Ashley

¿Qué es el amor?, es la pregunta que pocos saben responder. Muchos de los que me han dicho haberlo sentido no saben la respuesta a mi pregunta. He escuchado por ahí que hay dos amores: tu alma gemela y el gran amor de tu vida, ambos poco probables de conocer. Otros afirman que son tres: el primer amor, el de tu vida y la persona con quien te quedas; suerte sería que todos fueran la misma persona. Todos tenemos esa ilusión en la vida de encontrar el amor; muchos pasan la vida en ello. Otros lo dejan escapar. En fin, existen distintas formas de amar a Dios, a la familia y al amor propio.

Recuerdo cuando leí "Alicia en el país de las maravillas", el conejo blanco hacía mucho énfasis en que Alicia se amara a sí misma y sólo así él sería capaz de amarla.

Desde niña siempre crecí pensando que los príncipes azules existían, soñé con un final de cuento de hadas .Pero al pasar de los años me di cuenta de que eso no existe. Paren todo, no quiero romper el corazón del que esté leyendo esto; siempre hay excepciones.

En la adolescencia empecé a leer, y la ilusión creció con cada personaje literario que conocía entre páginas. A veces creo que en el fondo guardo la esperanza de encontrar el amor.
Pero con el tiempo he empezado a vivir mis propias experiencias.

¿Para qué recordar a mi ex novio Dylan? Es como un grano en el culo molesto y desagradable. Con él nunca sentí las famosas mariposas en el estómago, pero sus besos y caricias se sentían bien. Pensé que con el tiempo el amor crecería, y así fue; por lo menos fue lo que sentí.

Dylan fue mi novio por dos años; al terminar la preparatoria estaba segura de dar el gran paso con él. En la fiesta de fin de curso, lo sorprendería pero la sorprendida fui yo. Hagamos un recuento mejor dos años atrás.

Fiesta de Preparatoria

Al pasar por la puerta el olor a sudor, a cigarrillo y a cerveza penetró mis fosas nasales. Por lo general no acudía a fiestas, pero era la fiesta de graduación y aunque había dicho que no vendría aquí estaba acompañada de mí prima Beca, una chica 1,50 pelo cobrizo rizado y con un montón de pecas esparcidas por todo el rostro, a veces pienso que ni perecemos primas.

—Matti—digo tocando el hombro de uno de los compañeros de equipo de fútbol de Dylan. Era rubio, al igual que mi novio, de 1,80 más o menos. Había que admitir que el tío estaba buenísimo.

—¿Dylan?— tenía una expresión rara en el rostro, ¿estaría drogado?

—SÍ Matt, Dylan mí novio o ¿A caso conoces otro Dylan?—desvío la mirada muy nervioso.

—Sabes que a la mierda todos— dejo escapar una gran resoplido—.Lo ví camino a la cocina, aún debe estar ahí.

Me mezcle con muchos cuerpos sudados de tanto bailar, sujetando la mano de Beca para no perderla entre la multitud.

Cuando llegue a la cocina no podía creer lo que estaba viendo. Había una rubia colgada al cuello de Dylan, se me rovolvio el estómago y tuve un gran mal sabor de boca.

Me escondí tras el marco de la puerta de la cocina tapando mí boca para no emitir ruido alguno.

—Osito, ¿Cuándo vas a dejar a la estúpida esa? — decía la rubia, al parecer se refería a mí, respiré profundo para no arrancarle la peluca pelo a pelo.

—Ya te lo dije, eso nunca pasará.

— ¿Qué?—pego un chillido — Tú me lo prometiste.

—Sí no lo hubiera hecho no hubieras cedido — dijo cínicamente mientras acariciaba un mechón de su cabello—. Podemos seguir así Lucrecia.

Ella le dió la espalda, quedando de frente a mí. No sólo era el nombre de mí mejor amiga, sino que era ella.

Todo mí ser se llenó de irá, se me hizo un nudo en la garganta y los ojos se me llenaron de lágrimas. No podía contener la rabia que me estaba inundado en aquel momento.

