMA ACTUALIZACIÓN!


— Kirara

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro