Capítulo cuarenta: Él no es mi hermano
Pasaron unos minutos en lo que Daemon no veía a Dalma en ningún lado, ya comenzó preocuparse su inesperada ausencia y si alguien le hizo algo y la molesta insistencia de Yamiil ya comenzó a incomodarle , se levantó en plena subasta aunque su madre lo miro mal, salió pidiendo disculpas, pero ahora necesita buscarla, salia del salón cuando minutos después lo siguió Nicolás.
—¿Tío… pasa algo?
—No encuentro a Dalma y salí a buscarla.
—Quieres que te ayude, mi padre tampoco está.
—Está bien, si la encuentras primero, me avisas. tengo un mal presentimiento.
—Todo Estara bien.
Ambos se separaron y tomaron caminos diferentes mientras uno iba al pasillo el otro se dirigía afuera.
Daemon Llegó a un cuarto que olía horrible, era como alcohol, pero mucho más fuerte, se tapó un poco un poco la nariz y siguió fisgoneando un poco había un poco de desorden y salió porque ya sentía que se mareaba.
Cuando entraría a otro cuarto, un mensaje llegó a su celular, en cuanto vio de que se trataba corrió hacia el estacionamiento.
Llego y vio como su sobrino se tiraba sobre el capot de un auto evitando que siga en marcha, de inmediato salía de el dos hombres e intentaron sujetarlo, corrió en su defensa y aparto a los dos hombresotes que parecía que lo iban a golpear.
—¡Que está pasando! Déjenlo en paz o se verán en problemas conmigo.
—Tío… tío…
El chico no podía terminar de hablar cuando Daemon vio salir de la parte de atrás a Daniel y antes que la puerta se cerrará vio que adentro había una chica semiacostada, no le vio el rostro, pero solo basto con ver los zapatos para darse cuenta de que era Dalma, a ser los mismos que él le había regalado.
—¡Que le has hecho! ¡Que le hiciste! —se abalanzó como un animal enfurecido sobre su primo, segundos después llegaron personal de la fiesta y sostuvieron a ambos para que dejen de pelear.
—¿Qué intentas hacer ahora? ¿Por qué la tienes? ¿Qué buscas con ella? No fue suficiente con todo lo que me arrebataste, Dime no te es suficiente, ¿qué más quieres?
Daniel se encontraba sonriendo como si estuviera fuera de sus cabales, le divertía sacar de quicio a su primo. Daemon ya comenzó a perder la paciencia y casi se le va encima por segunda vez, cuando llegaron su madre y Yamiil.
—¿Qué está pasando aquí? Porque pelean como animales, Daemon que le has hecho a tu hermano, y si los reporteros se enteran, será un escándalo.
—Por favor mamá, él no es mi hermano, mi único hermano murió hace mucho tiempo y este sujeto es un impostor que se aprovechó de las circunstancias, si tú estás feliz te felicito, pero yo hoy rompo con este mundo de fantasía que creaste, ya no puedo tolerarlo más.
Hubo un silencio rotundo que duro solo un minuto, cuando el infeliz comenzó a reír y hablo nuevamente.
—Madre tranquila —dice Daniel, siempre mirando hacia Daemon —Daemon… sé que estás molesto, pero no es lo que piensas, yo nunca quise ocupar el lugar de Dean, solo ayudaba a la tía con su dolor.
—Deja de mentir, siempre le tuviste envidia, al principio no lo vi, pero luego de su muerte mostraste tus verdaderas intenciones, me robaste sus memorias, me robaste su recuerdo, te quedaste con su vida, sus cosas, con el cariño de su madre, mi madre. Con su primer amor, y no te bastó con eso que después viniste por mí. —Ahora miro a su madre —Desde que mi hermano murió, todo termino, nada volvió a ser igual, tú dejaste de ser mi madre, mi padre ya no fue el mismo, siempre se encuentra ido en su mundo… de todas formas ahora eso ya no importa porque ya crecí, pero no dejaré que este sujeto siga haciendo de las suya destruyendo lo poco que queda de mi hermano o de mí mismo, hoy soy un adulto ya no soy más un niño a quien manipular.
—Hijo, por favor, ya basta hablaremos en casa y aclaremos todos los malos entendidos… Yo…
—Malos entendidos, esto no es un malentendido, pero por supuesto para qué me molesto en contarte si de todas formas no me vas a creer, quédate con «tu hijo» favorito que yo me la puedo arreglar solo, pero mejor que se mantenga alejado de mis asuntos y a las personas cercanas a mí, porque soy capaz de todo.
—Señora venga, no se preocupe, Daemon está enfadado porque descubrimos su secreto, ¿sabe cuál? Sobre el origen de su noviecita y de donde salió, nada más y nada menos que de una subasta, y que fue él quien la compró.
—¿Hijo, que significa eso?
—No significa nada, Yamiil mejor no metas tus narices en este asunto, sé que tú al igual que él están detrás de todo esto, mejor ve y búscate a otro tipo a quien embaucar y manipular, quiérete un poco más como persona, porque así no llegaras a nada.
Dejo a su familia ahí mientras él se dirigía al coche donde estaba su novia y donde mando a su sobrino que la cuidara, llegó, pero solo estaba Nicolás mirando en dirección a su padre.
—Nick, ¿dónde está Dalma?
—Se fue tío.
—Como que se fue y ¿por qué la dejaste? Te pedí que te quedaras con ella, te dijo al menos donde iria, no importa seguro se fue con su amiga.
Salió en dirección a su coche y Nicolás lo siguió.
—¿Tío? Necesito hablar contigo de algo importante.
—Más tarde sobrino, ahora tengo que buscar y hablar con Dalma.
—Tío, se trata de Dalma.
Ahí se detuvo y lo miro y siguió caminado hacia el coche con Nicolás detrás.
Una vez ya puesto el auto en marcha, Nick comenzó a hablar.
—De hecho con Dalma ya nos conocíamos desde antes… Para ser más exactos fuimos novios.
—¡Queee!, como que novios y porque hasta ahora me lo dices.
El coche se frenó de golpe haciendo un chirrido horrible de neumáticos y asfalto quemándose.
—Tío, te lo contaré todo desde el principio… No fue mi intención herirla, solo … Solo quería ser querido y para ello utilicé los métodos incorrectos, de los cuales estoy muy arrepentido.
Autora: Danna
Univers
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