—Dylan y Lucrecia— automáticamente sali de mi escondite, emitiendo varias palmadas, mí cerebro se había desconectado de mis actos—. Son los actores del año, mis felicitaciones chicos.

—Puedo explicarte todo amor—.Dylan puso cara de corderito e hizo un puchero, que desgraciado.

—¿A cuál de las dos te refieres? —dije mostrando mi mejor sonrisa

—A ti, tú eres mí amor—no se podía ser tan cínico en esta vida, pero lo deje continuar mientras escuche un resoplido seguro proveniente de Lucrecia—tú amiguita se me metió en la cama en el campamento de atletas y de verdad no sé qué pasó.

"Pobrecito "formulé en mí cabeza, con mucha ironía.

—Yo te diré que pasó nos acostamos todo el año escolar mientras está estúpida, creía que entrenábamos y de cierta forma así fue — soltó mí ex mejor amiga con todo el veneno del mundo, como la víbora que era.

Al instante Beca le dio una fuerte bofetada y se que lo fue, ya que Lucrecia se tambaleo hacia atrás. Lo único que lamentaba era no haberlo hecho yo.

— ¿Amor me perdonas? — Dylan se acercó a mí tocando mí hombro e inmediatamente retrocedí.

—Dan asco los dos, son tal para cual—. Tome una fuerte bocanada de aire y aguante las lágrimas- esto se acabó.

Me trató de sujetar por los hombros pero lo patee en la entrepierna y retrocedió soltando una maldición.

"Eso por cabrón ", pienso mientras sonrió.

Mientras tanto Lucrecia reía con satisfacción, no podía reconocer a mi mejor amiga por ninguna parte y de un momento a otro había perdido el poco autocontrol que me quedaba y de pronto estaba a ahorcajadas sobre esa pelos de muñeca llena de falsedad .

Mientras todos gritaban" pelea, pelea".

En un instante yo estaba debajo recibiendo tirones de cabello y luego arriba nuevamente de mí adversaria, esparciendo golpes más duros, hasta que le dí un gran derechazo en la nariz.

— Mí rinoplastia—chilla de dolor y me aparto rápidamente, creo que me excedí, pero no sentiría lástima alguna.

—Yo pensé que eras cien por ciento natural amiga —dije marcando cada sílaba con ironía.

Salí de allí, con las piernas como gelatinas, la cabeza estallando y un profundo dolor en el pecho podía sentir físicamente todas mis emociones a flor de piel .Dejando esos traidores, acompañada de Beca y con algunos rasguños en los brazos que me ardían y el vestido un poco destrozado.

Esa noche me rompieron el corazón por primera vez, perdí a mí mejor amiga, me fuí a golpes por un chico primera y última vez esa fue una promesa. Pero lo peor de la noche fue haberme emborrachado hasta perder la conciencia, despertando en una cama de hotel sin ningún recuerdo además del tatuaje de clave de Sol en mí espalda y pecho.

Junto a una nota:
"Nunca te rindas bonita, persigue tus sueños".

Tenía dos cosas buenas que resaltar de mí acompañante, no sé aprovecho de mí y tenía una hermosa caligrafía.

Pero no podía recordar su rostro y en estos momentos sé que es casí imposible volverle a ver. Aunque así lo tuviera delante no lo reconocería.

—Ashley cariño — abre la puerta de mi dormitorio mí madre dando dos pequeños toques suaves en la puerta—. Te he estado llamando y no contestabas, ¿todo bien mí pececita?

—Si mamá, ya tengo las maletas listas —digo sonriendo, en el rostro de mí madre noto algo de tristeza acaricio su rostro—.No es mí primer año en el conservatorio, además cada fin de semana estaré de regreso.

Me estrecha en un abrazo un poco asfixiante, pero que reconforta cada parte de mí corazón.

—Te amo —decimos a la misma vez, por lo que dejó escapar una pequeña risita.

Después de mamá enjuagar un poco sus lágrimas y recoger todo lo que necesitaré, salimos de casa.

—¿Se ha mudado alguien a la casa de los Willson?

Hace dos años se fueron por asuntos de trabajo, al parecer tendremos nuevos vecinos.

—No amor, ellos están de vuelta—dice mí madre cerrado el maletero del auto, dejando mis maletas dentro.

—¿Aarón?

—No lo sé, no lo he visto— contesta mamá entrando al auto.

Pero no era una pregunta para ella, sino algo que formulé en voz alta. Sí mis ojos no me engañaban el chico que estaba bajando de aquel auto era Aarón Willson, mí primer amor. Se me curvo una pequeña y tonta sonrisa en el rostro, pensé que no lo volvería a ver porque yo en Inglaterra sería un sueño imposible.Aarón paso una mano por su cabello rubio dorado y no sé porque razón resplandecia está mañana, tal vez eran los rayos del sol que lo iluminaban favoreciéndolo gratamente .Se detuvo frente a mí al otro lado de la calle , ya no era ese chico de 18 años todo flacucho que se despidió de mí con unos ojos llorosos, ahora se veía altísimo, atlético y sus ojos azules un poco somnolientos y cansados, aún así lucían encantadores.

Mí madre tocó el claxon del auto sacándome de aquella burbuja mental en la que me había sumergido en un instante, y no sé pero esperaba que Aarón viniera a darme un abrazo, pero en cambio levanto su mano en forma de saludo, era como sí algo en él hubiera cambiado por completo. Le devolví el saludo y subí al auto. Sintiendo una gran decepción, no sé por qué, pero quería más de aquel reencuentro.Los Willson eran los vecinos millonarios, la se señora Alexandra madre de Aarón nunca vió con buenos ojos que fuéramos amigos.Era de esperarse mí madre era una mujer divorciada e independiente, así la veía yo.En cambio para ellos eso era algo terrible y además éramos de diferentes clases sociales.

Pero eso nunca importo para que Aarón y yo fuéramos amigos.En nuestros juegos de niños la señora Alexandra dejo ver siempre una mirada de desaprobación y desprecio hacía mí, frunciendo siempre su nariz con un toque aguileña que había heredado a su hijo. Él tenía tantas responsabilidades de niño y mucha carga sobre sus hombros. Siempre tenia muchas tareas que cumplir y expextativas que llenar y eso me ocasionaba tristeza porque yo quería verlo feliz.

—Ash cariño, no deberías poner tus ojos en ese chico Willson—dice mí madre como si hubiera leído cada uno de mis pensamientos—.Es por tú bien pecesita.

—Tranquila mamá ,yo sé que Aarón no se fijaría en mí. No soy de su clase social etcétera etcétera — dije recalcando lo obvio y tratando de repetir las miles razones que había escuchado toda la vida.

—No me estás entendiendo, tú eres maravillosa,es esa familia es muy complicada y no quiero que te lastimen.

Mí madre detiene el auto frente al conservatorio y me mira detenidamente.

—Te amo pequeña—toma mí mano y la aprieta.

—Lo sé mamá, yo también.

Depósito un beso en su mejilla .

—¿ Quieres que te acompañe a dentro? —niego

—Llámame cuando llegues a casa —le digo depositando un beso en su mejilla —En mí vida no hay lugar para chicos, sólo para la música.

Salgo del auto , sacando a maleta del maletero .

Siento una vibración en bolsillo proveniente de mi teléfono y lo veo.

Miss Cheltron
Ashley ven a mí oficina, necesitamos hablar,es urgente.

Entre al conservatorio mediante una beca, este mensaje me deja muy preocupada y con un presentimiento.

—Ashley —mí mejor amiga y rumy salta arriba de mí literalmente haciendo que nos caigamos sobre mí equipaje —¿ No te alegras de verme?— frunce el ceño.

—Por supuesto que sí, es que recibí un mensaje de miss Cheltron —le muestro el móvil— ¿Crees que habrá problemas con mí beca?.

—No, como crees eres la mejor de nuestro curso —se pone en pie y me ayuda a levantar—.Yo me encargaré de esto toma mí equipaje Todo estará bien.

—Eso espero—digo tratando de ocultar mí preocupación.

Camino un poco preocupada y siento que la oficina de nuestra jefa de año está cada vez más lejos, los pasillos están abarrotados de estudiantes de nuevo ingreso. Subo las escaleras y me detengo frente a la puerta un poco nerviosa. Doy dos toques.

—Adelante— responde la miss desde el interior.

Al abrir la puerta veo la señorita Cheltroon sentada detrás de su esritorio . Tiene el mismo peinado de siempre una coleta apretada y no se como hace pero nunca tiene un cabello fuera de lugar. Se ajusta sus lentes y frunce el seño . Luce una camisa blanca con botones dorados. Estoy complamente segura que el resto su vestimenta esta impecable como siempre . Es una mujer de unos 40 años ,que de joven debió robar muchos suspiros .

—Buenos días miss

Hace un ademán con la mano, para que me siente.

—Buenos días,no te angusties —dice pisando la vista sobre mí ,notando mis nervios;estoy segura jamás he sido buena ocultando emociones.

—En realidad sí estoy preocupada,¿qué pasó?.No me diga que perderé mi beca, ¿hice algo malo?.

—Ashley respira—me dice—Tú composición,la inscribiste al examen de premio no fue aceptada.

—¿ Lo que significa?

—Que no habrán puntos extras para tí y no podrás mantener la beca el próximo semestre.

Sus palabras son como un balde de agua fría y directo del Polo Norte,con pingüinos incluido . Mí sueño estaba hecho añicos.

—Pero hay una solución.

Esas palabras me ilucionaron.

—Dígame por favor.

—El problema es que te falta algo en tú composición,es muy técnica,en sí carece de pasión. Pero puedes presentarla nuevamente en el el festival de primavera. Para ello necesitas un compañero y creo que encontré a la persona ideal para ayudarte.

— Eso es genial,¿ quién es?—digo entusiasmada.

—Es un estudiante de último curso acepto verte,pero no hacer el dueto.

Genial tendré que rogarle a un idiota de último curso.

—¿ No me puede ayudar otro compañero de mi curso?

—Pues de poder podría — suspiré aliviada- pero si quieres pasar es la persona perfecta para ti. Es un genio improvisado y creando ,su talento es único.

—Estoy segura que alguien más lo supera— dije albergando algo de esperanza.

—Aquí tienes sus datos me extiende unas hojas que hecho en mí mochila Mañana a las 4 en la sala de música, yo tú me lo pensaría y trataría que fuera mí compañero de música.

—Muchas gracias señorita Cheltron.

Me pongo en pie y salgo de su oficina.
¿ Qué está pasando?, Puedo perder mí beca.

Mí teléfono suena y contesto

—Tessa.

—¿ Qué dijo miss Cheltron?

—Que puedo perder mí beca.

—Queeeeee

El grito de mí mejor amiga me hace arrepientirme de contarle esto por teléfono.

—Nos vemos en la cafetería y te cuento todo vale.

—Vale.

....................................*****************

Llegó a la cafetería y me dirijo directo al mostrador.

—Hola Shelly, un cappuccino con extra de crema batida y muy cargado por favor.

—Al parecer alguien tiene un mal inicio de curso—asiento— Marchando tú orden,guapa.

Shelly es una chica pelirroja guapísima y muy amable que trabaja en la cafetería de la escuela. Creo que es la principal razón que casí todos alrededor sean chicos. Ella entiende que esa orden extra de azúcar es sinónimo de problemas en mí vida.

—Tú café me extiende el bazo— y al dar un sorbo me sorprendo es muy amargo —Shelly te equivocaste con mí...

—Este no es mí café, casí me da un coma diabético —dice un chico alto de cabello negro que de perfil se ve muy guapo , tengo que aguantar la risa ese era mí café.

—Lo siento mucho señor.

—No lo sientas , cometiste un error muy grave— reprocha con tono un poco exagerado para mí gusto , Shelly se le ve muy nerviosa —.Además,¿ a quién se le ocurre tomar tal porquería?

—A mí -digo sin pensarlo — por lo que me mirá fijamente con unos ojos azules eléctricos de una manera demasiado fría- no veo razón para que le hables de esa manera, yo también tengo un mal día y no lo descargo con la pobre chica.

—Que te hace pensar que tengo un mal día , ella cometió un error y debería hacer su trabajo correctamente . Además de asumir que es una incompetente.

—Pues asumo que es así porque sino ya te hubiera arrojado está bomba amarga como tú que tengo entre mis manos —digo haciendo referencia a su café—.Supongo que eres el ser humano perfecto, el cual no comete errores .

—Tú eres hay—se queja y pone una mano en su sien derecha.

—¿ Estás bien?

Me acerco a él para tratar de ayudarlo pero retrocede.

— Alejate de mí — dice arrojando su café al suelo el cual me salpica la sudadera y pantalón quemandome un poco por lo que retrocedo.

Se marcha soltando otro quejido en forma de gruñido.

—Pero que idiota —suelto sin más — Shelly no te preocupes.

—Le habrá hecho daño el café dice preocupada.

—Yo creo que tiene un terrible mal carácter es todo, permite algo para limpiar este desastre .

—No te preocupes yo lo arreglo.

—Bueno gracias, nos vemos—le digo después de pagar todo.

Veo a Tessa que se acerca

—¿ Qué le hiciste a ese bombón tan divino que te arrojo un café?

—De divino no tiene nada, sólo es el mayor idiota de este colegio.

—Bueno luego me contarás eso . Dime de la beca.

Tenía tanta rabia que lo había olvidado increíble.

—Resulta que sí un chico de último año,no quiere hacer dueto conmigo la podría perder,es un supuesto prodigio.

—Pues si no quiere lo amarramos y lo obligamos —reímos de su comentario—.Excepto por el chico de la cafetería,no creo que alguien se resista a tús encantos amiga.

—¿ Mis encantos? Sí lo peor que podría pasarme es que fuera don perfecto amargura ,mí posible compañero de música.

—¿ Perdona quién?

—Ya te contaré , entre todas las cosas que necesito contarte, Aarón regreso.

—El pan dulce de Aarón.

Estoy al pensar que mí mejor amiga tiene problemas con la comida, compará los chicos con ella.

—Enserio necesito que está semana mejore sí o sí.

—¿Por qué no buscas los datos de tú compañero de música?, quiero saber quién es.

—Sólo tengo su número, sería raro que lo llamara hoy,no quiero agobiarle.

—Agregalo y sabremos quien es.

Saco el móvil y entro al WhatsApp, mí sorpresa es grande,me he pasado todo el rato haciendo una película de terror en mí cabeza y por lo que veo en la foto creo que aceptará trabajar conmigo.

Le muestro su foto a Tessa y pone cara de sorpresa.

—Waw estoy anonadada, por lo que veo en la fotografía —expresa Tessa con cara de asombro y no la culpo.

Siento una vibración en mí bolsillo proveniente de mi celular.Lo revisó y veo otro de esos mensajes provenientes de un número desconocido que me han atormentado todo el verano.

Desconocido
Ten cuidado nada es lo que parece... No conoces tú propia historia.

Guardo el móvil y muestro mí mejor sonrisa a mí amiga.

—¿ Pasa algo?— me pregunta

—No es sólo un spam — miento

Bloquear a esta persona no tiene caso , cambiar de número tampoco. No sé quién es o que pretende. Sólo sé que conoce cosas de mí pasado que quiero descubrir.Mi mayor anhelo es descubrir quien es mi padre y,¿Por qué me abandono?